Ese par de ojos celeste no dejan de mirar su cuello, inspeccionando minuciosamente que no se vea ninguna marca. Luther habia puesto mucho esfuerzo en maquillar su piel lo mas natural posible ya que, no podía solo ponerse una camisa de cuello de tortuga, ese no es su estilo y su familia notarían que algo anda mal.

—Creo que con esto es mas que suficiente.—Se siente todo un profesional.—Para ser mi primera vez haciendo esto, lo hice muy bien.—Admira su maquillaje en el cuello.

‹Diell hizo un excelente trabajo trayendo esto productos y contra el agua, por mas que sude o me moje no se quitará esa base de mi piel. ¿Cómo es que es bueno comprando productos como estos?

Aunque me saco un gran susto cuando toco la puerta de mi habitación, creí que era alguno de mis hermanos mayores, pero no. Lo que me hizo suspirar aliviado de que fuera él, apareció en el momento exacto en que requería de su ayuda.

Él es mi fiel y confidente guardaespaldas, tan dedicado a su trabajo y dispuesto a protegerme que estuvo dispuesto a desafiar a Dean, cuando el doberman desvergonzado intentaba subir a hurtillas a mi habitación. Su actitud le agrado a Dean, el mismo me comentó que tenía un buen perro protegiendo mi espalda y seguridad.›

Luther salió de la habitación solo para encontrarse con su hermano mayor, Eren. Este lo analizo de pies a cabeza como un detective e interrogado a un sospechoso solo con la mirada.

—¿Ya te encuentras bien?—Su rostro muestra palidez, ¿el malestar que sentía anoche continúa en él?—¿Sigues mareado?

Queremos hablar con el pero si sigue sintiendo mal, ¿cómo sacaremos el tema sobre nuestra relación sanguínea con él? De somos primos y mis padres sus tíos. Tengo tanto miedo de como reaccione, sobre todo por todo lo que paso en el colegio.

—Estoy bien, hermano mayor.—Sonríe.—No tengo ninguna incomodidad.—Claro que sí, mi cintura sigue sin querer sentirse bien.

Sin embargo no negara que mi corazón se siente cálido, saber que tengo personas que se preocupan por mí, es una sensación reconfortante. Es algo que había olvidado con el pasar de los años, pero ahora vuelvo a sentir esa grata sensación.

—¿De verdad?

—Si, lo digo en serio.

—Bien.—Suspira con tranquilidad.—¿Vas a salir?—Mira a su hermanito, "no hay nadie más atractivo que él, todo le queda perfecto." Piensan al mismo tiempo que asiente con cabeza. Eren parece mas un fan de Luther que su hermano mayor.

‹Su atuendo es casual, algo rebelde y muy práctico para conducir su motocicleta. Es bueno que salga a tomar aire fresco. No podemos mantenerlo protegido en la casa solo por miedo, Luther tiene que seguir disfrutando y viviendo su vida.›

Luther vestía una camisa de algodón, gris. De mangas cortas y de cuello en "v" mas encima una chaqueta de mezclilla, negra, al igual que su pantalón y unas botas de cuero con suela de tacón de un centímetro.

‹Solo tengo pensado en ponerle un poco mas de seguridad aparte de Diell, sin que Luther lo note porque tampoco lo queremos abrumar. De esa manera estaremos un poco menos preocupados, ansiosos, por su bienestar.›

La preocupación mas grande de Eren y su familia es que la familia paterna de Luther aparezca, no saben nada de ellos. Sus intenciones y del porque el padre de Luther, nunca hablo de ellos.

—Si, iré a la galería un rato.

Tengo que terminar el cuadro que estoy pintando, también tengo que colgar los cuadros que estarán en venta. Solo espero que sean del grado del comprador y valore el esfuerzo al momento de ofrecer una cantidad.

No era el sueño del anterior Luther el hacer algo como eso, pero siento que es necesario que alguien mas logré ver su trabajo, que lo aprecié.

—¿Galería?—¡¿Luther tiene una galería?!—¡¿Tienes una galería?!—Eren detuvo su caminar para mirar a su hermano menor, sorprendido.

Mi hermanito es tan sorprendente como siempre, ha logrado comprar una galería y sin pedir nuestra ayuda, dinero. No solo tiene un trabajo que consiguió por sus propios esfuerzos, sino que también una galería.

—¿Qué galería?—Erin se los encontré en el camino y se unió a la conversación.—¿Tienes una galería?—Pone sus manos en los hombros de Luther.—¿No te quedaste cortó de dinero al comprarla, ¿verdad?

