Minutos antes de lo sucedido en el consultorio.

Los cubiertos impactado con el plato en lo único que se escucha en ese ostentoso y privada mesa de restaurante, mientras padre e hijo degustan de un silencio y muy tenso almuerzo.

Ellos dos no parecían ser unidos como suelen aparentar en público, puesto que, Charles está procurando el terminar rápido su comida lo antes posible. Aunque parecía que cada bocado era llevar piedras a su estómago, muy pesado y desagradable para su paladar.

El alfa se sorprendió y tuvo un mal presentimiento cuando vió llegar a su padre, de la nada. Qué de un momento a otro le dijera que venía por él, para ir a pasar un rato en familia.

-¿Ya descubriste quién fue el maldito entrometido?-Preguntó con molestia, sin mirar a Charles. Travis Turner seguía cortado la carne en pedacitos.

¿Desde cuando mi personal se volvió inepto? Siguen sin poder encontrara información de algo tan simple como eso. Esa maldita tierra estuvo tan cerca de ser mía, para muchos puede ser solo una tierra común y corriente sin embargo, cabe la posibilidad de que se encuentren minerales de lo que vendría siendo al rededor de donde se va a construir ese complejo turístico.

Me dí cuenta de eso luego de que envié a alguien a inspeccionar ese lugar, es por eso mismo que de alguna manera forcé al dueño a vender esa tierra luego de enviar a mi gente a hacerle algo a esa tierra para que nadie se acercará. Es así como entro en subasta, si la hubiese quitado con amenazas pero lamentablemente ese maldito era sobrino político de uno de los más grandes abogados.

-Siguen sin encontrar absolutamente nada.

Ese tipo que contraté para que siguiera a Luther, tampoco sea dignado dar la cara. [Que ni sé le ocurra aparecer o le cortaré las extremidades por e inepto.] Sí hubiera estado pendiente de Luther, esas personas no se lo hubieran llevado como lo hicieron.

Por lo menos la familia Astier ya sabe sobre el paradero de ese alborotador, es lo que expresó el chófer, Delio. Con eso, esa familia ya no va echarnos la culpa, es por eso que lo envié a buscar para empezar, porque de hay no me interesa lo que pasé con él.

-Ese inversionistas ha de tener suficiente poder como para hacer algo así, ocultar su identidad.

¿No creó que sea Dean Bennet? Ese hombre es tan narcisista, arrogante, con un ego tan malditamente ridículo. No pone a nadie en sus ojos, es por eso que no creo que sea él quién se digno a ver más allá de su ego.

-¡Eres un inútil!-Vociferó, dejado los cubiertos sobre la mesa.-¿Para que tienes ese omega sin gracias a tu lado?-Preguntó, su mirada fría hizo contacto visual con la de Charles.-Él es amigo de ese bueno para nada de Luther Astier, ¿por qué no le has pedido que le saqué esa información?

No hubo cambió de expresión en Charles, miraba a su padre sin miedo, sin intenciones de doblegarse. Sin embargo, bajo la mesa sus mano se convirtieron en un poderoso puño. Tan fuerte que las venas se tensaron en sus brazos expuestos.

-¡No hables mal de Lander.-Rompió la copa de vino en su mano.-Él no es ningún inútil. Es mi pareja, no mi informante.-Dejo en claro.-Si vamos hablar de inútiles, tú tampoco te quedas atrás, padre.-Sonrío burlesco.-¿Acaso has logrado descubrirlo con toda y tu influencia?-Limpio sus labios.-De tal palo tal astilla...

-¡Cierra la maldita boca!-Abofeteó el rostro de su hijo.-Seras igual que tu madre, esa cualquiera.

Charles solo escupió un poco de sangre, el impacto de esa mano sobre su lado izquierdo del rostro, lastimó un poco su mejilla. De igual manera siguió viendo a su padre sin signo de sumisión es mas, su mirada mostraba sed de sangre.

