A solas

Bueno, la cena estuvo tranquila, Ashton hacía de nuestro mozo y nos servía la comida y la bebida. No saben las ganas que tengo de tomar mi celular y sacarle muchas fotos para mostrarla a los chicos.

¿Qué estarán haciendo Mike y Cal?

Me pregunto, pero creo que es inútil porque el arcoíris debe estar comiendo pizza o durmiendo y Calum debe estar jugando con su celular. ¡¿Quién podrá ayudarnos?!

Merian hablada de como le fue en la escuela mientras que yo debía escucharla. Dios, que aburrido.

A nadie le importa que hayas echo una operación de matemáticas tu sola. -Le contesto en mis pensamientos rodando los ojos.

Terminamos de comer y Ashton quedó para limpiar los platos sucios.

En ese momento Merian le ordena algo al mini yo, no puede escuchar pero mis brazos la alzan del suelo al estilo nupcial.

Tengo miedo.

-Vamos a la cama bebé. -murmura ella en mi oído. Baja un poco y deja un beso en mi cuello, eso hace que se me erize la piel. Ése es un lugar muy sensible para mí.

Mis piernas se mueven y subimos las escaleras, al llegar al cuarto, yo lo abro rápidamente y luego cierro la puerta con mi pie. En eso, quedo quieto esperando su siguente orden, ya sé lo que vendrá.

Tratemos de ver el lado bueno, Mike dejará de gritar a los cuatro vientos que soy un virgo.

¿Eso es bueno? No me juzguen, hay muchos muchacho de 17 años como yo que nunca de han tenido sexo.

Bajo a Merian con cuidado y mis manos de dirigen a sus hombros descubiertos, su vestido no tiene mangas y deja mucho de su piel expuesta. Piel suave, un poco pálida.

-Te quiero todo para mí por el resto de la vida. -habla sonriendo teniendo sus manos detrás de la espalda. Ella las lleva hacia adelante y veo que tiene una cajita forrada, la abre y en su interior se encuentran dos alianzas.

¡CORRE! ¡ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE!

-De rodillas. -le ordena al muñeco Vudú y una de mis rodillas se cae al suelo dejándome frente a ella, nuestro ojos de conectan por un momento.

Mis manos toman la caja y me coloco yo mismo una de las alianzas, luego tomo la que sobra y se la coloco en el dedo de Merian. Ella se encuentra sonriendo y algunas lágrimas caen de sus ojos.

Realmente está muy emocionada.

Cuando vuelvo a levantarme, una nueva orden hace que quede paralizado -Promete que nunca te alejarás de mí, que me protegerás de los que me quieran hacer daño y que me amarás por siempre. -su voz sale como un murmuro mientras tiene la cabeza agachada. Ahora está llorando de verdad.

Me toma un instante darme cuenta de que no obedecí esa orden -Lo prometo. -digo por mí mismo. Algo está pasando, tal vez el muñeco está perdiendo su poder sobre mí.

Merian levanta la mirada para luego sonreír -Soy una tonta... m-me encuentro llorando en vez de hacer el amor con la persona que amo. -entonces su ánimo cambia y me tumba en la cama.

Yo quedo boca abajo en la cama y la siento subir sobre mi espalda, de nuevo besa mi cuello y eso me hace estremecer. Por desgracia, ella nota esto y la siento sonreír aunque no la puedo ver.

-¿Te gusta Luke? -vuelve a besarme pero esta vez con intenciones de dejar marcar mientras sus manos comienza a desprender los botones de mi camisa.

Esta será una noche larga...