aguardando fuera del aeropuerto un mercedes color negro y su chofer, un joven alto, moreno y de rasgos maduros, se hallaban a la espera de sus clientes, rogers y lucia,
el jet en el que viajaban ambos ya había aterrizado hacia unos momentos y ahora solo restaba recogerlos

—¿Y ahora que se traerá el señor rogers entre manos? —pensó— mira que llegar a un país ajeno de incógnito y regresar de la misma manera... nunca entenderé a los ricos

apartándose de sus pensamientos el joven chofer logro apreciar la figura de rogers a través del parabrisas sin embargo le pareció muy extraño verlo acompañado de una pequeña

—«¿una niña? ¿en que lío se metió?

el chofer bajo del mercedes

—¡julio! —exclamo rogers— ¡cuanto tiempo!

—un año señor —respondió el chofer con una sonrisa— un año

ambos estrecharon sus manos como viejos camaradas

—veo que viene acompañado señor—dijo julio

—oh si ¿donde deje mis modales? julio —tomo a lucia del hombro— ella es lucia, lucia el es Julio alvarado mi chofer y mayordomo

—hola —dijo lucia— es un gusto

—el gusto es mio —respondió julio con una reverencia

—bien aun queda un..—el sonido del celular interrumpió a rogers— tengo que atender, ocupate del equipaje

—claro señor

—diga

//rogers.. —dijo la voz de un hombre a través del aparato— es Ana.. ella —hubo una pausa— tuvo una recaída hace unos minutos//

—¡que..¡ —bajo mas la voz— ¿que sucedió?

//no lo sabemos muy bien aun.. pero al parecer sufrió un ataque de pánico.. tal vez eso pudo ayudar//

—¿y los chicos? —pregunto alarmado— ¿están todos bien?

//Damian.. intento tranquilizar a Ana y..

—¡que! —grito

//ella lo.. ataco con un cuchillo.. pero no te preocupes.. no fue nada grave//

—¿y Ana?

//logramos tranquilizarla.. esta en la habitación 300.. dormida..//

—bien mantengan la habitación vigilada, ya voy hacia allá

//de acuerdo.. y.. rogers//

—¿si?

//¿la encontraste?//

—ya hablaremos de eso —colgó

—todo listo señor —dijo julio

—bien, porque debemos llegar lo mas rápido posible

—¿sucedió algo? —pregunto

rogers se acerco a julio

—hay una situación “especial"—susurro

—entendido —subió inmediatamente al coche

—¿que sucede? —pregunto lucia nerviosa

—tranquila, —sonrió— solo sube

lucia le hizo caso, ambos subieron al coche y salieron rápidamente del aeropuerto, ahora tanto rogers como lucia se hallaban muy preocupados, aun no sabia muy bien como pero rogers estaba seguro de que algo malo ocurriría con Ana

«¿porque ahora? —se pregunto con la mirada fija en la carretera— ¿que sucedió?

para rogers Ana no era cualquier niña, desde que la vio por primera vez supo que seria alguien diferente al resto, el día en que se conocieron seria de los mas importantes para ambos, un día obscuro y lluvioso de abril, el sonido de la lluvia acompañado por el de las sirenas en los coches de policía, rodeando una vieja casa de la cual dos para médicos sacaban en camilla un cadáver ensangrentado cubierto con una manta

—valla forma de comenzar la semana —dijo un oficial de policía alto y robusto

—como si odiar los lunes no fuera suficiente —añadió un hombre vestido de traje y con una placa de policía en el pecho— ¿como dijiste que sucedió?

—un peatón que cruzaba por aquí llamo reportando gritos de hombre en la casa, yo y marcus  fuimos los primeros en llegar, creímos que nos encontraríamos con una discusión marital, pero al llegar solo oímos los gritos de una niña —hizo una pausa— como era de suponer entramos y.. en efecto encontramos a una niña, albina, cubierta de sangre y apuñalando aun hombre en la cabeza una y otra y otra vez... ¿crees que halla sido su padre?

—tal vez, o quizá algún tío que se halla querido pasar de cariñoso—respondió el hombre de traje— no a hablado asta ahora, por lo tanto no lo sabemos

Ana se hallaba sentada en una de las ambulancias con una manta encima llevaba puesto un vestido blanco de tirantes lleno de sangre al igual que su rostro, manos y pies, en sus ojos podía reflejarse todo el odio que aquel día había dejado salir

—¿que ocurrirá con ella john?—pregunto el oficial

—lo mas probable es que sea llevada a una casa hogar —respondió— aunque.. tal vez eso no sea suficiente,

a la escena arribo una camioneta cuatro por cuatro color negra y de allí salieron dos personas, una misteriosa mujer rubia de cabello largo y brillante, ojos verdes, rasgos delicados y vestida de traje, detrás de ella se hallaba rogers con unos cuantos años menos 

—ya te habías tardado —dijo john— me sorprende que vengan asta aquí personalmente

—si hay trabajo hay que hacerlo bien —respondió la mujer— el, es el profesor rogers washington es..

