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Naruto ni Jujutsu Kaisen me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí en este fic.
Sin mas que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo de mierda.
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Una explosión se dio.
Y luego otra, seguida de otra y otra.
Y pronto el cielo se incendió.
"¡HAAAAAAAAAA!"
En medio de aquella lluvia de meteorito echos de fuego que caían a la tierra, un rubio corría a máxima velocidad.
Su ropa iba rota, su cuerpo manchado de tierra, pero sin embargo su rostro sólo reflejaba la mas pura resolución.
Flush.
El muchacho dio un enorme salto mientras que elevaba su pie para realizar una patada de hacha.
Crack.
Pero algo lo detuvo.
Un escudo de energía lo detuvo a unos metros mientras que todo alrededor de ellos se formaba un cráter debido a la fuerza que el suelo había absorbido por aquella patada.
"No puedes herirme, en cambio yo a ti..."
El muchacho dejó ver sus dientes lleno de rabia eh impotencia ante lo dicho por aquella maldita cosa que le sonreía con calma, burlandose de él.
Flush.
El muchacho rápidamente dio un enorme salto para atrás cuando rayos de energía salieron de los costados de aquella cosa y se dirigían a él a una velocidad imposible de esquivar para alguien normal.
Pero él no era alguien normal.
Círculos de energía se formaron en las plantas de sus pies cuando aquel hombre "pisó" el aire, ondulaciones de color azul tenue se que formaron en la realidad misma.
Y le dejo caminar sobre ellas.
Rápidamente el muchacho se intentaba alejar de aquellos rayos que eran controlados para dirigirse siempre a él.
El muchacho corría por el aire evadiendo aquel ataque energético dirigido a su persona.
Pero los rayos eran más rápidos.
BOOOM.
Cuatro de ellos lograron impactar en su objetivo mientras que una bola de fuego se formaba consumiendo a aquel muchacho.
Pero una estela de humo y fuego salió.
PAM.
El muchacho rodó por los suelos dejando salir un ahogado grito mientras que se deslizaba usando sus pies y sus manos para evitar seguir recorriendo metros.
Las uñas debido a ello se habían arrancado quedando ensangrentadas mientras que sangre salía de sus rodillas y dedos de los pies debido a la fricción generada por deslizarse.
Pero no eran las heridas más importantes.
La mitad de su rostro estaba calcinado mientras que se podía ver claramente sus dientes y humo salía de esa herida, en su pierna un trozo de carne arrancado mientras que partes de su estómago estaban de color rosado, la mitad de su mano derecha ya no estaba siendo solo una masa de carne molida debido la explosión que había tomado.
Pero su ojo seguía ardiendo de voluntad.
Slash.
"Ni siquiera me esfuerzo para tocarte"
Aquella cosa tenía su brazo introducido en la caja torácica de aquel muchacho mientras que sonreía con total burla.
Sangre salía de la nariz, el ojo y las orejas del muchacho que seguía viendo a aquel monstruo con gran resolución.
"[Ryoiki Tenkai]:..."
Y entonces aquello abrió sus ojos incrédulo mientras que observaba al muchacho hacer un sello de mano muy peculiar
Y entonces abrió los ojos.
El muchacho lo primero que observó fue el techo de madera de su hogar mientras que lentamente oía el suave sonido de la lluvia afuera, movió su rostro para ver su mesa de noche.
4:03 am.
Él nunca fue una persona madrugadora, sin embargo por azares del destino le había tocado siempre levantarse temprano porque su cuerpo al parecer se había cansado de dormir.
Lentamente se sentó al borde de su cama, incluso en la completa oscuridad de la noche podía observar hasta el mínimo detalle de su habitación, sus ojos trabajaban con los mínimos rayos UV por lo que incluso en la noche más oscura el solo vería "sombreado".
Sin atrasar su despertar se levantó se su cama mientras que sentía el frío viento chocar contra su torso desnudo debido a la que no le gustaba dormir con camisa.
Y se observó al espejo y chasqueo su lengua.
Cicatrices yacían en todo su cuerpo, unas más horrendas que las otras, todas contaban una historia y una cercanía a la muerte.
