Agnar espero pacientemente afuera de la escuela, vió como su hija y Jack llegaban, ambos se bajaron tomados de la mano, convenientemente a  Jack se le olvidó algo en el auto.

Agnar no lo pensó dos veces y fue inmediatamente tras de él.

- ¡Tú!- Agnar lo golpeó en el rostro.

Elsa escuchó el golpe y salió a ver qué pasaba, junto con unos treinta alumnos tras de ella y otros veinte que venían llegando claro.

Rápidamente se hizo un círculo que rodeaba a un hombre de unos cincuenta años que acababa de golpear al entrenador de la escuela.

- ¡Cómo te atreviste! ¡Confíe en ti!- Agnar dio otro golpe a Jack quien no intentaba esquivarlo sin corresponder.

- ¡No se dejé!- grito Cusco desdé los espectadores.

Elsa se abrió paso entre la bola de gente para ver cómo su padre estaba dispuesto a moler a golpes a su novio.

- ¡Papá!- media tribuna volteó a ver a Elsa.

- ¡Entonces si déjate!- volvió a gritar Cusco.

Elsa fue con ellos colocándose en medio de ambos.

- Papá qué te pasa-

- ¡Qué me pasa! Sucede que un día voy tranquilo a una fiesta y cuando regreso ya no están ni mi hija ni la mascota- todos los espectadores hicieron un "uhhh"

- Papá aquí No-

Los tres fueron a un lugar donde no toda la escuela estuviera viendo el chisme de la relación de Elsa y Jack.

Después de ser sometidos al tercer grado por largas horas Agnar terminó resignandose y pidiendo disculpas por haberle partido el labio a su yerno.

Al siguiente día el primero en recibir a Jack fue Cusco.

- ¿Elsa está embarazada?- dijo sin rodeos.

- ¡Qué! ¡No!-

- ¿Entonces por qué tu suegro te odia tanto?

- Metiche

***

Me acaban de avisar que tengo que hacer una demostración de trigonometría en línea me lleva la chinita.