capitulo 29

Sus inquietos dedos jugaban con ese colgate de su celular, sintiendo un leve cosquilleo es su estómago cada vez que veía esa estrella de mar. Le hacía recordar ese día cuando obtuvo su primer vez.

‹Lo hice, yo tuve mi primera vez con un hombre así de excepcional, es un premio o alguna clase de castigo que en su momento puede llegar hacer sentir pérdido, no lo sé. Solo puedo decir que fue algo que me hizo sentir muy bien, me estuve perdiendo de algo tan bueno como eso...¡Maldición! Qué rápido soy para aceptar que soy un pervertido muy pasivo.›

Luther muerde con furia la manga de su camisa, reprochando a simismo por haber sido tan fácil en todo los aspectos. No se arrepentía de nada, no, pero seguía con la ilusión de ser el activo cuándo ya aceptó que ser pasivo fue algo verdaderamente placentero.

‹¿Cuánto tiempo tendré este incómodo dolor de espalda? Fue muy bueno todo, pero, ¿a qué costó? Aun me sorprende que esa anormal cosa logró estár dentro de mí, en serio cuando digo que es "anormal" es literal.

Ese tipo le quitó lo que tendría que ser para los demás alfas, Dean hizo tres veces la cola cuándo estaban repartiendo serpientes [miembros]

Quizás logré soportar su intromisión porque me dilato lo suficientemente y al ser alfa soy más fuerte, pero creó que también por ser un alfa eso debería ser más doloroso porque no lubrico, no lo sé. Sin embargo de que lo hicimos y lo disfrutamos es un hecho.

Pero si voy a terminar así de adolorido e incómodo todas las veces luego de que lo hagamos y el placer haya pasado, no sera nada bonito...espera, estoy pensando en eso, ¡es en serio!› Quería darse un buen manotazo para entrar en razón.

Diell quería preguntar que le pasaba a su joven maestro, ya que lleva un buen rato acostado de lado en los asiento de atrás del auto, con su mirada en el limbo.

"En algo importante o preocupante tendria que estar pensando mi joven maestro, como para desconectarse del mundo." Pensó el preocupado guardaespaldas.

Luego de salir del penthouse de Dean, Luther le pidió a su guardaespaldas que lo llevará a la galería. Todavía no podía volver con su familia, aparte falta poco para su cita con su psiquiatra.

No iba a volver a posponer su cita con su psiquiatra, por nigún motivo. Luther ya sabe un poco de la vida del anterior Luther, siendo una marioneta sin voz ni voto. Pero, también quería saber de qué hablaba con la psiquiatra, esa persona podría decirle algo más importante. Tan importante como lo que está grabado en aquélla cinta de grabación.

Por lo que optó matar el tiempo restante en la galería, quería pintar algo, también analizar las pinturas del anterior Luther a la cuáles solo les había dado solo un vistazo.

Tal vez en esas pinturas también haya dejado algún mensaje secreto o algo por el estilo que sea de utilidad en un futuro.

Solo ahora, Luther entiendo del porque no había ninguna pintura de Lander en esa galería la primera vez que fue, del porque el Luther de la primera línea no mostraba su obsesión por el Omega atraves de las pinturas, y eso porque nunca sintió amor por Lander. Todo lo que sentía era cariño que no iba más allá de lo que el creía una hermosa amistad. Nada mas que eso.

—Joven maestro, hemos llegado.—Informó.

—¿Ya?—Con sumó cuidado se sentó antes de abrir la puerta del auto.

—Sí.

—Ya veo.—Perdí la noción del tiempo perdido en mis pensamientos, todo por culpa de ese doberman desvergonzado. ¿Se habrá comido los dos Shanwhise?

No lo creo, no eran la gran cosa, solo eran dos Shanwhise simples y corrientes comparados con los que ha de servir su chef de cinco estrellas. No debí de hacerle algo como eso cuando su piel se encontraba tan reluciente luego de agotar o succionar mis energías, ah, ese bastardo y su magnífica "personalidad"

Era como si recordar la sensación de esos pectorales lo hacía sentir un poco más relajado, con energías. Solo los amantes de unos buenos pechos podría entender a Luther y su fascinación por los pectorales de Dean.

