UN NUEVO COMIENZO
Era una mañana tranquila, pocos coches pasaban a esas horas, solo se podía escuchar la brisa del viento recorriendo las calles casi vacías, la poca gente que había por esas horas en la calle, eran gente de camino a sus trabajos y estudiantes caminando con sus mochilas hacia las clases.
También podías ver a gente sacando a pasear sus Pokémon, la vida de la gente era simple, pocos se salían de su rutina, en contraste con todo lo vivido por Pedro, pero ahora él ha decido llevar una vida simple como todos, era una vida tranquila, pero a la vez un poco deprimente.
Pedro sacó su móvil, y miró la hora.
Faltaban 10 minutos para comenzar las clases y aún estaba bastante lejos, así que debía ir más rápido.
Una idea cruzo su mente ¿era hora de usarlo? lo tenía muy fácil y poca gente lo vería.
Pero al instante lo descartó.
Ahora era una persona común, y nada haría cambiar eso, nada de poderes, locuras o extravagancias.
"8:47 AM"
-¿Puedo pasar?- dije al llegar 17 minutos tarde a clase.
-¿a ver, que te ha pasado?-
-pues nada... me quedé dormido- dije sin rodeos.
El profesor de turno me miro con desaprobación, no era alguien que llegase tarde muy a menudo, pero igualmente eso era algo inaceptable.
-venga pasa- dijo a regañadientes.
Me senté y el profesor reanudo la clase, así pasando las horas.
A mi lado tenía sentado a un chaval llamado Miguel, y como cualquier otro estudiante, en su infancia al cumplir 10 años, obtuvo su primer Pokémon, pero como casi siempre ocurría, después de la adolescencia y al entrar en estudios superiores, esa pasión se le fue y nunca despegó como un gran entrenador, eso era lo normal.
Es gracioso, en este tiempo descubrí algo interesante, mi despego como entrenador comenzó cuando ya casi nadie de mi edad continuaba con su camino como entrenador, y los que seguían ya tenían un gran nivel, como mi primo Álvaro, que se convirtió en el nuevo campeón de Hoenn, o como mi otro primo, Alejandro, que había obtenido grandes logros como Ranger, incluso obteniendo el respaldo del legendario Pokémon Latias.
Yo era un fuera de serie, tanto en las buenas y en las malas, y la verdad, no sé qué pensar al respecto, pero mi vida se ha vuelto más simple, y eso me tranquiliza, ya que parece que mi familia está a salvo, a veces me pregunto quién me ocasiono tantos problemas en el pasado, quien estaba detrás de todo eso, pero parece ser que, o se olvidó de nosotros, o algo le impide actuar de nuevo.
Pero sea la razón que se sea, incluso después de perder a mi padre, mi corazón esta, aunque dolido, bastante más tranquilo.
-psst, ¿al final seguiste leyéndote Berserk?- dijo Miguel en un tono bajo para que no le escuchase el profesor.
-¿eh, que? ah... que va, aun voy por la mitad y no avancé- eso me saco de mis pensamientos de imprevisto.
Comenzamos a conversar de varias cosas, ese era el día a día como estudiante, echar cuenta en clase un rato y ponerme a hablar con Miguel cuando hubiese un momento que pudiésemos sin molestar demasiado.
-bueno, ¿y qué tal llevas el Dark Souls?- volvió a preguntar Miguel.
-ya por fin acabe el primero, un juegazo la verdad- conteste.
-¿ves? te lo dije, yo ya me acabe Elden Ring, eso sí que está a otro nivel- Exclamo el emocionado.
-ohh... ya veo... supongo que me tocara jugarlo en algún momento... Y tú que, sigues sin verte Dragón Ball no?-
-que va tío, cuando me ponga a verlo te aviso-
¡Los del fondo, callaos ya, estáis molestando a la clase!
Nuestra conversación se terminó repentinamente, nuestro todo de voz comenzó a subir sin darnos cuenta y comenzamos a molestar.
-luego en el recreo hablamos...- susurro él.
En este tiempo, ya que mi motivación como entrenador estaba estancada, lo dedique a los estudios, pero también aumenté mis relaciones sociales, así fue como lo conocí, acabe metiéndome de lleno en el mundo de los videojuegos y del anime, así como salir con amigos en mi tiempo libre.
Me volví lo que se podría llamar ¿adolescente genérico?, pero fue mi propia decisión, así que no me arrepiento de nada, ciertamente mi situación actual en general no es la mejor en mi familia, ya que se mire por donde se mire, nada está bien ahí dentro.
Finalmente, las clases terminaron, a la vuelta fui con Miguel hasta un punto medio y nos separamos para ir cada uno a nuestra casa.
-venga chaval, nos vemos-
-claro, ya hablamos, adiós-
Cuando llegue a casa, sentí el cansancio recorrer todo mi cuerpo, agarre los cascos, me tumbe en el sofá, y cerré los ojos.
Agarre mi móvil y busque en Spotify: Digital Love, de Daft punk.
