033

╭══════•>✾<•══════╮
V A M O S    D E
C O M P R A S
╰══════•>✾<•══════╯

         ↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡    —Podemos explicarlo—se apresuró a decir Koemi mientras guiaba a Seojun a la sala.

          —Tienen un bebé—murmuró totalmente ido.

          —Podemos explicarlo—repitió Suho con la pequeña en brazos.

          —¿En serio?—cuestionó con arrebato el azabache y elevando la voz, causando que el llanto de la bebé aumentase—Quisiera oírlos.

         Suho dejó a la bebé en los brazos de Koemi mientras él iba a la cocina a preparar la leche.

          —En sí, es muy sencilla la explicación—rio nerviosa mientras mecía a la bebé.

          —¿Dónde esta la formula?—cuestionó Suho.

          —En el cajón de abajo, a la derecha—dijo, para luego girarse hacia Seojun—. Estaba abandonada, Seojun.

         El apenado rostro de la pelinegra ayudó a que Seojun se tomara un respiro para no alterarse mas de lo que ya estaba.

         —Debiste llevarla a alguna comisaria donde pudieran hacerse cargo de ella.

         —¡Lo mismo le dije yo!—exclamó Suho desde la cocina, aunque no tenía sentido elevar la voz cuando no había una pared que separase la cocina de la sala.

         —Ustedes no lo entienden.

         De hecho, solo una persona comprendía de los dos varones. Y ese era Suho. Sabía que Koemi estaba reaccionando así porque no quería que la bebé pasara lo mismo que ella tuvo que pasar por su infancia.

         El abandono.

         —No puedes quedarte con la bebé para siempre, Koemi—murmuró con pesar Seojun cuando vio las lágrimas amontonarse en los luceros de la chica que seguía meciendo a la bebé.

         —La han dejado en calle, Seojun. Con frio y con hambre. No quiero que vuelva a pasar por eso nunca más.

         —Encontrará buenos padres.

         —No todos los niños huérfanos o abandonados son adoptados—negó inmediatamente Kim—. Me he leído un montón de artículos y denuncias sobre lo que hacen las instituciones que acogen a estos niños. Son malos, Seojun.

         Suho se acercó hacia ellos para entregarle el biberón con la leche tibia a Koemi. Le hizo una seña a Seojun para que lo acompañase fuera del departamento para que pudieran hablar cómodamente.

         —Deja el tema a un lado—pidió Suho hacia el azabache.

         —Un bebé no es una cosa de juego, Suho.

         —Lo sé. Lo sé. Me encargaré de esto. Solo necesito tiempo para hablar con ella.

         Seojun se acaricio la cara con frustración.

         —No entiendo porque quiere quedarse con él.

         —Es ella. Es una niña—corrigió de inmediato.

         —No importa. Sabemos que lo que está haciendo Koemi está mal.

         Suho se quedó en silencio mientras observaba a Seojun. Creo que era la primera charla que ambos tenían sin llegar a los gritos, amenazas o comentarios hirientes. No iba a mentir que aquello calentaba su corazón.

         —Me encargaré de ella. Lo único que te pido es que no la hagas alterar ni la hagas llorar—le dijo Suho, antes de colocar la clave en la puerta e ingresar nuevamente al departamento.

          Ambos chicos encontraron a Koemi abrazada a la bebé mientras se encontraba encogida en el sillón, mientras lágrimas silenciosas caían por sus mejillas.

         —Necesito que no le digas a nadie sobre esto, Seojun—habló Koemi con voz dura, muy a pesar de que sus luceros seguían derramando agua.

         —No lo diré a nadie—accedió el azabache, haciendo que los hombros tensos de la chica se relajen.

         Al menos unos de los problemas de Koemi había desaparecido.    ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

         ↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡    El siguiente día tampoco fue a la escuela. Y Suho la acompañó, a pesar de que la pelinegra le había dicho que podía sola.

         —Haría lo que fuera por ella—le había dicho a Suho, causando preocupación en el joven Lee.

         Ambos pelinegros salieron del departamento cuando en sí deberían de estar en clases. Caminaron por el parque y Koemi le estuvo repitiendo palabras para que la bebé lo dijese, consiguiendo solo balbuceos de la pequeña criatura.

         —No tiene nombre, Suho—le dijo cuando se sentaron en una banca.

         —Koemi—soltó en advertencia.

         —Está bien. Está bien—la pelinegra rodó los ojos—. Ya pensaremos luego en eso.

         Los brazos de Koemi se cansaron de sostener a la bebé, siendo la oportunidad de Suho de cargarla.

         —¿Y si compramos un coche de bebé?—cuestionó sin apartar la vista de la pequeña.

         —Ni lo piensen, Koemi.

         Pero Suho no podía hacer nada con ella. Prácticamente lo jaló hacia una tienda de bebés. Le compraron de todo. Suho pudo presenciar como todo se le salía de las manos con el asunto de que Koemi no se encariñara con la pequeña.

          Cuando fueron a pagar todo lo que Koemi había escogido de la bebé, la encargada hizo énfasis en la bonita pareja que formaban ambos con la bebé.

         —Son unos padres bien guapos—dijo—. La belleza ha sido heredada a la bebé.

         Suho se removió incomodo en su lugar. Él no era papá de nadie y no lo sería hasta unos buenos años más adelante. Además, tenía novia.

          —Es mi belleza—dijo Koemi mientras pasaba la tarjeta de crédito—. Estoy agradecida con Dios porque no quería que se pareciese a su padre.

         —¿Por qué no?—soltó ofendido el pelinegro.

         —Eres feo.

