-se aman, se aman- canturreaba Taehyun dando pequeños saltitos acompañando a sus amigos

-tarado, lo asustas- Hyuka le dio un golpecito en la cabeza

-ustedes piensan mucho en cosas que no son reales y sin importancia- Beomgyu bufó

-ya veremos, Beomgyu- sorbió su batido -ya veremos- se sobó en la parte anterior golpeada

-cállense y entren al salón- Beomgyu los empujó dentro del aula

-uy, ya se molestó- Hyuka los siguió siendo empujado por el pelidorado
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Las chicas cuchicheaban toda clase de cosas al rededor del salón de quinto grado en esa escuela

¿Porqué? Por que Soobin estaba tranquilamente parado frente a ese salón junto a Yeonjun, ambos parecían estar esperando algo... o a alguien

Las puertas del salón se abrieron pocos minutos después de que el timbre haya sonado, Soobin se reincorporó viendo atentamente s cada alumno que salía, no era difícil, sus 1,94 cm. Ayudaban a hacer la búsqueda mucho mas fácil... bueno... la pequeña estatura de Beomgyu la dificultaba un poco

-Beomgyu!- los cuchicheos pararon cuando Soobin pronunció el nombre de ese lindo pelidorado que acababa de salir del salón

Los cuchicheos volvieron segundos después de que el peligris se acercara al joven que antes había llamado

-pff- empezó a reir -si me esperaste- cubrió su boca

-claro, buscarte es muy tedioso- rodeó sus hombros yendo donde antes estaba solamente Yeonjun, pero ahora estaban los otros dos jóvenes del mismo aula de Beomgyu

Tae y Hyuka susurraban entre ellos diferentes cosas, que Beomgyu y Soobin se aman por ejemplo

-¿ya puedo mudarme?- dijo directamente

-claro- sonrió acomodando nuevamente sus gafas

-dejemoslos solos- Tae empujó a Kai y Yeonjun -hasta mañana Beom- se despidió agitando su mano

-hasta mañana, chicos- sonrió despidiendose -¿vamos?-

-seh, mis cosas están en la casa de mis padres, iremos caminando pero volveremos en mi auto- no retiraba su mano del hombro del menor

-ok- sonrió, después de todo aún era medio día

-¿quieres comer algo?- Soobin se sentía algo culpable por recibir comida de Beomgyu sin darle nada a cambio

-estoy bien, despues de todo casi nunca almuerzo a esta hora- sostenía los tirantes de su mochila

-por esi mismo despues de recojer todo, mis padres me darán una tarjeta, te voy a llevar a comer- su vista seguía en frente -estás muy delgado, apuesto que no pesas nada-

-estoy bien, obviamente tengo peso-

-¿te lo pruebo?- se colocó en su enfrente bajando la mano que antes estaba en el hombro de contratio hasta su cintura, colocando la otra mano en su otra cintura levantandolo cual niño -y no estoy haciendo ningún esfuerzo-

-bájame- se desesperó un poco

-¿tienes miedo a las alturas?- lo levantó mas alto

-¿t-tú que crees?- sus manos se aferraron a las de Soobin para que no lo soltara

-bien, además de una piel de princesa éres un miedoso, adivino- lo bajó pero Beomgyu seguía aferado a sus manos -le tienes miedo a las peliculas de terror y a los ruidos fuertes, sin contar la oscuridad-

Beomgyu no lo miró delatándose claramente

-¿cómo es que vivías solo?- rió

-tengo un gato- soltó las manos de Soobin suavemente

-¿le voy a caer bien?- no le molestaba tener un animalito en casa

-depende si le das comida o no- levantó sus hombros siguiendo con la caminata

-le compraré comida una vez qye tenga la tarjeta de mi familia de vuelta-
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-¿e-esta es la casa de tus padres?- estaban enfrente de una gran mansión, Beomgyu no podía creerlo

-sip- subió las gradas hasta llegar a la gran puerta -vamos, entra- habló a Beomgyu cuando el mayordomo abrió la entrada

-si- se posicionó un poco atras de Soobin avanzando a su par

Vio a un señor y una señora sentados en el sofá, el señor fumaba y la señora un poquito arrugada con una amigable sonrisa bordando un pequeño mantel sobre sus pantalones de tela

Beomgyu pensó que al vivir en una gran mansión, los padres de Soobin vestirían atuendos muy caros y que la señora llevaría puesto un vestido con un cabello demasiado arreglado, pero se llevó una sorpresa al ver todo lo contrario