En cuanto le di al play comenzó a sonar, y como si fuese un calmante para mi mente, comencé a relajarme.
Comencé a recordar varias de mis vivencias como entrenador, que ya se hacían distantes y difusas, y poco a poco me quedé dormido.
Perdí toda la noción del tiempo y las horas pasaron, hasta que...
-despierta hijo, que vas a llegar tarde- decía una voz familiar un poco alterada.
-vo...voy...mamá... - dije medio dormido.
-¿Sabes que hoy consigues tu nuevo Pokémon?- dijo ella.
-¡¿que?!-
En ese momento abrí los ojos de golpe y me levanté asustado, mi corazón latía rápido y mi respiración estaba acelerada.
-que fue... eso...-
Seguía tumbado en el sofá, no había nadie a mi lado y todo estaba exactamente igual que cuando me dormí.
-que susto... - dije aliviándome.
En aquel momento escuche un pequeño ruido en la cocina, no sabía bien la hora que era, seguramente la hora de comer ya se pasó hace rato, la luz que entraba de la ventana era tenue y anaranjada, deberían ser las siete o las ocho de la tarde a lo poco.
Me levanté lentamente y me dirigí a la cocina, cuando estaba a punto de entrar, por una fracción de segundo, pude ver un pequeño fragmento de pelo celeste asomándose por la esquina de la puerta, pero inmediatamente después pude sentir como un rayo de luz azul eléctrico cruzaba delante mía y se dirigía escaleras arriba.
-¿Kira?- quede atónito, puedo decir con total sinceridad que hacía meses que no la veía, ni siquiera sé exactamente cuánto.
Cuando finalmente entre en la cocina, como temía, estaba vacía, pero la puerta de uno de los armarios estaba abierta.
Si realmente fue ella, supongo que no esperaba que yo fuese a despertar y verla, por lo que se lo dejo abierto.
Al acercarme al armario vi algo que jamás esperaría ver dentro de mi casa.
esto debe ser una broma... y de muy mal gusto...
agarre lo que había visto, hacía mucho tiempo que no me sentía tan decepcionado y asqueado, no en si por lo que era, si no por el contexto en el que se encontraba.
Era una caja entera con cajetillas de tabacos.
En esta casa nadie fumaba, o eso es lo que creía, hasta ahora...
Debo ir a confrontarla, esto ya se pasó de castaño oscuro.
Mientras todos nosotros estamos tratando de llevar una vida normal y mantener esta casa como podemos, ella ha pasado incontables meses encerrada ahí, malviviendo a costa de nosotros.
Cerré mi puño furioso y subí las escaleras totalmente determinado a enfrentarla.
Pero en cuanto llegue a la puerta y agarre el pomo... toda esa energía desapareció.
Era hilarante, no sé porque, si era por miedo u otra cosa, pero mi mano no quería moverse, como si ahí dentro hubiese alguien que no conozco, era algo irracional, pero esa era la sensación que residía en mi corazón.
Finalmente desistí, volví a hacer lo que llevo haciendo todos estos meses, ser un completo y absoluto cobarde.
que mierda...
Y como normalmente hacia cuando ya no tenía nada que hacer, fui al despacho, me metería un rato para jugar a algo y desconectar.
Pero ahí estaba de nuevo, Shade, tumbado en la silla gamer, con el aire acondicionado encendido y con los cascos puestos.
Me acerqué a él, y lo vi dormido con la silla reclinada y las piernas en la mesa.
ahh... este chico... ya no se si este cuarto es mío o suyo...
Quería despertarlo, ya que se estaba tomando demasiadas libertades para ser un cuarto que se supone que es mío, pero igualmente lo deje estar.
bueno, que se le va a hacer...
Se le veía bastante tranquilo, aparte de que incluso el con esta con sus cosas de estudio online, merece un descanso de vez en cuando.
Seguía sin nada que hacer, así que fui al dormitorio, a ver si seguía Suli allí.
Al entrar, ahí estaba, justo como pensé.
Iba a levantar el tono de voz, pero en cuanto noté que estaba dormida, me detuve, ella ha estado sufriendo mucho por no poder dormir, siempre que lo hacía un sueño recurrente aparecía, ahí la razón de su insomnio.
Es más, estoy seguro de que ella me oculta muchas de sus noches sin dormir, para no hacerme sentir mal.
Nunca me quiso contar de que iba el sueño, como si no lo recordase, solo que le daba mucho pánico, pero comenzó a hacerse presente gradualmente desde que mi padre murió, no si tenga algo que ver con eso, o si fue por culpa de la primera gardevoir, Astrea.
Hablando de Astrea... Ella no volvió a hacerse presente de nuevo, en aquel momento hablo de una misión o algo parecido, pero nada a cambiado desde que ella desapareció, hace tiempo ya comencé a creer que era nada más que el delirio de un ser al que ya le paso su tiempo.
No tenía nada que hacer, así que salí de casa, cerré la puerta y agarré el móvil.