-¿Cuándo te volviste tan valiente?-Lo vio con desdén.-Ya quieres actuar como tú madre, otra buena para nada que solo sirve para saltar de árbol en árbol. (Miembro)

Travis no acepta que su orgullo fue pisoteado, que su ex esposa no huyó de él con otro hombre como le hizo creer a Charles. Qué ella escapó por miedo luego de que su ex esposa, le rompiera la cabeza con un florero.

-Qué no se te olvide que si estás con ese omega, es por el simple hecho de que su familia es de gran utilidad. Tiene buen prestigio y mi consuegro es fiscal. Tu cuñado es un excelente abogado, con un récord de juicios ganados bastantes notarios, reconocido en varios países.

Su poder de fiscal lo podré usar para evadir la justicia, o salir de aprietos con respecto a mis negocios ilícitos. Es por eso que permití ese noviazgo en primer lugar, porque si ese omega hubiera sido inútil y pobre jamas aceptaría eso. El destino es una mierda, así se murieran por estar lejos no permitiría tal cosa.

Es por eso que hasta el día de ahora Charles, no está comprometido por conveniencia, lo cual es una lastima porque hay bastantes prospectos decentes para ser el cónyuge de mi hijo, pero nadie mejor con el estatus de la familia Cooper.

Aunque ese chico bueno para nada de Luther, tampoco es un mal prospecto para ser la pareja de Charles. [Qué importa sin dos alfas, aunque es asqueroso vale la pena.] Si lo analizó de una diferente manera, no estaría mal si nuestra enemistad se arreglará con un matrimonio, mas ahora que los Astier serán una familia con un nivel igual que nosotros.

Con un compromiso podría tomar control de todo eso desde dentro, de esos ricos minerales que me darían un dinero inmensurable. Podría alcanzar a Dean Bennet.

-¿Cómo lo voy olvidar?-Se pone de pie.-Me lo dices todo el maldito tiempo que, ya me sé de memoria tu desagradable discurso.-Tiro la servilleta sobre la mesa.-Lander no me dirá nada aunque se lo pida.-Mintió.-Luther Astier es su mejor amigo después de todo.-Camina hacía la salida.-Sin embargo, puede que él logré trabajar con Tyr Bennet...

-¡Vaya que grata noticia!-Su expresión se relajó.-Mi yerno por fin está por volverse de utilidad.-Sonrió ampliamente.-Podremos llegar a Tyr Bennet, eso ya es una verdadera ganancia.-Con esa noticia su humor se volvió mucho mejor.-Ya puedes irte, también puedes tomarte la tarde libre. Yo, me haré cargó de los demás asuntos, querido hijo.

-Ya me estaba yendo para empezar.-Cerro la puerta con fuerza.

Ya en el pasillo desató su impotencia, estrelló su puño contra la pared de enfrente. Su guardaespalda, Edgardo. Le pasó un pañuelo para que se limpie la sangre en sus nudillos.

‹En ocasiones me entregan unas ganas de tomarlo por el cuello, hacerle saber todo lo que tengo guardado en mi pecho, sin embargo, es mi único familia. A pesar de que esa mujer lo abandono por otro hombre, él siguió cuidando de mí. Poniéndome atención, era mínima pero lo hacía.

Pese a eso, hay momentos en que los malos pensamientos se adueñan de mi mente, pero logró controlarlo a tiempo porque no ganaría nada con pelear a muerte con mi padre. Es por eso que prefiero tolerar sus desagradables palabras.›

-Vicepresidente, he recibido informes que el joven maestro Luther Astier, se encuentra en un consultorio...

-Solo termina de hablar, ¿por qué te callas?-Su expresión se volvió extraña al escuchar "consultorio."

-Eso es lo raro, se supone que es un consultorio de alguna especialidad. Sin embargo, los chicos no lograron encontrar absolutamente nada cuando se infiltraron.

Por una fracción de segundos en ese color azul verdoso de sus ojos, hubo una pequeña perturbación. No le agrado el rumbó que estába tomando esa información.

-Luther Astier hace poco entro al consultorio, pero no hay nadie mas aparte de él.-Comunicó Edgardo.-La otra cosa es, han llegado "limpiadores" al lugar.