Pero una predominaba.
Era una sobre su corazón, como si un brazo le hubiera travesado su caja torácica lo cual había echo en realidad, pero no se había podido curar del todo dejando aquella horrenda cicatriz en su pecho.
Lentamente paso su palma sintiendo la piel rugosa que la componía y volvió a chasquear su lengua, entre todos los putos recordatorios este fue el que aquello le dejó.
De verdad esa cosa tenía un sentido del humor retorcido, bueno aunque cortarle los pies a los niños y dejarlos arrastrarse por el suelo no era de alguien de un humor muy "sano" que se pudiera decir.
-Hoy lloverá todo el dia-Hablo aquel muchacho oyendo la lluvia y sintiendo la acumulación de bioelectricidad en el ambiente.
No era una lluvia torrencial, sino más bien una lluvia lenta y calmada, pero que no se iba a detener en todo el día.
La lluvia perfecta para dormir.
Dando un suspiro, decidió que era mejor ir a ducharse, no había cosa que disfrutara más era bañarse con agua fría en un día que sería frío.
Tendría que irla a dejar a la escuela en lugar de enviarla en bicicleta, pero era algo que no le molestaba en absoluto.
Él le había regalado una bicicleta para que ella aprendiera independencia, sin embargo debería ponerle límites un día de estos, ya que no creía que fuera legal que una persona en bicicleta anduviera a 220 K/H, diablos, él había visto carros y motos que no podían llegar a esa velocidad sin fundir su motor en el proceso.
Bah como sea.
Solo se aseguraría que los frenos y la bicicleta en general fueran reforzados con energía maldita, aunque al paso que iba la bicicleta terminaría siendo un "Objeto Maldito" debido a la regular suministracion de aquella energía a ella.
JA.
Ya podía ver las caras de esos bastardos cuando él tuviera que ir a inscribir la bicicleta maldita como "Objeto Maldito de Rango A", sin lugar a dudas llevaría una cámara consigo.
-Vuelve a dormir, te levantaré cuando sea tu hora de despertar....Violet-Hablo aquel muchacho observando su cama.
Una par de ojos le vieron sin despegar su mirada, Naruto se preguntó si había echo algo para que ella pensara que la iba a abandonar.
Aunque este comportamiento era recurrente.
Su cabello echo una maraña entrelazado, su ropa de dormir era una simple camisa de color blanco y su rostro era uno que no dejaba entrever sentimiento alguno.
Pero lo que más destacaba era un collar, la cuerda era simple, pero llevaba una joya colgando de la misma, de un tono azul eléctrico, pero dentro habían tres pequeñas burbujas de color.
La primera era de un color rojo carmesí y la otra burbuja era de un verde bosque, las dos burbujas orbitaban en una mas grande que esta era de color morado púrpura.
-Ya me eh levantado-Hablo la muchacha saliendo de la cama al igual que el mientras que caminaba.
Naruto solo suspiro al ver que se ponía a su lado, debido a la camisa blanca y delgada él podía ver todo lo que ella ofrecía, aunque tampoco era preocupante para él ya que ellos eran los únicos habitantes en este pueblo.
-¿Te quieres bañar conmigo verdad?-Pregunto Naruto ya que esta no era la primera y seguramente tampoco la última vez.
-Le ayudare a lavar la espalda-Hablo la muchacha con tranquilidad mientras que Naruto solo atinó a sonreír ante aquello.
Ella por todos los medios siempre intentaba mantenerse a su lado, yendo donde él iba y comiendo lo que él comía, si no lo veía siempre corría por toda esta aldea en desesperación buscándole.
Le había costado demasiado el echo de que ella fuera a la escuela a la que asistía, una tarea casi imposible que se había logrado después se meses de sufrimiento.
-Muy bien vamos a bañarnos-Hablo Naruto aunque tendría que cambiar el agua fría por una tibia ya que no quería que ella se enfermera.
Ella asintió mientras que seguía a Naruto atrás viendo la espalda del mismo, ella no se quería alejar de él, después de todo.
El era cálido como el sol.
Minutos después.