Mire en mis contactos y llame a uno de mis amigos para dar una vuelta por la ciudad.
Pasaron unos segundos y salto el contestador, por lo que quede extrañado, entonces mire la hora.
espera... claro, como no me di cuenta, seguro ahora estará en directo...
Él era Adri, un chico que conocí poco después de la muerte de mi padre, no se interesó nunca por los combates Pokémon y los gimnasios.
Él siempre tuvo un gran interés en ser famoso, por lo que en cuanto pudo comenzó a hacer videos y directos en redes sociales.
Era alguien muy confiable, pero bastante reservado, cosa de delante de una cámara cambiaba por completo, por lo que poco a poco se estaba volviendo una figura de renombre en internet.
Suele salir en cámara con sus dos Pokémon, un Espeon y un Umbreon, justo eso lo está catapultado a la cima.
suspire -supongo que lo llamare luego...-
Entonces me dispuse a dar una vuelta, sin nada que hacer ni a donde ir.
Después de pensarlo un poco me decidí por ir al bosque, cerca había un rio, así que me acercaría a él un rato.
No faltaba mucho para que anocheciera, por lo que no me quedaría mucho tiempo.
En cuanto llegue me tumbe justo al lado, escuchando como el agua bajaba, mientras yo me relajaba.
Había llegado al lado de aquella cueva donde me quede con Suli cuando peligraron nuestras vidas y ella quedo en ese extraño estado, ahora que lo llegue a recordar, realmente me alegro que saliésemos con vida esa vez, fue casi como un milagro.
El tiempo paso y ya el sol estaba a punto de ocultarse, así que me levanté y me dispuse a volver a casa.
En aquel momento se escuchó un enorme estruendo a poca distancia y una nube de polvo llego hacia donde me encontraba con una gran velocidad.
Tape mis ojos ante tal viento y polvo.
Cuando todo se calmo retire mis manos de la cara, y todo quedo en silencio, solo se oía el agua bajar por el rio.
En aquel momento dos ideas cruzaron mi mente.
Una era salir de ahí y volver a casa, olvidar que algo así había pasado y seguir como si nada, sin duda la más sensata.
La segunda, era ir a donde todo había ocurrido, ya que tenía mucha curiosidad, pero podría ser peligroso.
-nada olvídalo, no seas idiota, ya fui muy impulsivo en su día y eso me metió en demasiados problemas, me retirare tranquilamente y todo quedara en una simple anécdota-
Finalmente, mi curiosidad gano y termine acercándome al lugar donde había escuchado la explosión.
-idiota, idiota, idiota... al final tuve que venir, como no...- me susurré a mí mismo, sentía que estaba rompiendo mis propios principios.
Cuando llegue, quede confundido, no había signos de una explosión, si no de algo aún más descomunal y destructivo.
Un enorme socavón cruzaba una parte del bosque de una punta a otra, como si algo enorme hubiese cruzado el bosque y hubiese arrasado todo su paso.
vale, vale... ya vi suficiente, esto me queda muy grande incluso a mi...
Dicho eso, me di media vuelta y seguí mi camino.
Pude proseguir mi camino tranquilamente durante unos metros. ya que de pronto, pude sentir como si viniese algo hacia mí, y no me equivocaba, una silueta cruzo a mi lado con una rapidez abrumadora.
Creo que pude ver algo, pero ni siquiera estaba seguro de lo que había visto, en ese momento que cruzo justo a mi lado, casi podría decir que vi algo imposible.
una gardevoir... ¿roja?
Quede paralizado, completamente incrédulo, supongo que simplemente estaba comenzando a delirar por haber visto tal destrozo hace momentos.
Justo cuando iba a comenzar a moverme para retomar mi camino, una ola de calor recorrió mi cuerpo, y justo donde yo estaba mirando comenzó a brillar el fondo de un color rojizo.
No me dio tiempo a reaccionar, cuando la silueta roja que vi anteriormente se abalanzo desde el lado para apartarme del sitio donde me encontraba.
Ahí fue cuando lo vi claramente, era una gardevoir, y era roja.
Cuando me di cuenta, esa zona había sido apisonada por un enorme rallo de color rojo que había devastado un enorme terreno de bosque.
Quede en shock, no estaba seguro de lo que acaba de ocurrir, termine cerrando los ojos antes tal luz, solo sé que me encontraba tirado en el suelo.
En el momento que decidí abrir los ojos ya no había nadie en frente mía.
Una dulce y aguda voz grito:
¡Corre!
En ese momento vi que tenía en mis brazos a una pequeña ralts roja.
-¡¡Dije que corras, si es que no quieres morir!!- grito ella.
¿ehh? -mi mente no estaba procesando lo ocurrido demasiado bien.
CONTINUARA:
Ey aquí Power reportándose xd.
Nada chavales, nuevo capitulo, ahora con planes de ir un poco mas rápido cada vez, ya que acabe mi curso y aprobé todo, veranito chill, nos vemos en el próximo capitulo.
Un saludo xd.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top