-hijo!- la señora se paró dejando a un lado el bordado yendo hacia donde Soobin estaba

-hola, mamá- sonrió levemente -hola, papá-

-¿que te lleva por aquí? Te dijimos que no podíamos darte tu tarjeta o auto si no encontrabas un compañero de departamento-

-lo encontré- volvió a pocicionar su mano en el hombro de Beomgyu -él es con quien compartiré departamento-

-oh!- la señor sonrió en dirección a Beomgyu -entonces tú serás su compañero-

-s-si- hizo una reverencia -bue-buenas tardes-

-oh, querido- la señora juntó sus manos -no tienes que estar nervioso-

-querida- llamó el señor -ganaste- rió

-me debes unas vacaciones- sonrió

-mamá,¿de qué están hablando?- Soobin estaba confundido, su madre veia con mucha atención a Beomgyu

-oh, es que yo predije que algún día de este año nos presentarías a tu novio y tu padre apostó por que sería cuando estuvieses en la universidad-

-¿qué? No- Soobin sacudió su cabeza -Beomgyu no es mi novio- negó

-si, si- su madre no le hizo caso a su hijo -cuida bien de Soobin, algunas veces te colma la paciencia, pero con un poco de amor todo se arregla- abrazó a Beomgyu -es lo más importante para su padre y yo- sonrió -a Soobin le gusta abrazar mientras duerme y además que le acaticien el pelo- tomó las manos de Beomgyu -haz eso por nosotros, porfavor- sonrió amablemente -ah! Cierto- tomó aire -no hace falta formalidades, puedes llamarnos papá y mamá-

-madre...- Soobin moría de la verguenza

-tenemos un lindo yerno- habló a su esposo -y ahora es parte de la familia- sacó de su bolsillo una billetera, de ahí mismo sacó una tarjeta y se la entregó a Soobin -consiente bien a este lindo joven-

-lo haré, mamá- no estaba de humor para explicarle que sólamente viviría ahí

-ahora ve a recojer tu auto y tus cosas- lo empujó -quiero hablar un momento con Beomgyu-

-sip- se fue dejando solo al de cabellos dorados
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Soobin llegó a la sala una vez terminó de recojer todas sus cosas, sin esperarse ver a Beomgyu muy cómodo con sus padres

-¿Beom?- ladeó la cabeza

-oh! Soobin- le sonrió -tus padres son realmente agradables-

-no te atrevaz a dañar a este jovencito- centenció su padre

-Beom, tenemos que irnos- intentaba sostener su sonrisa, la cual estaba a punto de ser borrada y reemplazada por gritos de explicaciones de que no es su pareja

-oh! Cierto- se levantó del suave sofá -adiós papá, adiós mamá- se despidió agitando su mano yendo al lado de Soobin

-hasta luego, hijo- ambos adultos mayores despidieron al joven que acompañaba a su verdadero hijo

Una vez salieron de la mansión Soobi pudo respirar correctamente y borrar su sonrisa

-anda, sube- activó el auto para que cuando lo abra no chille

-sip- se dio la vuelta subiendo a la movilidad

-¿qué quieres almorzar?- sonrió sacando su tarjeta de su bolsillo guardándola en su billetera

-¿tteokboki está bien?- abrazó su mochila

-claro, vamos a comer- se encaminó hacia donde él sabía que había un buen restaurante

Una vez ahí ambos se bajaron y entraron al local, ordenaron y Soobin tomó aire

-Beomgyu, necesito que me hagas un gran, gran favor- unió sus manos

-¿qué?- tomó del agua de cortesía

-cuando vayamos donde mis padres necesito que actues como mi pareja-

-claro... pero ¿por qué?- ladeo su cabeza

-mamá y papá me seguirán molestando con el tema del matrimonio si no estás tú- rogó -porfavor-

-mmm..déjame pensarlo- miró a otro lado dudando si aceptar o no

-compraré todos los víveres que quieras ademas de postres y comida para tu gato- ofreció

-trato hecho- extendió su mano con una sonrisa

-si!- festejó -gracias- le dio un apretón a la pequeña mano de Beomgyu cerrando así el trato

-a comer- sonrió cuando la comida llegó

-disfruta todo lo que quieras, cariño- jugó riendo

-gracias por la comida, cielo- siguió el juego levantando un poco de la comida con sus palillos

Definitivamente esto será divertido

Cami~