-¿Limpiadores?

Así se le conoce a las personas que limpian algún desastre, asesinatos hecho por las organización clandestinas. También son usados por las personas con dinero, cuando quieren limpiar la suciedad en su patio trasero o esos secretos en el armario.

-Sí...¿movilizó a los chicos?

-¿No lleva seguridad consigo ese idiota?-Sus manos se volvieron un puño antes de darse cuenta.

¿Qué demonios está pasando con él? ¿Acaso está planeado ponerse en peligro para llamar la atención de Lander? ¿Qué no se había rendido ya? Ya decía yo, era demasiado bueno para ser cierto.

-Ese guardaespaldas se quedó en el estacionamiento.-Estoy seguro que también ya notó la presencia de lo chicos, ese tal Diell es como un sabueso. Lo único malo es que no se mueve sin órdenes de su joven maestro, tenía que ser un marino, creó que hay es donde estuvo desde pequeño.

-Entonces, solo pasarle la información a ese tipo.-Sube al ascensor.-No me importa que le suceda.-Apoyo su cintura en el pared del ascensor, cruzado sus brazos en pecho.

-Bien.

Se mostraba desinteresado pero su pie golpeado el suelo, lo estaba delatando aunque si le preguntaban si estaba ansioso por lo comentado hace un minuto, diría que está molesto porque el ascensor no se mueve rápido.

-Vamos a ese consultorio.-Ordenó tras salir del ascensor y subir al auto.-Voy a dejarlo al descubierto, no puedo permitir que engañe a Lander.-Declaró.

-Como ordene.-Piso el acelerador.

¿Por qué no puede ser honesto? Estoy seguro que está ansioso por la situación en la que se encuentra ese joven maestro. Pero, ¿por qué? ¿Por qué sus colores se van y vienen cuando se trata de Luther Astier?

-¿Qué tan lejos está?-Mira su reloj, sus ojos se mueven con inquietud.

-Máximo 35 minutes en auto, creó.-Lo bueno que no hay tráfico.

-Conduce más rápido, que no te importe las multas.

¿Por qué iría a un consultorio, Luther? ¿De que podría estar estar enfermo? Él es un maldito bastador y los bastador no se enferman...¿vuelve a sufrir de insomnio? Una vez Lander comento que ese idiota sufría de insomnio, batallaba para dormir.

¿Eh? ¡¿por qué recuerdo algo como eso en estos momentos?! Mas bien había olvidado que tuve una conversación como esa con Lander, al igual que estoy recordando que cuidé de Luther en la enfermería del colegio. ¿Yo hice algo como eso? ¿Por qué lo haría?

-¿Vicepresidente?

El guardaespaldas se alarmó al percatarse que Charles, se encuentra sostenido su cabeza, con una expresión de dolor.

-Estoy bien.-Maldición que fue esas horribles punzadas.

Por un instante creí que mi cerebro estaba siendo perforado, con un polígrafo en vez de otro objeto más destructivo. También percibí una intensa mirada en mi nuca. O, ¿solo fue mi e imaginación?

-Hemos llegado.-Estacionó el auto.

Para en ese entonces Diell ya no estaba en el auto, ni bien había entrado al lugar cuando escucharon disparos, tanto empleado como jefe se pusieron en marcha. Esos disparos no les permitió observar que había tres autos mas sin placas y vaporizador oscuro.

-¡Cuidado!-Edgardo despejó el lado izquierdo de Charles, mientras el nombrado defendía a su guardaespaldas desde la derecha.

Era complicado el caminar mientras te vas escondido para no ser herido, Charles le indicó a su guardaespaldas que fuera por las escaleras, el tomaría uno de los ascensores de la esquina porque el principal ya estaba siendo usado, pensaron que era Diell quién iba subido.

-¡Joder qué mierdas esto!-Cargo su pistola, a tiempo se cerraron las puertas o hubiese terminado lastimado por los disparos.-¿Luther en que diablos te has metido?-Trago grueso antes de asomarse por la puerta, analizado el perímetro.

