¿Por qué todo está tan silencioso? ¿Dónde estarán en esos pequeños diablillos? Es muy raro que no anden molestado a Lukyan, o escondido a Kiel de sus padres. Son unos condenados que les encanta poner todo esté lugar de cabeza.

También es raro que Misha no ande detrás de Lewis, verificado que no esté incómodo y atento en todo momento a qué la fuente no se vaya a romper de la nada y ponga en peligro la vida de su futuro esposo e hijo.

—¿Te dijeron que iban a salir alguna parte?—Le pregunté a Lewis, quién se encuentra igual que yo, desconcertados.

No sé en qué momento me quedé dormido, estaba muy cansado ya que hoy en la madrugada pudimos tener un momento para nosotros dos. Lukyan y yo disfrutamos el convertir nuestros cuerpos en uno, hasta que el reloj marcó las cuatro de la mañana.

El muy bastador se levantó más fresco de una lechuga luego de robar mis energías, es a mí el que deja secó aunque es mi culpa por ser insaciable con respecto al hacer el amor con mi esposo.

—No—8:00 PM. Es la hora que marca su celular—Se supone que es hora de cenar—Tengo hambre—Tal vez se encuentre en el comedor—Ha bosteza.

Últimamente me he sentido mucho más somnoliento que los primero meses de embarazo. Hay ocasiones en la que solo quiero estar acostado sin hacer nada, creó que es porque no tarda en nacer el inquieto del mi pequeño Elián.

—Vamos al comedor.

—Si...sin embargo Misha me acaba de enviar un mensaje de que vayamos a la sala de descanso.

—¿Para que?

—No lo dijo—Desde ayer se encuentra todo nervioso.

—Bien, vamos.—Que más da.

Los dos sin más y sin sospechas de nada. Cruzaron dos pasillos para poder llegar a dicha sala, al entrar no veían a nadie.

Leo se encontraba a un segundo de gritar con molestias el nombre de Lukyan. Sin embargo, vio a dos pequeñas personitas. Ellos lo veían con una expresión sonriente y emocionada por ver a su papá y mostrarles lo que podían hacer.

—...¡Asher, Asier!—Leo cubrió su boca con ambas manos.

Era sorprendente y un tanto atemorizante ver lo que sus ojos estaban viendo, los gemelos venían caminando con sus piernas todas temblorosas. Solo tenía unos meses de nacidos y no hace mucho empezaron a gatear, sin embargo ya estaban dando sus primeros pasos.

Leo no era el único consternado y sorprendido, Lewis también se encuentra incrédulo viendo como sus sobrinos dan sus pequeños pasos.

La incredulidad se convirtió en unas lindas emociones, estár presente en algo como esto, le hace muy feliz. Es una oportunidad única en la vida, algo que no podrá olvidar nunca. También se imagino a su hijo dar sus primeros pasos de esa forma tan adorable.

Leo se preocupaba desde cuándo ellos podían hacer eso, es la primera vez que los ve. Llegó a la conclusión que los gemelos debieron de esconderlo para poder darle una sorpresa así de grandiosa a sus padres, ya que Lukyan está con sus ojos bien abiertos viéndolos des de una esquina.

Él iba ir por los gemelos para que la sorpresa no se arruinara, pero en vez de sorprender a Leo y a Lewis, todos ellos fueron los sorprendidos. A excepción de Ruby, ella se encuentra tomado video como si desde un principio supiera lo que iba a suceder.

Ella y los gemelos se llevan tan bien que llegó un punto en que puede entenderlos con solo mirarlos a los ojos. Eso tan era obra de los gemelos, usaban su poder con Ruby. Después de sus padres, Ruby era la persona que más les agradaba y luego seguían sus abuelos.

—¡Cuidado!—Los sostuvo antes de que cayeran de espalda al suelo—¡¿Cómo es que lograron hacer eso?!—Son hijos de dos personas anormales, ¿que esperaban de sus crías?

—Pa...pa—Balbucean al unísono.

—¡¿Te quisieron decir papá?!—Preguntá muy sorprendido, Lewis—Ellos siempre me terminan más que solo sorprendiendo.

No logró acostumbrarme a su crecimiento tan espontáneo, en estos momentos tienen la estatura promedió de un niño que está a dias de cumplir un año.

—Creo que sí—Sonríe ampliamente—Son unos pequeños muy traviesos pero demasiado inteligentes para su edad—Son hijos míos y de Lukyan después de todo.

Leo los ve con esa mirada llorosa la cual escondió en los pequeños pechos de sus dos hijos, los que abraza con un inmenso amor.

—¿Dónde está su padre....?

—¿Un apagón?

Leo por instinto y preocupación se pone en guardia protegido a los gemelos y a Lewis. Estába preparo para dejar salir a ISIS, cuando escucharon "Feliz cumpleaños" cantado por toda su familia. Logrado ver que empujan un pastel y la luz de las velas dejan ver sus sonrientes rostro.

