Pequeños detalles 🥰

Holaaa normalmente no hago esto, pero.. este capítulo va dedicado a Lunittavelasquez aunque sea atrasadito, pero igual, feliz cumpleaños, sé que estamos en momentos duros de cuarentena y demás, pero igual, quiero que lo pases de lo mejor y al menos comer pastel o comer lo que te gusta a ti. Espero que este capítulo te guste.

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Los días en el trabajo para el bicolor transcurrieron como si nada, sus compañeros de trabajo laborales al menos ya dejaron de fastidiarlo a excepción por el turco y su jefa libia que cada que podía le llenaba de papeleos que lo tenían corriendo de extremo a extremo de la gran empresa.

El joven bicolor, quien ya se encontraba sumamente cansado, decidió detenerse para tomar un poco de agua, pero por desgracias en ese momento apareció la jefa de su área, la señorita Libia.

Se puede saber porque aun estas acá, te acabo de dejar nuevos documentos de carácter de urgencia y tú, bien gracias aquí tomando agua – dice la mujer completamente molesta, logrando que el menor bajaba la mirada, el joven no necesitaba escuchar para saber que la mujer se encontraba sumamente molesta, solo era necesario ver su cara de pocos amigos.

El menor en ese momento solo dejo su vasito de agua que aún no había tomado y con una reverencia se disculpó para salir corriendo de aquel lugar, rumbo a su cubículo para llevar esos documentos a las respectivas áreas.

Aún sigo diciendo que, contratar a un sordo era completamente innecesario y una pérdida de tiempo – dice seria para luego volver a sus quehaceres.    

El día transcurrió normal, al fin el pequeño bicolor fue a dejar el último documento que le faltaba a la señorita de tesorería, y al llegar ahí vio que la chica está completamente estresada.

El menor dudaba si preguntar o no, pero lo de chismoso nadie se lo quita, por lo que agarro su libreta y comenzó a escribir, mientras cruzaba mentalmente los dedos para que aquella mujer no le contestara mal y le mandara completamente al cuerno.

¿Le pasa algo, señorita? – le escribió el menor en su libreta para luego mostrárselo a la joven

Si, lo que pasa es que.. – la chica guardo silencio recordando que el joven era sordo, por lo que rápidamente fue a la computadora, abrió el Word y comenzó a escribir ahí – lo que pasa es que tengo que dejar estos documentos al señor Rusia para que los revise y firme, son todos los requerimientos que se necesitaran para la reunión con los inversionistas que será pasado mañana, pero tengo que reunirme con el encargado para separar la sala de audiencias justo ahora.

Si gusta yo puedo dejarle los documentos, ya que igual tengo que pasar por la oficina del señor Rusia para llegar a mi despacho – le escribe el menor en su pequeña libre a la cual ya le quedaban muy pocas hojas.

En serio me arias ese favor.. – le escribe en la computadora toda emocionada la joven mujer – muchas gracias, en un papelito escribiré de que es cada documento para que el señor Rusia solo lo lea.. de verdad muchas gracias.

Solo fue cuestión de unos minutos para que la joven señorita de tesorería escribiera todo lo necesita y los colocara con un pequeño clip en la parte delantera de las hojas.

Aquí tienes muchas gracias y ten esto.. – escribe la chica en la computadora para luego pararse y buscar entre sus cosas – ten.. – le dice extendiendo una nueva libreta de apuntes

No es necesario, de verdad señorita.. – escribe rápidamente el menor completamente avergonzado 

Ten.. – le vuelve a decir sin deja de extender aquella libreta, cosa que el bicolor muy avergonzado acepto – y muchas gracias por todo.. – dice la joven tesorera que gira su asiento un poco para poder escribir en la computadora - ya me tengo que ir.. gracias nuevamente – escribe por última vez la chica para poner de pie y agarrar sus cosas para ir a hablar con el encargado de la sala de audiencia.

El bicolor sale de aquella oficina junto con la señorita para luego irse por caminos separados.

