-¿curso de preparación?

-sí, mis padres creen que me servirá, y puede que si, pero eso no me quita la flojera de tener que ir. -le doy una mordida a mi sándwich. -les dije que aún no sé que voy a estudiar, y dijeron que independientemente de eso, necesito prepararme.

En junio los alumnos de tercero de preparatoria realizaremos el examen para la terrible universidad, o más bien terribles universidades, antes cada universidad tenía su propio examen, aunque eso era bastante estresante para competir con fechas, tráfico y demás, por lo que hace unos años dió la orden para que todo fuera un solo examen, dependiendo de la carrera que quieras, tu promedio y obviamente tu nivel socio económico te desbloquean escuelas, tanto privadas que te pueden dar una beca de acuerdo a calificaciones y tu puntaje en el examen como solo públicas de acuerdo a tu calificación, lo cual pone otro tipo de presión aunque quitaron otra ¿Fácil, no?

Debido a lo "fácil" que es el examen; algunas personas y escuelas cobran por dar clases los sabados para ayudar a estudiar a los chicos que van a presentarlo. Mucha gente llega a pagar miles por uno de estos cursos y aún así se quedan en esas universidades comunitarias en el rancho más alejado y peligroso que nadie quiere, o se quedan sin opciones.

Por suerte, para la billetera de mamá y papá; una conocida que es clienta de mamá les recomendó un curso, según parece, muy bueno con una vecina suya, que es una maestra retirada. Cobra ciento veinte por clase y nos queda cerca de casa. Es una buena oferta, además, el horario es de once treinta de la mañana a dos treinta de la tarde, lo cual me deja tiempo para mi apretado horario de no hacer nada. Incluye exámenes de simulación y vemos todos los temas.

Lo malo es que no se que estudiar, al menos Jason quiere ser abogado, como su padre.

-¿y cuando empiezas a asistir?

-a partir de este sábado

-vaya, quisiera ir contigo pero mamá ya me inscribió a otro, lo peor es que es de ocho a dos. -frunce el ceño un poco, se me hace algo gracioso, no lo suficiente para que me ria.

-que mal.

-¡escuchen todos! -habla Cristal desde una de las jardineras de bambu, trae un cuaderno en las manos, creo que ya se lo que sucede.

-¿quieres ir a ver? Mucha gente se amontona al lado de ella. -dice Jason.

-ve tú si quieres, a mí no me interesa

-oh vamos, por favor, tengo mucha curiosidad.- me puso sus tontos ojos de cachorro, creo que ahora debo ceder.

-ash, de acuerdo.- nos levantamos y fuimos con el resto de la escuela, alrededor de Cristal.

-Veran.-dice ella.- ya tengo los resultados de la encuesta de este mes.-lo sabía, se trata de esa tonta encuesta del chico guapo de la escuela ¿Por qué volverla hacer? Siempre sabemos quien va a ganar.- y por primera ves, en estos tres años: hay un empate.- (¡!) se empiezan a escuchar murmullos por todos lados, Jason me pregunta algo, aunque no le entendí.- Este empate es entre el, usualmente, siempre ganador: Derek Stabolly de la clase 3°B.-obvio.- y Jason Masner de la misma clase.

Yo, simplemente no supe que reaccionar.

Jason, estaba bastante confundido, y sonrosado.

Los chicos, bueno, había uno cuyo nombre no recordaba pero estaba enojado porque él no fue el empate.

Las chicas, estaban cuestionando quien era el tal Jason, y algunos apuntaron al gigante a lado mío. Sabía que él empezaba a ser popular, solo no me imaginaba tanto.

¿Qué hago? ¿me asombro? ¿me rio? ¿me alegro? ¡¿Qué demonios se supone que haga?! Mejor solo lo felicito y ya.

-genial amigo.

-gracias, supongo. -no se oía muy agradecido, pero tenía las mejillas rojas y se veía tierno.

-sip, ahora está confirmado que las chicas babean por ti. -le doy una palmada en la espalda. -aunque te ganaste el odio de todos los hombres, en especial de Dereck.

-¿a qué te refieres?

-mira disimuladamente a donde él está.-con cuidado giramos la vista a donde estaba él. Dereck miraba a Jason de una forma espeluznante y nada comoda. Rapidamente apartamos los ojos de ahí.

-¿seguira enojado por lo del otro dia?

-nooo ¿Cómo crees?

-agradezco el sarcasmo. Ya en serio, el chico más peligroso de la escuela me odia, no quiero sonar gallina pero... temo por mi rostro.

-¿Por qué? Derek no es el tipo de bully que da golpes, él es más como... un bromista pesado.

-ah, entonces ¿él me hara bromas?