Violet tenía los ojos cerrados sintiendo los dedos de su señor acariciar el cuero cabelludo mientras que un sueño le invadía quedando casi dormida.
Debido al frío y al calor el ambiente estaba vaporozo manteniendo una temperatura caliente sin llegar a ser sofocante.
Una gran nube de burbujas salían del shampoo que había sido utilizado para lo mismo, los dedos de Naruto formaban círculos generando incluso mas espuma, pero incluso ante aquello se podía ver la suavidad con la que lo hacía.
-Porque tengo que ir, esta lloviendo y no eh visto nada importante, solo fechas y datos irrelevantes-Hablo Violet mientras que Naruto sonrió ante aquello.
-Eso justamente es lo importante sabes, debes conocer todo eso para tener un buen futuro, que nadie te pueda pasar por encima, cierra los ojos...-Hablo Naruto con tranquilidad mientras que tomaba un recipiente mediano.
Violet cerró sus ojos ante aquella petición y sintió el agua caer en su cabeza mientras que lentamente la espuma caía al suelo.
-La moral, su código de vida, es solo el peor mal chiste que la humanidad tiene, al menor signo de problemas o debilidad, te van a despedazar como hienas hambrientas, solo son buenos porque el mundo los obliga a serlo, cuando hay problemas unos se convertirán en hienas y otros en ovejas, por ello se estudia, no porque uno quiera, sino porque así uno se convierte en hiena en este mundo actual, tiene algo con lo que defenderse, ya no vivimos en un mundo donde el más fuerte es el que reina, sino vivimos en un mundo donde los ladrones y los corruptos son el orden mundial-Habló Naruto mientras que quitaba el exceso de jabón mientras echaba otro poco de agua para terminar de limpiar el cabello de ella.
-No lo entiendo-Hablo Violet mientrA que Naruto simplemente sonrió ante aquello.
-Algun día lo harás Violet, solo tienes que darle tiempo y esperar que esta lección no venga en forma práctica-Hablo Naruto mientras que entonces Violet asintió.
Lentamente Naruto pasó un suave trapo por la espalda de ella mientras que comenzaba a limpiarle la espalda sin siquiera dudarlo.
-Ya veo-Hablo Violet mientras que asintió ante lo dicho por su señor.
La humanidad era cruel, más cruel que bondadosa, nadie ya extendía su mano para ayudar a su prójimo, ni siquiera a aquellos que se hacían llamar humanistas, todos velaban sólo por ellos y nada por ellos.
Violet era un ejemplo de ello.
Ella fue un obsequio, un retorcido obsequio para él, o quizás más bien había sido una burla de los Zen'in, no lo tenía muy claro todavía.
Todavía la recordaba, sucia y con ojos muertos, echada como un perro en una pequeña cobija, había simplemente sido asqueroso de ver, tanto que desde ese momento había jurado que volvería a la mansión Zen'in solo para verla arder si alguien no se adelantaba.
Ellos le habían mostrado el porqué sus antepasados se habían llevado tan mal manteniendo una rivalidad que perduraba hasta ahora.
Minutos después.
Naruto solo sonrió forzado.
-Oye, ¿No tienes nada más femino?-Hablo Naruto con una ceja temblando ya que estaba 90% seguro que él le había comprado ropa femenina a ella.
Pero ella amaba vestirse como hombre.
En su instituto la habían tenido catalogada como hombre el primero día, no fie hasta el viernes de esa semana que al cambiarse lo hizo en el vestuario de mujeres y se fueron cuenta de que ella tenía atributos más que incluso algunas de las muchachas pero su ropa extremadamente holgada le ocultaban.
-¡ROAR!-Viole lanzó un rugido intentando sonar como un león ante aquella pregunta.
Naruto casi murió de glucosa en sangre.
-¿Porque el rugido?-Pregunto Naruto curioso ante aquello mientras que Violet le observó tranquila.
-Escuche una de mis compañeras decir que a los hombres les gustaba, así que decidí intentarlo, ¿No le gustó?-Pregunto Violet viendo a su señor quien se rasco la cabeza.