El joven peruano camino hacia su despacho, pero antes paso por la oficina del jefe principal, y con algo de miedo toco tres veces la puerta y rezando para que estuviera solo y no reunido con alguien, pero lastimosamente es tricolor estaba platicando con el turco encargado del área de imagen.

Por lo que veo, la palabra ocupado no fueron oídas – dice el turco mientras sonreía de medio lado con esa sonrisa cínica característico de él. 

Perdón.. – dice el bicolor en señas completamente avergonzado cerrando la puerta de una manera rápida y se quedó ahí parado hasta que terminaran su plática.

Solo fue cuestión de veinte minutos, para que el turco saliera de la oficina, pasando por el costado del menor con una sonrisa de medio lado cosa que le hizo estremecer y desviar la mirada hacia otra dirección, al menor no le gustaba para nada esa mirada tan penetrante.

Cuando regreso la vista a la oficina del señor Rusia, este se encontraba parado en la puerta, con un semblante completamente serio.

Pasa.. – le dice en señas, abriendo un poco más la puerta para que el menor ingresara. 

El menor dio un suspiro e ingreso a la oficina cabizbajo, al pensar que su jefe estaba sumamente enojado por su intromisión, mentalmente maldijo una y otra vez de ser como era, de ser un sordo que no puede hacer bien su trabajo.

Perdone, yo no quería interrumpir su reunión con el señor Turquía – dice el menor en señas aun manteniendo el semblante deprimido, pensando en que sería seriamente regañado, por su estupidez.

Descuida, igual esa reunión ya estaba terminando.. – le responde de la misma manera en señas, para luego caminar y sentarse – necesitas algo?

Solo era para entregarle estos documentos de tesorería, la señorita tuvo que ir a hablar con alguien para tener todo listo para su reunión de pasado mañana – camina hacia el escritorio hasta poder estar frente a frente del tricolor quien lo miraba fijamente – aquí tiene.. y yo me retiro y disculpe nuevamente.

¿Tienes tanta prisa? –el ruso le dice de manera rápida antes que el menor girara y se fuera de su oficina – ya que estas acá, puedes ayudarme con unos documentos míos.. pitufina me dijo que eres muy bueno en redacción y muy rápido con los dedos sobre la computadora

Aquello último hizo que el bicolor se ruborice ligeramente, no podía creer que los hermanos hablaran de él fuera del ámbito laboral.

Pero no sé si la señorita Libia tendrá documentos que tenga que llevar con urgencia – dice el menor en señas, la verdad es que no quería ser nuevamente gritado, aunque no escuchaba nada pero la expresión de esa mujer molesta daba miedo.

De eso yo me encargo – le responde en señas para luego agarrar el teléfono y hacer una llamada – Señorita Libia..

Señor Rusia.. – dice la señorita libia un poco ruborizada, muy raras veces por no decir pocas su jefe llamaba a su oficina – en que le puedo ayudar.

Quería informarle que por favor no le asigne deberes al joven Perú – comienza a decir el ruso en modo serio.

Pero señor, hay documentos que deben ser entregados con carácter de urgencia.. – dice la mujer con algo de enojo, como era posible que su jefe de las pocas veces que llame, tenia que ser solo para hablar sobre aquel sordo.

Tienes suficiente personal para designar ese trabajo, necesito secuestrar al joven Perú – responde el tricolor jugando con el cordón del teléfono de la oficina.

Pero señor si necesita algo puedo mandar a un personal más capaci.. – antes de poder terminar la frase, la mujer es interrumpido por el tricolor.

Señorita Libia, no le estoy sugiriendo que me recomiende a alguien, le estoy diciendo que no asigne deberes al joven peruano ni hoy ni mañana.. – dice el ruso en modo serio – y si quiere saber el motivo, es que por estos dos días será mí.. asistente personal.. – dice aquello ultimo girando para ver hacia la ventana mientras mantenía una sonrisa pira de medio lado, para luego colgar la llamada.

¿Paso algo malo? – se animó a preguntar el bicolor utilizando el lenguaje en señas.

No.. pero hoy y mañana te quedaras en mi oficina ayudándome a mí y a Ucrania a terminar y redactar unos documentos – responde en señas mientras revisa esos documentos – te recomiendo que traigas tus cosas porque son varios los documentos que te voy a encargar.