Antes de que pudieran decir algo la iluminación del interior de la sala cambio con diferentes colores que por unos segundos presenciaron un arcoiris o la aurora boreal desde la cima de una montaña en Nebraska. Hasta podían jurar que podían sentir frío y al otro segundo calidez.

Lukyan trabajo mucho en desarrollar un nuevo sistema para A1. Sin borrarle nada, fue más como una nueva actualización para mejorar sus funciones.

Fue así como logró que la sala deje de ser tan simple y se vuelva un hermoso paisaje ya sea de día o de noche. Que los presentes, en especial los cumpleaños sientan que están en ese lugar oliendo el olor a otoño o primavera.

En estos momentos se suponía que estaban en primavera, las flores se desprenden cayendo al piso. Lo realistas que eso parecía dejó perplejos a todos. Pues estaba de noche pero en el interior de esa sala era un hermoso día, oliendo el aroma de las flores

—¿Que es esto?—Preguntan confundidos.

Es hermoso, esta creación solo pudo hacerlo una persona y esa persona es mi inteligente esposo. ¿Cuánto tiempo se llevó creado y modificado la sala para poder adaptar todo también? Me encanta, alguien ya se ganó una recompensa.

—Este es mi regalo para ambos—Expresó Lukyan—Mio y de A1—No se iba a llevar todos los créditos—Ustedes decidan en que estación del año quieren estar o lugar.

—¿Quién cumpleaños?—Pregunte.

—Por supuesto que tú, esposa—Besa los labios de Leo—Feliz cumpleaños—Sostiene a Asher en sus brazos.

¿Mi cumpleaños? Parece que me había olvidado de eso por completo. No es como si lo celebrará para empezar, llegó un punto en que había olvidado la fecha de mi nacimiento...no está mal, se siente bien el saber que a muchas personas les importa y mucho.

—Lewis, feliz cumpleaños para ti—Con su mano despeinó todavía más el cabello de su hermano menor.

Asher ve por unos segundos fijamente a Lewis, en especial el abultado estómago. Lukyan al sentir lo inquieto que se encuentra su hijo, lo vio para saber que pasa.

—¿Que sucede?—El pequeño Asher le indica que lo baje un poco.—¿Así?—Asher ignoro la voz de su padre, puso ambas manitas en el estómago de Lewis.

Asher sonrió al sentir los movimientos del bebé, esa sonrisa escandalosa sorprendió a todos, ya que él no es de los que se rían mucho, al contrario de Asier. Él es más risueño.

—Creo que le gusta sentir como se mueve Elián.

No es la primera vez que Asher hace algo como esto, él suele venir a tocar mi estómago cuando los cuidó, mientras ellos juegan en la sala de juegos.

—Eso parece—Responde Ezekiel—Pronto serán cuatro niños gateando por todo el lugar—Frota su rostro en la mejilla de su pequeño Kiel.

—Se volverá todavía más animado—Expresó Dexter, quién se encuentra siendo abrazado por su prometido. Dexter al fin había aceptado la propuesta matrimonio por parte de Ezekiel.

Y el pequeño Kiel está creciendo tan sano y fuerte que no parece que nació antes de tiempo, eso les alivia mucho a Dexter y a Ezekiel. De igual manera cada mes le realizan estudios para verificar que todo este funcionando bien con su cuerpecito y cuando sea adulto no contraiga nada que dañe su salud.

—Feliz cumpleaños mi amor—Misha lo abraza por la espalda, dejando un casto beso en la nuca del menor.

—¿Mi cumpleaños ya pasó?

—Sí, sin embargo decidimos celebrarlo este día. Leo, ¿no te importa, verdad?—Pregunta Ruby.

—No, para nada.

—Ves—Sonríe—Ahora deja esa cara de niño chillón y partan el pastel porque tengo hambre.—Ya llevá un plato en su mano.

Los cumpleañeros solo niegan con la cabeza, Leo dejo a Asier en los brazos de su madre. Quería evitar cualquier peligro mientas cortan el pastel.

—A1, cambia la primavera por una noche a la luz de la luna menguante.

—Enseguida.—El interior fue iluminado por la luz de una brillante luna y el cielo fue teñido de estrellas sin opacar la luna.

Tanto Jenson como Herbert, dos hombres que toda su vida han vivido viendo y haciendo cosas tecnológicas, morían de ganas por preguntarle a Lukyan como logró tal azaña o si podían tirarlo al mercado. Es algo que se vendería rápidamente.

—Taben poneralgo de musca. (También poner algo de música)—Comentó Ruby con sus mejillas abultadas degustado del pastel.

—No hables con la boca llena—Reprende—Es desagradable—Limpia las esquinas de la boca—Pareces más tú, la cumpleañera en vez de ellos—Herbert solo niega con su cabeza.

