8. Arrullo
Destiny estaba hecha un mar de lágrimas, James dentro de su confusión comenzó a frotar el cuerpo de Dominic, recordando las cosas de primeros auxilios Muggles, que su padre le había enseñado alguna vez.
-¡Rápido, comienza a prender fuego, necesitamos calentarlo, hay que quitarle la ropa helada para que entre en calor, saca los abrigos que están dentro de las mochilas!
Dominic cada minuto estaba más azul
-Frotemos su cuerpo, que la sangre circule, necesitamos más calor
-¡Vienen de regreso! - Señaló Tiny aterrada
Ahora, los que vieron la muerte en sus pupilas fueron ellos…
De nuevo una sombra borrascosa de aquellas medianas criaturas se cernía sobre el cielo e iba hacia ellos, lanzando su fuego, amenazante, dispuesto a matar todo aquello que estuviera vivo, quizás en Islandia no eran peligrosas porque estaban rodeados de hielo, pero…
-¡Lo siento mucho James! - Lloriqueo Tiny - Lo lamento tanto Dominic - y las lágrimas fluían con avidez… mientras que James alzó su varita, si iban a morir, sería peleando… Solo pensaba en el sufrimiento de sus padres… en sus hermanos… en el dolor de la madre de Destiny al perder otro hijo…
-¡Ataquemos! - Se levantó James
-¡Pero…! - Destiny se sentía cada vez más inútil
-¡Inflamarus! - Gritó James para concentrar todo su poder, lanzando una lengua de fuego que iba directo a la colmena de esas criaturas que se acercaban emitiendo chillidos truculentos, cuando…
De repente, un dragón de fuego se dejó ver en las alturas, más alto que la parvada de Mancornadoras, aquel dragón abrió las fauces y arrasó con el resto de las bestias que ya iban directo a los muchachos.
Quedaron estupefactos cuando solo quedaron cenizas cayendo del cielo como una lluvia fina, James se volvió a Dominic y le indicó a Tiny que encendiera fuego mientras el le quitaba la ropa escarchada y helada, para evitar el enfriamiento.
Pero Tiny se volvió a ver quién había sido su salvación y el dragón de fuego se posó sobre ellos y comenzó a consumirse y se volvió un cuerpo sólido… era Jenne…
-¡Tú! - Gimieron
-¿Qué diablos? - Chilló al ver a Dominic azul
-¡Sufrió su ataque, se muere!
James que era más hábil que Destiny ya le había quitado la ropa mojada, excepto la ropa interior y trataba de hacer una cama con los abrigos para frotarlo mejor y recuperara la circulación de la sangre.
-¿Por qué está desprotegido? - Frunció el entrecejo al ver que no poseía el aura de siempre
-¡Yo no sé! - Chilló James
Entonces ella se arrodilló y abrió los labios de Dominic y comenzó a soplar hacia el interior de su boca, un airecillo, era luminoso, transparente, que comenzaba a infiltrarse a su interior y a bajar la temperatura de su cuerpo…
Estuvo así unos minutos, soplando con avidez… Destiny le masajeaba los brazos y las piernas, y vio con alivio como recuperaba poco a poco su color, pero seguía casi inconsciente y helado, al menos respiraba, sus labios ya no eran azules.
-¿Traen casa de campaña?
-¡SI!
-Pónganla, necesitamos estar todos dentro y comenzar a hacer una protección… Proteus vio el ataque, parece ser que esa mujer que los quiere matar tiene el control de muchas criaturas peligrosas…
-¿Por qué no vinieron ellos solos?
-Porque no saben que los escuché… no quieren intervenir porque no es nuestra guerra, pero… tuve un no sé qué, que me indicaba que viniera aquí… fue algo involuntario…
Entre todos metieron a Dominic a la casa de campaña, que como era mágica, pues era familiar, todos entraban y por dentro tenía todos lo necesario, de inmediato, arrastraron al chico a una habitación que estaba cubierta por cortinas.
La ropa interior fue lo último que James le quitó mientras que Tiny miraba a otra parte y Jenne miraba de reojo… el chico no tenía mal cuerpo… Ella mandó al par de muchachos a descansar mientras ella se encargaba de mantener ambientado a Dominic.
