Nos miraron al escuchar como la mano de Sparta golpeó mi mejilla, sabía que Timba no haría nada, después de todo el es amigo de ambos, las demás personas sólo se quedaron a ver. Ligeras lagrimas pasaron por mis mejillas al sentir aquella bofetada, las lagrimas por parte de Sparta tampoco se hicieron de esperar, Víctor trato de hacer que Sparta se volviera a sentar, sólo que no sabía que sería inútil.

— ¿¡te das cuenta que por tu culpa Raptor se fue hasta Estados Unidos?! ¡por tu culpa ya no pude decirle lo mucho que me gustaba! — reclamó entre lagrimas, todos guardaron silencio, incluso los mismos trabajadores ya que no era una pelea a golpes o algo que logrará pasar de aquella reciente bofetada.

— no fue mi culpa... — respondi bajando la mirada, mi voz ahora estaba cortada y hacia el mayor esfuerzo por no romper en llanto, no sabía como sentirme con varias personas mirando y escuchando.

— ¿¡entonces por que carajos se fue?! ¡fuiste el único que hablo con el esos últimos días y su madre le dijo a mis padres que me dejará de juntar contigo por ser una mala influencia! — contó cerrando sus puños y al igual que yo, tratando de no romper en llanto.

— ¡me buscaba ayuda para mi anorexia y posible depresión y bipolaridad!

Aprovechando el estar en la esquina me levanté tapando mi cara con mis manos, no pensé en aquel momento lo que había dicho, hasta no haber terminado de decirle fue cuando me di cuenta que no debí gritarlo. La gente comenzó a hablar, eran susurros está vez, quite mis manos de mi cara y comencé a correr al escuchar como pagaron todo para seguirme, al menos Sparta.

Avance el paso, sólo escuche un espera de Sparta, fue cuando comencé a correr lo más rápido que podía.

Caí al suelo al pasar frente un callejón, Flex quien salía de ahí sólo se tropezó, me vio y de inmediato me ayudo a levantarme, no se había quejado ya que hagan lo que le hagan el jamás se quejará, al contrario mío que ya hubiera insultado a la persona con la que choque, pero al tratarse de Flex lo último que quiero es llevarme mal con el.

— ¿Qué paso Darling? — pregunto abrazandome en cuanto me levanté, aún tenía lagrimas pasando lentamente por mis mejillas, sólo pude corresponderle.

— Mike... perdón por lo del restaurante... no sabía que fue por eso pero es que... — soltó un suspiro pesado bajando la mirada — creo que prefiero que Raptor se fuera a otra ciudad, al cabo el sigue con vida y tu puedes perderla...

— oye creo que es mejor que te vallas. — se puso Flex frente Sparta, parecía confundido pero era más que claro que corría de Sparta, y Flex lo iba a alejar.

— déjame hablar con el, me urge. — pidió mientras las lagrimas volvían a pasar con rapidez.

— me quedaré con el, puedes retirarte.

Me tomo de los hombros y comenzamos a caminar, ya se miraba oscuro, parecía bastante tarde cuando realmente era temprano. Nos acercamos a un parque iluminado, nos sentamos bajo un árbol y recargue mi cabeza en sus piernas aún con pequeñas lágrimas por mis mejillas.

— ¿Qué paso allá darling? — pregunto acariciando mi cabello, lo había terminado, lagrimas siguieron cayendo al pensar en eso.

¿¡Por que es así?! Me dolía ver mas como me seguía sonriendo después de que sus intentos en lograr algo conmigo se habían caído, se que sólo somos amigos ahora, pero todo sigue siendo como cuando fuimos pareja, el apodo de cariño seguía siendo para mi de su parte. Me seguía tratando diferente al resto, trataba de pensar en cualquier otra cosa pero seguía acariciando mi cabello.

— oye ¿estas bien? — pregunto un chico de lentes, detrás iban otros chicos, me tomo de las manos y me levanto.

Estaba confundido ¿Cómo se pudo acercar a mi? Tome la mano de Flex antes de que los otros dos nos cerrarán cualquier forma de vernos o tocarnos, el chico de cabello morado tomaba mi mano con delicadeza, mis manos las sentía frías mientras las de el estaban calientes.

— ah... ¿quienes son? — pregunté algo incómodo por su forma de llegar como si nada sin siquiera conocerlos.

— dime Mayo, ellos dos son mis amigos Tiko y Manu. — los presentó a los tres con una pequeña sonrisa. Me sentía un poco seguro entre la demás oscuridad del parque mientras estaba acompañado, supongo que los peligros serán menores estando cinco personas juntas.

— ¿por qué llorabas? — se acercó el chico más bajo tomándome de los hombros mientras el de cabello verde hacia que Flex y yo nos soltaramos.

— sólo eran unas tonterías, nada grave o de gran importancia. — respondi limpiando las lagrimas que aún tenía.

— nosotros vamos a hacer que estas lagrimas se conviertan en risas, y tranquilo que no somos prostitutas, si no personas psicópatas y locas en busca del sufrimiento de las personas. — dijo Tiko tomando más fuerte mis hombros.

— pero antes ¿cómo te llamas? — pregunto Mayo acercándose a mi.

— se llama Mike y con permiso, espero puedan soltar a mi novio. — dijo molesto empujando a los chicos para que me soltaran y me puso de su lado ¿se habrá olvidado que no somos pareja?

— oh tranquilo, sólo vamos a caminar un rato.

Al escuchar eso Tiko y Manu se miraron entre si al escuchar a Flex mientras Mayo seguía sonriendo tiernamente. Los dos amigos de Mayo tomaron a Flex de los brazos y comenzamos a caminar mientras ellos lo abrazaban para que de esa forma no se me acercará, aunque no creo que sea malo, seguro son como era Raptor conmigo.

