capitulo 53
—¡Me envían muchas fotos, hablas con nosotros cada noche sin importar cuan tardé sea!—Ellie abraza una y otra vez a su pequeño Leo. Sí, para ella, Leonardo siempre sera su bebé.—Te amamos cariño.
—Sí, tu madre tiene razón—Jenson pone sus manos en los hombros de Leo—No te preocupes por nada, no soy tan bueno como tú, pero tengo mucha más expresión, así que, la empresa no se vendrá en bancarrota—Abraza fuertemente a su hijo—Cuidate mucho, si Lukyan te hace algo, avisarme, iré a darle su merecido. ¿Sí?
Leo iba a responder, pero ahora era turno de Vincent, los demás fueron a despedirse de Dexter. Jenson y Ellie quieren mucho a Dexter.
Vincent aprovecho el momento para poder apreciar y guardar como su mayor tesoro, ese cálido abrazo. Solo por está vez, Leonardo le correspondió.
—En ese lugar nadie podrá tocarte, ya di órdenes estrictas de que, hagan lo que tú digas. Cuidarte mucho, cuando tenga tiempo iré a visitarlos....gracias por permitirme y darme la oportunidad de ser un padre...aunque lo dudes o no lo creas, te amo, eres mi hijo. Hijo del hombre que hasta el momento, sigo amado—Susurró.
Leo se congeló un poco, en su mente creía que, Vincent. Ya había olvidado ese amor del pasado. Miró a su papá y luego a su mamá. Leo sintió un poco de pena por su padre, tener que ver interactuar de manera cariñosa a esa persona que tanto ama, debe de ser muy doloroso.
—Lo siento—Susurró—Pero es momento de que, dejes ir ese pasado...vive tu presente e intenta realizar tu vida con alguien más. Será difícil, pero más difícil sería seguír así, sin hacer nada. No te preocupes, seguiré siendo tu hijo—Eso no se puede cambiar aunque lo quisiera.
—Lo intentaré.
—Okey, puedes soltarme antes que esto se vuelva incómodo.
—Sí—Se alejó de Leo, con una gran sonrisa en sus labios. Estaba feliz.
Su sonrisa me está molestando un poco, lo hice feliz sin yo, quererlo. Bueno, que más da.
—¡Cuñado!—Ruby frota su cara en el pecho de Leo, hace poco terminó de despedirse de Lukyan—Yo quería verte todos los días—Acaricia la pronunciada pancita—No podré ver el proceso de crecimiento—Solloza.
—Puedes reunirte más adelante con nosotros...
—¡En serio!—Dejo de llorar—Ya que me estás invitado, no puedo rechazar la invitación—Sonrio.
Lukyan está muy irritado, quiere ir a darle un pequeño golpe en la frente por atrevida, por abrazar y tocar descaradamente a su Leo.
—Ya sabes que hacer ¿Verdad?—Le pregunta a Lewis.
—Si. No soy estúpido....pero si tengo alguna inquietud, ¿Puedo llamarte?—Pregunta algo avergonzado, frota su cuello para intentar ocultar su vergüenza.
—Soy tu hermano mayor—Por primera vez, Lukyan mostró un poco de afecto hacia él—No dudes en llamar—Alborota un poco el cabello de Lewis—Estare ahí para cuándo me necesites.
Lewis sintió algo cálido en su corazón, esa pequeña muestra de afecto hacia el, lo hizo sentir bien, siempre había querido escuchar unas palabras así, por parte de Lukyan.
Aunque no lo aceptará, muy en el fondo envidia un poco a Ruby, ella no le teme o no le importa los regaños de Lukyan.
—Si—Sonrio un poco—Que te vaya bien...
El celular de Lewis empezó a sonar ruidosamente, verifico quién era el número y cuando vio que era un desconocido, instintivamente colgó. Olvidado que, en su momento se lo había dado a Misha.
—¿Quien era?
—Desconocido—Lo puso en silencio, lo lleva a su bolsillo nuevamente—Ve rápido, Ruby esta por quitarte a tu prometido.
—¡Ruby, ya soltarlo!—Camina a grandes zancadas hacia ellos.
Me sorprende que mi padre haya aceptado que, Lukyan se fuera a Canadá. Pero entendió por el motivo por el que, se van a ese lugar.
Tendré que realizar el doble de trabajo, será muy pesado, sabré de primera mano lo que tenía que sufrir Lukyan, cuando yo, aún era un estudiante y el se encargaba de todo.
Lewis apoya en el auto negro deportivo, desde una distancia de unos metros, observa como las dos parejas suben al Yate. En sus condiciones no podían viajar en avión, por eso decidieron ir por mar.
Por segunda vez, Lewis estuvo a punto de sufrir un colapso mental cuando vio el estado de Dexter. Ruby lo trajo de vuelta a la tierra con el gran gritó que, produjo por la emoción de ver a dos personas que para ella, eran extraordinarias.
