chapter two

El clima frío como siempre, Billy sentado delante de la computadora viendo si al menos la temperatura subió de -57. . . Pero no, esta vez bajo 3 más y todo seguía igual.
Ya van 3 años desde que todo seguía así y no subía la temperatura para dar la noticia de que pueden volver y regresar a lo suyo. A lo que sería el trabajo, el deporte, las reuniones en parques o plazas, etc.
Se levantó para ir a prepararse la merienda. Cereales con yogurt de vainilla.

Cuando llego a la cocina le dió la impresión de que había otro tazón de cereales pero con otro yogurt, de frutilla, miro para todos lados y no se encontraba con nadie en lo absoluto, entonces lo tomo y se puso a comer de ambos.
Cuando fue a su abitacion se encontró con que estaba la cama desordenada.

> Que tan mala memoria estoy teniando? Que ni siquiera puedo recordar ni un poquito de haber desordenado tanto así>

Entonces aprovecho para acomodarlo, pero cuando toco las frazadas, se dió cuenta de que parecía que alguien de tamaño más pequeño que él estuvo ahí, ¿Acaso no es él único? Solo acomodó la cama, pero eso no impidió que siga pensando en eso, las dudas no paraban de pasar por su cabeza y molestarlo con que había alguien más allí.

Se hicieron las 12:30, tenía hambre entonces fue a la cocina a prepararse algo, pero casi se le da un paro cardiaco cuando vió en llamas a la cocina, rapido agarro un lanzallamas que estaba colocado en la pared y apago todo eso, asustado cerro el gas. Se dedico a apoyarse contra la pared e ir colocándose en el suelo hasta quedar sentado escondiendo su rostro entre los brazos.

>>¿Mi memoria me esta abandonado? ¿Ahora? ¿Que pasara si sigo así? >>

Cuando miro abajo de la mesa, se encontró con lo que nunca creyo. . . Una niña.
La pequeña tenia el pelo negro, y un mechon blanco, sus ojo izquierdo era de color café oscuro, mientras que el otro que lo acompañaba una manchita de vitíligo era más claro, piel morena y parecia ser una de 10 años. Su ropa era un vestidito amarillo con margaritas y una chaquetita de Jean con una rosa rn la manga izquierda, estaba con unas simples apargatas blancas.

Que . . . C-Como puede ser que . . . ? Donde esta tú mamá? -pregunto extrañado el de mayor edad, como respuesta solo recibió un temblor de parte de la pequeña, parecia que estaba al borde de llorar ya que se le cristalizaban los ojos - ¿No vas a hablarme? -la de menor edad solo nego con la cabeza - Bien . . .

Billy se puso de pie para luego salir de ese lugar, su cabeza le daba vueltas . . . ¿Desde cuanto tiempo que estuvo allí? ¿Como puede ser que no se haya dado cuenta de la presencia de esa niña? 

- . . . ¿Desde cuanto tiempo estás acá? - la niña salió de sonse sería su escondite quedando apoyada en la mesa, solo lo miro con la mirada perdida, eso confundió más al mayor, ya no sabe si estuvo allí, o se abra bajado en una de las 3 paradas comerciales en donde pudo perderse o durante estos 3 años . . . Estubo ahí siempre.- Mira emmm . . . Yo no sé que hacer, no tengo especialidad con los niños . . . -se dedico a decir el hombre mientras tembloroso se acercaba a ella.

Mientras en el tren, una mujer estaba haciendo unas revisadas en algunos vagones, caminar en uno solo era como caminar 1 cuadra. Malena Morales, era la vice encargada del lugar, el encargado principal era Diego Hernández, un hombre Ambicioso y orgulloso, el lleva sus tres años en ese tren y nada se le escapa de las manos, y si eso pasa, a la persona que logro hacerlo lo saca de ese tren y que muera congelado afuera . . .

Estaban en el vagón n°12.

- . . . Señor, tenemos que ir a la siguiente parada por comida, en Estados Unidos, dicen que allí pronto cerrarán, ya se les esta acabando los productos de elaboración. -dijo Malena mientras en su cuadernillo tachaba a Estados Unidos como productor principal de ese lugar.

- Pues, que nos den todo lo que hay allí, incluso su comida -Dijo mientras movia su cuerpo en forma de baile en frente de una familia.

- Pero, ¿Que hay de ellos? Ellos tam . . . -no pudo terminar la oración ya que Diego la mira de forma amenazante, acercándose y encorbandose un poco a su altura le dice lo siguiente.

- Los estados unidenses tienen que sentir que es pasar hambre y miseria, ellos también tiene que sufrir alguna vez . . . -se levanta y mira de un lado con una sonrisa retorcida- ELLOS NOS ARREBATAN TODO A SU PASO! ELLOS TAMBIÉN VAN A SENTIR RL SUFRIMIENTO DE TODO ÉSTO!! Y aún así . . . SE PREOCUPAN!! -dijo para finalmente reir a carcajadas. No es que la gente diga algo, pero el ya es así y todos obviamente que se acostumbraron.

- . . . ¿Siempre asesinando? -pregunto Malena al hombre con sombrero de copa.

- No siempre -contesto- Tambien su propia vida decide dejarlos - sonríe- Bueno! Vagón limpio y sin mugre! -mira hacía un costado donde había un niño con una liebre- . . . Lindo conejo.

Malena se dedico a mirar allí, al menos lo unico de verdad era el césped, las plantas y las mascotas de allí.

  Fabrica Estados Unidos...

- Hola señor, un gusto tenerlo aquí en la fábrica y supermercado, les aviso que ya no pueden venir después de esta parada, porque nuestros productos se acaban. -dijo una mujer de unos 66 años.

-tomaremos lo suyo . . . -Dijo el hombre- Tomen todo!!! -grito y la gente sin entender bajo preocupada y abrigada, rápidamente todos adentro del lugar.

- P-Pero señor! Necesitamos para nosotros! Para vivir en lo poco que nos queda! -dijo la mujer soltando una lágrimas- Por favor! Ten misericordia con nosotros! Son mis hijos! -llorando se arrodilla delante del hombre.

Antes de que se negase nuevamente, la mujer se colo a hablar - Pueden venir con nosotros, a 7 vagones atras, hay dos casa vacías -miro al hombre por lo último haciendo referencia a que esas casas vacías eran por un solo motivo, él.- y otros 3 vagones más hay tres más vacias.

Dicho esto, Diego la miro mal, por otro lado la mujer se puso a llorar de la alegría y se levanto para abrazarla, la mujer sentía pena por ellos y odio por él, sabiendo que esta mal, viene a sacarle su comida. Sabía que Diego le diría algo.

  Después de unas horas de comerció allí, también se dedicaron a cargar el suficiente combustible para otro largo y tal vez eterno viaje, que tal vez tampoco tenga fin . . . Y ya sabemos como podría terminar todo.

El adulto cuidando de una niña. . . Que no sabe cuanto tiempo estuvo allí sola y preparandose su propia comida.

Y la mujer que tal vez no termine bien todo, Diego si pierde la cabeza . . . Algo podría pasar.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top