Jeongin iba lagrimeando, le dolía discutir con Lee Know o con cualquiera de sus amigos, estaba lastimándolo más el hecho de que al castaño le importara poco o nada sus sentimientos respecto a Hyunjin o incluso el mismo Hyunjin.

No era noticia nueva que estuviera enamorado del rubio, lo que sí era nuevo fue que Hwang empezara a darle más importancia a él y menos al castaño del que juraba estar enamorado desde hace un par de años y eso, era algo que de cierto modo le causaba angustia porque... ¿y si no era suficiente para Hyunjin? ¿y si ahora que Lee Know empezaba a darle más interés las cosas fluían mejor entre ellos?

—¡Innie-ya! —A la distancia iba corriendo Bang Chan, llevaba su patineta y una mochila. Él estaba bastante preocupado y aunque Yang quisiera estar solo, no iba a dejarlo.

—Hyung. —Respondió ocultando sus lágrimas, pero el mayor no era tonto y los ojos rojizos del menor lo delataban.

—¿Cómo te sientes? —Lo observó con detenimiento.

—No importa, hyung... —Titubeo, en ocasiones le gustaría poder contarle a su hyung las cosas que lo acongojan, pero no quería ser una carga, además no quería causar una desunión entre ellos por sus sentimientos.

—Jeongin, quiero que platiquemos, en ocasiones siento que te guardas demasiado las cosas y eso no me parece justo, somos amigos ¿no? Puedes desahogarte conmigo, seré una roca, no diré nada de lo que me cuentes, pero por favor, habla conmigo.

El menor analizó la actitud de Bang, en verdad lucía preocupado por él y eso lo hacía sentirse un poco más reconfortado. Bang Chan siempre se prestaba a escucharlos a todos, él era como la figura paterna del grupo, era el único que sabía qué y cómo decir las cosas para que todo saliera de la mejor manera, eso hacía que Jeongin lo admirara y confiara en él.

El mayor tomó con cautela la mano contraria y lo llevó hasta el jardín de la cafetería, ahí podrían hablar sin problema ni distracciones.

Llegando, Jeongin empezó a sacar todo su sentir, incluso le contó sobre las cosas que habían pasado entre él y Hyunjin. Chan parecía sereno, pero si se sinceraba, estaba de todo, menos tranquilo...

—Entonces, me estás diciendo que Hyunjin decidió abrir un poco más su corazón contigo, pero no quiere que nadie lo sepa hasta que él se sienta seguro de lo que siente por ti y por Lee Know... —Suspiró y se quedó pensando un poco más. Jeongin miraba con detenimiento las facciones del chico frente a él, no imaginaba qué estaba pensando—. Solo quiero que sepas que eres una persona grandiosa Innie, que mereces cosas lindas, mereces ser el primero en todo para la persona de la que te enamores... —Titubeó—. Es decir, sé que Hyunjin es una buena persona, es increíble y te quiere demasiado, pero no le permitas que te haga sentir insuficiente ¿de acuerdo? Tú eres como la Luna... una Luna que ilumina con fuerza la vida de otros y no quiero que te apagues nunca. —Sonrió y volvió a tomar la mano del menor—. Puedes confiar en mí y puedes venir a mí las veces que sean necesarias, no lo olvides.

Estar con Chan era demasiado cálido y tranquilizante, era verdad que siempre encontraba las palabras correctas, Jeongin había pasado de sentirse miserable a sentirse alguien valioso y con más confianza en sí mismo.

Él sabía que el corazón de Hyunjin estaba viéndolo, comprendía que la cabeza del mayor fuera un caos, pero en su interior, él sabía que el corazón del rubio empezaba a elegirlo y a necesitarlo, de cierto modo, eso empezaba a tranquilizarlo de la fuerte rabieta...

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Hyunjin estaba desconcertado, miraba la duela y viajaba en muchos pensamientos a la vez, mientras Lee Know seguía contándole demasiadas cosas.

—Pero no entiendo ¿por qué Jeongin vendría a decirte de groserías? Él no es así hyung.

—Las personas enamoradas pueden cambiar, Jinnie. Él me ve como una amenaza constante y eso que ustedes ni siquiera tienen nada.

