Cerraba y abría mis ojos repetidamente, quería saber si estaba soñando, mis manos estan demasiado rojas por tantos pellizcos. Mi mente está trabajando muy lento, todos esos recuerdos a un no los proceso. Al parecer llegue a un mundo igual que el mío.

Mi nombre es Matt Jones, tengo 25 años. En este mundo existen los doncel ese es el termino que le dan a los hombres que pueden dar a luz.

Si, justo como Mpreg de las novelas que escriben las fanáticas del Bl. En lo que estaba, yo soy un doncel mejor dicho un miserable doncel, ya que mi padre es un completo bastardo y mi hermana ni se diga están hija de puta como su madre.

La hermana le tendió una trampa, la que tenía que casarse con Adiel Taylor, era ella no el. Pero ella lo drogo luego lo envió a la habitación donde Adiel estaba igual o peor que Matt.

Adiel es un hombre frío, elegante, imponente, varonil, tiene una mirada exquisita color miel que con solo verla te congelas. Su identidad era muy discreta nadie conocía como era el gran maestro Adiel Taylor, Por eso nadie quería casarse con el. Le tenían miedo o pensaban que era un viejo gordo feo.

Después de esa noche desagradable y dolorosa para Matt, todo su mundo cambió. La persona que el amaba lo vió con asco y repulsión, pero lo que no sabia o se negaba a creer era que fue planeado por el y su hermana, tanto Adiel como Matt solo fueron piezas en su tablero.

Entonces a Matt no le quedo de otra que casarse con Adiel, ya que las náuseas el mareo se hicieron presentes. Destrozado, herido, se casó con un  hombre que no amaba, durante todo el proceso de embarazo lo rechazó hasta le advertío que no fuera aparecer el dia que diera a luz.

Adiel lo complació, el siempre dejaba que hiciera lo que quisiera, ninguno de los dos se querían pero Adiel Taylor respeta a Matt, su madre lo educó, que aunque estuviera en una relación por contrato, jamás hiera o engañara a su pareja.

Pero Adiel tampoco quería que Matt se vea con el bastardo de Félix, porque el sabia que ese es tan culpable como la hermana del Doncel, si fuera por el, ese par ya no estarían en el planeta Tierra.

En todo momento Adiel le decía a matt que Félix están culpable como su hermana, que había participado en el complot, pero Matt nunca le creyó, por lo que siempre terminaban en pelea. Por lo tanto el comenzó a evitarlo, no quería que por los arranques de enojo perdiera a la niña.

Matt jamás le permitió que fuera con el a los chequeos médicos, esa era una forma de castigarlo por todo el sufrimiento que estába pasando. El no quería tener esa niña pero lo hizo por obligación de su padre quien casi lo mata de una paliza, le gritó que el no iba arruinar su inversión.

Matt solo es un joven Modelo y actor, su carrera se está viniendo cuesta baja por todo los escándalos que a tenido por perseguir a Félix, cuando el mismo ya esta casado.

Que información tan llena de sangre de perro, y yo ahora estoy en medio.

Matt llevo su mirada a la pequeña niña qué ahora mismo está amamantando con un rostro que es todo un poema. Casi se vuelve a desmayar cuando vio que de sus pesones salía leche, muchos escucharon los gritos que estaban llenos de maldiciones.

—Jun, entra—Matt, llama al cuidador de su puerta, era uno de sus guardaespaldas. Más bien que Adiel le había puesto.

Jun entró a la habitación, cuando vio a Matt rápidamente giró su cuerpo. No tenía que ver al esposo de su maestro en ese estado.

Matt aún amamanta a su hija, el quiere que ya dejé de comer. Le llevo como 5 minutos en poner la boca de la pequeña en su pezón.

—¿Llama a Adiel?

—¿Disculpe?—Jun no podía creer que no le estuviera llamado bastardo a su maestro.

__Ya que estás en el hospital deberías revisarte los oídos. No hagas que lo vuelva a repetir.

—Le llame ahora mismo—Jun salió de la habitación.

—Tu eres una cosita muy hermosa—Toca la pequeña nariz.

Todavía no proceso todo esto, aunque estoy calmado, todo mi interior es un caos, pero no puedo odiar ni despreciar a esta cosita.

Durante mis largos 25 años de mi vida anterior, nunca tuve a alguien que me gustará, no porque no quisiera, solo que mi trabajo, mas mis estudios me mantenían muy ocupado.

No quería tener una relación donde no podría darle aunque sea un mínimo de tiempo. Y todo para que al final muriera en mi primer día como pilotó.

Matt bajo su camisa hizo que la bebé eructara. La puerta fue abierta nuevamente, dándole paso a una nueva persona.

¿Quién es este poste de luz o solo yo soy el enano? Con que este es mi esposo Adiel Taylor.