—Puedes ir por un poco de comida, no muy lejos de aquí se encuentra un restaurante.

—¿Qué le gustaría comer?

—Ensalada de pollo, una bebida carbonatada.

—Volvere en un momento.—Salió a cumplir órdenes.

Luther saludó al guardia de seguridad y a la de recesión antes de subir al ascensor, ya estado ahí pensó en la oferta de esa persona que quería comprar las pinturas.

El alfa iba pensando seriamente en venderlas, sí existía alguien tan bueno en apreciar el arte abstracto del Luther anterior, ¿por qué no venderlas? Sería un desperdicio si esas obras de arte termina guardas en una bodega, muy lamentable que no salgan a la luz.

Es por eso que Luther tenía planeado venderlas e inclusive hacer una exposición si tiene tiempo, el dinero obtenido de todas las pinturas que logré vender.se lo dará a su familia. Luther creía que era lo justo.

—...¡Jefe!—Se exalto—Buenas tarde.

—No te levantes.

Elza estaba disfrutando de su almuerzo, el cual casi se va por mal lado al ver a su jefe. Tanto este Luther cómo el de la línea original no se les pasa por la cabeza el llamarle a su secretaria.

A ella le gustaría que le hiciera saber que estaba yendo en camino hacia la galería, de esa manera ella podría tener preparada varías cosas para su jefe, como por ejemplo; tenerle el almuerzo.

—Luego de que termines tu comida, le llamas a esa persona que quería comprar mis pinturas. Preguntarle si aun está interesado y como compensación por mi mala educación de la vez pasada, lo dejaré ponerle el precio.

—¡Lo haré ahora mismo!—Ella estaba más emocionada que el dueño de las pinturas.

Elza siempre ha creído que Luther merece más reconocimiento con respecto a su arte. En varias ocasiones le comento a Luther que debería de exponerlo al público, e inclusive le recomendó crear una página web donde podría mostrar un poco mas del proceso, dedicación y tiempo que se llevaba realizado cada una de sus obras.

—Termina de comer, no hay prisa...

—No, lo haré ahora mismo.—Busca la tarjeta que le había dejado Fausto.——Esto es algo muy importante, por fin allegado el momento de que su talento sea reconocido.—Tal vez esa persona se las muestre a sus conocidos o socios, así irá creciendo la influencia de mi jefe.

Espero que ese atento asistente sea quién conteste en vez de el Ceo Dean, sería muy sofocante si es él quién termina respondiendo.

—Haz lo que quieras.—Niega con la cabeza, rendido ante la actitud de su emocionada secretaria.—Estare en mi estudio. Una persona subiera y preguntará por mí, él es mi guardaespaldas.

—Entiendo.

—Bien. Buen provecho.—Dio la vuelta hacía su estudio.

A Luther se le iba hacer una costumbre el dar un profundo suspiro antes de abrí la puerta de su estudio, preparándose para entrar.

—No quiero ni e imaginarme lo incómodo, desagradable que fue para Luther original el tener que fingir que estaba enamorado de Lander, cuando nunca lo estuvo.—Expresó en voz alta, mientras deja al descubierto las pintura.

Ese color celeste que anteriormente estaba muy alegré, ahora se encuentra apagado, observando cada una de esas pinturas que anteriormente estaban cubiertas para no ser vistas. Ahora que Luther sabía el contexto, o el significado de cada una de esas pinturas, le hace sentir muy molesto, agobiado.

En esas pinturas del anterior Luther, gritan "ayuda" y te hacen saber cómo se sentía de desesperado. Él no quería seguir escuchando esa voz. Solo quería que se callara y dejará de susurrarle al oído sobre lo que tenía que hacer.

