- Aika - Llamó el castaño a la chica que miraba la televisión. Pero no le hizo ni caso - A-I-K-A - Repitió lentamente, aun así no hubo respuesta, por lo que no le quedó de otra que darle un beso para que centrara su atención en él.

- ¿Qué? - Contestó simplemente.

El chico se quedó callado por unos instantes, había aprendido a leerla un poco durante esos años.

- ¿Estás en esos días del mes~? - Bromeó tratando de suavizar el ambiente. 

Normalmente le habría tirado algo o le hubiera devuelto la broma, sin embargo solo le ignoró.

- Está bien, como quieras. Me voy a casa. - Cortó la conversación marchándose. 

Estabas actuando tan extraño.

Parecía que estabas molesta.

No lo sé. 

Horas más tarde el castaño le envió un meme a su novia. Sin respuesta. Le envió una foto suya sin camisa, nada. Continuó mandandole mensajes y cosas pero le dejaba el leído.

A veces ni si quiera puedo llegar a ti.

Bastantes minutos más tarde recibió un "Deja de molestar" como respuesta.

Incluso si respondes, te tardas veinte minutos.

Dije "boo".

Pasaron días sin que él pudiera contactar con Aika. Hasta que, una tarde, recibió un mensaje de que tenían que hablar.

- ¿Lo dices en serio? - Preguntó tras escuchar lo que tenía que decirle - ¿Cortar, qué he hecho esta vez?

Vamos niña, estás diciendo que quieres terminar.

¿Por qué tenemos que terminar? niña

- Se acabó - Respondió firmemente cerrándole la puerta de su casa en las narices.

- Que desperdicio... Ojalá lo hubiera dicho antes, no habría estado perdiendo el tiempo - Se dijo a si mismo alejándose a la vez que sacaba su teléfono. Nada más encontrar a quien buscaba una sonrisa iluminó su rostro.

Mientras veo que te vas

me doy la vuelta y sonrío.

- ¿Si? ¿Clare? - Preguntó por teléfono cambiando ahí mismo su apariencia - Soy yo, Pierre, ¿quieres quedar~?

Me encuentro con otra chica cuyo número de teléfono tengo.

Me quedo toda la noche divirtiéndome como loco. 

Soy un hermoso soltero, cada día es fiesta.

Hermoso, hermoso, hermoso soltero.

El, ahora, rubio se despertó en una cama ajena junto a la mujer con la que había salido la noche anterior, cabe decir que era más que obvio que habían tenido sexo desenfrenado por como estaban las cosas tiradas por todo el suelo. Recogió su ropa para vestirse y salió del lugar sin despertarla.

- Chicas... ¡He vuelto! - Celebró - Sinceramente me alegro de haber cortado con esa aburrida, ya ni me dejaba dormir en su misma cama ¿Y qué era eso de no dejarme besarla? - Se quejó - Da igual, eso ya es agua pasada. Solo espero no volver a tener que cruzarme con ella - Se dijo a si mismo - ¿Con quién debería acostarme hoy~? - Se preguntó revisando su teléfono.

Te dejé, tu eras una prisión agotadora.

No conocía este sentimiento te libertad. 

Woo, ahora soy un hermoso soltero hoy.

¡Oye! ¡Vete lejos!

Esa misma noche quedó con otra chica distinta, nada más despertarse al día siguiente fue a comprarse ropa nueva y más sexy. 

Puedo jugar toda la noche e ir de compras.

- Aún con todo lo que gaste en esa suit de lujo aún queda bastante - Observó revisando el dinero de su cartera - Al final salir con Aika no fue tan malo. Meh, tonterías~

Pero mi billetera sigue estando llena.

Estoy tan emocionado.

- ¿? - Se fijó en un grupo de chicas hablando en la fuente del parque, inmediatamente se acercó a conquistarlas haciendo uso de la apariencia de un modelo.

Vamos chica, el tiempo se desborda 

más que cuando solía salir contigo.

- ¿Y esto? - Se preguntó al ser despertado por una especie de alarma procedente de su teléfono. 

Un aviso inundaba la pantalla, "Aniversario".

- ¿Jim? - Una voz a su lado hizo que dejara de observar el mensaje - ¿Ocurre algo?

- Un viaje de negocios - Mintió apagando su teléfono - Aun así... - Se puso sobre ella - Tenemos algo de tiempo~.

