El silencio en las calles era lo único que se podía escuchar, no había ningún rastro de vida orgánica en aquel desolado lugar. Sólo había robots de Eggman patrullando la zona en busca de supervivientes con el único fin de capturarlos para que le sirvieran de esclavos a su amo. Los robots iban acompañados de unos grandes tanques en los que encerraban a sus prisioneros, por desgracia para estos seres mecánicos, no parecía haber una gran cantidad de personas en la zona. Habían capturado a unos cuantos, pero nada a comparación de lo que había conseguido en días o meses previos.

―La zona ha sido completamente analizada, no hay rastros recientes de vida desde hace días, comandante ―informó un Egg Robot.

―¿Cuántos ciudadanos hemos capturado hoy? ―le preguntó el comandante.

―Entre esta zona y la zona Sur solo hemos encontrado a un total de 17 ciudadanos ―le respondió el Egg robot.

―Vamos a hacer un último barrido antes de ir al Norte y al Este, si no encontramos más en esta zona llevaremos a los ciudadanos a la zona de concentración con el resto de los suyos ―ordenó el comandante.

―Afirmativo ―dijeron todos los Egg robots.

Los Egg robots reanudaron su búsqueda de supervivientes. Sin embargo, estos robots no se habían percatado de algo. En una azotea de la zona se encontraba un grupo de supervivientes observando atentamente cómo estos marchaban por la zona. Uno de ellos usaba una especie de prismáticos que le permitían localizar rastros térmicos para así saber si había supervivientes dentro de los tanques.

―Mirad como esos cabrones se pasean a gusto por nuestra ciudad ―dijo uno de ellos.

―No hables muy alto Spike, nos van a pillar si no bajas un poco el volumen de tu voz ―le comentó uno de sus compañeros.

―Perdón Wing, se me va la olla un poco cuando veo la situación en la que estamos ―se disculpó aquel erizo llamado Spike.

―Tranquilo es comprensible, solo trata de estar algo más calmado ―dijo la gaviota.

―Lo intentaré ―dijo Spike.

―¿Cómo está la situación ahí abajo Rookie? ―le preguntó Wing.

―De los tres tanques que han traído solo el primero tiene supervivientes, el resto están vacíos ―les informó el lobo de pelaje rojo con gafas.

―Con la munición explosiva nos basta y sobra para tumbar a uno de esos tanques ―dijo Wing.

―Aun así tenemos que tumbar a los otros dos, como los dejemos intactos nos van a dar mucha caña a la hora de liberar a los prisioneros ―opinó Spike.

―El otro grupo me ha confirmado que ya están en posición, les he informado que apunten a las ruedas para evitar que los prisioneros salgan heridos ―les informó Rookie.

―¿A qué esperamos entonces? Que comience la operación de rescate ―dijo Spike.

―Las órdenes las doy yo...pero si que de inicio ―dijo Wing.

Con mucha ilusión el erizo Spike levantó el lanzacohetes y apuntó en dirección hacia el primero de los tanques. Rookie por su parte miró con sus prismáticos a uno de los edificios que se encontraban al otro extremo de la calle. En él se encontraba otro grupo de la resistencia haciéndole señales de que ya estaban listos para atacar. El lobo con gafas le confirmó inmediatamente a la gaviota lo que vio, por lo que Wing se preparó para dar la orden de disparar.

―¡Fuego! ―ordenó Wing.

Spike disparó nada más su jefe lo ordenó. Los Egg robots no se esperaron esto y para cuando se dieron cuenta, las ruedas del primer tanque ya habían sido destruidas junto con los robots que se encontraban cerca de este.

―¡Ahora, segundo ataque! ―ordenó Wing.

Desde el otro edificio dos cohetes más fueron lanzados contra los otros tanques, esta vez fueron directos hacia las cabinas de estos para destruirlos al completo dado a que al no haber prisioneros dentro no había razón alguna para tener cuidado hacia donde apuntar. Ambos cohetes impactaron con éxito en los tanques provocando una pequeña explosión que acabó con los Egg robots que rodeaban ambos tanques, tras eso una nube de humo cubrió completamente ambos tanques.

―¡Ja! ¡Chupaos esa hombres de hojalata! ―dijo Spike.

―Perfecto, hemos logrado abatir a los tres ―dijo Wing victorioso.

―No esperad, aún detectó leves señales dentro de la nube de humo ―les informó Rookie.

―¿Como que detectas señales? si les hemos dado de lle... ―dijo Spike sin poder terminar su frase al ver lo que había tras la nube de humo.