En esa galería no había ni una pintura que refleje algo de felicidad para el anterior Luther, excepto la foto de sus padres. Esa era la única que tiene colores radiantes y muy alegres. De ahí, las demás solo te transmiten desesperación, agobio, agonía.

En la mayoría hay alguien gritando mientras se cubre o trata de arrancarse los oídos, creyendo que de esa manera ya no escucharía nada mas.

Entre tantas pinturas hubo una que dejó sin aire a Luther, en ese arte podías apreciar a un árbol con sus ramas secas y sus raíces alimentándose de la sangre esparcida por el suelo.

Y en la cima sobre la copa de ese mismo árbol, se encuentra un joven con sus manos extendidas, queriendo alcanzar el cielo. En su rostro se veía la desesperación por ir más allá de esas nubes, no quería ser tragado por ese lago de sangre que si lo veías bien, iba subiendo al punto de cubrir por completo el árbol donde se encuentra el joven.

Esa pintura era sumamente asombrosa por como la perspectiva de la pintura cambia al moverte o moverla un poco, al igual que es tan malditamente espeluznante de ver por la sensación y los escalofríos que te trasmite al sumergirte en ella.

Todos podía darle un significado diferente, pero el significado que Luther le dio fue; que ese joven estaba tratando de huir para no terminar con la vida de nadie, porque ese lago de sangre es con el que terminaría bañado si se quedan en tierra firme.

Quería huir con todas sus fuerzas porque no quería terminar manchado sus manos con la sangre de nadie más, a excepción de la suya.

—Perdón por juzgarte mal, Luther.—Sabia que nunca lo iba a escuchar, pero aun decidió pedir disculpas nuevamente.—Por creer que solo eras un persona escrito con puño y letras sobre una hoja de papel, alguien sin sentimientos.—Empuño sus manos.

‹¿Qué pasará conmigo cuando mi tiempo en pantalla terminé? Quería seguir con mi papel porque creí que era así de simple, al no saber más de mi personaje estaría a salvo siendo desterrado. Sin embargo, nada me garantiza que algo así sea seguro. ¿Si muero después de ser desterrado?

Lo sé muy bien, sé que desde hace mucho hubo un poco de efecto mariposa pero solo por mí lado, ya que los protagonistas siguente juntos y amándose más que nunca, por lo que creí que lo estaba haciendo bien, pero al final solo estába volviendo a poner a este cuerpo en aprietos.

Estaba actuando como la marioneta de esa voz sin que me lo pidiera, o me obligara hacerlo. ¿Qué pasaría si me reuso a seguir actuando como el villano? ¿Esa voz también vendrá por mí o cambiará las cosas a su beneficio? Todo a mi alrededor se ha vuelto una bomba de tiempo.

¿Qué hay de diferente está vida con mi anterior vida? Sigo siendo sometido ya sea por mis tíos, o por la persona que creó está historia. Me siguen haciendo sentir un inútil, cobarde...›

Los pensamientos complicados y existenciales en Luther, se apagaron al instante en que sus ojos se encontraron con los ojos grisáceos, los que había pintado en ese momento.

—Doberman desvergonzado—Susurró, frotando sus dedos sobre el lienzo.——Te apareces en todas partes, hasta en mi estudio llega tu acoso.—Busca un cojín para ponerlo sobre el banquito.—Es por eso que debería tenerte miedo.

Luther tomo asiento frente al lienzo, sin darse cuenta ya estaba preparando los colores para seguir retractando la belleza de Dean. Ver esos ojos era como un tranquilizante para Luther, cuando veía ese color grisáceo era como si su nublada menté termina despejada.

—Pero no, en ves de huir te recompense de diferente manera. Con mi trasero por ejemplo.—Chasqueo su lengua con molestia.—Solo quería ser desterrado, no llamar su atención.—Su mirada conectada con la del lienzo.—Llame la atención de una persona más loca y peligrosa que el mismo diablo.