—en realidad —añadió rogers— john y yo ya nos conocíamos de hace algún tiempo

—aun así es un gusto verlo —dijo john— profesor washington

—¿donde esta? —pregunto impaciente la mujer

—por allá —respondió el oficial apuntando hacia Ana

—por dios, —dijo la mujer impactada, respiro hondo y observó a rogers— ¿enserio crees que puedas con esto?

—siendo sincero no estoy seguro—respondió rogers— pero vale la pena intentarlo

—no me decepciones —sonrió

—Mérari, —rio— ¿cuando te he decepcionado?

con una sonrisa y mucha seguridad rogers comenzó a caminar hacia Ana, a primera vista rogers vio que seria alguien diferente no solo por su físico si no por el aura que desprendía

—Hola —dijo con una sonrisa— mi nombre es rogers washington, soy psicólogo, ¿cual es tu nombre?

Ana solo se quedo mirando hacia abajo sin decir nada

—mira, se que acabas de experimentar algo muy traumático pero trata de tranquilizarte un poco.. estoy aquí para ayudar 

Ana poso su mirada sobre los ojos de rogers y asintió con la cabeza

—bien, ¿cual es tu nombre? —repitió la pregunta?

—Ana —dijo con voz baja

—bien Ana, a partir de ahora nosotros nos encargaremos de ti

—¿me llevaran a la cárcel?—pregunto con miedo la niña

rogers se apresuro a tranquilizarla

—¡No, no claro que no

—pero yo...

—escucha —rogers guió la mirada de Ana hacia su compañera— ¿ves a esa linda joven de allá?

Ana vio que en efecto la mujer que señalaba rogers se trataba de una linda joven rubia con aproximadamente entre diecinueve o veinticinco años

—Ella —añadió rogers— es la agente Mérari, ella se ocupara de que no te lleven a prisión

—y.. ¿a donde me llevaran?—pregunto Ana

en el rostro de rogers se formo una pequeña sonrisa

—A casa

—¿señor?

la voz de lucia saco de inmediato a rogers de sus recuerdos, le costo un segundo recordar en donde se encontraba «camino al orfanato», a un lado de el sentada y con mirada confundida se hallaba lucia

—¿que sucede? —dijo finalmente

lucia le dedico una pequeña mirada de extrañes y continuo

—ese campo —volvió su mirada al enorme prado que se extendía por toda la ventana del coche— ¿porque esta prohibido su acceso?

rogers capto a lo que lucia se refería

—lo dices por el aviso que se halla unos metros atrás ¿no?

lucia asintió con la cabeza, hacia apenas unos minutos mientras rogers se hallaba sumido en sus pensamientos el coche se detuvo en un pequeño cruce, allí ella logro apreciar a través de la ventana una enorme lamina de metal cuadrada en la que ponía la frase “PROHIBIDO EL PASO" en varios idiomas entre los que se hallaban español, ingles, alemán y coreano, seguida de esa frase se hallaba otra la cual el tiempo y el clima se habían ocupado de borrar en su mayoría sin embargo las pocas letras que se encontraban visibles ponían

“___P_ __ _R_EBA_
N___E__"

Lucia aun no sabia si se tratase del idioma español o ingles

—bueno —rogers se aclaro la garganta— en realidad el paso no esta prohibido, al menos no en estos tiempos

—¿a que se refiere? —pregunto confundida

—ese prado que ves allí, fue utilizado como campo de experimentación durante la segunda guerra mundial

lucia quedo sorprendida ante las palabras de rogers

—pero —añadió rogers— al finalizar la guerra lo dejaron olvidado, el letrero que viste atrás a estado allí desde que operaban dentro del campo, como es una zona rural y montañosa nadie se a molestado en quitar el letrero, incluso la cerca de casi tres metros que rodeaba el prado a terminado por caerse sola.

lucia se quedo observando el prado que aun era visible
«eso explica porque se ve tan demacrado»
—entonces.. ¿la gente aun puede ingresar allí? —pregunto

—mm si, en teoría si, pero.. —miro fijamente a lucia— no creo que la gente quiera pasar su día de campo en un lugar donde alguna vez se experimento con armas biológicas de destrucción masiva ¿o si?

lucia ahora tenia mas claro todo, luego en su cabeza recordó el viejo aviso, ahora con las palabras de rogers todo estaba claro

CAMPO DE PRUEBA
NUCLEAR

Lucia solo observo confundida
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