-No, es que me no me guste, simplemente me tomo por sorpresa, pero bueno, como sea, sube al coche-Hablo Naruto mientras que tocaba el botón de su coche oyendo los seguros salir.
En la espaciosa cochera yacía un Ford Mustang GT500 de color negro, lentamente Violet abrió la puerta del mismo.
Violet introdujo su mochila de primero ya que hace unos días la había olvidado, lentamente se introdujo también mientras que Naruto también se metió pero en la parte del conductor.
Lentamente tocó el botón viendo que la puerta del garaje se abria lentamente y encendió su coche.
El agua no se dejó esperar mientras que se podía ver como caía suavemente, poniendo primera rápidamente
Rápidamente puso primera mientras que salía de su hogar girando a la derecha.
En el auto.
Como siempre la aldea estaba abandonada, pero incluso asi las casas y caminos estaba completamente impecables, incluso mejor que cuando vivía gente.
Y era por él.
En ello era que dedicaba sus días para evitar el aburrimiento, cada clavo, cada madera y cada piedra de camino había sido restaurado por él.
Después de todo 60 kilómetros a la redonda eran suyos habiendole comprado al estado y a los que tenían las propiedades.
Japón tenía una concentración en las ciudades muy grande, aldeas como esta eran fáciles de encontrar debido a que estaban alejadas de la civilización haciendo que biaticos, energía y similares fueran muy difíciles ya sea de manter o de traer para estas zonas, al no haber trabajado para sostener una economía era muy difícil mantenerse.
Pero para él era fácil.
Después de todo tenia a su disposición una fortuna incalculable debido a su herencia de sangre, un ejemplo era lo que hace unos días había realizado hace unos días.
Después de todo de nada servía construir un hermoso jardín si lo hacías en el terreno de tu propio vecino.
Y este era un capricho suyo.
Vivir lejos de todo, apartado de la sociedad opresiva y los que la controlaban, lejos de la avaricia, gula o lujuria, lejos de todo lo que era carnal.
Apartado de los humanos.
Naruto despreciaba a la humanidad, para él tener que salvar a alguien débil era lo más asqueroso que un fuerte hacía, el debil muere, el fuerte vive, esa era su filosofía, aquellos que no lo vieran así eran pobres imbéciles que no entendían absolutamente nada.
Seguro Geto lo aprendió a la mala.
Pero tampoco era un psicópata o terrorista como el caso de Geto, él hombre prefierio convertirse en terroristas antes de ir a un psicólogo, lo peor era que murió como un perro en un callejón sin antes ir a un psicólogo
Él respetaba su voluntad.
Naruto si tenia que salvar a alguien lo hacía y ya estaba, despues de todo habian debiles que no se habian visto en vueltos en ello por voluntad propia, ya le jodería ir caminando y alguien le pateara el trasero sin avisar, por más asco que le diera, toda vida para el debía tener un significado, sea bueno o malo y era la persona la que debía descubrirlo.
Aunque si un debil era asesinada no le importaría en absoluto, así funcionaba su mentalidad, por más que solo lo vieran como un idiota orgulloso.
Fuerte pero justo.
-Tengo que ir a la escuela de hechicería-Comento Naruto mientras que Violet giraba su cuello.
-Iré contigo-Hablo Violet mientras que Naruto negaba ante aquello.
-No, tienes que asistir a la escuela, sin mencionar que es una reunión con las bolsas de hueso, nada bueno sale de ello, simplemente espérame en la entrada de tu escuela, pasaré por ti apenas salgas-Hablo Naruto ya que ella salía a las 3 pm más la hora que debía estar en el club entonces a las 4 sería.
-Deacuerdo-Susurro Violet entendiendo que no la dejaría ir a la escuela de hechicería.
Naruto aborrecía asistir a esa escuela, incluso aunque le hubieran extendido una invitación de maestro él había rechazado ya que la aborrecía.
Rápidamente Naruto dio un giro en una curva mientras que apretaba el acelerador sin miedo alguno, iban a 167 kilómetros, la velocidad estándar para llegar a la cuidad más cercana en 2 horas.