—Tengo dinero.—Quita de sus hombros las manos de Erin.—Les iba a contar pero han sucedido tantas cosas que no se presentó la oportunidad, pero sí. Tengo una galería, aunque tenía mucho tiempo sin pintar hasta hace poco que volví agarrar el pincel.

Es lógico que reaccionen de esa manera ya que nunca se enteraron que Luther, quería regalarse a Lander para su cumpleaños pero Charles terminó copiando la idea. Y Pensándolo bien creo que fue lo mejor así, porque seguramente también fue una obligación al igual que lo estaban obligando amar de manera romántica a su mejor amigo.

—No se como quedará cuando este finalizado.—Las habilidades son parte de este cuerpo, no mías. Sin embargo pienso usarlas sabiamente.—No me siento calificado...

—¡Mamá, papá!—Erin interrumpe a Luther.—¡Les tengo una gran noticia!

—¿Por qué gritas?—Elek estaba ayudando a poner la mesa.—Buenos días, tesoros.—Ve a Luther.—¿Fue una buena noche?—Camina hacia él.—¿Sigue ese malestar?

Ayer tuvimos que cenar sin él, nos preocupados tanto que mi esposo y yo estamos decididos a subir, preguntarle si necesitaba algo. Pero Eren nos aconsejó que solo lo dejáramos descansar y también teníamos visitas no podíamos solo dejarlos solo en la mesa, lo bueno que tanto tío como sobrino fueron compresivos y entendieron que Luther no podía acompáñanos.

—Buenos días, Mamá.—Ahora que los he aceptado como mi familia, todo se siente diferente y me gusta como se siente todo.—Estoy bien, no te preocupes.—Besa la frente de Elek.—Buenos días, papá.—Abraza por la espalda a su padre.—Cuida de tu salud, papá. Te ve un poco pálido y ojeras bajo tus ojos.—Besa la mejilla de Harold.

Esa muestra de afecto tan afectuosa por parte de Luther, dejó sin habla a sus padres, con una calidez en sus corazones y ganas de llorar. Mientras que los gemelos estaban sufriendo de envidia porque no han recibido nada, ni un abrazo.

—Cof, cof.—Harold solo tosió superficial, ocultando el evidente sonrojo. Él se había puesto tímido.—No te preocupes, hijo.

¿Qué día es hoy? ¿Mi cumpleaños? Tiene que ser un día asombro como para ser abrazado por mi tercer hijo,¿cuando fue la última vez que Luther actuó tan dulce? Creí que nunca volvería a recibir estás muestras de afecto.

—Ahora que la empresa se esta volviendo a poner estable, tanto tus hermanos mayores como yo, tendremos un poco mas de tiempo libre.

—Me agrada escuchar eso, papá...¿Qué?—Mira a sus hermanos.—¿Tengo algo en mi cara?—¡¿Notaron los chupones en mi cuello?!

Luther estuvo apunto de ponerse mas blanco de lo que ya es, pero suspiro al ver que no era nada de eso. No obstante seguía sin saber del porque esas miradas extrañas.

—No es nada.—Los gemelos tomaron asiento, mirando con recelo a sus padres, los cuáles se encuentran muy sonrientes.

—¿Es así?

‹¿Por qué de un momento a otro sus expresiones se volvieron inexpresivas?› Se cuestiona Luther, sin comprender nada.

—¿Por qué gritabas, Erin?—Pregunta su padre, Harold.

—Ah, eso.

No deberías decirle en venganza por obtener un beso en la frente y un abrazo de Luther, pero sino lo digo yo, Luther lo terminara contando de todas maneras.

—Luther tiene una galería y al parecer tiene varios cuadros pintados.

—¡En serio!—Sus padres se emocionaron.—¡¿Podemos ir a ver tus pinturas?!—Querian ver el trabajo de su hijo.

—Si gustan vamos la próxima semana, solo ponerlos de acuerdo con el día.—Les mostraré las que tengan un transfondo no tan espeluznante.

—Nos encantaría.—Expresan todos.

—¿No has pensado en realizar una exposición?—Preguntó Eren.—Se que no dijiste nada de esto porque no querías recibir ayuda, que querías hacerlo por tu cuenta. Pero si estás dispuesto, nos gustaría ayudarte a que expongas tus pinturas.

—Si, Eren tiene razón.—Erin está de acuerdo con su gemelo.

—Gracias, en serio aprecio sus intenciones.—Sonríe con alegría.—Lo voy a pensar.—No estaría mal mostrarle al mundo el arte abstracto del anterior Luther, que sientan el dolor que sintió mientras plasmaba con el lienzo su agonía.

—No hay prisa, tomate tu tiempo.—Su familia le hacía saber que lo que decida estará bien, no tiene que hacer nada que no quiera.