Sí señor.. – responde el menor rápidamente con las manos y sale de la oficina para correr a su pequeño despacho, para entrar con cuidado porque no quería hacer enojar a su jefa de área.

Pero para su grandiosa suerte la mujer no se encontraba por ningún lado, así que ingreso rápidamente como cuy asustado y comenzó a arreglar sus cosas para luego salir como alma que es perseguida por el tunche a la oficina de su jefe quien se sorprendió de lo rápido que había sido aquel chico.

Vaya, eso sí que fue rápido.. – dice el ruso, sacando su laptop de su maletín para encenderla, cambiarla la configuración y entregársela al bicolor – Bien te explicare lo que necesito, es solo armar un power point con todos los avances que se han realizado en la empresa y de los futuros proyectos que se están haciendo, esto lo tendré que exponer pasado mañana, por tal motivo hoy y mañana te quedaras todo el día conmigo y no te preocupes si salimos tarde yo te llevo a casa – le dice en señas haciendo que menor le mire completamente sorprendido.

Pero señor y si lo arruino.. – dice con sus manitas temblando.

No lo creo.. – responde con señas muy seguro – vi el trabajo en power point que le ayudaste a hacer a pitufina, muy bueno y entendible.. toda la información está en las hojas, solo no pongas tanta letra

Está bien.. yo donde me puedo acomodar para poder iniciar – se atreve a decir en señas más calmado.

Mi escritorio es suficientemente grande como para poder recostarte en el, así que siéntate a mi costado.. – le dice con una sonrisa de medio lado mientras movía las manos – tranquilo, no muerdo

Para ese momento el menor estaba completamente ruborizado, no podía mal interpretar lo dicho por su jefe, o si, no, no, no, él ese su jefe y el solo un empleado sordo así que nada de mal pensar las cosas, mente sana como manzana para que pienses en la banana. 

Después de mantener su lucha mental interna, el menor agarro una silla y la coloco en el extremo más alejado de su jefe, no por temor a él, sino para que las personas, que ingresen a la oficina puedan mal interpreta algo.

Las horas pasaban rápidamente y el menor estaba completamente concentrado en las hojas y cuadernos que su jefe le había dado para poder realizar esas diapositivas, el menor realizaba cuadros y estadísticos con la finalidad de poder poner todo lo necesario y sin la necesidad de colocar tanta letra innecesaria. 

Señor.. – dice el menor en señas, pero al ver que el ruso estaba concentrado se paró con la computadora en mano y camino hacia el tricolor, ganando toda su atención y colocar la laptop en frente de él – señor, me puede explicar esto.. la curva estadística me sale decrecientes y debería ser creciente – le dice en señas mientras le muestra la tabla de ingresos de la empresa.

A ver.. – dice el ruso acercándose, y eso hizo que el menor se ponga un poco nervioso – bien déjame explicarte.. – le dice mientras mueve las manos para luego colocar sus manos sobre la fina cintura del menor para atraerlo más hacia el.

El menor estaba ruborizado, estaba muy pero muy cerca a su jefe, relativamente es estaba ligeramente recostado en el escritorio, en frente del ruso quien le explicaba, como debía hacer el gráfico de la mejor manera.

Entiendo.. – responde el menor en señas – por eso no me salía la curva gracias

Estas haciendo un buen trabajo por lo poco que pude ver – le dice moviendo sus manos para luego darle palmadas en el hombro ya que aún estaba muy cerca del uno al otro.

Disculpe señor Rusia vengo informarle que.. – la joven tesorera se detiene en seco al ver a su jefe y al joven novato de esa forma – yo lo siento no quería interrumpir.. – les dice con un ligero rubor en las mejillas y salir corriendo de esa oficina, con un hilo de sangre saliendo de su nariz.

El menor quedo con una expresión de confusión total, al no entender porque la joven salió de ese modo, mientras que el ruso intentaba no soltar una carcajada por lo mal pensados que podían ser algunos.