El porqué no tenía miedo de conducir a esta velocidad en curvas y el suelo mojado era que estaba aplicando un pequeño truco,estaba imbuyendo su técnica maldita "Azul" en ellas obligándolas a siempre mantenerse adheridas al suelo sin posibilidades de derrape.
Era por ello que también el porque habían abandonado aquella aldea ya que las curvas eran muy cerradas por lo que era demasiado peligroso el salir de ahí.
-Dime, ¿Has echo amigos o amigas?-Pregunto Naruto curioso ya que nunca había llevado a nadie a su casa.
Bueno aunque debido a la distancia era casi imposible de hacerlo, aunque él le había comprado un celular a Violet y las únicas llamadas que tenía eran de él.
-No sé...-Hablo Violet ya que ella veía innecesario el echo de tener eso llamado amigos, mientras pudiera seguir las ordenes de su señor ella sería feliz.
-Pero hay unas hermanas gemelas llamadas Hatsuho y Kagaho Sasahara que me dan de sus golosinas-Hablo Violet ya que no sabía si eso contaba como amistad.
-Ya veo-Hablo Naruto divertido ante la idea de que aquellas mujeres hachas le dieran ofrendas de paz a Violet.
Violet debía volver a ser introducida al mundo poco a poco, milímetro a milímetro, después de todo antes ella había sido considerada un arma viviente y vivido como tal hasta que los Zen'in se la habían obsequiado en un acto e buena fe.
Ella había sido obsequiada con 12 años de edad, ahora ella tenía 16, estos 4 años él le enseñó a volver a ser un ser humano, aprendió a escribir, leer y todo lo referente a los estudios generales.
Eh incluso había dejado su manía de morder a todos excepto a él, la pobre Sui había casi perdido su dedo gordo de la mano derecha cuando Violet se lo arrancó con parte de su mano.
Le debía una a Ieiri Shōko.
-Yo quiero ir con usted a la escuela, sin ordenes no se que hacer, las ordenes son lo....-Hablo Violet intentando la ultima vez que Naruto no la dejara.
Podría incluso aburrise de ella.
Solo la idea de eso provocaba un sentimiento extraño en su pecho, ver a alejar a Naruto era algo que le hacía despertar agitada.
-Tienes que ir al instituto Violet, lo hemos hablado muchas veces, no te preocupes, lo sucederá nada, después de todo sigo siendo el mas fuerte, que tal si te traigo un bocadillo de Tokio eh escuchado de una tienda que venden un Wagashi delicioso, te traeré un poco-Sonrió Naruto mientras que Violet entonces siguió observando para adelante.
-Ya veo-Hablo Violet ya que ella no podría ir y ella ahora lo entendió claro.
Naruto simplemente sonrió de medio lado mientras que seguía conduciendo, no quería llevarla, todo lo relacionado con la escuela era mejor simplemente mantenerlo al margen y lejos por si explotará que no molestara mucho.
Él sabía que Violet era fuerte, si la catalogaba como en la escuela, sería un primer rango en toda regla de la palabra.
Pero solo primer rango.
Habían peces gordos y tiburones que andaban por ahí sueltos ocultándose entre las sombras, sin mencionar que la Escuela debido a su falta de personal se intentaría aprovechar de ella a como diera lugar.
Y aunque podía hacerlo, era mejor no masacrar a esos vejestorios todavía, conservaban mucho poder todavía sobre Japón, ellos eran los que regían a Japón.
Los titiriteros tras bambalinas.
Por ello poco a poco se estaba comiendo un poco de aquel poder político que tenían, lentamente, cuando esos vejestorios se dieran cuenta de la rata ya esta habría picado todos los pilares de sus casas.
Lentamente Naruto acelero aún más mientras que seguía de camino a la cuidad para entregar a Violet.
-¿Quieres que te traiga un cuento?-Pregunto Naruto ya que conocía que a Violet le gustaba leer cuentos infantiles.
-Hago-Hablo la niña ya que el que estaba leyendo pronto se acabaría y necesitaba otro.
Ella leía cuando su señor estaba meditando, se sentaba en una esquina a leer mientras que él estaba en ello.
Para Naruto era increíble.
