Era temprano en la aldea y los aldeanos estaban reunidos en la plaza para conocerme.
No había muchas personas, ni siquiera los chefs se habían mudado aquí.
Mi padre no era exactamente el mejor hombre, se ganaba la vida como caza recompensa.
-Hijo desde ahora vivirás en esta aldea, saluda y presentate. (decía mi padre secamente)
-NO! No quiero estar aquí! Porque no puedo ir contigo!?
-Lo siento hijo, pero el trabajo que me encargaron hacer es muy peligroso para llevar a un acompañante, es mejor que te quedes aquí. Conozco un amigo en la aldea, se encargará de cuidarte mientras no estoy.
-Adiós hijo, te quiero!
Me decía mientras me acariciaba la cabeza y se iba corriendo
-PADREE!! POR FAVOR PADRE NO TE VALLAS!!..LLEVAME CONTIGO!!
Corría y corría con lágrimas en los ojos, pero me era imposible alcanzarlo a mi edad, solo podía mirar entristecido como se iba mi padre para nunca más volver.
Solo pensaba en mi mismo, estaba afligido y muy enojado, no quería que se fuera, mi madre murió cuando nací  así que el era todo mi mundo.
Comencé a odiarlo por abandonarme en un lugar que no conocía.
Pensé que quería más su trabajo que a su propio hijo, pero una vez madure me di cuenta que el solo quería protegerme.
No era un trabajo lo que tenía,  parece ser que se había hecho un fuerte enemigo mientras cumplía una misión y mando a varios sicarios para tomar su vida. En uno de esos ataques recibí una fuerte herida en el rostro, así fue como obtuve esta marca de cruz en el entrecejo. Mi padre al verme en esas condiciones no lo pudo soportar más y a cambio de que me dejaran con vida, el personalmente se entregaría para aceptar su castigo.
Yo no sabía eso hasta mucho tiempo después, ahora mismo estaba muy malhumorado y depresivo, no quería hablar con nadie y los otros niños al ver mi fea cicatriz tampoco querían hacerlo.
El amigo del que hablaba mi padre era un hombre llamado Chang, así es, el padre de ching y era el maestro de artes marciales de la aldea.
Antes era un compañero de mi padre y al pedirle que me quedara con el acepto con gusto.
Tenía una hija un año menor que yo, era una niña linda pero algo rara, tenia un pollito en la cabeza lo que me parecía muy raro, ella intentaba entablar una conversación para que fuéramos amigos pero yo solo me iba, no quería hablar con nadie y sentía miedo de que si habría mi corazón de nuevo sería abandonado como lo hizo mi padre.
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Paso un año y yo seguía igual. Debes en cuando escuchaba algunas noticias de la aldea,  parece ser que hoy se mudaban unos nuevos habitantes, chefs para ser precisos, para habrír un restaurante y resulta que habían traído a su sobrina con ellos. Todos decían que la niña era muy linda pero a mi no me interesaba.
Pasaron los días y todos seguían hablando de la deliciosa comida que preparaban los nuevos residentes, incluso algunas tiendas tuvieron que cerrar por ellos.
Mientras estaba repasando lo que me enseño el maestro Chang alguien se me apareció en los arbustos haciéndome caer del susto.
-Hola! que estas haciendo en un lugar tan apartado!?
(Me decía la niña curiosa.)
-Acaso no lo vez!?..Estoy entrenando así que por favor largate, me quiero concentrar!
(estaba muy enojado en ese momento, el entrenamiento era lo único que opacada el dolor en mis pensamientos y esta extraña vino a molestar)
-Hmph eres un niño odioso! yo solo vine a saludar, no tienes porque hablarme así.
Ho!? Así que entrenando, que tal un duelo, si me ganas te traeré comida gratis todos los días y si yo ganó me dejarás visitarte sin quejas!..Trato!?
-Comida gratis todos los días!??
Estaba entusiasmado,  si ganaba no tendría que probar más los experimentos extraños del maestro Chang así que acepte al instante el duelo que esta niña de nueve años me propuso.