Se encuentra tan concentrado pintado y hablando con la nada que ni siquiera escuchó el llamado de su guardaespaldas, Diell ya lleva tocando la puerta mas de dos minutos.

—¡Joven maestro Luther!—Grito.

—¿Sí?—Salió de ese transe.

—Salga, por favor.—Pidió.—Ya puse la comida en el escritorio de su oficina.—Informó.

—Bien, iré en un momento.—Tenia que terminar toda la pintura derramada o terminaría dañada, no podía desperdiciarla.

No le llevo mucho tiempo hacer eso, acto seguido volvió acomodar todo como estaba anteriormente, al salir de su estudio, aseguró la puerta con llave  porque nadie mas que él tiene permitido entrar a ese lugar.

—¿No compraste algo para ti?

Diell es una persona muy silencia y con nula presencia, sino habla o se muestra ni siquiera sabrías que se encuentra ahí, conmigo.

Es tan leal a mí que nunca le ha dicho nada de lo que hago a mí familia. Entonces, ¿Diell también es consciente de alguna manera de lo que hago? ¿Cuánto sabe de mí? ¿No olvida lo que ve?

—Ya comí.—Responde, llevando sus manos tras la espalda.—No se preocupe por mí y solo disfruté de su comida.

Cierto, los señores y los jóvenes maestros Astier me pidieron que les envié fotos, tengo que tomarle unas cuantas y enviárselas para que vean que está comiendo bien.

Están preocupados de que mi joven maestro no haya comido nada desde la mañana, me han enviado una enorme cantidad de mensajes con una sola orden muy estricta. Qué Luther coma aunque sea un poco, tienen miedo que termine enfermo.

—Bien.—No tengo nada de hambre, pero tengo que comer aunque sea un poco. Necesito recuperar fuerzas luego de casi muero de una manera completamente diferente que haya conocido.

El ligero sonrojo en sus mejillas y eso dos visibles hoyuelos, fueron captados en la fotografía tomada por Diell. Hasta el mismísimo guardaespaldas sintió un aleteo en su corazón, Luther se vía demasiado hermoso y dulce en esa foto.

No era para menos que Diell terminé sorprendido de esa forma, después de todo, es la primera vez que veía sonreír genuinamente a su joven maestro. Ya lo había visto anteriormente, pero esa sonrisa por mas feliz que se mostrará seguía transmitiendo tristeza.

—¿Qué estás haciendo?—Su expresión nuevamente volvió hacer sería.—¿Estás tomando fotos?—Frunció el ceño.

Diell no fue lo suficientemente rápido, había sido atrapado por Luther y tenía que decir la verdad o terminaría castigado de alguna manera.

—Sus padres y sus hermanos me dieron la orden de enviarles una foto, querían verificar que si está comiendo. Me disculpó, pero en está ocasión no podía desobedecer sus órdenes.

—Entiendo.

Ellos deben de estar muy preocupados, ¿cómo podré verlos cuando regrese a casa? ¿Me regañaran por ver salido así? Están en su derecho, lo que hice estuvo mal pero si me quedaba ahí hubiera terminado ahogado. E inclusive hubiese dicho cosas que no debería, es por eso que preferí huir antes que enfrentarme a ellos.

—No te pongas nervioso.—Expresó.—Se que es tu trabajo, pero que sea solo una foto o en verdad me terminaré enojando.—Advierte.

—Asi será, solo una.

Les envío un último mensaje a la familia Astier, acto seguido guardado su celular. Volviéndose a pararse firmé, con sus manos detrás de la espalda.

—¿Te puedo preguntar algo?

—Sí. Adelante, joven maestro.

—¿Qué tanto sabes de mí y que tanto le haz dicho a mi familia?

Quiero saber cómo se veía Luther original desde la perspectiva de Diell, si él recuerda todo. Luther expresó en esa cinta de video que había ocasiones en que varías cosas eran olvidadas por las personas, por ejemplo el hecho de que fue salvado por Charles.

