013
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R U M O R E S E N
E L K A R A O K E
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Maratón 1/3
↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡ Aquel día se había levantado de buen humor a pesar que se había levantado temprano. Cuando llegó al colegio lo primero que tuvo en frente fue el rostro de Soojin, preguntándole como había coincidido con Jukyung.
—Estaba paseando por ahí junto a un amigo cuando me percate de tu amiga—dijo la verdad a medias.
—¿Tu amigo es aquel chico que te trajo rosas al colegio?—preguntó Kang moviendo sus cejas de arriba a abajo.
Koemi se sonrojo de manera notable y miró avergonzada hacia Soojin. Sabía a ciencia cierta que todavía la escuela no se olvidaba de la escena que Hyunsu a la hora de salida. ¿Quién lleva un cartel con un "Te quiero, Koemi" y una docena de rosas en el primer día del cortejo? Si, solamente Hyunsu.
—Si—mintió.
—¡Aigoo!—exclamó Soojin preocupada—¡Pero que te pasó en la mano!
—Ah. ¿Eso?—Koemi elevó su mano para observarlo—Solo fue un pequeño accidente. Nada de que preocuparse Soojin.
La amistad de Soojin y Koemi era rara. No eran unas amigas muy unidas, pero se preocupaban cuando algo malo le pasaba en la otra. Soojin sabía de la desconfianza que tenía Koemi hacia la gente nueva sin que la aludida supiera. Así como Koemi sabía de lo que pasaba Soojin por culpa de su padre.
Las horas pasaron tan rápido que ya se encontraba caminando por los alrededores del jardín junto a Suho. Era la hora de refrigerio, mas ella ni Suho tenían hambre. Lamentablemente su caminata se vio interrumpida cuando su amigo gruñón vio como Seojun agarraba a Jukyung del brazo. Él, no queriéndose quedar atrás, agarró el brazo libre.
Koemi volteó los ojos. ¿Qué tipo de escena es esta? La pelinegra se paró en frente de la chica mirando tanto al motociclista como a su mejor amigo.
Jukyung se preguntó qué tan mala suerte tendría como para tener a los tres dioses junto a ella, dando miradas precavidas.
—Yo que tú correría.
La castaña miró a Koemi y asintió a su idea. Salió corriendo, dejando caer las llaves de Seojun en los pies de la pelinegra. Koemi miró el objeto antes de levantarlo y lanzarselo al chico de argollas, quién lo agarró fácilmente.
—¿Cómo está tu mano?—preguntó Seojun hacia Koemi.
—Está mejor.
Suho levantó una ceja al ver la complicidad con la que Seojun miraba a Koemi. En modo protector, Suho se llevó a su mejor amiga lo más lejos posible de Han.
—¿Sucedió algo de lo que no estoy enterado?
—Mmm—fingió pensar—. Nada importante. Cuando fui al hospital para atender la herida me encontré con Han Seojun. Eso es todo.
Suho hizo una mueca—Ten cuidado con él.
Koemi rio—¿Tienes miedo que me vaya de tu lado?—Suho no contesto, y en vez de eso desvío la mirada—No te dejaré por más que Seojun me chantajee—dijo esta vez seria.
Lee mostró una diminutiva sonrisa, agradeciéndole—Para la otra llámame si te lastimas o sucede algo, ¿Entendido?
—Si, mi intento de capitán. ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫
↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡ Más tarde, en la hora de salida. Suho se encontraba discutiendo con Koemi para ir a estudiar junto al grupo de amigos de Soojin.
—No~. No quiero ir~—se quejaba la pelinegra—. Además no nos han invitado para formar parte de su grupo de estudio.
—Lo hicieron el viernes. Así que vamos—murmuró entre dientes mientras jalaba a Koemi del brazo.
—¡No puedo ir! ¡Tengo una cita a la cual asistir!—gritó, haciendo que Suho la soltara y la mirara con los ojos bien abiertos.
—¿Por qué siempre me tengo que estar enterando a última hora siempre? ¿Con quién saldrás? ¿A que hora llegarás a casa? Recuerda que debes estudiar para el examen.
Koemi volteó los ojos divertida. Le encanta cuando Suho actuaba de esta forma—Saldré con Hyunsu a pasar el rato y no sé a qué hora regresaré a la casa.
—Quiero que me envíes tu ubicación a tiempo real.
—¡¿Qué!? ¡No haré eso! Solo saldré con Hyunsu.
—Por eso mismo. Quiero que me mandes tu ubicación.
—Ash—con un resoplido e hizo la orden que le había mandado Suho—. Listo, ¿Feliz?
—Si y ahora ve, pero con cuidado.
—Tsk... yo si miró a los costados antes de cruzar.
Le saco la lengua y salió corriendo, escuchando por último el gritó de Suho—¡Koemi!
Kim rio al recordar el encuentro donde habló por segunda vez con el joven Lee. Era un día lluvioso y gris. Hacía más frío de lo normal por lo que caminaba por el lugar abrigada.
Recuerda haber salido esa noche para despejarse un poco. Sentía que mientras estaba dentro de su casa caía en depresión. Quién iba a decir que Kim Koemi podía llegar a estar verdaderamente mal solo por chico. Que patético.
Ella caminaba por la vereda sin ninguna protección a la lluvia. Su cabellera negrisa ya se encontraba mojada al igual que su ropa. ¿Cuántas horas se encontraba caminando? Ni ella misma sabía, solo que era bastante.
Delante de ella pudo apreciar como su compañero de clase —aquel que había llegado ayudarla en una ocasión cuando su ex-novio la perseguía— caminaba para cruzar la pista para llegar a la vereda de su izquierda.