Las horas pasaban y ya eran las 9 de la noche, el menor se encontraba cansado, después de estar varias horas en frente de la computadora. Incluso le estaba doliendo un poco la cabeza y ante ellos el bicolor le lanza una pequeña bola de papel haciendo que el ruso levanté la mirada sorprendido ante aquello.

Perdón.. ¿pero puedo llevarme las cosas para continuarlo en casa? - le dice utilizando las señas a penas el menor tuvo la completa atención de su jefe.

Lastimosamente con cosas de la empresa y no puedo dejarte solo con ellas.. simple protocolo - le responde en señas, a la vez que se quita los lentes de lectura y se soba el entrecejo.

Entonces, vendré mañana temprano a eso de las 5 de la mañana para poder terminarlo, porque de verdad estoy cansado y me duele.. – detiene el movimiento de sus manos, querida decir trasero, pero prefirió decir otra cosa – la espalda.

Uhmmm hay otra manera para poder avanzar esto, porque a mí también me faltan cosas por terminar – le dice utilizando el lenguaje de señas para luego acomodar sus cosas y guardar la laptop en su maletín – sígueme..

El menor completamente confundido se pone de pie y comienza a estirarse como si fuera un felino haciendo que algunos huesitos de su espalda suenen, para luego ir detrás de su jefe.

Cuando salió de aquello oficina, se dio cuenta que el lugar estaba completamente vacío, al parecer eran los dos únicos seres vivos en esa gran empresa, la cual estaba totalmente oscura lo que provoco que el bicolor se ponga completamente nervioso.

El menor caminar a solos dos pasos del tricolor, pero en ese momento una mano sale de las sombras para sujetar el hombro del joven bicolor, haciéndole tirar sus cosas y saltar del susto, pero gracias a los reflejos rápidos del tricolor que logro atraparlo teniendo ahora cargándolo en sus brazos.

FBI, asustas al niño.. – dice el tricolor aun con el joven bicolor en brazos completamente asustado.

Perdón joven Rusia, pensé que era su hermano Ucrania.. – responde rápidamente el encargado de la seguridad de toda la empresa.

Hahaha y sí que dejaste al niño completamente asustado.. mira como esta.. – menciona el tricolor, mirando al menor que se encontraba con la cara bien enterrada en su pecho – y me sorprende que pudiera saltar tan alto.

Poco a poco y lentamente el menor despego la cara del pecho del más alto para darse cuenta en posición vergonzosa en la que se encontraba y rápidamente se bajó de los brazos de su jefe con la cara completamente roja incluso su franja blanca había desaparecido.  

El tricolor y el FBI se quedaban platicando por un rato sobre la seguridad de la empresa, para luego despedirse con un apretón de manos y jalar al pequeño cuy del brazo que lo siguió a duras penas el ritmo de la caminata, hasta llegar al auto y subir en él.

Perdón por jalarte – comienza a hacerle el lenguaje de señas y al ver que el menor estaba agitado aguanto una risita – y perdón por hacerte correr una maratón

Sé que se quiere reír.. lo puedo ver en sus ojos. – le responde el menor moviendo sus manos y con mirada sumamente seria.

En serio puedes leer las miradas.. – le responde con movimientos rápidos de manos – entonces que te dice mi mirada ahora.. – mirando al menor con ojos entrecerrados, mirada penetrante y con una ligera sonrisa de medio lado.

Bueno ya para ese momento el menor estaba sudando frió, por aquella mirada que estaba clavada en su persona.

Esa mirada me dice que.. ehmm usted tiene hambre.. – responde moviendo las manos mientras baja la mirada, pero se sorprendió al sentir las manos frías del tricolor sujetándole del mentón y alzando su mirada.

Tienes toda la razón – dice con movimientos de labios lentos para que el menor pueda entenderlos para luego soltarlo – hemos estado toda la tarde trabajando así que te invito la cena – le dice usando el lenguaje de señas.

No es necesario, no quiero causarle incomodidad ni nada señor Rusia.. – responde el menor moviendo las manos para luego bajarlas y colocarlas entre las piernas volviendo a bajar la mirada.

