Muérdago
Pronto sería Navidad, y la escuela pensaba tener un partido de hockey amistosos y después una pequeña fiesta.
Después del partido, en el cual ganaron todos fueron a la fiesta.
Elsa y Jack, aparte de ser maestros también eran chaperones, una buena excusa por la cual estar juntos durante toda la fiesta.
Una chica aproximadamente de una quince años llegó y les aventó una ramita.
- ¿Muérdago?- dijo Elsa oliendo la ramita.
Jack alzó sus cejas inquisitivamente, Elsa subió el muérdago haciendo que él besara sus labios.
Para su desgracia el metiche mayor de la relación llegó.
- ¿Cómo se supone que son nuestros chaperones si nos están dando este ejemplo?- dijo Cusco.
- Por Dios Cusco se que te gusta ver nuestra relación- dijo Elsa bajando el muérdago, Jack deposito un último beso en la mejilla de ella.
- Muy bien, muy bien, yo voy para aya- dijo marchandose.
Empezó a sonar una canción lenta y todas las parejas fueron a la pista.
- ¿Bailamos?- Jack tendió su mano a Elsa.
Ella negó.
- Cusco ya nos regaño, si nos ve algún superior nos puede ir mal.
- Está bien, te amo.
Elsa se sorprendió, era la primera vez que alguien decía "te amo" en la relación, por lo que entró en pánico.
- Yo todavía no- salió corriendo del gimnasio con rumbo a su pequeña oficina.
Jack se regaño mentalmente, la había cagado como siempre, a lo lejos vió a Ariel la instructora de natación.
- Ariel cubreme, ahora vuelvo.
Jack salió corriendo rumbo a la oficina de Elsa, la conocía muy bien, sabía que iría a ese lugar.
Elsa estaba en apoyada en su escritorio meditando las cosas, sabía que amaba a Jack pero no estaba lista para escuchar esas palabras o para pronunciarlas.
Jack entró a la oficina tocando el hombro de su novia.
- Perdón si fuí muy rápido, no tienes que decirme lo mismo ahora pero no te alejes de mi- Jack la abrazo poniendo su barbilla en el hombro de Elsa.
- Tranquilo, entre en pánico no estaba lista para escuchar esas palabras- se volteó hacía él, Jack tenía sus manos en su cintura y ella llevó las suyas a su nuca.
- Entiendo que aún no sientas eso por mi-
Elsa acarició los cabellos de su nuca y dió un beso en sus labios.
- Si lo siento, solo me asusté. Te amo.
Una sonrisa se pintó en el rostro de Jack.
Tomó uno de los bordes de la blusa que más bien parecía sudadera de Elsa y se metió entre ese estrecho lugar, era una costumbre que tenía, siempre que Elsa usaba sudaderas o blusas holgadas el entraba en ellas y empezaba a besar a Elsa.
Ambos estaban felices dándose besos cuando nuevamente la puerta se abrió.
- ¿Están aquí? Ariel me envió a... Ay mis castos ojos- dijo Cusco.
Jack salió cómo pudo de entre la blusa de su novia, los tres estaban apenados y un tanto sonrojados.
Así regresaron a la fiesta, con pena en sus rostros.
Elsa y Jack aún pasaron la navidad cada quien con sus familias se sentían completamente unidos a pesar de la distancia.
Aunque el año nuevo si la pasaron juntos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top