Hyunjin alzó la mirada ante eso último, porque... así cómo "no tener nada" pues no era verdad, él y Jeongin habían avanzado más de lo esperado y en poco tiempo, no significaba que hubieran tenido relaciones sexuales o esas cosas, pero pasaban más tiempo como "pareja" y no iba a negar que en ocasiones sus labios se unían durante bastante rato, sumándole el hecho de que su corazón se agitaba con fuerza cada que veía al menor acercarse con su enorme sonrisa con hoyuelos y sus hermosos y exóticos ojos achicándose con ello.

—¿O me equivoco? ¿ustedes empezaron a...?

—No es tan así... es decir, sí, Innie y yo hemos... —Carraspeó inquieto—. Hemos tenido acercamientos que rompen la barrera de la amistad y...

—Pero soy yo quien te gusta ¿no?

Lee se acercó con rapidez al cuerpo contrario, hasta dejarlo sentado sobre la duela del templete que había en el enorme salón, quedando él entre sus piernas.

—¿Hy-hyung...? —Hyunjin estaba cohibido. Eran muy pocas las veces que Lee Know actuaba de esa manera estando completamente sobrio y, eso le daba un poco de miedo y no sabía por qué.

—Yo sé que al que quieres es a mí Hyunjin. —Se acercó más al rostro contrario, sin despegar su vista de los labios.

Hyunjin luchaba con todas sus fuerzas para no caer, claro que quería besar a Minho, pero su corazón se contraía cada que se imaginaba juntando sus labios... ¿desde cuándo? Su cabeza le decía que lo hiciera, que se dejara llevar, que lo besara, pero su corazón no...

El rubio estaba por detenerlo, cuando la puerta se abrió, dejando ver a Félix, ambos se separaron, pero el otro rubio ni cuenta se dio de la situación en la que se encontraban cuando ingresó, iba tan metido en el ardor que sentía en sus manos por el hielo que le llevaba a Lee que lo demás pasó desapercibido.

Lee Know rodó la mirada, odiaba que siempre interrumpieran esa clase de momentos, en específico Félix, siempre era el de pecas.

Nadie dijo nada, simplemente se limitaron a "curar" un poco las heridas del castaño y también debían ensayar, habría un festejo por la entrada del otoño, habría puestos de comida, pequeñas áreas de juego y lo principal, el espectáculo de talentos que se llevaría en la explanada ahí participaría personas de canto, danza y obras teatrales, por lo que Félix, Lee Know y Hyunjin estarían participando con baile.

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Jisung estaba cansado ¿por qué él y Chang Bin tenían que llevarles las motocicletas a Hyunjin y Minho? Él muy pocas veces condujo una y la casa del mayor quedaba bastante lejos de la universidad, tenía bastante miedo si era sincero.

Seo por su parte estaba en constante calma, desde que era un jovencito de 15 años había subido a su primer motocicleta, no era raro para él subir a una ahora, sabía que Han si lo estaba, pero intentó tranquilizarlo, diciéndole que irían a la par en todo el camino.

—¿Crees que las cosas mejoren? —Expresó desanimado Jisung al mayor.

—¿A qué te refieres? —Chang Bin creía saber por dónde iba ese asunto, pero prefería que el castaño lo explicara.

—Las cosas últimamente han estado tensas entre todos, mayormente con Hyunjin, Lee Know y Jeongin, siento que cada vez es peor cuando los tres se encuentran.

—Pensé que era el único atento a eso... —Sonrió desanimado y dejó el casco en el manubrio.

Todos sabían que a Hyunjin le gustaba Lee Know, sin embargo, Seo estaba enterado de que el rubio avanzaba cada día un poco más con el pequeño Yang, todo lo sabía gracias a boca del mismo Hwang, él le había contado todo respecto a los cambios recientes en sus sentimientos románticos por ambos jóvenes y le inquietaba la nueva insistencia de Lee sobre Hyunjin, porque se suponía que hasta hace muy poco tiempo él estaba en algo con Seungmin, del cual seguían sin saber nada...

