La señal por parte de Luke llegó antes de lo esperado. Aún estoy sorprendido de cómo Liam confía en Luke, ya que este le dijo que Noah podría cambiar de parecer y modificar todo de un momento a otro, por eso tomaron la precaución y Damon le dió una llave a Luke, no sin una mini discusión sobre hacer aquello.

Apenas la señal fue recibida, nos movimos rápido. Los que quedaron en el campamento están guardando lo primordial mientras Liam, Damon, Morgan, Cam y yo nos adentramos en zona de humanos.

Me molesta el poco tiempo que tengo para buscar a K o sacarla de sus tierras para que este a salvo en las nuestras. Sé cuál es su preocupación, ir a un lugar que no conoce, con personas a las que le enseñaron a odiar, no debe ser fácil, pero tengo el apoyo de Liam.

En aquella discusión, Damon se negó, me dejó claro el error que voy a cometer y no lo culpo, sé cuáles son sus razones, pero no dejaré a K atrás. Debemos completar la marca y será mucho más fácil si estamos juntos.

Lo bueno es que tengo la aprobación del Rey. Eso dijo Liam.

—Tienes mi apoyo y mi padre quiere conocerla.

Sé que a mi gente le puede costar un poco, pero le darán una oportunidad, ya comenzamos con la fogata y no nos fue tan mal, Luke, Nat y H, también son bienvenidos. Pero sigo teniendo el mismo dilema: ¿cómo voy a llegar a ella?

Es algo que resolveré en la marcha porque ya hemos llegado al lugar. Todos estamos calmados, menos Damon quien está que tira toda esa base de un golpe. Liam lo dejó venir solo si seguía sus ordenes y Damon aceptó, pero le cuesta; va encontrar de su esencia como heredero.

—Parece que no hay nadie afuera —menciona Liam.

—No lo hay. —Morgan quita sus manos del suelo, uno de sus dones es la tierra—. Adentro hay dos humanos más de lo esperado, un total de dieciocho.

—¿Quiénes son los otros dos? —pregunta Cam.

—Prepárense, solo hay que neutralizar —Liam dice eso último a Damon.

—Dije que haría todo lo que dijeras, ¿No? —Damon se controla lo mejor que puede.

Liam hace las señales correspondientes para que nos despertamos y comencemos el ataque. Morgan se queda en el lugar para estar alerta de cualquier acercamiento no deseado —Humanos—, Cam va directo a los árboles para estar en posición sí tenemos un ataque sorpresa mientras Liam, Damon y yo corremos hacia la entrada.

Liam mueve sus manos para crear una ráfaga de viento que abre la puerta de golpe.

Damon y yo entramos deprisa, para encontrar adentro a dos Alphas que le inyectan algo a una niña amarrada a una silla; la niña tiembla al ver a Damon.

—Sire —dice con lágrimas en sus ojos. Su voz es frágil como su cuerpo.

Los Alphas se sorprenden, saben quienes somos, uno va directo a una de las mesas para buscar algo.

Me interpongo en su camino y lo noqueo mientras que el otro sale corriendo hacia un pasillo.

Liam lo intercepta antes de que entre a una habitación.

Damon se acerca a la niña y quita todos los cierres que la retienen en la silla, apenas es liberada abraza a Damon y veo como las líneas doradas salen de él.

—Damon, faltan más niños —digo muy suave. No puede perder el control—. Hagamos esto y vámonos.

—El collar —susurra la niña, sin soltar a Damon—. Nos matará antes de salir de aquí. Los collares duelen.

Busco en mi mochila un pequeño interruptor. Luke en definitiva pensó en todo.

Coloco el aparato cerca de su collar, una luz verde se enciende y el collar se abre. La niña da un suspiro, le hemos quitado un peso de sus hombros.

Liam sale del pasillo con varios niños, quince para ser exactos los que dijo Luke y K que seguían vivos. Reconocí a dos de ellos, hijos de personas del palacio, pero casi todos reconocían y se acercan a Damon.