Mayo me tomaba de la mano, nuestras manos de un momento a otro se entrelazaron, hacia bromas haciendo como que me acostaria con Mayo y nos íbamos a casar.

— ¿Y si jugamos a casarlos? — pregunto Manu; Mayo y Tiko de inmediato sonrieron, Flex no decía nada pero se veía que no estaba para nada de acuerdo con aquella sugerencia, a mi me gustaba la idea, después de todo sólo sería un juego.

— ¡yo no seré la mujer! — grite sonriendo antes de que dijeran algo más demostrando que estaba de acuerdo.

— yo seré el padre, Mike el novio y Mayo la novia. Tiko y el otro hum... pues ¿sólo se quedarán a ver o quieren otro papel?

— ¿puedo ser el que interrumpe? — pregunto Flex sonriendo.

— no queremos que interrumpan. — dijo Tiko de una manera algo sería.

Al final si comenzamos a jugar, teníamos unos anillos hechos por Tiko con ramas, ambos reíamos un poco por las ocurrencias de Tiko y Manu, Flex sólo estaba callado mirando todo. Sabía que no estaba cómodo, quería acabar con esto de inmediato ya que no quería incomodar a nadie y menos a Flex después de todo lo que a hecho por mi.

— ¡quiero el divorcio y repartición de bienes! Me quedo con tu dinero y tu con mi hijo. — exclame en forma de juego, de inmediato las sonrisas de Manu y Tiko se borraron mientras Mayo entendía el juego.

— ¡pero no me puedes dejar! ¿que voy a hacer sin ti? ¡si yo te amo!

— perdón, pero jamás te quise, desde un momento tuve un amante, sólo te quería por tu dinero. — respondi tomando la mano de Flex.

— ¡no les voy a conceder el divorcio! — grito Manu al encontrar una forma de continuar el juego.

— como sea, yo me voy.

Flex se colgó su mochila y se fue acelerando el paso, nadie fue por el, sólo se movieron de donde estaban cuando lo iba a seguir, me tomaron justo como habían tomado a Flex antes para así mantenerme con ellos; Mayo me abrazo por la espalda y recargo su cabeza en mi.

— tranquilo mi amor, vas a ver que luego volverá. — dijo Mayo sonriendo.

— ese zorro no hará falta, quédate con Mayo que ya comencé a shippear a ambos. — comentó Tiko sonriendo, tenía la opción de irme o quedarme pero los acabo de conocer y ya es bastante tarde.

— oigan no es por nada pero me tengo que ir. ¿Me pasan sus números? — tampoco quería verme tan grosero, me pasaron sus números y se quedaron a ver como los registraba.

— adiós mi vida, ve con cuidado. — se despidió Mayo con una sonrisa, esto ya no parecía un juego, quería llorar por lo que había pasado, después de todo ya tenía dos problemas encima.

Me fui corriendo para buscar a Flex, seguro ellos tomaron otro camino ya que no me detuve a ver atrás. Escuche como alguien rompía varias ramas y gritaba molesto, me acerqué, era Flex, aunque ya era de noche me sorprendía ver como no le temía a la oscuridad. Me acerqué un poco, el estaba molesto, tenía miedo que me lanzará una de las ramas.

— ¿Flex?... ¿por qué dijiste que éramos pareja?

— ¿¡encima preguntas?! ¡idiota yo aún te amo! — reclamó entre lagrimas lanzando ramas a un árbol rompiéndose cada una de las ramas que lanzaba — por favor... sólo seamos pareja de nuevo, no soporto la idea de que tendré que verte en los brazos de alguien más...

Me mantuve en silencio escuchando los sollozos de Flex, cubrió su cara con sus manos. Cerré mis puños mirándolo, tenía miedo de decir algo y que después me terminará odiando, finalmente comencé a llorar por todo lo que se me había juntado, los chicos iban a ir detrás de mi al confesar sin querer sobre mi anorexia, aquellos chicos excluyeron a una de las personas que más quiero, si lo intentaba ellos cortaban la soga nuevamente para evitar que llegará a el, y nuevamente Flex me recordó a Ela, está vez no de una forma agradable.

— ¿estamos volviendo a lo mismo? — pregunté con lagrimas en mis mejillas, el sólo me miro, parecía no entender — digo, lo que menos quiero es hacerte daño pero...

— por favor sólo te pido esto...

— ¡no está bien! — grite interrumpiendo a Flex quien sólo dio unos pasos atrás para escucharme y tratar de entenderme — ¡no puedo estar con nadie por que terminó cayendo en el mismo pozo, conmigo no te espera nada bueno!

— darling eso no importa, quédate conmigo.

— ¿¡para que te haga el mismo daño que a ella?! Gracias por todo pero no puedo... es más un castigo.

Comencé a correr, el no me seguiría ya que conoce que me arrepiento de las cosas pero ¿Realmente estoy haciendo algo bien?

Mi garganta ya me dolía, las veces que eh vomitado no ayudan, contener el llanto tampoco, pero no podía quejarme. Mi cabeza no tardo en mandar un fuerte dolor, seguí corriendo sin importar que, al llegar a mi casa sólo me limpie las lagrimas y pase como si nada, nadie de mi familia puede verme llorar por mi miedo a escuchar la misma palabra salir de la boca de mi madre... ridículo.

Al subir Willy se acercó a mi, como una forma de consolarme parecía, tape mi boca con mis manos tratando de no gritar por el dolor de mi cabeza y garganta, toda la noche Willy estuvo conmigo y yo sin poder dormir por la misma voz...