La nube de humo desapareció por completo mostrando como los tanques seguían completamente intactos pese a recibir un impacto directo de un misil cada uno.

―¿¡Pero qué cojones!? ―dijo Spike sorprendido.

―¡Que nos apuntan! ―dijo Rookie.

Los tanques apuntaron a la parte superior de la azotea. El grupo se apartó lo más rápido posible antes de que los tanques disparasen sus misiles. Por suerte cuando los cohetes impactaron en la azotea el grupo ya se había apartado a tiempo.

―Equipo A ¿Estais bien? ―les preguntó uno de sus compañeros al comunicador.

―Sí Bullet, por suerte hemos podido apartarnos a tiempo antes del impacto, aunque el plan de acabar con los tanques ha salido mal ―le respondió Wing.

―Ya lo hemos visto ¿Creéis que Eggman ha mejorado su tecnología? ―les preguntó el toro Bullet.

―Al parecer sí y no ha tardado mucho porque hace unos días estos tanques caían con un solo misil ―les respondió Wing.

―Esto, siento meterme en vuestra conversación, pero Eggman se ha olvidado de proteger las ruedas de los tanques, si os fijais el primero está totalmente inoperativo―les comentó Rookie.

―Uyyy parece que el bigotes no es tan listo como pensaba ―dijo Spike en tono burlón.

―Bien hecho Rookie, ahora podremos tumbar a los otros dos ―dijo Wing.

―Ya, sobre eso... ―les informó Bullet.

―¿Qué pasa?...Ah mierda ―dijo Wing recordando que no les quedaban más disparos.

―¿Como que Ah mierda? ―le preguntó Spike.

―Que hemos disparado toda la munición explosiva que teníamos ―le respondió Wing.

―¿¡QUÉ!? ¿¡TAN POCA TENÍAMOS!? ―les preguntó Spike.

―¡No iba a gastar toda la munición que teníamos en este ataque con la poca que teníamos! ―dijo Wing.

―¡Pero podríamos haber evitado lanzar toda nuestra artillería de ahora! ―dijo Spike.

―¡No había pensado en eso, no estoy acostumbrado a este tipo de situación! ―dijo Wing.

―¡Chicos dejad de pelear, tenemos que pensar qué hacer! ―les comentó Bullet.

―¿Y qué hacemos? los tanques ya están alertados al igual que a los robots ―se preguntó Wing.

―¿Nos retiramos? porque por aquí mis compañeros están algo estresado ―les informó Bullet.

―Me niego a dejar a esos civiles para que Eggman los use como esclavos ―dijo Spike.

―Tampoco es que podamos hacer mucho ahora, nos superan en número y en armamento, además no quiero perder más compañeros ―dijo Wing.

―Rookie ¿Tú también piensas igual? ―le preguntó Spike.

Pero para cuando sus amigos terminaron de discutir, el lobo rojo ya había bajado de la azotea a ayudar a los civiles. Rápidamente el lobo disparó a los primeros robots que se interponen en su camino abatiendolos sin muchos problemas.

―Peligro, se acercan a los prisioneros ―informó uno de los Egg robots.

―Disparar a matar, no podemos permitir que liberen a los prisioneros ―les ordenó el comandante de los Egg robots.

Los Egg robots comenzaron a disparar a Rookie. El lobo intentó llegar hacia el tanque en el que estaban atrapados los civiles. Sin embargo, no pudo acercarse mucho al tanque debido a que los múltiples rayos le evitaban dar cualquier paso.

―¿¡Qué hace!? ¡Se ha vuelto loco!―dijo Wing sorprendido.

―¡Loco o no yo voy a ayudarlo! ―dijo Spike disponiéndose a bajar.

―¡Espera! ―dijo Wing mientras lo detenía.

―¡Ya no espero más, mi amigo está solo! ―dijo Spike bajando a ayudar a Rookie.

―Mierda, que impulsivo es ―dijo Wing.

―¿Nosotros qué hacemos? por aquí mis compañeros quieren bajar a ayudar a Rookie y yo en parte también ―le preguntó Bullet desde el comunicador.

―Limitaros a acabar con los robots desde la azotea, yo iré detrás de esos dos y les ayudaré a sacar a los presos del tanque ―le respondió Wing para después colgar la llamada del comunicador e ir tras Spike.

―¡Ya los habéis oído tenemos que permitirles el avance así que encargaros de acabar con los robots de Eggman! ―les ordenó Bullet.

―¡SÍ! ―dijeron todos motivados.

El grupo de Bullet empezó a disparar desde la azotea a los robots de Eggman, destruyendo a una pequeña parte de los robots. Esto se convirtió en una oportunidad para Spike y Wing que lograron avanzar hasta donde se encontraba su amigo Rookie.