Ahora puedo borrar completamente

todas las fechas de aniversarios molestos.

Día tras día continuó con su nueva rutina de encontrarse con una chica nueva, y si algún día no tenía ninguna interesante solo tenía que salir a buscar.

Me encuentro con otra chica, cuyo número de teléfono tengo.

Soy un hermoso soltero, cada día es fiesta.

Hermoso, hermoso, hermoso soltero.

- ... - Se congeló instantáneamente al pasar sin darse cuenta frente a su casa - Tonta costumbre - Se rió de si mismo y escuchó sonar su teléfono, otra de sus conquistas - Sí, sin duda mi vida es mucho más divertida ahora~.

Te dejé, tu eras una prisión agotadora.

No conocía este sentimiento te libertad.

Woo, ahora soy un hermoso soltero hoy.

¡Oye! ¡Vete lejos!

- Cierto... Anoche fue un premio doble~ - Murmuró orgulloso viendo a las dos chicas durmiendo sobre su pecho.

No me mientas, dos es mejor.

Cuando me despierto, es otra mañana sin ti.

Nada más se despertaron se inventó una escusa para marcharse. Se estiró un poco en plena calle.

- Quizá hoy debería descansar un rato... - Sin embargo, al observar la cantidad de mensajes de su teléfono cambió inmediatamente de idea.

Debido a que no ha sido muy largo, se siente todo bien. 

No sé, no sé, no hay mañana.

Solo, estar solo es mejor.

- ¿En qué piensas? - Le preguntó la mujer a su lado al notarle algo distraído.

- En nada, solo admiro tu belleza - Le dijo, no obstante en su mente había una pequeña duda ¿Aika habría logrado superarle tan fácilmente como él? Es decir, ¿no echaría de menos a un hombre tan perfecto?

Debes sentir lo que estoy haciendo también.

Date prisa y superalo, niña.

Otro fin de semana de pura fiesta y sexo pasó, realmente disfrutaba volver a poder ser como antes de haberse reencontrado con la castaña.

Quiero jugar todo el fin de semana.

Quiero jugar todos los juegos que quiera.

En una de sus revisiones de contactos encontró el número de su ex.

- Debo haberme olvidado de borrarlo... - Supuso, lo observó por unos segundos,  hasta que finalmente pulsó el botón de eliminar.

No tengo que enviar mensajes, puedo dormir bien.

No necesito bajar de peso, es un día maravilloso.

Y así, la olvidó totalmente, continuando con su nueva rutina. 

Me encuentro con otra chica, cuyo número de teléfono tengo.

Soy un hermoso soltero, cada día es fiesta.

Hermoso, hermoso, hermoso soltero.

Finalmente una semana entera desde la última vez que la vio pasó. Por primera vez se encontraba solo en su hogar, no le apetecía ver a nadie ni hacer nada. Simplemente iba de un lado a otro en su teléfono.

- Esto... - Murmuró al encontarse con una foto de la primera cita que había tenido con ella. Le había costado semanas convencerla y tras eso era normal que se encontrara tan nervioso, aún con lo acostumbrado que estaba a esas cosas - ¿Qu... Qué? - Se sorprendió a si mismo al sentir como algo húmedo resbalaba por su cara.

Un día, dos días, una semana pasa.

Pero las lágrimas caen incluso cuando estoy sonriendo.

 Salió corriendo lo más rápido que pudo en dirección a la casa de ella. Una vez llegó, se la encontró  justo saliendo del lugar.

- ¡Aika! - La llamó con todas sus fuerzas para que pudiera oirle.

¡Oh, no! Espera, esto no está bien ¡No te vayas!

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La canción como tal termina aquí por lo que el one shot también, sin embargo me da la sensación de que algunas personas querrán explicaciones sobre lo que pasó después y el por qué Aika se comportaba así.

Empezando por el repentino comportamiento de la castaña, este se debió a que horas antes se había enterado de que estaba embarazada de la propia Hitomi. Pero, como conocía a Nao y no quería cortarle de lleno su amada libertad, optó por dejarle totalmente libre cortando con él y pasando a criar a su hija por si misma sin que lo descubriera.

Habiendo explicado esto, supongo que más o menos supondréis lo que pasó luego del final. Nao se disculpó, Aika le explicó todo y vivieron juntos hasta que ella fue asesinada, dejándolo a él al cuidado de Hitomi.