El bicolor no dice nada y enciende el auto para salir manejando del estacionamiento de la empresa. El bicolor miraba por la ventana, en verdad le gustaría poder hablar con su jefe sin la necesidad de utilizar sus manos, platicar como antes lo hacía con sus amigos y familiares.

Fue solo cuestión de tiempo para que el ruso estacionara su auto en el estacionamiento de un restaurante llamado Khinkali Point. Un restaurante pequeño pero acogedor, de típica comida rusa.

Señor de verdad no es necesario.. – le dice rápidamente moviendo los dedos, hace años que dejo de salir con personas que no fuera sus familiares por el simple motivo de que no quería incomodar o pasar un mal rato con alguien que ni puede hablar.

Bajas o te bajo cargando.. – le responde de igual modo con sutiles movimientos de manos – ya sé que eres peso pluma.. baja

El menor no tuvo más alternativa que bajar del auto y caminar con algo de miedo, el lugar sí que era hermoso y estaba completamente lleno de gente. El ruso y el peruano caminaron a sus respectivos asientos siendo guiados por la mesera.

Меня зовут Наташа, и я вернусь, чтобы записать ваши запросы (mi nombre es Natasha y regresare para apuntar sus pedidos) – dice la chica dejando la carta en la mesa para luego retirarse.

El menor miro la carta y la verdad es no entendía ni papa y ni camote, eran platillos nuevos para él, por lo que se sentía muy pero muy avergonzado de quedar como un completo tonto.

¿Sabes que pedir? – pregunta el tricolor mientras movía las manos

No.. – responde de la misma manera avergonzado

Pediré por ti.. – le responde para luego levantar la mano, lo que hizo que la señorita llegara con una libreta y un lápiz lista para apuntar los pedidos - приведи меня Pelmeni и Shashlyk и два Shchi (tráeme Pelmeni y Shashlyk y dos Shchi)

сразу сэр (de inmediato señor) – dice la joven retirando la carta de la mesa y dirigiéndose a la cocina.

El menor estaba sorprendido viendo la decoración, estaba completamente maravillado por aquel lugar, nunca había estado en un lugar tan pituquito.

Es un lugar muy acogedor.. – le dice moviendo sus manitas mientras en sus labios se forma una sutil pero genuina sonrisa

Si.. vengo a menudo con mi padre y mi hermano – le dice moviendo las manos suavemente.

Eso es genial y con mi madre íbamos siempre a una feria gastronómica llamada Mistura, era muy grande lleno de platos típicos de mi país tanto de la costa, sierra y selva – responde todo emocionado el menor sin parar de mover su manitas – no sabes lo mucho que esperaba que llegara ese día para ir y.. cocinar – al terminar de mover las manos los ojos del bicolor se iluminaron haciendo que el tricolor se quedara maravillado.

Sí, me di cuenta que te gusta cocina recuerdo que te apoderaste de mi cocina.. – le dice moviendo sus manos mientras le sonríe de medio lado.

Perdón por eso.. – responde el menor con una pequeña sonrisa a la vez que sus mejillas se pintaban de un rojo carmesí, giro el rostro ligeramente para evitar mirar al tricolor, pero al mirar hacia las personas veía como algunos les miraba con extrañeza.

Aquello hizo que la mirada del menor se volviera a entristecer y se encogiera en su asiente, intentando con todas sus fuerzas evitar llorar.

¿Qué te pasa?, hace un momento estabas feliz y ahora pareciera que tus baterías se hubieran apagado – le dice moviendo sus manos al notar como ese semblante del menor se entristecía

Perdón.. – le responde mientras sus manos se movían ya no con tanta emoción – las personas nos miran y no quiero que usted pase vergüenza por estar moviendo sus manos para poder comunicarse con un sordo como yo.. y no hablando como una persona normal – le responde para bajar las manos y ocultarlas entres sus piernas.

El menor suspiro, su auto estima estaba hecho trizas desde que perdió la audición, desde que se volvió una carga y una vergüenza para su amigos y novio de aquel tiempo. Se sentía mal de ser como era, de gritar en silencia sin que nadie le pueda escuchar.