         La encargada solo se limitó a reír cuando la respuesta de Suho fue:

          —Yo soy hermoso, Koemi.

          Cuando salieron de la tienda y pidieron un taxi, Suho le preguntó porque no le dijo a la encargada que él no era el padre de la bebé.

         —Era más creíble que tu seas él padre, a decir que era madre soltera.

          Y sí, tenía razón. Desde afuera se podía ver que Koemi no podía hacerse cargo ni de ella misma.

        —A la otra toma a Seojun como el papá sustituto.

       Koemi rodó los ojos, aunque un ligero rubor se instaló en sus mejillas.

        —No hables tonterías.

       Su celular vibró. Así que sacó el aparato de su bolso. Suho se estiró como el buen chismoso que era para leer la conversación.

         —Es Soojin. No te me emociones.

         —¿Qué quiere saber?

         —Si estoy bien. Creo que es la única que le preocupe que no este yendo a la escuela.

         —No es cierto—refutó Suho—. Jukyung también se preocupa.

         —Estoy segura que se preocupa más por tu "resfriado" que por el mío—blanqueó los ojos.

         Bueno... del todo Koemi no mentía.    ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

         ↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡    En el tercer día de cuidar a la bebé, Koemi fue enviada a la escuela a patadas por Suho.

         —¡Corre a estudiar!—le dijo mientras la botaba de su departamento.

         —Pero quiero cuidar de ella—un puchero se formó en sus labios, mientras que la bebé reía por los revoltosos amigos desde los brazos del pelinegro.

         —No te quiero ver aquí hasta que la tarde—y le cerró la puerta en la cara.

         Koemi no tuvo de otra más que asistir a la escuela. Allí tuvo que explicarle (mentirle) a Soojin sobre sus anteriores ausencias y la falta de Suho ese día.

         —Tenía gripe, y le contagie—fue lo que dijo.

         Las clases fueron normales. Koemi tuvo que prestar atención para hacer los apuntes que luego se lo pasaría a Suho.

         —Es la primera vez que te miro escribir tanto—la voz de Seojun hizo que despegara la vista de su cuaderno para centrarlo en el susodicho.

         —¿Eso quiere decir que siempre me miras?—los tartamudeos del motociclista hicieron que Koemi sonriera.

         —Como sea. ¿Ya arreglaron el problema?

         El entrecejo de Koemi se arrugó. Su bebé no era ningún problema. Pero no podía reclamarle a Seojun ahora mismo cuando todo el salón pareciese estar atentos a ambos.

         —Sigue en casa, si es lo que intentas preguntar.

         —No debería quedarse mucho tiempo.

         —Seojun—advirtió—. Esta es cosa mía. No te metas, por favor.

         —No quiero que termine mal para ti.

         Koemi trató de relajarse. A veces olvidaba que era muy explosiva y era fácil encenderla. Soltó el aire que retenía sus pulmones y se giró hacia Seojun una vez más.

          —Gracias por preocuparte—le dijo—. En serio. Lo agradezco mucho-

          Quiso continuar, pero el bullicio de Hyungyu hizo que se detuviera.

          —¡Kim Koemi y Han Seojun están saliendo!

          ¿De dónde han sacado eso?

         El salón entero se puso a susurrar entre ellos —aunque prácticamente ni siquiera se tomaban la molestia de bajar su tono de voz—, con sonrisas en los rostros que Koemi quería arrebatárselas a golpes.

          —No están peleando.

          —Koemi le sonreía.

          —Parecían cercanos.

         —¿Estarán saliendo de verdad?

         Suho no estaba con ella parada detenerla y tratarla de calmar. Soojin no se encontraba en el salón. Y Jukyung se encontraba despertándose por el bullicio que había.

          —¡Yah! ¡Deja de hablar sobre mi vida como si fuera una farándula!—exclamó Koemi hacia el chico de lentes.

         —¡La silla! ¡La silla! ¡La silla!—gritaron todos para avisarle a Hyungyu sobre el peligro.

         La silla prácticamente ya se encontraba en el aire cuando Seojun la sostuvo.

         —No queremos más problemas, ¿verdad, Koemi?—dejó la silla en su lugar y tomó el brazo de la pelinegra para sacarla del aula.

         —Ya vas a ver en la salida—amenazó hacia Hyungyu, quien temeroso se encondió tras Taehoon.

         Era un hecho para todos. Han Seojun y Kim Koemi traían algo. Después de ver la forma en la que actuaban, los rumores sobre la supuesta relación se esparcieron por el colegio.

         La pregunta que la mayoría de los adolescentes hacia, era:

         ¿Suho será el reemplazo de Seojun?    ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

┎─────«❀»─────┒
¡Annyeonghaseyo!
❝안녕하세요❞
┖─────«❀»─────┚

UFFF ME TARDE ESCRIBIENDO ESTE CAPÍTULO, PERO AQUÍ ESTÁ

COMO HABRÁN VISTO, KOEMI CADA VEZ MÁS FORMA UN VÍNCULO CON LA BEBÉ DE LA CUAL AÚN NO TIENE NOMBRE

Sugerencias de nombres para la bebé AQUÍ

POR CIERTO, YA SE ACERCA LA PARTE DONDE SOOJIN DESCUBRE QUE JUKYUNG ES LA NOVIA DE SUHO

[•••]

ESTE CAPÍTULO ESTÁ DEDICADO A GFMSNC_

GRACIAS POR COMENTAR Y VOTAR EN MI HISTORIA, HERMOSA 💖

SÍGUEME • COMENTA • VOTA

Instagram: Kriss.sama

● Kriss-sama

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top