Un impulso le hizo mirar atrás, observando que había un carro que iba a máxima velocidad. Dirigió nuevamente su vista hacia el chico Lee, al parecer no prestaba atención a nada a su alrededor mientras tenía los audífonos puestos. Tenía la mirada perdida y apagada, una mirada parecida a la de ella cuando recordaba la traición de Hyunsu y Sunhee.
—¡Lee Suho no cruces!
En ese momento tuvo un descargue de adrenalina que le permitió llegar hacia él a tiempo. Llegando a tirar al chico a unos 30 centímetros de ser arrollados.
—¡Pero qué te sucede!—gritó; sin embargo, su expresión se suavizó a divisar gruesas lágrimas salir de los ojos del chico—Esta bien—susurró mientras aquel pelinegro temblaba entre sus brazos.
Esa noche, sin saber, casi pierde a su mejor amigo. Esa noche Suho estaba tan sobrecargo de culpa y pesadillas que por un minúsculo momento pensó en acabar con su vida. Por unos segundos tomó la suficiente valentía para acabar con su vida.
Las personas se acercaban a ellos para verificar si estaban bien. Unos preocupados y otros asombrados. Esa misma noche Koemi supo todo lo que estaba pasando Lee Suho. Esa misma noche se prometieron estar siempre para el otro.
—¡Yah, princesa!—gritó Hyunsu mientras corría a su dirección.
Koemi sonrió ante la adorable escena. Aquel chico estaba logrando enamorarla más.
—¿Estás lista para pasar el mejor día de tu vida?—preguntó con ilusión Jung. La pelinegra solo se limitó a asentir con la cabeza sonriente.
Kim Koemi pudo sentir los fuertes latidos que su corazón hacia cada vez que cruzaba miradas con Hyunsu. Aún no sabía que era lo que le atraía a él. Tal vez la forma dulce y empalagosa con la que le hablaba. Tal vez la mirada llena de amor que le dedicaba.
—Una tiara para una princesa—dijo Hyunsu mientras colocaba la tiara en la cabeza de Koemi.
Ambos se encontraban en un parque, parados frente a la fuente de esta. No había casi nadie en el lugar, a las justas un pareja de ancianos y una familia.
Hyunsu observó los ojos oscuros y cautivadores de Koemi. Se encontraban a escasos centímetros, cerca del uno con el otro. El chico acarició de manera delicada el rostro de la chica. Poco a poco se fueron acercando, mas no unieron sus labios, pues el sonido del celular de Koemi sonó.
—Es Suho—dijo mientras inspeccionaba el mensaje.
"Estamos en el karaoke. Si quieres ven.
*Ubicación actual*"
Koemi soltó un suspiro. ¿Desde cuando que no va a un karaoke? Desde hace mucho tiempo. Se moría de ganas de ir, pero también quería quedarse con Hyunsu. Mas sabía que quedarse más tiempo con su ex-novio podía desencadenar algo que deseaba, pero que no era el momento. Porque... ¡Dios! ¡Casi se besan!
—Lo siento. Mi amigo me están esperando. Fue un agradable día. Adiós—dijo apurada-mente, pero antes de que se vaya, Hyunsu la detuvo.
—Tú... mmm... ¿Qué clase de relación tienes con ese chico?
Koemi se quedó petrificada al escuchar la pregunta, para después sonreír—¿Celoso?—el chico asintió—Es mi mejor amigo. Nada ha pasado entre nosotros, si es que eso es lo que te preocupa.
El chico asintió dudoso para al final despedirse y dejarla ir. Koemi al llegar al karaoke le mando un mensaje a su amigo, haciendo que Suho saliera en busca de ella.
—¿La pasaste bien?—preguntó Lee mientras miraba la tiara en la cabeza de su amiga.
—Si, fue una tarde amena. ¿Tú qué tal la pasaste? ¿Ya coquetaste con Im Jukyung?
—Shhh... no hables tan fuerte.
Koemi rio. Ingresó a la habitación de karaoke encontrándose a Sooah, Taehoon, Jukyung y Soojin adentro.
—¡Viniste Koemi!—chilló Soojin. Kim solo se limitó a sonreír y a saludar.
Un poco alejados de ambas chicas. Taehoon, Sooah y Jukyung cuchicheaban en susurros.
—Te dije que uno no puede estar tan separado del otro—le dijo Sooah a la castaña.
—Ya veo.
—Hay rumores que dicen que tanta es la necesidad de estar juntos que duermen en la casa del otro—Sooah asintió afirmando las palabras de su novio.
—Omo, ¿En serio?
—Si, por qué crees que a veces vienen al mismo tiempo y juntos. No creo que se la pasen recogiendose en sus casas. Además hay veces que Kim Koe suele vestir con las sudaderas de Lee Su.
Jukyung miró asombrada a su amiga. ¿Aquellos dioses eran pareja? ¿O solo eran rumores? Si fueran pareja serían la más envidiable. ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫
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¡Annyeonghaseyo!
❝안녕하세요❞
┖─────«❀»─────┚
AAAAAA NUEVO CAPÍTULO
¡EMPEZAMOS CON LOS DÍAS DE MARATÓN!
¿QUÉ OPINAN SOBRE LOS RUMORES QUE CREAN SOOAH Y TAEHOON?
¿Y SOBRE LA RELACIÓN QUE TIENEN SOOJIN Y KOEMI?
POR SI NO SE HAN DADO CUENTA, MÁS O MENOS LA RELACIÓN DE SUHO Y KOEMI ES COMO PADRE E HIJA, Y ALGUNAS VECES AL REVÉS (MADRE E HIJO)
NOS VEMOS MAÑANA PARA OTRO CAPÍTULO ♡
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ESTE CAPÍTULO ESTA DEDICADO A michelle2250
GRACIAS POR COMENTAR Y VOTAR EN MI HISTORIA, CARIÑO ❤
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