Eso todavía se me hace difícil de creer, pero si de verdad pasó él terminó olvidado eso como si nunca paso. Aunque en está línea no ha sucedido ni va a suceder porque no tengo pensado morir, voy a vivir así tenga que pelear con uñas y dientes.

Si puedo y tengo la oportunidad voy a liberar está novela de las garras de Dios [autor] de está cochinada de trama tramposa. Eso es lo que es, una novela tramposa que desde un final te vendía una pelusa e interminable y al final de esa pelusa no tiene nada. Quedando solo intriga e injusticias para quienes no lo merecían.

¿No había alguien más para ser un villano? Fácilmente podia dejar a Luther y tomar a alguien más para ese papel. Alguien que si lo mereciera.

—Se qué no está enamorado de Lander Cooper, que la sola idea de abrazarlo con intenciones más allá de un amigo, le repudia.

Luther se quedó frío al escuchar esas declaración, esperaba cualquier cosa pero nunca que le dijeran algo como eso. Diell sabía más cosas de lo que él hubiese e imaginado.

—Como ya sabe, soy su sombra en todo momento y hay cosas que no quiero ver, pero las termino viendo de todas maneras.

Anteriormente Luther se sorprendió al enterarse que si tenía un guardaespaldas, y precisamente que era un hombre que estuvo en el ejército. Diell no era un guardaespaldas como y corriente como los demás por decirlo asi.

—Una vez lo vi vomitar luego de tratar de besar al joven Lander Cooper, para darle celos al joven Charles. Su expresión era tan pálida que creí que en cualquier momento iba a desmayarse.

Era como si de alguna manera mi joven maestro, se sintió abusado en ese preciso momento. Y él también había abusado de su amistad con Lander Cooper.

—¡¿Vistes algo como eso?!

¿Por qué lo sigue recordando? ¿Acaso esa voz creyó que eso no era importante? No, debió ser importante solo que ahora soy yo, quién posee este cuerpo y su influencia no puede tocarme. Todavía.

—Sí. No quería acercarme porque sabía que se enojaría, pero al final lo hice.—En ese momento me cuestione tantas cosas, pero hasta el día de ahora no puedo recordar que fue lo que le dije a mi joven maestro.

Por más que traté de recordar sigue siendo inútil, todo se vuelve completamente blanco cuando trató de indagar más sobre eso.

—Hasta el momento sigo sin entender porque sigue haciéndole cree a todos que gusta de ese joven.—Expresó.—Desde el momento en que jure serle leal, desde ese instante usted se volvió mi único maestro y a menos que no me de órdenes, nada de lo que haga o vea no se será informado a la familia Astier.

Diell decía completamente la verdad, su deber y única responsabilidad estaba con Luther, su joven maestro al cuál a jurado cuidar y proteger.

—Sin embargo, creo que ellos merecen saber lo que está pasando con usted, joven maestro.—Dio su opinión.—Son su familia, apoyarse un poco más en ellos, confíe y deje de caminar solo por ese camino que escogió caminar solitariamente desde un principio.

—No es que no confíe, lo hago para protegerlos.—Pese a su sufrimiento el anterior Luther, siempre se preocupó por su familia.

Solo tengo algo de temor por lo que les puede pasar si les cuento la verdad, de por si el Luther de la primera línea tuvo que soportar ser un títere porque su desobediencia provocaba varios accidentes, donde terminaban involucrando a su familia.

Aunque aveces así no lo quisiera dudaba si de verdad era amado por su familia, estaba en su derecho, ¿quién no dudaría cuando te enteras que solo eres un personaje de una novela? Era lógico que pensara por momentos que ese amor familiar también era solo una simple ilusión creada para eso, para engañarle.







Nota 🤍

Buenos días. 🌤️ ¿Cómo amanecieron? ¿Bien? Espero que sí. (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠) Yo, ya me encuentro muy bien. 〜⁠(⁠꒪⁠꒳⁠꒪⁠)⁠〜

Feliz inicio de semana. ❤️🤍

Att; Yessi.A

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