Salimos de este horrible lugar, no pude evitar ver que el pequeño niño tal vez de cuatro años está casi muerto.

Liam mantiene la compostura y guía a los demás niños hacia afuera. Yo no puedo, debo ver hacia otro lado y mantener la calma. No logro sentir sus energías, creo que todos se dieron por vencidos o están tan golpeados que su conexión con la Naturaleza se apagó.

Algunos se quejan con cada paso que dan, otros tienes sangre seca en su piel y algunos cortes que cualquier médium podría curar en segundos, pero aquí no, por eso esas heridas están infectadas y dejarán cicatrices en su piel.

Levanto a una de las niñas y por instinto me aparta, mi alma se quiebra al ver el miedo en sus ojos.

—Perdon —susurra, pero sus brazos no dejan de crear una distancia entre los dos.

—No te haré daño —digo un poco más fuerte de lo que debería.

—Lo sé, es que... —Sus ojos se nublan y quiero acabar con este lugar solo por eso—. Mis costillas duelen.

Aparta la mirada, su cuerpo tiembla y le cuesta respirar.

—Pronto estarás curada. —la acerco con cuidado y ella abraza mi cuello. Se está obligando a acercarse porque no deja de temblar—. Estás a salvo.

Paso al lado de un chico más grande que cojea al caminar, le doy mi mamá y tiene la misma reacción de esta niña. ¿Que demonios le hicieron a estos niños?

Busco la mirada de cualquiera de los herederos, también observan a los niños. No podrán moverse muy rápido o solos.

Damon baja a la niña que carga y le dice a cam que cree dos carrozas para que los niños suban, usaremos nuestros dones para moverlas y así llegar rápido a una zona segura.

Cuando todos están dentro los más grandes abrazan a los pequeños y estos solo lloran, queremos que se calmen, pero son niños y no quiero saber que clase de infiernos han pasado.

Desde jóvenes nos preparan para reconocer las emociones y canalizarlas, pero nadie te prepara para ver sufrir a unos niños y sentir que no pudiste evitar que sufrieran.

El camino es largo y el llanto se ha transformado en lentos sollozos que se los lleva el viento. No nos apuramos porque están agotados y debemos tener cuidado de que no sufran daños más graves.

Damon sujeta con fuerza una de las carrozas y la madera cruje debajo de su mano.

—Respira —digo poniendo mi mano en su hombro. Las líneas doradas en su cuerpo son nuestra señal de que está al límite.

Estamos a diez metros de la zona neutra si pasamos, lograríamos la primera parte. Evitar una pelea.

Cam aparece frente a nosotros y crea una pared con enredaderas. Algunas son destruida y mi piel se eriza.

—Estan aquí —digo.

Un gran impacto mueve las carrozas, Cam intenta evitar que los disparos nos den mientras protegemos a los niños. Morgan encierra las carrozas para que nada entre en ella y nos protegemos entre los árboles.

—Lo voy a matar —dice Damon y Liam le agarra el brazo.

—Tú no harás nada —gruñe Liam.

Noah disparando sin piedad, no le interesa perder lo que tenía, solo no quiere que nos lo llevemos, esto no es más que un juego para él.

—Están locos si dejaré que lleguen a nuestras tierras y se vayan sin pelear —grita Noah, luego se protege detrás de un árbol.

Cam comienza su ataque, convirtiendo las hojas en pequeñas navajas aéreas.

Alguien debe empujar las carrozas y otra debe hacer un puente para cruzar por el río Black.

—Sí dejan lo que encontraron, no seguiré el ataque —grita Noah, pero Cam y Liam siguen contra atacando—. Lo tomaré como un no.

Liam mira hacia un punto, se quienes y sobre todo quien está ahí, me asomo con cuidado y puedo ver a los gemelos, dos chicas cerca de ellos, Noah y entre los árboles Luke, Nat, H y una K muy preocupada lanzando algunas flechas que dan cerca, pero no en el objetivo.

—El muy maldito los trajo —susurro al mismo tiempo que saco mi arco y formo flechas con mi don. Es hora de atacar.