Al final tiró hacia afuera su chaqueta, en ese instante fue agujerada. No había sido del todo bueno el subir por el ascensor después de todo.

‹Hay tres enfrente, dos en el pasillo a la derecha y tres al fondo del pasillo. También pueden haber escondidos en los alrededores, para poder salir y encargarme de ellos tengo que dispararle a las luz de esa manera...¿Gritos?>

Mientras Charles buscaba una solución para salir del ascensor, alguien mas caminaba por los pasillos sin miedo, eliminando a todo lo que se mueva.

-¡Aaagh!

-¡Aahh!

-¡Demonios!

Charles se desconcertó al escuchar diferentes gritos de dolor, a quienes le estaban descargado el cartucho estaban siendo liquidados de la peor manera. Ese tirador severamente despiadado, disparaba en lugares nada letales pero eso no los hacía sentir menor dolor.

Preferían morir que ser torturados de esa forma, peor era hacer contacto con esa fría mirada grisáceo. Esa aura, presión e intimidate saliendo de su cuerpo es una completa locura.

En su mirada afilada y sanguinaria no había una pizca de emoción, era como ver al demonio subir al mundo humano, a recoger las almas que le pertenecen.

-Ceo Bennet, esta area está despejada.-Informó Diell.-Ya puede proceder a ir por mi joven maestro.

-Jefe, aquí también ya está todo está despejado.-Grito Vladi desde el otro lado del pasillo.

-Bien, en cargarse de lo demás y sobre todo ese maldito helicóptero.

-¡¿Dean Bennet?!-Charles se desconcertó todavía mas, el ver a ese hombre con dos pistolas en sus manos y dos en la espalda sostenidas con el arnés.

Pero eso no era lo importante, por lo que Charles dejo de perder el tiempo en escuchar esa conversación, tenía que abrir esa puerta por lo que empezó a llamar la atención de todos.

Dean ni siquiera le prestó atención y de una sola patada tiro la puerta, su única preocupación y objetivo es encontrar a su alfa de ojos celestes.

-¡¿Quienes son ustedes?!...¡¡Agh!!

Ambos alfas descargaron el cartucho de sus pistolas, en cualquier objeto que se movía, volviendo a cargar tan rápido como fue posible.

-¡Lut!-Gritó tan fuerte como pudo el nombre de Luther, aunque eso pareció más un rugido de un lobo enfurecido al oler las feromonas con diferentes emociones de su pareja.

El solo inhalar un poco de ese aroma convirtió en un ser enloquecido a Dean, en su mirada solo podías ver oscuridad y una enorme sed de sangre.

Acto seguido, los dos alfas siguieron el rastro de feromonas de Luther, llegando al baño. Sentado en el piso yacía un Luther con su pierna sangrado, su pecho descubierto todo arañando acusa de su problema para respirar, creyó que si hacía eso podría obtener un poco de aire.

A pesar de encontrarse aturdido y con hiperventilación él reconocí ese aroma muy familiar, eso lo llevo abrir sus ojos lo más que pudo.

-V...vini...ste.-Apenas podía sonreír.-Te estuve... esperando.-Como pudo se puso de pie.

-¡Luther...!

-...Dean...

Luther paso de largo a Charles, dejándolo con los brazos abiertos, mientras él se escondido en los fuertes y protectores brazos del alfa ojos grisáceos.

-Lamento llegar tarde.-Suelta sus feromonas.-En serio lo lamento.-Ese color grisáceo se volvió turbulento.

‹Su cuerpo está temblando al igual que su voz así no lo muestre, se encuentra temblando. Sus brazos me arrullan con tanta protección logrando que mi corazón se calme.