-Guaaaah!!
Caí al instante, ni siquiera dure diez segundos contra ella, su fuerza era impresionante para alguien de su edad.
-Ju ju ju! Parece que yo ganó! Así que te podre visitar cuando quiera y no tendrás queja alguna.
Su sonrisa de victoria me ponía furioso, lo tenia todo planeado desde el principio y caí como tonto. Esa fue la primera vez que pensé, "las chicas son aterradoras."
Yo estaba devastado, perdiendo contra una niña menor que ello,  mi orgullo como hombre estaba por los suelos, pero estaba fascinado y quería saber un poco más de ella así que acepte gustoso que me visitará.
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Pasaron los meses y sentí que por fin me estaba habriendo con alguien. Me alegraba cada vez que la niña me visitaba y aveces traía la merienda para comer juntos. Se había hecho muy buena amiga de Ching así que no la veía mucho, eso me ponía triste, no quería hacer nada si ella no estaba presente, incluso soñaba con ella mientas dormía.
Un día me decidí, tenia que contarle mis sentimientos y estaba muy nervioso pero ella tenía que saberlo, ya no podía dejarlo dentro de mi pecho así que sali corriendo para decirle.
......pero al llegar a su casa mi piernas comenzaron a temblar y mi alma dejo mi cuerpo por lo que veía.
La chica que amaba estaba abrazando con locura a alguien que no era yo, eso me partió el corazón. La ira se apoderó de mi y corrí hacia el chico tirandolo al suelo y comencé a pegarle con todo lo que tenía. El no se podía defender y recibía herida tras herida cada vez que le golpeaba, no me podía detener, mi cerebro no parada de gritar que me detuviera pero mi corazón no me dejaba pensar claramente.
En eso sufrí un fuerte empujón que me lanzó muy lejos contra unas cajas de maíz, me dolía bastante sentí que fui atropellado por un auto a toda velocidad.
En eso mire hacia arriba y era la chica que me gustaba la que me había atacado. Mis ojos se habrieron en grande al ver su cara llena de tristeza, dolor y mucho miedo cuando me veía y no sólo ella, los demás también.
Me sentía horrible en ese momento, sucedía nuevamente,  estaba siendo dejado atrás, la chica que amaba quería a alguien que no era yo y ahora estaba asustada de mi.
Me levante como pude y salí corriendo de allí, busque mis cosas en la casa de Chang y escape de la aldea para no volver en mucho tiempo.
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Pasaron días desde que deje la aldea y mientras viajaba pensando en lo que haría a continuación, termine rodeado por varios niños menores que yo.
-Oye chico danos todo lo que tienes si no quieres morir.
Yo bufé ante sus palabras, no estaba de humor para esto así que los ignore y me fui.
-E...espera no te irás a ningún lado.
Todos me atacaron en conjunto pero comparado con el entrenamiento de Chang esto no fue nada, esquive sus ataques con extrema facilidad y les di una buena golpisa para que me dejaran en paz.
Uno de ellos aun consciente no se rendía.
-N...no te irás! (Decía el niño)
-Detente es inútil que sigas, vuelvan a sus hogares y déjenme en paz.
El chico al escuchar mis palabras se enfureció y grito.
-SI TUVIERAMOS ALGO LLAMADO HOGAR NO ESTARÍAMOS HACIENDO ESTO!!!
Me sorprendí por sus palabras.
-Que quieres decir!? (Le pregunte) estaba algo intrigado.
-Nosotros somo huérfanos de las calles. Nuestros padres nos abandonaron, otros murieron por las drogas y algunos escapamos por miedo a ser vendidos como esclavos para pagar sus deudas. Solo nos tenemos a nosotros.
Comenzaron a llorar, no mentían, tenían varias heridas en sus cuerpos que lo probaban.
Tobe no dijo nada solo agarro su bolso que tenía toda la comida que le quedaba y se la lanzó a los hambrientos.
Los chicos se sorprendieron.
