XII
Querido diario, como ya te he explicado me empecé a conectar menos, a buscarle menos. Lo que significó que si ya hablábamos poco empezamos a hablar aún muchísimo menos. Nuestras conversaciones se empezaron a resumir en palabras intercambiadas entre dos personas que hasta no hace mucho lo hubiesen dado todo la una por la otra.
Ya desaparecieron las promesas de amor eterno, y todas las demás promesas que nos habíamos hecho.
Fueron promesas rotas ante nuestros propios ojos, nosotros mismos las rompimos siendo conscientes de ello, siendo conscientes de que estábamos matando lo que tanto nos costó construir, por lo que tanto luchamos para que nunca se desvaneciera, para que no se marchitara igual que una rosa a lo largo del tiempo. Fue ver como nosotros mismos rompíamos nuestras promesas con nuestras propias manos y las tirábamos al mar mientras veíamos como el oleaje se las llevaba, en vez de reaccionar y rescatar todas las que podíamos.
Se acabó el amor para nosotros.
Pero, aun así, ¿qué era el amor? ¿Qué es el amor? ¿Por qué me llegó a importar tanto?
El amor, unas veces lo tenemos, otras las necesitamos y otras lo queremos hacer desaparecer. El amor, ese sentimiento que unas veces nos alegra, otras nos entristece y otras nos hace odiar a la gente. ¿Qué pensar de un sentimiento tan emotivo? ¿Cómo podemos saber si ese sentimiento realmente existe? Mejor dicho, y corrigiendo mis palabras, para empezar el amor existe, pero ¿cómo podemos hacer para que no nos mate por dentro? Ya que, a fin de cuentas, es la razón por la que más sufrimos, por la que más lloramos, por la que más nos deprimimos, por la que más se nos destroza el alma, por la que más deseamos vivir. El amor.
Amor, una palabra hermosa. Te amo, una frase sincera. Siempre te amaré, una gran mentira.
El amor es un sentimiento, hasta ahí todo el mundo llega, pero en mi opinión y en cierto modo es un sentimiento identificado con el sufrimiento, una razón que altera al corazón. También es una razón de ser, una razón de esperanza, es algo que desconcierta, que la cabeza no controla.
Responder a esa pregunta es algo tan confuso, porque si el amor es un sentimiento que siempre te hará bien ¿por qué más de una vez he llorado por amor? Por mucho que lo intente no consigo describir que es el amor, por qué existe, su significado, ya que es algo tan grande, tan bello y tan hermoso que uno lo tiene que vivir y descubrir por su cuenta, que con palabras nunca lo podrá descubrir.
En resumidas cuentas, el amor es algo inefable.
Y después de estas líneas en las que he me he enredado bastante intentando dar una explicación a algo que no se puede explicar, deja que retome mi historia, mis pensamientos por esos días.
Como ya expliqué, ya no recibía ningún tipo de atención especial, por denominarla de alguna manera, por su parte. Extrañaba esa atención, sentir que era especial para alguien, sentirme ese alguien especial de otra persona. ¿Quién no desea eso? Eran pensamientos inocentes, pero necesitaba sentir algo de amor.
Supongo que fue ese pensamiento el que me hizo empezar a hablar con el niño de ojos azules que me había llamado la atención. Le agregué al Tuenti y poco a poco fui hablando con él, conociéndolo, averiguando quién era, descubriéndolo poco a poco, ver si me gustaba o no como persona.
Natalia estaba contentísima en lo que hacia mí se refería. Ya no le iba con trabadas por Ángel o simplemente no le comía la cabeza hablando sobre él una y otra y otra y otra y otra vez, como si no tuviese otra vida que no fuese él. Le estaba empezando a hablar de Cristian, el niño de ojos azules, quien hasta la fecha me había parecido un amor de niño que carecía de defectos, aunque solo llevaba hablando con él un par de semanas por entonces. Ella no hacía más de decirme que quedara con él de una vez por todas, que a ella también le parecía adorable y que tenía que dejar al destino que me enseñara lo que tenía preparado para mí.
En mi opinión ella solo me estaba dando ánimos para que pasara definitivamente de capítulo y dejara a Ángel como un recuerdo del pasado que como recuerdo se quedó. Dos años escuchándome hablar de la misma persona, sabiendo tanto las cosas buenas como las malas que me había hecho debieron hacer que ella estuviera aún muchísimo más cansada de mis ir y venir con él que hasta yo misma.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
¡Hola a todos los que han llegado hasta aquí!♥
Primero, ¡muchísimas gracias por leer mi historia!
Ya estamos por más de la mitad de la parte de Ella, después empezaré a subir la parte de Él (he de confesar que es mi favorita), que tendrá exactamente la misma extensión.
Y eso, voten y comenten si les gusta lo que leen... y así a mi me dan ánimos para seguir subiendo más a menudo (sobre todo ahora que se acabó la época de exámenes y toca vacaas ♥___♥)
Besos y abrazos
CelyLove
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top