Alguien tan "calmado" como Violet le era imposible meditar, lo máximo que había podido hacerlo eran 10 minutos y luego abrió sus ojos para saber si estaba ahí o se había ido.
Después.
"Oye mira eso"
"Increible"
"¿De quién es?"
Los hombres susurraban al ver el carro estacionarse en la entrada de la escuela, impecable u hermoso, solo visto en sus sueños.
Incluso algunos se querían acercar para tomarse una foto con aquel vehículo, pero sin embargo antes que lo pudieran hacer.
La puerta se abrió.
"Ese es..."
"Es Violet"
"Debe ser su papá"
Varios susurraron viendo a la niña como siempre en su traje masculino de su escuela salir del vehículo mientras que una sombrilla negra era abierta por ella.
-Recuerda esperarme-Hablo Naruto mientras que la muchacha cerraba la puerta que tenía la ventanilla abierta.
Violet se agachó un poco y asintió.
-Deacuerdo-Hablo Violet mientras que Naruto le dio una sonrisa tenue amtr aquello.
-Y recuerda no morder a alguien, dales un puñetazo, pero nada de mordiscos-Hablo Naruto ya que él arma más temíble que ella tenía eran sus dientes.
-Buena suerte-Hablo Violet mientras que Naruto asintió mientras que cerraba la ventanilla de su vehículo.
Violet se erguio mientras que ponía su mochila en la espalda y caminaba para adentro.
"¡Violet-chan!"
Una voz femenina habló mientras que Violet observaba a su derecha donde provino eso.
Eran dos mujeres casi identicas, solo que una llevaba el cabello corto mientras que la otra iba con su cabello largo, de no ser por ello sería difícil el diferenciarlas a las dos.
Las muchachas observaron el auto doblar y perderse en una esquina a unos metros de la entrada de su escuela.
Ellas eran Hatsuho y Kagaho.
Su apellido era Sasahara.
El máximo de dulces a pedir eran 10 por hermana.
Un nivel aceptable.
-¿Es tu hermano?-Pregunto la de cabello corto mientras que silbaba ante aquella belleza de auto, ella tenía de nombre Hatsuho.
-N-No sabía que t-tu familia fuera de dinero-Hablo la muchacha de cabello largo de nombre Kagaho de manera suave y temerosa.
Ellas provenían de una familia fuerte económicamente, ellas no eran clasistas ni algo similar, Violet era una amiga que ellas meterías sus manos en el fuego incluso con su forma de ser tan seria.
Pero tenía varias cosas que les hicieron pensar que ella venia de una familia pudiente, ya que solo en aquel estrato social se podían observar ese tipo de comportamientos.
Habían comportamientos que cada clase social tenía que la diferenciaba uno de la otra, un ejemplo era que en los estratos bajos no se daban nunca chistes sobre el dinero, se entendía el porqué no sucedía aquello que en el estrato alto sucedía a menudo.
-Es mi señor, él me da de comer, me trata con suavidad en ocasiones y me hace cosas muy rudas en otras-Hablo Violet mientras que observaba la esquina donde el se había ido hace unos minutos.
A las cosas suaves se refería a que ella se bañaba a su lado, cuando él le limpiaba su cabello el solo sentir sus dedos en su cabello le hacían querer dormir, incluso lo había echo en un par de ocasiones.
Las cosas rudas se trataban de que su señor la entrenaba en el uso de diferentes técnicas marciales y sobre todo en todo lo referente a la energía maldita, ahora ella podía levantar un velo para formar una zona delimitada para un combate.
-¡Q-Q-Que! ¡E-Eso es desvergonzado!-Hablo la muchacha de pelo corto completamente roja.
Kagaho estaba igual que su hermana pero simplemente estaba en silencio pero misteriosamente humo salía de él su cabeza.
"Yametekudasai~"
Aquella imagen de Violet tendida en una cama con los botones de su camisa abiertos pero sin dejar ver nada comprometedor le hicieron ponerse aún más roja.
Violet observó a las dos hermanas.
Eh inclinó su cabeza confundida.
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Fin del capítulo.
Sin mas que decir se despide su amigo y pana del alma Escritor-san.
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