También puedo escuchar su corazón, late tan fuerte que mis tímpanos podrían explotar en cualquier instante...¿todo por mí? ¿Muestras está apariencia nada propio de él, solo por mí?›

Solo eso basto para que Luther mojará el pecho de Dean, esas lágrimas tibias causaron que el alfa mayor, perdiera toda expresión en su rostro. Eso era todavía más peligroso cuando se trata de Dean, y su gente que acaba de entrar solo bajaron sus cabezas, queriendo huir a un lugar seguro porque su jefe no estará satisfecho con eliminar un par de personas.

-¿Lo...Lo hice bien?-Preguntó con lágrimas en sus ojos.-¿Lo hice bien...verdad?-Todo el empezó a temblar descontrolado, sollozando.

Abraza con fuerza a Dean, respirando su olor como si fuera oxígeno. El aroma y lo que las feromonas de Dean le hacía saber lo hace sentir a salvo.

-Lo hiciste bien, mi Lut.-Besa la coronilla de Luther.-Ya estoy aquí.-Cubre los oídos de Luther, para que no escuché los ruidos de allá afuera.-Solo concentrate en mi voz, cierra tus ojos y crea un escenario donde solo estamos nosotros dos.

No muy lejos de ellos, había un par de personas a punto de dejar de respirar. Mas la psiquiatra inconciente a punto de perder la vida desagrada.

Al parecer hnaia logrado abrir la puerta del baño, pero en ese momento no se esperaba que Luther la recibiría con un recibimiento "Calido." [Le dió con la tapa del baño un par de veces.] Aprovechando para quitarle el arma, así sintiera que iba a morir por falta de oxígeno, su alfa interior se negó a caer y saco fuerzas dónde no la había, comenzado a quitar unas cuantas vidas.

Fue la parte alfa de Luther, quién tomo el mando por un momento, no quería que Luther se sintiera culpable después. Aunque jalo el gatillo al mismo tiempo no era él, en su subconsciente su parte alfa le hizo ver que fue su lado animal, fue quién se ensució las manos.

-Nada de esto es tu culpa, nada.-Frota con cariño la espalda de Luther.-Los únicos culpables son esas cosas tiradas en el suelo.-Levanta en sus brazos al joven alfa.-Ya puedes descansar, no iré a nigún lado...

-¿Así esté loco?-Su mirada se encuentra con la de Dean.-¿Seguirás pensando igual?-Esa mirada cristalizada apuñaló el pecho de Dean, el alfa mayor no quería verlo así de mal.

-Seremos dos locos, vamos a enloquecer juntos.-Posa su frente sobre la de Luther.-Mi Súcubo.-Solo frente a Luther, su expresión se volvía diferente, preocupado, impotente.

-Mas loco de lo que ya estas, Doberman desvergonzado.

-Sí.-Sigue sin dejar de mirarlo-Soy tuyo...-Sonríe al verlo quedarse dormido con esa expresión de tranquilidad.

Sin embargo esa sonrisa en los labios de Dean, se volvió dos destructivas balas al igual que sus ojos inyectados de sangre.

-Vladi.-Llamo a su guardaespalda.

-¿Sí?

-No permitas que esa cosa muera.-Ordena.

-Asi será.

-No importa porque alguien como usted, llegó aquí y del porqué está aquí.-Habia salido del aturdimiento.-No es necesario que se tome tales molestias, seré yo quién lo lleve al hospital.

Charles no había escuchado toda la conversación de los dos alfas, estaba algo lejos de ellos dos, aparte en todo momento habían hablado muy bajito.

-Niño.-Lo vió fríamente.-Agradecerle a tu suerte por no morir hoy.-Paso de largo a Charles.

Dicho eso salió del consultorio, dándole órdenes estrictas a Vladi de que lleve a cada uno de esos sujetos a ese lugar, donde se encargan de todos. También que tomen cada papel o objeto que tengo el nombre Luther.

Nota.🤍

Buenos días o tarde .🌞

Espero que hayan disfrutado la nueva actualización, nos vemos hasta el domingo con la próxima. ✨❤️

Y otra vez estuve peleado con la AI para que me diera al Dean, que quiero. Este fue el nuevo resultado 👇👇👇

Recuerde que Dean ronda por los 27 años de edad.

Att:Yessi.A