012

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E N V I D I A    Y
A M O R
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         ↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡   Aquel fin de semana se había levantado temprano. ¿La ocasión? Ese día Suho y Soojin daban la prueba de matemática. Así que se apresuró a bañarse, cuidando que la gasa de su mano izquierda no entrara en contacto con el agua.

         Koemi desayuno, según ella un desayuno decente —cereales con yogurt—, y salió de su departamento a la dirección donde se iba a dar el concurso.

         Bajo del taxi y miró a los adolescentes que representarían ese día a sus colegios. Algunas chicas llevaban faldas con unos cuatro dedos más arriba de la rodillas. Hizo una mueca al pensar que dar un examen con falda era incómodo. Generalmente ella daba sus exámenes con alguna ropa que se le sea cómodo.

         Rió al recordar que una vez casi se va al colegio con su pijama cuando estaba en épocas de exámenes. Mas Suho le obligó a ponerse, aunque sea, el uniforme deportivo de la institución.

         Buscó su celular en el pequeño bolso negro que combinaba a gusto con el polo negro manga larga que era señido a su cuerpo. De pantalones llevaba unos jean Boyfriend rasgados.

         —¿Dónde estás?—preguntó cuando Suho aceptó su llamada.

         —Detrás de ti.

         Koemi volteó en busca de su amigo, encontrándolos a la mitad de cuadra caminando hacia ella. ¿Qué hacía con una chaqueta con tremendo sol?

         La pelinegra sonrió hacia él y lo saludo con su mano derecha, escondiendo la otra para que no llegara a preocuparse y se concentre 100% en el examen.

         —¿Listo para sacar una mala nota?

         —Nunca sacó una mala nota.

         —Nunca digas nunca, amargado. Yo dije que nunca me iba a levantar temprano un fin de semana y mírame, he aquí presente para darte mala vibra.

         Suho sonrió ante las locuras que soltaba la chica—Se supone que eres mi mejor amiga, deberías de apoyarme a mí y no a Soojin.

         —En ningún momento mencioné a Soojin—sonrió divertida—. Pero si, prefiero apoyarla a ella. Ella no me pone muecas cuando le hago porras.

         —Es cierto—dijo una voz femenina. Los dos mejores amigos voltearon encontrándose con Soojin—. ¿Estás preparado?—dijo hacia el chico

         —¿Qué hay que preparar?

         —Ah~ eres desagradable. Sé que lo harás bien sin ninguna preparación.

         —Aún sigue en pie eso de tirarlo de las escaleras, Soojin—la aludida rio.

         —Yah, en serio, en mi casa sus calificaciones son lo más importante después de las mías.

         Koemi sonrió tristemente. Sabía de lo que pasaba en la vida de Kang Soojin gracias al chismoso de su mejor amigo.

         —Tranquila, en mi casa tus calificaciones son más importantes que el de este amargado.

         —¡Yah! ¡Deja de decirme amargado!

         —Es que eres un amargado—dijeron ambas mujeres antes de estallar en carcajadas bajo la mirada matadora de Suho.

         —Bueno, no los retraso más. Dentro de poco empezará el examen—dijo Koemi al ver que ya casi nadie se encontraba en la entrada de la institución—. Suho, olvídate todas la fórmulas. Soojin, sé la mejor como siempre lo has sido.

         Se despidió de ambos. Suho con una mueca de disgusto y Soojin con una sonrisa divertida—¡Suho, vendré a recogerte en la salida!

         Lee solamente caminó avergonzado al ver que unas cuentas personas habían escuchado el claro mensaje que había dejado su amiga.

         Koemi soltó un suspiro y camino en dirección hacia un parque que había visto cuando se encontraba yendo en el taxi.

         El parque tenía un montón de árboles, tranquilamente estos podían darte la sombra necesaria. Se sentó en una banca frente a los juegos del parque donde se hallaban niños jugando.

         Con una pizca de tristeza y envidia vio a una chica siendo abrazada por sus padres. ¿Cuántas veces deseo eso? Un montón de veces. ¿Cuántas veces sucedió? Ninguna.

         A los largo de su vida había tenido que convivir con 12 niñeras. Ellas renunciaban al ver que no podían cuidar de ella sin dejar de lado a su familia, debido al requisito de sus padres. La niñera debería de estar al 100% para Koemi. Fue duro cuando pedían que la niñera tenga entre 30 a 40 años, pues a esa edad ya uno tenía sus propios hijos.

         Koemi lo entendía. Entendía porque sus niñeras no podían quedarse con ella más de un año. Ellas si querían a sus hijos y familias. No como sus padres que la dejan abandona.

         Dejó de tener niñeras a la edad de 15 años, cuando aprendió a cocinar, lavar y limpiar la casa adecuadamente. A sus padres no le agrado esa idea, pero insistió tanto por medio de llamadas que terminaron aceptando.

         Con el semblante un poco deprimido camino hacia las afuera del parque. Tal vez había sido mala idea ir allí. Sin pensarlo mucho sus piernas caminaron hasta llegar al centro comercial, donde pidió un frappuccino de Starbucks y se sentó a tomarlo.

         A unos cuantos metros de ella se encontraba Seojun y su pandilla paseando por el centro comercial. El primero en divisar a Koemi fue Chorong.

         —Miren, halla está la Diosa Helada—señaló el chico hacia la dirección de Koemi.

         —¿Diosa Helada?—cuestionó Seojun ante aquel raro apodo.

         —Si, porque su mirada es capaz de helarte la sangre.

         Seojun asintió comprendiendo. No podía negar que la mirada que proporcionaba Koemi cuando estaba enojada le daba cierto pavor.