Pasó sus manos por su cuerpo, diciendo algunos hechizos para entibiar su cuerpo… y por último, enviando de nuevo un alo vital dentro de la boca del chico… recuperaba el color maravillosamente… él parpadeó y entreabrió los ojos, mirando de cerca el rostro hermoso de Jenne que le soplaba…
Haciendo un gran esfuerzo, levantó el brazo y la jalo a su boca dándole un beso y sonrió con debilitamiento, ella gruñó y le miró molesta…
-Te amo - le dijo quedamente y volvió a cerrar los ojos…
Jenne se ruborizó y se le bajó el coraje… aquella confesión había sido tan sincera, que la tomó por sorpresa… ahora, Dominic dormía plácidamente y recuperando fuerzas… su respiración era más controlada y el frío de su cuerpo se comenzaba a quitar…
Instintivamente, ella tocó su frente, acarició su rostro, y acarició sus cabellos ¡Si que era extraño el carácter de Dominic! Pero había algo en él, que le provocaba el odiarlo y el… el… ¿Qué le gustara? ¡NO! Eso no… a ella no le gustaba… no continuaría por nadie… por nadie…
Cuando salió un momento, vio a los chicos que estaban durmiendo profundamente en unas colchonetas, encendió la calefacción y los dejo dormir… Ella se metió de nuevo a donde Dominic y se quedó a su lado, hasta que le agarró el sueño.
Pasaron algunas horas…
Cuando sintió como un cuerpo tibio, estaba junto al de ella y la mantenía bien sujeta… Abrió los ojos espantada, Jenne había bajado la guardia dejando que su parte humana durmiera, cuando podía pasar horas y días sin hacerlo… se volvió a su lado ¿Quién más podría estar sujetándola?
Un Dominic desnudo, envuelto en unas sábanas estaba a su lado, la abrazaba y dormitaba sobre su pecho… Quiso patearlo, pero se contuvo y lo jaloneo… Éste abrió los ojos y sonrió satisfecho mientras le depositaba unos besos en su cuerpo.
-¡Hey!
-Gracias - suspiró mientras se componía, ella sintió que su piel ya estaba aclimatada, pero el debilitamiento del chico aún persistía.
-Suéltame - protestó - Estás desnudo…
-Aja
-¡Dominic!
-Mi nombre suena celestial en tus labios - Murmuró - mientras la abrazaba con fuerza
-En serio… no me siento cómoda
-¿Por qué no? - Rumoreó - ¿Te soy antojable y no deseas abusar de mi?
-¿Qué? - Chilló entre dientes
-Puedes hacer conmigo lo que quieras - susurró mientras se acomodaba mejor y alcanzaba su rostro, mirándola con intensidad y deseo - Pero ahora estoy muy débil
-Aja
-No podría responderte como te mereces… pero lo sabes… - y le dio un beso largo, mismo que ella aceptó porque estaba absolutamente hipnotizada por esos ojos tan, pero tan azules que parecía el cielo mismo - que te quiero…
-¡Como tienes humor para bromear de ese modo! ¡Casi te mueres!
-Me salvaste… ahora mi alma te pertenece… soy tuyo Jenne…
-¡No quiero tu alma!
-Lo lamento - Sonrió dulcemente desarmando a Jenne - No acepto devoluciones… no querré a nadie más que no seas tú… te quiero y te deseo solo a ti…
Luego se acomodó de nuevo en el hueco de su cuello y cuando ella quiso protestar, se había dormido de nuevo, pero sentía el cuerpo tibio del chico, y ahora en una posición tal que… si se movía podía tocarle algunas partes…
Y se ruborizaba aún más…
Pero su pecho bombeaba, su corazón palpitaba de un modo que la descontrolaba y un cosquilleo en su cuerpo se apoderaba de ella, tener a Dominic así, pegado a ella, escuchando sus respiraciones trémulas y ronroneantes, con su dulce aliento sobre su cuello…
Jenne se quedó impávida ¿Qué era lo que estaba sucediendo con su cuerpo, con su corazón y sus sentimientos? ¿Acaso su parte humana estaba borrando la oscuridad de su alma?..
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