De verdad crees que me importa si las personas me miran por mover las manos para poder comunicarme contigo.. – le dice el tricolor moviendo las manos ganando la atención del bicolor que se encontraba deprimido – te puedo confesar una cosa, he salido con personas "normales" y la verdad me he sentido incómodo y aburrido muchas veces que me daban ganas de salir de ese lugar lo más rápido posible, pero contigo es diferente, a pesar que no puedes hablar puedo decirte que no me siento aburrido cuando platicamos en señas, e incluso me atrevería a decir que tú conoces más de mí que otras muchas personas que conozco de años.. – le dice notando que el bicolor se encontraba sumamente sorprendió y con la boca abierta – y quiero que esto te quede bien claro en tu cabeza, tu no me causas vergüenza entendiste.

La mirada del bicolor se ilumino nuevamente al comprender cada uno de esos movimientos de manos, de verdad aun existían personas que no le consideraban un bicho raro, y solo de pensar que esa persona era su jefe le causaba admiración.

Cuando el menor se propuso a decirle algo con el lenguaje de señas, fue interrumpido por la camarera, quien coloco los pedidos correspondientes en la mesa, con una gran sonrisa.

приятного аппетита (buen provecho) – dice la joven para luego retirarse.

Los jóvenes cenaron en silencio, pero no era un silencio incomodo, sino una agradable, por lo menor ahora sabio que aquel tricolor que tenía enfrente no se avergonzaba de él. Cuando terminaron de cenar fue el ruso quien pago la cuenta a pesar que el bicolor se negaba.

Es mejor irnos ya son las 23:00 horas.. – le responde en señas cosa que sorprende al menor.

Mandare un mensaje a mi madre para que no se preocupe.. – le dice el joven bicolor para luego con su mano derecha mandar un mensaje de texto a su madre – lo que pasa es que mi madre aun no llega de viaje y no quiero que se preocupe por mí – le dice cuando termino de mandar el mensaje.

Luego de eso ambos regresaron al estacionamiento para poder seguir su destino, pero fue el menor quien con algo de miedo sujeto la tela de la camisa del ruso para llamar su atención, cosa que logro.

Entonces.. yo iré mañana temprano a la empresa para continuar con las diapositivas.. – le dice el joven bicolor moviendo las manitas.

O podemos avanzar las cosas sea en tu casa o en la mía – responde el bicolor para luego abrir la puerta del asiento del copiloto.

Que.. lo siento pero mi madre me mata si se entera que alguien entro a la casa.. – dice completamente sorprendido para luego sentarse en el asiento del copiloto.

Entonces será la mía.. – responde rápidamente para cerrar la puerta he ir a su respectivo lugar.

Pero, pero.. – intentó decirle, pero el mayor le interrumpió

Escríbela a tu madre que te quedaras en casa de un compañero de trabajo para terminar unos trabajos de la oficina que tu jefe el ogro te ha encargado.. – dice para luego encender el motor del auto.

Que.. yo.. pero.. no tengo ropa y tampoco pijama – intenta persuadir el menor para que su jefe olvidara esa idea.

Hahahaah.. claro que tienes pijama, recuerda la que compramos en el centro comercial – le responde con una sonrisa pícara al recordar al menor con ese pijama tan, provocativa.

Yo no me pondré esa pijama.. no, no y no.. – dice el menor con mucho énfasis en el NO

Luego de un buen rato, y ya en el interior del departamento del tricolor, se podía ver a un peruano utilizando el mismo pijama de aquella vez, el menor estaba sumamente avergonzado, mientras que el ruso se le quedaba mirando de pies a cabeza de una manera disimulada, claro hasta que su celular comenzó a sonar.

Hola dime pitufina.. – el ruso contesta su teléfono aun manteniendo una sonrisa de victoria por el pijama.

Ponte con patas donde estas, padre está preguntando por ti – le dice su hermanito con un ligero puchero – oye perdón por no ir a la empresa, pero me dejaron muchas tareas en la universidad, mañana prometo ir y ayudarte en esas diapositivas.

No te preocupes hermanito tengo la ayuda que necesito.. – responde el tricolor sin borrar esa sonrisita mientras veía al bicolor de reojo el cual aún está algo enfadado por el pijama.