         —¿Deberíamos de acercarnos?—preguntó a todos Chorong, haciendo que varios negaran.

         —Recuerda que nos amenazó por no limpiar la cancha junto a ellos—recordó uno de ellos.

         —Cierto—pasó saliva con dificultad—. Seojun, retomemos el camino hacia el área de comida.

         —Ella está al lado del puesto de comidas—repondió el motociclista, quién no había despejado su mirada de la pelinegra.

         —Aigoo, ¿Y ahora que vamos hacer? Tengo hambre pero tampoco quiero morir. Aunque morir a manos de la Diosa Helada no suena tan mal.

         —¡Ash!—exclamó Han mientras golpeaba a Chorong—¡Qué tonterías estás diciendo!    ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

         ↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡   —Solo tengo una pregunta Suho... ¿Por qué mierda estamos en el cine?

         —Lenguaje.

         —Tranquilamente podemos mirar esta película en mi casa—habló ignorando la frase robada que había dicho su amigo.

         —Shh... ahí están.

         —Ahí están, ¿Quién?—mas no hubo respuesta. Suho agarro el recipiente de palomitas y se acercó a Koemi para tapar sus rostros.

         Kim se dio cuenta de la presencia de la castaña junto a un chico, que por lo que se veía, universitario—Estamos aquí por la chica que te gusta.

         —No me gusta.

         —¿Y se puede saber porque estamos acá?

         —Solo quiero ver la película.

         —Entonces no te molestaría que vaya hacia ella y la salude—dijo Koemi mientras se paraba. Sabía que aquello no lo permitiría su amigo, y sonrió cuando Suho la agarró del brazo izquierdo deteniendo la.

         —¿Qué te pasó en la mano?—cuestionó mientras tiraba del brazo de su amiga para que se sentará.

         —Ou, ¿Eso? Mmmm... tuve un pequeño accidente.

         —¿Pequeño?—dijo Suho, olvidándose por completo que tenía que espiar a cierta chica castaña.

         —Si, un pequeño accidente que me costó seis puntos. Pero no te preocupes, esto se solucionó rápido.

         —Fuiste al hospital—afirmó—. ¿Por qué no me llamaste?

         La película ya había empezado, por lo que Koemi aprovecho para desviar la mirada de un Suho molesto.

         —Koemi.

         —No quería molestar, ¿Entendido? Tú seguramente estabas con Im Jukyung en la tienda de cómic. Simplemente no quería interrumpir—se encogió de hombros restándole importancia.

         —Primero eres tú, luego Jukyung.

         —Aigoo, eso de estar enamorado está volviendo cursi—rio Koemi, haciendo sonrojar a su mejor amigo.

         La película transcurrió tranquila hasta que de la nada Suho se paró al ver que el chico se encontraba demasiado cerca de Jukyung. Pero al separar a la pareja se dio cuenta que se había equivocado.

         Koemi tuvo que reprimir una carcajada para no llamar la atención de la castaña. Al final, cuando terminó la película, Koemi se encontraba burlándose de Suho por lo vergonzoso que había sido aquel momento.

         —Realmente te tiene mal esa chica—rio.

         —¡Yah! ¡Cállate!

         Ambos salieron del centro comercial detrás de la pareja a la cual se encontraban espiando. Koemi miró el rostro desencajado de Suho cuando aquel chico había acariciado el cabello castaño de Jukyung en modo de despedida.

         —Yah, controla tus celos—dijo divertida Koemi.

         Suho la miró serio en modo "cállate ya" mas cambió su mirada a terror cuando vio que Jukyung iba a pasar por su lado—Escondete.

         El pelinegro se escondió detrás de un letrero de neumáticos mientras que Koemi miraba desinteresadamente hacia el interior de centro comercial, dándole la espalda a la castaña.

         Kim volteó cuando ya no hubo peligro, observando entre risas el lugar donde se había escondido su amigo—Pero que escondite más patético.

         Más las risas por parte de la fémina acabaron cuando vio que el chico universitario se reunía cariñosamente con otra chica. Hizo una mueca antes de sacar el celular y tomarle una foto a la escena. Más tarde se lo mandaría a Soojin para que se lo mostrase a Jukyung.

         Luego de unos minutos Koemi se encontraba a las afuera del baño de los chicos, esperando pacientemente a Suho. A quien se le había ocurrido intimidar al chico universidad en el baño de hombres.

         Al ver que su amigo demoraba más, decidió enviar la foto a Soojin, adicionando que había visto a ese chico con Jukyung y luego con otra chica. Se detuvo a ver de nueva la foto. La pareja de la foto se mostraba tan cariñosa que hasta no podías creer que aquel tipo era un imbécil de primera.

         ¿Así se veía Hyunsu cuando se veía a escondidas con Sunhee? Aquella inseguridad volvía en ella. Movió la cabeza negativamente para sacar ese pensamiento. Hyunsu ya le había dicho que nunca la quiso, que ha la única que quería era ella. Su corazón confiaba ciegamente en su primer amor, pero su razón no se fiaba del todo.

         Buscar el amor es complicado.    ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

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¡Annyeonghaseyo!
❝안녕하세요❞
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¿LES HA GUSTADO?

AMO CUANDO KOEMI MOLESTA A SUHO

EN ESTE CAPÍTULO HEMOS PODIDO VER LA GRAN FALTA DE AMOR QUE HA VIVIDO KOEMI DURANTE TODA SU VIDA

POR CIERTO, QUERIA PREGUNTARLES SO QUERÍAN MARATÓN ¿QUIEREN?

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ESTE CAPÍTULO ESTA DEDICADO A itkk_riddle

GRACIAS POR COMENTAR Y VOTAR EN MI HISTORIA, CARIÑO ❤

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