―Chicos, habéis bajado ―dijo Rookie sorprendido.

―Claro que si, a los amigos se les ayuda, bueno el pajarito de aquí al lado tenía dudas ―dijo Spike.

―Y las sigo teniendo ―dijo Wing mientras se asomaba para disparar a los Egg Robots.

―Vosotros cubridme, yo me acercaré al tanque y lo abriré con esto ―les comentó Rookie sacando una sierra mecánica.

―Intuyo que por ese diseño macabro ha sido hecha por Cross y eso me da razones de sobra para preocuparme de que Rookie pierda el brazo ―dijo Spike.

―Lo hemos probado antes con los restos de un tanque, funciona perfectamente a la hora de destrozar los tanques ―le comentó Wing mientras disparaba a los robots.

―Me sirve ―dijo Spike mientras ayudaba a Spike con los robots.

―Rookie cuando quieras, tienes vía libre ―le comentó Wing.

―Muy bien allá voy ―dijo Rookie mientras se preparaba.

El lobo rojo salió de los escombros aprovechando la oportunidad que se le había presentado. Los Egg Robots intentaron frenarlo, pero no pudieron hacerle nada ya que fueron rápidamente abatidos antes de poder tocar al lobo. Finalmente el lobo llegó al tanque derribado y se preparó para abrirlo.

―¡Atención a la gente de dentro del tanque! ¡Voy a destrozar la parte trasera del tanque, así que apartaros! ―les avisó Rookie.

Rookie esperó unos segundos para darle tiempo a que la gente de dentro se pudiese apartar de la puerta. Tras eso el lobo encendió la sierra mecánica y comenzó a cortar la puerta trasera del tanque.

―Comandante, esperamos instrucciones para el contraataque ―le comentó un Egg robot a su comandante.

―Que el segundo tanque apunte al primero y que el tercero dispare a la azotea ―les ordenó el comandante.

―Destruir el primer tanque supondrá la destrucción de muchos de nuestros compañeros ―le informó el soldado.

―Es un dato del que soy consciente, disparad ―les ordenó el comandante.

Los Egg robots obedecieron sin rechistar a su comandante. Prepararon los dos tanques que les quedaban para efectuar las órdenes dadas. Este movimiento no pasó desapercibido frente al grupo de los rebeldes.

―Eso no tiene buena pinta ―dijo Spike.

―¡Bullet dile a tu grupo que se aparte de la terraza! ―les ordenó Wing por el comunicador.

―¡No hace falta que lo digas dos veces! ―dijo Bullet mientras ordenaba la retirada a sus compañeros.

―¡Rookie apartarte del tanque! ―le ordenó Spike.

―¡Pero siguen encerrados en el segundo tanque! ―le recordó Rookie.

―¡Joder! ―dijo Spike mientras iba corriendo hacia donde estaba Rookie.

―¡Spike! ¿¡Qué cojones haces!? ―le preguntó Wing alterado.

―¡Salvar a mi amigo! ―le respondió Spike.

―¡FUEGO! ―ordenó el comandante.

―¡CHICOS! ―gritó Wing con impotencia al ver que no podía hacer nada.

Los tanques dispararon tanto a la azotea contra el tanque abatido. Por suerte el grupo de Bullet pudo apartarse a tiempo, pero Rookie y Spike no podían escapar de ese ataque. O eso es lo que parecía en un principio.

―¡STOP! ―dijo una voz.

Tras que la persona misteriosa dijera eso, ambos misiles fueron rodeados por un campo de energía azul que los inmovilizaron en el aire evitando que ambos misiles pudieran impactar en sus objetivos.

―Imposible...¿Cómo es que se han detenido? ―pensó Wing.

―Error, error, esto no estaba en los cálculos previstos ―le informó un Egg robot a su comandante.

―Analizando posibles respuestas... ―dijo el comandante.

―¿Qué narices? ¿Los misiles pueden hacer eso? ―preguntó Spike sorprendido de lo ocurrido.

―No, pero existe alguien que sí ―le respondió Rookie.

―¡Alerta, los resultados indican que hay una amenaza de alto nivel en la zona, nombre en clave Silver the Hedgehog! ―les informó el comandante.

Al escuchar eso, Silver devolvió los cohetes de donde provenían. Ambos misiles impactaron en los dos tanques provocando una pequeña explosión que destruyó tanto a los tanques como algunos Egg robots que estaban alrededor de los tanques.

―Impresionante... ―opinó Rookie.