-si no te las hizo antes por juntarte conmigo, de seguro te la hara ahora, así que si encuentras una lagartija u otra cosa en tu mochila o casillero no te sorprendas ¿bien?

-bien. -dijo más tranquilo.

"si... es o le dije pero..."

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Jueves en mi casa.

Estaba jugando Mario Bros, papá fue de compras y mamá trataba de vender una casa. Disfrutaba de mi soledad cuando llamaron al timbre, como mamá y papá no estaban tuve que salir de mi cuarto y abrir yo. Cuando lo hice Jason estaba ahí, tenía la cara muy golpeada, aunque nada más.

-bromista, eh.- ups

-No pensé que haría algo como esto, pasa, te voy a curar las heridas. -me hice a un lado para dejarlo pasar. - siéntate ahí, voy por algo.

Fuí al cuarto de mis padres y saque de un pequeño botiquín una botella y gasas, luego fui a la cocina donde puse hielo en una bolsa de plastico limpia, le hice un nudo para que este no se saliera. Regrese a la sala y le di la bolsa a Jason que se la coloco en un chipote del lado izquierdo de la frente, puse las cosas en la mesa: tome una gasa y la moje con alcohol y con ella le empeze a quitar la sangre de la mejilla derecha. Por alguna razón él se empezó a reir un poco.

-¿Qué es tan gracioso?-dije mientras tiraba la gasa al bote y mojaba otra.

-lo dicho, serías un buen padre.- se que está bromando pero no me parece gracioso.

-lo golpes debieron dejarte más idiota de lo que ya estabas.

-¡oye!

-quedate quieto, termine de desinfectar las heridas, luego le puse una curita. -listo, lo bueno es que no ocupaba puntadas.

-gracias. -me entregó la bolsa con hielo, o mejor dicho, la bolsa de agua fría. Fui a tirar el agua al lavabo, tire la bolsa y regrese a la sala. Me quede en silencio un rato, no era necesario preguntar que había pasado, sus heridas me lo decían todo. -ese idiota. Juro que si no hubiera traído compañía yo lo...

-ya calmate, no hay nada que puedas hacer. Y por favor no digas una estupidez como que te vengaras porque tú y yo sabemos que no, eres muy buena persona para hacer eso.-se queda callado.- ¿ves? Vamos, juguemos videojuegos, mientras pensamos como explicarles esto a tus padres.-le sonreí y el me devolvió la sonrisa.

Pero muy en el fondo yo también estaba bastante enfadado con ese tipio ¿qué se cree? ¿Que por ser listo y guapo es mejor que nosotros? No es más que un cretino.

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1 mes despues.

Sabado.

Mamá me dejó en el curso un poco tarde, ellos ya habían empezado la clase, otra vez. Es la cuarta clase y es la segunda vez que llego tarde. Oigan es sábado, y lo que uno quiere hacer los sabados es dormir hasta el medio dia, ni modo, así tendre que estar por los próximos cuatro meses que faltan para el examen. La maestra es buena y explica bien, siempre nos repite que estudiemos y si lo hago... una o dos veces a la semana, debería ser diario pero no es mi costumbre estudiar tanto.

Somos en total veinte estudiantes, a uno de ellos lo conozco desde primaria, casi no nos hablabamos en ese entonces, ni la secundaria y no lo hacemos ahora, cinco de ellos estudian conmigo en la prepa, ninguno de ellos va en mi grupo pero si hablo con uno, un poco, él se acercó primero. Su nombre es Deymon, va en el grupo D, calificaciones malas, sin embargo (con mucha suerte) obtendrá su certificado. Es gracioso, aunque... muy incomodo, he notado que se la pasa mirándome es... extraño, no hablo tanto con él en la escuela, pero, necesitaba alguien con quién socializar para no aburrirme. Cosa que no necesitaba antes, la compañía de Jason me ha hecho mal.

-y así se saca el volumen del cono. -termina de explicar la maestra, justo a tiempo; sonó su celular, el primer toque indica que tenemos diez minutos de descanso, podemos salir a la tienda o quedarnos adentro, usualmente Deymon y yo salimos a la tienda.

-oye Alexis, necesito hablar contigo.

-claro, dime.

-es que... es en privado. -voltea a todos lados para fijarse de que alguien no nos vea. Pero nadie lo hace porque siempre hablamos.

-de aaacuerdo. -esto no es para naaaada extraño.

Fuimos un poco más alejados que a la tienda, creo que cuando dijo "privado" no jugaba.

-listo, aquí está bien.

-¿Qué sucede? ¿Qué querías decirme?

-bueno... yo...-comienzo a sentir un hormigueo por mi mano, ¡él está intentando tomarla!

-¿Qué estás...?

-Alexis Evans... tú me gustas.