La mirada de Adiel se fue directo al cuerpo de Matt, luego al pequeño bulto que sostenía en sus brazos.

—¿Quien eres?—Pregunté, con qué ese rostro frío puede poner una expresión asi.

—¿No me recuerdas?—¿Qué diablos paso en el parto?

¡Mierda esa voz es demasiado grave y a la vez seductora, debería ser un crimen que la tenga!

—No, ¿Eres mi padre?—No te rias Matt.

—No—Refuto rápidamente—Soy tu esposo.

Adiel estaba pensando que no era nada bueno que Matt haya perdió la memoria, porque esas personas que tenía por familia lo manipularan aún más.

—Con que esposo, entonces tu eres el bastardo que le hizo eso a mí cul..—Casi digo una fuerte palabra frente a esta cosita.

Matt quería reírse por las expresiones que Adiel, ponía con cada frase que sale de su boca.

__Yo, lo lamento, no quería que pasarás por eso—Expreso con seriedad.

—Estoy jugando—Matt se puso a reír, y al parecer a la pequeña le gustaba esa sonrisa.

Adiel se quedó hipnotizado, la sonrisa de Matt es muy hermosa.

¡Mierda, no debí sonreír! Me duele todo, siento que nuevamente algo se romperá.

—No he perdido la memoria—Se limpio las lágrimas—Se quién eres, solo quería jugar un poco.

—No sabia que tuvieras esa faceta.

—Al igual que yo tampoco sabía que podías poner otra expresión que no fuera esa que siempre traes, como sea, ¿la sostendras o te quedarás como una estatua?

—¿Puedo?

—Estas muy joven para que tengas problemas auditivos—hablo con sarcasmo.

—Hace un momento me dijiste que parecía tu padre—Adiel se acercó, Matt puso a la bebé en los fuertes brazos del mayor.

Adiel le dio una mirada dulce a su hija, Matt solo estaba evaluando a su ahora esposo.

Su cabello cobrizo lacio lo lleva en una media cola, tiene unos perfectos pómulos. Esa mirada fría como su aura a su alrededor es magnífica, su piel es clara, muy fina.

Qué envidia ese cuerpo no es de un mortal, tiene la tallas perfectas y de la altura ni se diga, bien mide 1.90. Yo soy un enano de tan solo 1.78 metros de altura, al igual que mi otra vida.

—¿Como se llama?—preguntó Adiel.

—No tiene uno aún—Mire por la ventana, el sol ya se estaba ocultando.—Queria que lo decidiremos juntos—Lo ví a los ojos, por un momento vi un poco de sorpresa en ellos.

—Ayla; luz de luna—dijeron al unísono, le quedaba perfecto ya que ella había nacido justo cuando la luna brillaba en todo su esplendor.

—Entonces será, Ayla Taylor—Abostezo.

—¿No llevará jones?—Preguntó sorprendió.

—Ni me menciones a esos hijos de put...—Se me volvió a olvidar que había un menor presente—Como sea, no llevara el Jones.

—Como gustes.

—La lleve en mi vientre durante 9 meses—Bueno fue el anterior Matt, pero da lo mismo—Se abrió lo que no debía de abrirse, sufrí un infierno, casi me voy con mis ancestros y ella es idéntica ti—No lo decía con reproche si no qué con envidia.

El cuerpo de Adiel se tensó—¿Eso te molesta?—No quería que Matt, odiará a su propia hija.

—No, solo me da enviada. ¿Cuando saldré este hospital? siento que me asfixió.

—Mañana—Adiel dio un gran suspiro al saber que Matt, no odia a la pequeña, eso lo tranquiliza.

Lo único bueno de esta desafortunada situación es que no volveré a trabajar, estoy nadando en dinero. Adiel tiene mucho más, y bueno, lo del esposo también es de la esposa.

—¿Cuando salgas irás a la mansión o a tu penthouse?

—A la mansión, a partir de ahora viviremos juntos.

No quiero que Ayla crezca con padres separados, es algo muy horrible. Lo digo por experiencia, aparte aquien no le gustaría refrescar su vista con semejante Adonis. Eso último sonó demasiado Gay

Los ojos de Matt iban cerradose de apoco, el sueño lo estaba venciendo.

—Debes de ir a reglar el papeleo, dormiré un poco..cuida de ella..—El se quedo dormido.

No era para menos su cuerpo a un dolía. Estuvo en labor de parto durante casi 6 horas, desde las contracciones hasta la hora de dar a luz.

Adiel acostó a la pequeña Ayla en la pequeña camilla, cubrió con la colcha a Matt, el frío estaba muy fuerte.

Salió de la habitación. Le indico a Jun que entrara para que cuidara de su familia mientras el iba arreglar el papeleo.