-Que!! te compadeces de nosotros?
No queremos tu lastima. (decían furiosos)
Pero Tobe negó con la cabeza.
-No siento pena por ustedes,  siento una sercania por la historia que me an contado, después de todo e sufrido lo mismo que ustedes así que les propongo un trato, síganme como su líder y me encargaré que nunca más pasen hambre.
Los ninjas vieron la sinceridad en sus palabras y contenía el afecto que no sentían desde hace mucho, así que aceptaron rápidamente su oferta.
............
Pasaron dos años y volví a la aldea Sooga con el grupo de delincuentes que ahora eran mis ninjas personales. Tuvimos altos y bajos en nuestras aventuras pero siempre nos volvimos a levantar y continuamos.
Los niños que alguna vez conocí ya no tenían esos ojos vacíos llenos de tristeza y desesperación, ahora se veían muy alegres y llenos de risas.
Pero en cambio yo tenía una mirada melancólica, cada vez que nos aproximabamos a la aldea que una vez crecí mi corazón no paraba de latir al pensar en lo que diría la chica cuando me viera, se acordaria de mi?..tiene once años ahora mismo así que debe estar aun más linda desde que la conocí.
Mientras pensaba en ello alguien salto de los árboles,  era otro ninja. Al verlo pensé.
-que traje tan ridículo el que lleva y quien lo peinada? su hermanita menor?
Pero al contrario de su apariencia sus habilidades eran otra historia. Era bastante fuerte y había acabado a mis ninjas en cuestión de minutos.
Solo quedábamos el y yo,  la pelea estaba reñida y no parecía haber un ganador, pero en eso una niña de blusa roja salto directo hacia mi rival y lo abrazo muy fuerte dándole un beso en los labios.
Eso me sorprendió y no sólo por sus acciones, también porque conocía a esa chica, la única que no me pude quitar de la cabeza desde hacía ya mucho tiempo y me dolía que estuviera en una relación con el chico que, ahora me di cuenta, era el mismo que ataque ese día.
Trate de hablarle y decirle quien era pero solo me ignoro y me dio un fuerte golpe por haberla interrumpido con su amado.
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Después de recobrar la conciencia comencé a buscar información sobre los acontecimientos de estos años en que no estuve.
Al parecer el ninja con el traje ridículo era el nuevo héroe de la aldea y mi amada por lo que la gente veía tenía una fuerte relación con el, además que dejó de hablar para sentirse más unida con el ninja.
Me sentía más triste con cada dato que contaba mi subordinado.
Y nose si fue por tener muchas emociónes dolorosas en mi que no me hizo pensar claramente.
Solo pude pensar en una cosa y me propuse a derrotar al ninja que mi amada quería, si el no estuviera aquí todo sería normal como antes.
Planes tras planes fallidos una y otra vez. No podía vencerlo y cuando estaba cerca de darle el golpe final, la chica siempre aparecía y me quedaba petrificado cada vez que la veía.
Mi ira crecía más al verlos juntos y el resentimiento vacío que tenía con el ninja de coletas creció al ver que ignoraba los afectos de la chica.
-Por que!? Si la tiene porque la trata de esa forma!? Si fuera yo jamás me apartaría de ella!!
Tengo que esforzarme más, mucho más!! solo así podré volver todo a como era antes.
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-Bueno ahora lo sabes, de verdad que era muy estúpido en ese tiempo y me di cuenta muy tarde de lo erróneo que estaba, pero la ira que sentía no me dejaba pensar racionalmente y todo término así jajaja. (decía Tobe con una sonrisa a medias, se burlaba de si mismo por haber sido tan estúpido y desperdiciado tanto tiempo)
Hmm..? Que pasa Pucca no has hablado en toda la histo......!!?
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Bueeeeeeeeno se los dejo en suspenso para el segundo capítulo jajajaja,  no se preocupen que después de las 16 lo subo. Espero que les allá gustado y comenten como se sintieron al leer la melodramática historia de nuestro prota. XD