―Venga chicos aprovechemos esta situación para sacar a los civiles del tanque ―les indicó Wing.

―Ah si cierto, continúa Rookie nosotros te cubrimos, aunque no creo que haga falta con el erizo blanco acabando con esos robots a diestra y siniestra ―dijo Spike.

Como decía Spike. El erizo albino se las apañó muy bien para acabar con los robots uno tras otro, aplastándolos con su telequinesis o mandarlos a volar. El tan bajo número de Egg robots no podían hacer prácticamente nada contra uno de los miembros más poderosos del Sonic Team.

―Comandante, el número de bajas es cada vez mayor, nuestras pocas posibilidades de victoria bajan con cada Egg robot que es destruido ―le informó un soldado.

―Nuestra retirada no es una opción ―dijo el comandante.

―Tranquilo, no pretendemos dejaros escapar ―le comentó una voz por detrás.

Algo atravesó el cuerpo del comandante por la espalda. El Egg robot se sorprendió al ver que al parecer no había nada detrás del robot. Aunque su duda desapareció cuando lo que parecía una camaleón morado apareció frente a su cara.

―Amenaza de nivel medio, Espio the chameleon está también en la zona ―informó el Egg robot.

Espio atravesó al robot con un kunai antes de que hiciese algo que alarmarse a sus compañeros que seguían distraídos intentando hacerle algo a su amigo.

―¿Amenaza de nivel medio? pensaba que estaría un poquito mejor valorado, aunque viendo lo que supuestamente está en el nivel alto creo que estoy más o menos bien ―dijo Espio.

Espio observó cómo algunos Egg robots conseguián evitar al erizo. Esos robots iban directos a por el grupo de Rookie que todavía seguía intentando abrir el tanque.

―Me toca encargarme de esos de ahí ―pensó Espio mientras se camuflaba con el entorno.

Wing y Spike lo estaban pasando mal intentando frenar a esos Egg robots. Llegó un punto en el que las armas de ambos estaban casi vacías. El resto del escuadrón estaba tratando de bajar de las azoteas y así poder ayudar a sus tres compañeros.

―¡Rookie, date más prisa! ―le pidió Spike.

―¡Casi lo tengo! ―dijo Rookie.

―¡Joder, putos Egg robots! ―se quejó Spike.

Varios Egg Robots fueron atravesados por algo invisible, esto confundió a varias de las máquinas que intentarón rastrear al que estaba cometiendo esos ataques sorpresa. Esta oportunidad fue aprovechada por el grupo de Rookie que disparó todo lo que tenía contra los pocos Egg robots que quedaban.

―¡Aquí llegan los refuerzos! ―dijo Bullet llegando con su equipo.

―Tranquilos, tenemos la situación controlada ―dijo Wing.

―Aunque la sierra mecánica tarda más de lo que espe... ―dijo Spike sin llegar a terminar su frase.

―¡Ya está abierto! ―les informó Rookie.

―No he dicho nada ―dijo Spike.

Los rehenes del tanque fueron saliendo con cuidado del tanque. El grupo de Bullet se encargó de llevar a los civiles a un lugar a salvo mientras que el grupo Rookie ayudaban a Espio a acabar con los Egg robots.

―Creo que ya han salido todos ―les informó Wing.

―Hora de retirarse ―dijo Rookie mientras se iba junto con Wing.

―¡Ey vosotros! ¿venis? ―le preguntó Spike a Silver y a Espio que ya habían terminado con los pocos Egg robots restantes.

―¿Qué opinas? ―le preguntó Espio.

―No tenemos muchas opciones, vamos por ahora ―le respondió Silver.

Silver y Espio siguieron al grupo de Rookie hasta un callejón donde se encontraba el resto del equipo y los civiles rescatados.

―Hemos revisado los alrededores y es seguro bajar ¿Ellos vienen con nosotros? ―les preguntó Bullet sorprendido.

―Como lo ves ―dijo Spike.

―¿Es un problema? ―le preguntó Silver.

―No, en absoluto de hecho nos viene bien y todo ―negó Bullet.

―¿Como? ―le preguntó Silver.

―Luego os lo explicamos, bajemos a las alcantarillas antes de que lleguen refuerzos ―dijo Wing.

―Mejor, no queremos llamar la atención de cierta persona ―dijo Espio.

―Los habéis oído, entrad por el acceso a las alcantarillas, mis compañeros os irán guiando hasta una zona segura, nosotros iremos detrás en todo momento ―les informó Bullet a los civiles.