Jisung por otro lado, conocía bastante bien a Minho, ellos tenían una de las amistades más largas, casi tanto como Hyunjin con Jeongin, quizá había una diferencia de 1 año, pero de todos él era quien mejor conocía al otro castaño y, entendía que todo lo que estaba haciendo actualmente era actuar por impulso, sin pensar en las consecuencias de nada y ese lado de Lee lo asustaba bastante, porque una ocasión en años pasados terminó destruyendo todo lo que amaba.

—No, llevo tiempo notándolo, no quiero que nuestra amistad se vaya al carajo ¿me entiendes?

—Estamos en la misma sintonía querida ardilla. —Dijo tras un suspiro—. Sé que Hyunjin está superando a Lee Know, pero... aggh... no sé, Minho ha estado muy extraño ¿no crees?

—Sí, demasiado, siempre hace esto cuando está muy herido, cuando siente que no puede avanzar más... creo que todo es porque Seungmin se fue. —Empezaron a caminar al aula de danza, debían entregar los cascos y llaves a los mencionados—. No quiero que lastime a Jeongin ¿sabes? Y creo que... se está orientando a ese camino.

—¿En serio crees que él...?

—Lo conozco mejor que nadie, y créeme, puede hacerlo y si quiere, va a hacerlo.

El estómago de Seo se hizo chiquito, sabía que Lee Know podía ser tenebroso muchas veces, sabía que daba miedo en la mayoría del tiempo, pero él siempre pensó que era solamente una barrera que utilizaba para cuidarse a sí mismo de cualquier daño exterior... sin embargo, ahora que Jisung estaba diciéndole aquello, en verdad se sentía intranquilo.

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En Japón, Seungmin estaba leyendo en su habitación, extrañaba como loco a su novio, porque bueno, después de todo ellos jamás terminaron... aunque bueno, comprendía si su hermoso castaño seguía su vida porque después de todo, él nunca le avisó sobre lo ocurrido, más bien, nunca le dieron tiempo de hacerlo.

—¿Sigues leyendo? —Se adentró Seokjin con un rostro comprensivo y se sentó en una orilla de la cama.

—Es lo único que me despeja la mente, hyung.

—¿Seguro? Casi creo que solamente hojeas las páginas, creo que tu mente se encuentra en otro lugar. Sabes que puedes contarme cualquier cosa ¿no? Soy tu hermano.

—Hyung... no quiero estar aquí, necesito volver, quiero estar con mis amigos y con...

—Con Lee Know ¿no? —Sonrió enternecido. El menor asintió cabizbajo—. Hagamos algo, te presto mi celular para ponerte en contacto con alguien y que ese alguien le explique a Lee de todo lo que pasa.

—¿De verdad, hyung? ¿en serio? —La mirada apagada de Seungmin empezó a brillar al escuchar eso.

—Claro, pasé por algo similar hace algunos años, cuando se supo de mi relación con Nam... también me enviaron lejos, creyendo que de esa manera me olvidaría de él, pero...

—¿Nam? Pero tú ya no estás con él.

—Lo sé, lo que quiero decir es que, no es un capricho el enamorarte de alguien y no es pecado hacerlo de alguien de tu mismo sexo, porque a pesar de que me enviaron lejos... bueno, seguí queriéndolo y extrañándolo, pero un día empecé a olvidarlo y... conocí a Tae. —Ahora la mirada iluminada era la de Jin—. A lo que me refiero es, a que el hecho de que te envíen lejos no va a cambiar tu preferencia sexual, yo fui cobarde y no luché por regresar con Nam, y no quiero que pase lo mismo contigo.

—¡Hyung~! Eres el mejor~~~

Seungmin se abrazó del torso de Seokjin, eran raros los momentos cariñosos que ambos compartían, a parte, tenían más de tres años sin verse, pero ahora parecían bastante cercanos y amorosos. El mayor siempre había querido ser cercano con su dongsaeng, pero las circunstancias solamente los alejaban más de modo que consideraba que ahora que su hermano lo necesitaba iba a estar para él sin dudas.

Kim mayor le prestó su teléfono, y así fue cómo Seung llamó a Félix, porque Minho no tenía redes sociales y si era sincero, no recordaba su número de celular, pero regresaría pronto, estaba seguro de que lo haría, solamente necesitaba trabajar un poco para comprar su boleto de avión de vuelta.

La verdad, la verdad... Lee Know se está pasando de lanza. :c