Luego de unos minutos de esperar que, el yate se cubriera, cada uno subió a sus respectivos autos. Era un puerto privado por lo que, nadie sabría que estaban haciendo en ese lugar, grandes familias como la Well, Ivanov, Lee.
Ya de camino a la mansión Ivanov. Lewis, decidió revisar su celular, solo para encontrar como cinco llamadas perdidas. Sus ojos muestran confusión, luego un poco de desconfianza.
—Obed, investiga este número. No me ha dejado de molestar...otra vez esta llamada...
—¿No se acuerda que le dio su número al joven Misha?
Solo entonces cayo en cuenta que, si, que se lo había dado. Estos últimos días estuvo muy ocupado aprendiendo de Lukyan, que se olvidó por completo de eso.
—Hola—Respondió.
—Hola—Se escuchaba aliviado—Por un momento crei, que me había dado el numero incorrecto.
Lewis se alejó rápidamente el celular de su oreja, esa voz le causó un poco de hormigueo. Era demasiado buena para escuchar, tenía ese algo que, te hace sentir nervioso.
—Había olvidado ese hecho—Cruza sus piernas, mira por la ventana—Por eso no respondía—Hablo con sinceridad.
—Es demasiado sincero—Minimiza la voz para escucharse un poco herido.
Pero si vieras sus mirada, es muy diferente a lo que te hace saber con su tono de voz. Su mirada es juguetona y un tanto perversa.
—La sinceridad es mejor que las mentiras—Expresa fríamente—Lo que más detesto son las mentiras.
Esas palabras pusieron en que pensar a Misha, lo sabía, sabía que esto no iba terminar bien. Pero aún así, decidió seguir adelante.
—Bueno, no me llamó para hablar sobre mentiras ¿no?
—No—Respondió—¿También olvido que seria mi guía turístico?
—Si, pero no es mi culpa. No recibí ninguna llamada estos últimos días.
—Estuve ayudado un poco a mi amigo....
—No quiero saberlo—Solo es una persona convaleciente a la cual estoy ayudando.
No quiero saber sobre su vida. El dia de mañana desaparecerá y mi no tendrá porqué importarme.
—¿Ya tiene los lugares que me mostrará?
Estoy seguro que ahora mismo está pasando que, solo soy una persona desvalida a la cual le está brindado su ayuda.
—¿Si no es así?
Si se olvidó de mi existencia, es obvio que, olvidó eso también. Eso lo vuelve más divertido.
—Mi amigo me recomendó varios lugares. Como por ejemplo, la pista de patinaje. ¿Que le parece?
Lewis tuvo un pequeño flashback de su infancia, recordó los momentos vividos con su madre, ella amaba patinar. Fue así, como su padre se enamoró de ella.
Todos los inviernos iban a patinar como conmemoración a ella, pero en algún momento, eso se volvió sofocante. No podían ir a ese lugar, sin que, se sintieran a morir.
Por eso Lewis había olvidado cuando fue la última vez que, fue a una pista de patinaje.
—¿Que no hay pistas de patinaje en Rusia?—Respondió.
—Si. Pero, paso tan ocupado que, no me queda tiempo para ir.
Misha notó un poco de melancolía en la voz de Lewis.
—¿Entonces?
Estaré bien ¿verdad? Si, la muerte de mamá fue hace mucho tiempo...el nudo en mi garganta me dice otra cosa. "Recuerda Lewis, esa persona es un desvalido, te ayudó en dos ocasiones. Se amable y agradecido.
—Esta bien—¿Que puede pasar?—Le enviaré el día y la hora más noche. Tengo que, verificar mi agenda.
—Entiendo...me agradó...
—Si eso es todo, voy a colgar—Los instintos de Lewis, le advirtieron que, algo dulce estaba por salir de los labios de Misha.—Hasta luego—Colgó.
Misha vio el celular con incredulidad, Lewis sigue siendo la primera persona que, lo sigue dejando con las palabras en la boca.
—Jajajajaj—Carcajea el joven de ojos marron rojizo.
Los cinco hombres en la sala se congelaron, es la primera vez que lo ven sonreír de esa manera, eso solo significa, "Peligro o muerte"
—¿Que lo tiene tan feliz?—Pregunta el único que no le tiene miedo, su asistente y guardaespaldas, Dior.
—Al principio creí que seria un corderito—Fuma de su puro—Alguien fácil de engatusar, pero no, es muy diferente a la información que recopilaste.
—Es lo único que había—Sirve vino en la copa.—Actuaba como tonto por esa señorita Anne.
—Como averiguar más, Lukyan sabe cómo mantener la información confidencial muy bien guardada.
—Si, creo que fue lo mejor no seguir intentando entrar a su sistema...pero, ¿cuando irá hablar con Vincent Lee? El ya debe de saber que está aquí.
—Eso es más que obvió—Nada puede entrar o salir de este lugar sin que, Vincent Lee, no este enterado.
Es muy raro que no haya hecho un movimiento, la persona que conozco, me hubiese obligado a ir a rendirle respeto. A menos que ya, hubiese hablado con mi padre.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top