Despues de tanto los Astier por fin podían darse el lujo de disfrutar nuevamente sus desayunos en familiares, en sus rostros se ve la alegría principalmente en los señores Astier. Ellos están muy felices de poder compartir su tiempo con sus hijos, verlos sanos y salvo es todo lo que importaba.

Disfrutarán de la tranquilidad antes de hablar con Luther, porque de que le contarán todo se lo contaran y eso que los señores Astier aun no saben que su querido Luther, sufrió un buen tiempo de acoso en el colegio y en la universidad.

No hay dudas de que reaccionarán igual o peor de como reaccionaron los gemelos, al igual que ellos se culparan por no haberle explicado antes a Luther de porque su aparecían.

—Erin.—Busca obtener la atención de su segundo hermano.

—¿Sí?—Levanta su mirada.

—¿Has trabajado como agente de modelaje o de actores?

Lo he pensado un poco y creo que no estaría mal hacer ese comercial de publicidad, también quiero ver si esa voz llega hacer algún movimiento al verme siendo admirado por las personas y no solo a su protagonista masculino, Lander.

¿Qué pasaría si yo y Dean nos convertimos en los protagonistas de está historia? Quitándole de apoco el halo a Lander y Charles. Aunque ya lo estoy haciendo, estoy creando mi propia historia sin embargo todo ha estado muy calmado, eso me da mal espina.

—No, pero se que cosas se necesitan y de la forma en que operan, ¿por que?—Los demas al igual que Erin sintieron curiosidad.

—Lo que hable a solas con el presidente Tyr...

—¡Hablaste a sola con ese tipo!—La punto de sus orejas se enrojecen, no logró evitar recordar el beso que le fue robado por Tyr.—¡Te hizo algo!—Lo voy a matar si fue así, ese playboy abusivo, roba besos.

—No hizo nada.—Frunce el ceño.

—Deja de gritar.—Eren miran con extrañes a su gemelo.—Sigue hablado, ignora a Erin.

—Bien.

Luther explicó palabra por palabra sobre lo hablado con sus cuñado, excepto lo que estaba relacionado con Dean. Eso no fue revelado y solo se queda entre ellos dos.

—Es por eso que quería que Erin sea mi agente, solo si está desocupado. Pero antes de darles una respuesta a Tyr, quería saber su opinión. ¿Qué me aconsejan?

Los integrantes de la familia Astier se quedaron en silencio, pensativos con respecto a eso. Sí Luther realizaba ese comercial, se estaría exponiendo a los medios y cabía la posibilidad de que alguien por el lado de su familia paterna, lo reconozca.

El silencio por parte de su familia estaba empezando a poner muy nervioso a Luther, preguntándose si lo que había dicho es algo malo. Si sus padres y hermanos no querían que él se involucre con Tyr, por lo que dirá la gente que vive del chismes y conociendo la fama de Tyr, podría poner en una situación sofocante a Luther.

—¿No les agrada que trabaje con el presidente Tyr?—Pregunte.—Mamá, papá, y hermanos mayores.—Mira a cada uno.—No debemos llévanos por la habladuría de las personas, no hay que juzgar a una persona en base de chismes.

Aunque no es del todo mentira, una fuente confiable me lo hizo saber y esa fuente es mi Dean, él me confirmó que a su hermano le gusta andar de cama en cama, que ni permitiera que él me saludara de mano porque me podría contagiar de algo.

—No es que no nos agrade.—Comenta Eren.

—Y su vida personal tampoco nos importa.—Ese tipo me las va apagar por ser tan abusivo, no me importa si es un Bennet pero le haré apagar.—Él es dueño de su vida, cuerpo, puede hacer lo que le plazca.

—¿Entonces por qué se quedaron tanto tiempo en silencio?

—No estamos encontra de que hagas ese comercial.—Elek sostiene la mano de Luther.—Creo que este el momento adecuado de que hablemos de un asunto muy importante, del porque tenemos miedo de que tu imagen se vuelva internacional.

—Mamá.

—Esposa.

Los tres se tensaron porque sabía que venía después, pero de igual manera asintieron en acuerdo, diciéndole a Elek prosiga a confesarle todo a Luther.

—¿Qué es eso como para que se ponga tan serios?—Mi corazón también está poniéndose ansioso.

—Luther, lo que te diremos acontinuación puede ser muy difícil de asimilar, pero esperó que nos puedas entender. Por favor.—Suplicó Harold.

—Me están asustado con tanto misterio, solo hablen por favor.

—Lut.—Eren sostiene la mano de Luther.—Erin y yo somos tus...

—¡Luther!

Un gritó un tanto molesto proviniendo desde la sala, interrumpo a Eren, justo como se había decidido decirle a Luther sobre su relación familiar.