Y ¿quién te está ayudándo? – pregunto su hermano menor.

El mismo que te ayudo a ti para tu trabajo de comprensión de un libro que te dejaron para leer toda una semana – el ruso le responde de manera rápida, la verdad ya quería colgarle la llamada.

Espera que, estas con... PERÚ – grita el menor asustando a su hermano, ya que no sabía si el grito era de sorpresa o de emoción.

Respeta mi oído pitufina.. cada día más loca – le dice ya un poco enojado, de verdad casi lo deja sordo.

Lo siento, es que.. ahhh hermano recuerda que aún es un jovencito.. es menor que yo por un año – le dice el ucraniano con una sonrisita y un tonito picaro.

Sabes creo que hay interferencia, pierdo la señal.. dile al viejo que no se preocupe que esto en el departamento.. adiós – cuelga la llamada y guarda su teléfono celular para luego dar un suspiro, que cree su hermano que él va hacer al joven peruano.

¿Pasa algo?, ¿todo bien? – pregunta el bicolor en señas.

Si todo bien, vamos a tratar de avanzar algo y a descansar – le responde el bicolor, para luego colocarse sus lentes de lectura.

Tanto el bicolor como el peruano estaban recostados en la cama, cada uno concentrado en su respectivo trabajo, hasta que el sueño se apoderó del mas bajito, el mayor al percatarse de eso, guardo toda la información y apago la laptop para recostar al joven en la cama y que pudiera descansar mejor.

El bicolor se queda mirando un rato al joven peruano, se veía sumamente tierno, con su mano derecha delineo su mejilla para luego pasarla por el cuello, deslizarlo por encima del pijama por su hombro, debido a que el menor se encontraba recostado de costado, hasta llegar a la curva de su cadera, para jalar un poco más hasta sus piernas, las cuales eran suaves al tacto.

El tricolor salió rápidamente de su transe al sentir que el menor se movía un poco, pero solo para acomodarse mejor en la cama.

Descansa.. – dice en el ruso en un susurro, había comprendido dos cosas en ese momento, primero: no veía al menor de la misma manera que ve a su hermanito y la segunda: que era ese nuevo sentimiento que estaba experimentando él, un adulto de 22 años hacia un jovencito de 17 años, acaso eso estaba permitido.

El tricolor dejo escapar un suspiro, pero tendría tiempo para pensar mejor las cosas, ahora debe concentrarse en el trabajo ya que tenía una reunión sumamente importante, apago la luz de la lamparita de noche y se dispuso también a descansar, para así despertar a primera hora y poder leer algo más de los documentos, lo último que su vista pudo ver era una sonrisa que el menor dibujo en sus labios mientras dormir, al parecer estaba teniendo un sueño agradable, acaricio su mejilla por última vez para así cerrar los ojos y dormir plácidamente.

Pero como era de esperarse, la ley de la atracción esa, en donde las emociones que las personas posee de manera consciente o inconsciente, provocan consecuencias afines a lo que se desea, ambos cuerpos como dos imanes se atrajeron mutuamente terminando en un abrazo que ambos correspondieron mutuamente.

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Taran nuevo capítulo, perdón por demorar XD es que tuvo algunos bloqueos en ciertas partes de este capítulo y como dije al inicio de este libro, ejmm ejmm *hace sonido te tambores* FELIZ CUMPLEAÑOS LUNITTA, aunque sea atrasadito nu me mates por favor sabes que se te quiere.. y por favor guardarme pastel òwó o lo que sea que comieras XDU 

Espero que este capítulo sea del agrado de cada uno de ustedes y me dicen que tal quedo por favor, no sean malitos XD

Bueno como siempre, perdón si se me escapa alguna falta de ortografía, pero las malvadas siempre se escapan por más que intente que no salgan siempre se me escapan, me perdona ¿sí?

Como siempre los quiero mucho, respeten la cuarentena, un abrazo a la distancia para cada uno de ustedes. SE LOS QUIERE n.n

Nos estamos leyendo, nos vemos

XIAU

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