—Elijah, ¿Puedes retenerlos desde donde estas? —pregunta Liam.

—Si, los tengo a todos en mi campo de visión. —Sigo atacando hacia Noah y esos gemelos. Apuntando algunas flechas que sé que fallarán hacia Luke, Nat, H y contra mi voluntad hacia K.

—Cam haz lo mismo. —Liam agarra a Damon—. Mírame. —Puedo escuchar como Damon se queja—. ¡Mírame, Damon!

Si grito se camufla con los sonidos de los disparos y flechas que son lanzadas desde muchos ángulos.

—Los niños son la prioridad, no la venganza —dice Liam—. Necesito que tú y Morgan se los lleven.

—No —contesta Damon, muy cabreado.

No está en su ser seguir órdenes. Normalmente, lo ayudaría, pero entiendo por qué Liam necesita sacarlo de aquí, sus líneas doradas no se han desvanecido, se ven mucho más intensas y él está sufriendo, esa mezcla no será buena en este momento.

Además, está Noah. No se detendrá hasta acabar con Damon si ve que tiene ese don.

—Eres el único con la energía suficiente para mover esas causas solo, así que sí, lleva a esos niños a un lugar seguro y no mires atrás, no ataques, solo llévalos a la base secreta. —Damon quiere reprochar, pero Liam grita—: ¡Es una orden!

Damon maldice para luego ir hacia las carrozas. Liam tiene razón es el único con el poder para mover todas esas carrozas él solo y evitar cualquier ataque, nosotros vamos a retener a Noah, además Morgan va con él, así puede evitar que se descontrole.

—Cam, Elijah, a la cuenta de tres atacamos y no dejamos que lleguen a ellos. —Liam se coloca en posición para apoyarnos.

—Entendido, Sire —contestamos.

—Uno. —Damon se prepara y Morgan está lista para crear un puente rápido—. Dos. —Enfoco bien a K, no le iba a dar por accidente, los demás no me importan, si le doy a uno de sus amigos, pediré perdón—. ¡¡¡TRES!!!

Liam uso su don para desorientar a las dos chicas que están más cercas y en parte a los gemelos detrás de ellas, Cam hace que los árboles se agiten para que no puedan acceder fácilmente a los niños.

Es muy poco lo que podemos hacer en esta zona. Es casi como si la Naturaleza no nos escuchara muy bien —Cam expreso una vez, que es como si todo estuviera dormido—.

Lanzo flechas que cuando llegan al objetivo, el suelo, un árbol o alguna parte se convierten en pequeñas ráfagas de oscuridad que se disipan rápido, pero aturden al enemigo.

—Ahora, ya, ya, ya. —les avisa Liam.

Damon mueve todas las carrozas, la tierra tiembla un poco ante su energía y Morgan crea el puente, cruzan muy rápido.

No detenemos nuestro continio ataque hasta que Morgan destruye el puente. Están a salvo.

—¡NO! —grita Noah.

Corre hacia la zona neutra, pero Liam lo detiene cambiando los ataques de larga distancia a una pelea cuerpo a cuerpo. A su pelea se les unen los gemelos.

Cam está luchando contra dos chicas, H y Nat —lo hacen para mantener la fachada—.

Antes de que pueda hacer algo, enfoco a K.

Luke la empuja para que vaya hacia otro lado, pero mis ojos están en ella y los de ella en mí. No puedo dejar que la alejen de mí.

Doy un paso hacia ella, pero toda acción es detenida por algo que grita Noah.

—¡De aquí ustedes no salen vivos! Se llevaron algo importante, me quedaré con alguno de ustedes.

Luke ve algo, sigo su mirada. Noah saca algo del pequeño moral de su pierna derecha. Algo circular.

—¡Cam, aleja a Liam! —grito.

Noah lanza aquella esfera y de ella sale una explosión de sonido.

La tierra tiembla.

K está congelada.

Luke la protege, pero todo se sale de control.

El impacto nos manda a volar a todos.

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