Los civiles siguieron las indicaciones de Bullet. El resto incluyendo al erizo blanco y al camaleón morado esperaron hasta que todos los civiles hubiesen bajado a las alcantarillas. Tras eso fue su turno de bajar, no sin antes asegurarse de que no había nada observando. Cuando ya se fueron, el ruido en las calles desapareció por completo. Lo que había sido un campo de batalla hace tan solo unos minutos ahora se había convertido en un lugar ocupado por escombros de edificios y por restos de robots. Este era el tipo de escenas que abundaban ahora por todo el planeta. Todas ellas consecuencias de una única cosa. La derrota del protector de este mundo.

Mientras esto sucedía en las distintas partes del mundo. En la base principal de Eggman conocida como la Death Egg situada en el espacio, se encontraba el Doctor Eggman que se encargaba de gestionar como iba la expansión de su imperio.

―AGG nunca pensé que administrar un imperio tan grande sería tan aburrido, es lo único que extraño de pelear con esa rata azul, aunque me alegro de que por fin mis grandes planes den resultado ―dijo Eggman.

―Permíteme discutir eso último Doctor ―dijo Infinite saliendo de entre las sombras.

―¿No sabes que escuchar conversaciones ajenas no es de buena educación? ―le preguntó Eggman.

―Si hablar contigo mismo lo consideras conversación entonces tienes un grave problema Doctor ―le respondió Infinite.

―Callate, dime ¿Cómo ha ido tu conquista del territorio? ―le preguntó Eggman.

―Demasiado fácil, esos de la resistencia son unas debiluchos como el erizo azul, ni siquiera ninguno de sus líderes se ha dignado a aparecer ―le respondió Infinite.

―Tarde o temprano saldrán de su escondite, no tienen planeta para esconderse de nosotros ―le comentó Eggman.

―Su esperanza por ganar es casi inexistente y todo gracias a la falsa muerte del erizo ―dijo Infinite.

―Sí, todo ese espectáculo salió como lo habíamos planeado, el poder del Rubí fantasma es impresionante ―dijo Eggman.

―Lastima que no haya podido explotarlo al máximo contra alguien ―comentó Infinite.

―No te quejes, con darle una paliza al erizo vas que sobras, es algo que no muchos han podido hacer ―le recordó Eggman.

―¿Como tú? ―le preguntó Infinite con un tono burlón.

―Pero serás... ―dijo Eggman sin terminar su frase.

Antes de que Eggman pudiese maldecir al chacal. Metal Sonic entró en la sala interrumpiendo la charla entre ambos.

―Hablando del héroe ―dijo Infinite mientras miraba a Metal Sonic.

―Dime Metal Sonic ¿Cómo han ido los análisis? ―le preguntó el Doctor Eggman.

Metal Sonic se limitó a hacer sus característicos ruidos. El chacal no comprendía nada de lo que decía, pero al Doctor Eggman no parecía costarle mucho comprender lo que decía su fiel ayudante.

―Por fin se dignan a aparecer ―dijo Eggman.

―Traduce lo que ha dicho tu amiguito ―le pidió Infinite.

―Dice que al parecer Silver y Espio han aparecido en la ciudad, por lo visto se han encargado de ayudar a un grupo de civiles a neutralizar a un escuadrón de robots ―le comentó Eggman.

―Después de un mes deciden actuar ¿Por qué crees que lo harán? ―le preguntó Infinite.

―¿Qué importa? no pueden hacernos nada y tampoco saben que Sonic está vivo, son solo una pequeña molestia, además muy pronto será el gran día ―le respondió Eggman.

―Tienes razón, de todas formas ya tengo algo con lo que librarme de ellos ―dijo Infinite.

De vuelta en la ciudad, una pequeña figura se movía entre las sombras evitando ser visto por cualquier Egg robot. La figura avanzó hasta un pequeño edificio abandonado donde se paró para descansar durante unos segundos.

―Vamos Tails sigue avanzando, tengo que hacerlo por Sonic ―pensó el pequeño zorro.

Tails siguió su camino hacia su destino mientras seguía esquivando a los robots. Mientras se iba, una masa de agua comenzó a salir de las alcantarillas, esta masa cogió forma revelándose como Chaos que tenía una clara misión, cazar y acabar con miembros de la resistencia.

Tras un pequeño encuentro con un escuadrón de Egg robots. El grupo de civiles liderado por Wing ha conseguido realizar un rescate con éxito gracias al inesperado apoyo de Silver y Espio. Esto no ha pasado desapercibido ante el doctor Eggman e Infinite que pese a no darle mucha importancia han mandado a Chaos que tratará de cazar al pequeño Tails ¿Podrán Espio y Silver no ser detectados? ¿Chaos conseguirá su objetivo?