-Te invito un ramen al final del día, te has esforzado mucho estos días -el pequeño abrió sus ojos con sorpresa, asintió con una sonrisa tímida, rascó su nuca con vergüenza al recordar algo -gracias Itachi, pero no quiero meterte en problemas -el mayor negó dándole un poke en su frente -no te preocupes pequeño -el rubio mordió sus labios, acarició el lugar del cariño, no quería meter en problemas a su sensei -¿puedo ir con un henge?, me sentiría más tranquilo, no quiero que pases vergüenzas por mi culpa -Itachi respiró hondo, asintió -como te sientas más cómodo pequeño -el rubio le mostró un sonrisa sincera, el mayor respondió a su sonrisa con otra un poco ligera, ambos se perdieron un poco en sus miradas.

La mano del Itachi se acercó a su rostro lentamente, recorrió su mejilla con una ligera caricia con el dorso de ésta -¿tuviste más misiones? -el pequeño negó -tuve tres sencillas con otros equipos, espero la siguiente semana mejore -el mayor lo veía con preocupación -no quiero que caigas de nuevo en esas acciones pequeño, sabes que puedes confiar en mi ¿verdad? -el rubio se sonrojó, bajó el rostro avergonzado -gracias Itachi, gracias por ser tan bueno -el azabache seguía con su caricia, lo veía con cuidado, se le hacía muy bonito el pequeño, su dedo pulgar acarició sus labios. Naruto se dejó hacer, nunca había recibido caricias más que las de su jiji, las manos del Uchiha eran cálidas, lo hacía sentir bien, querido, sus grandes gemas lo veían con curiosidad y cariño, a Itachi esa vista le pareció adorable, se acercó invadiendo su espacio un poco atraído por sus labios. Al final se detuvo, besó su mejilla con cariño -vamos a seguir entrenando -el rubio se puso en exceso rojo, asintió, comenzó a seguir instrucciones. El mayor lo veía con cuidado un poco perdido, estaba por besarlo en los labios, pero al final se arrepintió no queriendo incomodarlo, mordió sus labios observándolo sin perderlo de vista.

....

Por la noche ambos caminaban por la aldea, Naruto usaba un henge un poco incómodo por el aglomeramiento de gente -si te sientes incómodo podemos comprar para llevar, ¿te parece? -el rubio asintió -sí, mejor, lo lamento -el mayor lo vio con seriedad -no te disculpes, los que deberían disculparse son ellos, vayamos -el azabache compró dos platos de ramen, caminaron hacia el cuarto del rubio. Al llegar ambos se sentaron, comenzaron a cenar -no tengo luz, ¿te incomodan las velas? -Itachi negó con una suave sonrisa -no me incomoda pequeño, es un ambiente diferente, me agrada ¿seguirás construyendo? -el rubio sonrió, asintió -lo haré, ahorraré un poco, quiero tener una casa, tal vez sólo agregar un baño y una cocina, no ocupo más, ¿ves? -Naruto apuntó su lugar, Itachi sonrió ligero -te quedará muy bien, escogiste un lugar bonito, hay que ver cómo escriturar tu propiedad -el rubio levantó un puchero -¿es de la aldea no?, no tiene un dueño particular, está en el bosque, no estorbo a nadie -el mayor negó -pueden quitarte tu construcción, no te preocupes, te ayudaré, la aldea te debe mucho -el mayor sonrió ligero, el pequeño se sonrojó nuevamente, asintió lentamente acomodando un mechón de cabello tras su oído, Itachi lo veía con cuidado.

….

-Equipo siete, irán a detener a un grupo de ninjas perdidos que han estado asaltando rumbo a la aldea de los arrozales. Sasuke debes tener cuidado, Orochimaru aún se encuentra suelto, está interesado en ti, su territorio está cerca -el azabache asintió -Kakashi, ¿llevas el sello? -el peliplata lo saco, el rubio alcanzó a verlo con el rabillo del ojo, frunció el ceño con molestia, era un sello de supresión de chakra para él por si se salía de control Kyubi, respiró hondo disimuladamente, su nivel de fuinjutsu según los libros de la biblioteca era nivel seis a dos meses de haber iniciado su entrenamiento, no podía hacer ese sellos de chakra o ese nivel de sellos, pero podía entenderlos -vayan a alistarse, los quiero en la entrada en media hora.

Naruto salió por la puerta antes que todos, corrió hacia su hogar. Itachi lo vio salir con velocidad, algo en su rostro no le agradó, mientras corría por los techos el pequeño, el Uchiha cayó a su lado deteniéndolo -¿sucedió algo pequeño? -el rubio asintió con un pequeño puchero -¿sabías que kakashi-sensei tiene un sello hecho para suprimir mi chakra si me salgo de control? -Itachi lo vio con su mirada estoica -no lo sabía pequeño, ignóralos, no debes sentirte mal, ellos sólo quieren evitar que Kyubi se liberé -Naruto levantó el rostro con sus ojos brillando, mordió su labio con miedo -¿tu también piensas... tu también piensas que puedo perder el control? -Itachi le dio un poke en su frente suavemente sonrojando al menor -pienso que te estamos entrenando para hacerte fuerte, para evitar que pierdas el control -el rubio entendió, sonrió ligero.

-Debes tener cuidado, no muestres aún tus habilidades, si descubren que estás mejorando, investigarán y no podremos continuar -Naruto abrió sus ojos con miedo, asintió veloz -gracias Itachi -la mano del azabache viajó al menton del pequeño acariciando con cariño su rostro, se acercó peligrosamente al Uzumaki besando su mejilla con cariño, sonrió ligero, desapareció del lugar con velocidad. Naruto lo vio irse, acarició el lugar donde lo besó algo perdido, un gran suspiro salió de sus labios, se dio la vuelta, salió hacia su casa por lo que necesitaba para la misión.

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Corría con velocidad con el equipo siete a los límites de las tierras de los arrozales -Naruto, has estado un poco perdido en la aldea, ¿sucede algo? -el pequeño hizo nota mental para mandar clones a pasearse por la aldea y cerca de su antiguo departamento o no tardarían en descubrirlo, era el jinchuriki, seguramente es normal espiarlo pensaba con cuidado -nada kakashi-sensei, simplemente no le agrado mucho a los aldeanos, he andado en los campos de entrenamiento -el peliplata sonrió tras su libro más tranquilo, aunque lo primero le molestó un poco, pero si el rubio no decía nada, tal vez estaba bien -bien-

Al llegar a su misión le tocó generar varios clones con henges para distraer al enemigo, mientras la pelirrosa derrumbaba el suelo de un golpe, Sasuke y Kakashi derribaban a los shinobis perdidos, no era nada diferente a lo que siempre hacía, generalmente lo usaban como distracción para que el equipo entrara en misión y poder tomar al enemigo distraído, era el chivo expiatorio del equipo.