—Soy la que preparo parte de la sorpresa—Toma otra porción—Merezco comer de primero, ¿Verdad pequeño Asier?—Toca con suavidad la pequeña naríz de Asier.

Está sonriendo de esa forma mientras mira a esos dos, eso quiere decir que quiere hacerles alguna travesura. No sé en qué momento llegué a descifrar que significa cada sonrisa y mirada.

—Bien. Voy hacerlo—Ruby camino elegantemente cómo si estuviera en una pasarela.

Se veía radiante y sexy al mismo tiempo con ese vestido rojo vino un poco escotado y abertura a cada lado. Cada vez que daba un paso podías apreciar sus tersas piernas que llevan unas medidas negras.

—Uno dos, uno dos—Prueba el funcionamiento del micrófono—La noche a penas en pieza y para la cena faltan—Mira su reloj—Unos treinta minutos, mientras esperamos.—Sonríe brillantemente—¿Por qué no bailar o jugar diferentes juegos? Los que pierdan serán encerrados juntos por unos cuantos minutos—Ve a Vincent y Brais que se encuentra a tres metros de distancia—¿Que les parece?

Esos dos no se dan cuenta de las ganas que se traen, hasta mi pequeño e inocentes sobrinos han logrado darse cuenta de la tensión al mirarse a los ojos.

Debería de ponerse a pensar que ya están viejos y no hay tiempo que perder en inseguridades. Bueno, son viejos pero malditamente atractivos...que no descubra lo que estoy pensando mi amado guardaespaldas o tendré serios problemas.

—Mejor aún—Sonrío perversa—Dejamos a los pequeños al cuidado de A1, Lewis y Misha. Ellos serán los niñeros—Ya que ellos no pueden hacer lo que viene acontinuación—Porque ellos no pueden emborracharse—Los borrachos y los niños siempre dicen la verdad.

—¿No a bebido nada, verdad?—Preguntó Herbert, acariciando los cabellos azabaches de Asher.

—¿No creó que el pastel tenga licor?—Contesto Jenson—Dejarla, solo se está divirtiendo por todos. Es joven y tiene muchas energías.

—Sí—Sonríe Ellie—Ella es un alma libre, muy única.—Ruby es el alma de la fiesta con sus ocurrencias.

Asher y Asier se ven uno al otro, esas miradas son las de dos pequeños traviesos. Ellos eran dignos de tener sangre de demonios.

—Baja de ahí—Expresa Lukyan—Se te olvida que beber es malo cuándo están amamantado.

—Entonces que solo jueguen las personas de medida edad, solo no quiero que este cumpleaños sea tan seco. ¿Cuál es la gracia de solo comer y luego ir adormir?

No sé cuándo tendremos otra oportunidad como está de pasarla en familia, así de unidos como hemos estado estos últimos meses. Ya que pronto Lukyan y Leo volverá a nuestro país, pero ya no vivirán con nosotros. Se mudarán a su propia casa.

Lo mismo va para Lewis Misha y el señor Yuri. Creo que ellos tienen pesando en mudarse a la nueva casa que envío a construir Misha, a ocho horas de dónde vivimos nosotros y a una hora de dónde vivirá Leo y Lukyan. Ellos si estarán cerca.

Luego está Dexter y Ezekiel, ambos tienen pesando en quedarse en este lugar. Solo que todavía no están muy seguro de ello.

Es lógico que hagan sus vidas en diferentes lugares y hogares ya que son mundos aparté como padres de familia que son.

—Niña deja de suspirar—Expresa Brias—Oh, por lo menos quitarte el micrófono de la boca, de esa forma no te escucharemos tan lamentable.

—Solo estaba pensando en que voy a extrañar vivir con ustedes.

Mira para arriba al mismo tiempo que mueve sus manos para que se sequen sus lágrimas mucho antes de que arruinen su maquillaje.

—Pronto viviremos por separados—Deja el micrófono—Usted también se irá, ¿verdad?

Las esmeradas verdes fueron perturbadas por un segundo, Vincent no sabía que Brais pronto se iba a marchar.

—Sí—Ve a Vincent—Tengo que regresar a mi hogar—Ya estuve mucho tiempo lejos, no puedo dejar mi asiento vacío por tanto tiempo.—Sin embargo no creo que ellos se vayan tan lejos—Señala a las parejas.—Van a vivir en el mismo país...

—A usted de seguro que le llaman el alma de la fiesta—Suspiro profundamente—Mi momento emotivo se arruinó, mejor vamos a comer después seguimos con la fiesta.

De todas maneras ya logre lo que quería, ponerlos nerviosos y hacerles saber que pronto ya no sé volverán a ver. Solo toca ver cómo se desarrollan las cosas, si Brais decide irse solo o llevarse consigo a Vincent.