Después del "accidente" con la madre de Jack, Elsa había conocido al padre de él, quien estaba estacionando el auto ese mismo día.

Había pasado una semana desde que Jack conoció a los padres de Elsa y hoy era el cumpleaños de Marie.

Elsa había pedido permiso en el trabajo, ya que en lugar de festejar los cincuenta años de la mujer en su casa que quedaba a unas horas de dónde ambos vivían, lo festejaría a las afuera de la ciudad y luego adentrándose a en una reserva natural.

Jack y Elsa tuvieron que salir en la noche para llegar temprano el día siguiente. Para su desgracia no encontraron ningún hotel en el camino por lo que se tuvieron que quedar en la orilla de la carretera.

Ambos durmieron en la parte trasera del auto y después continuaron.

- Mi hermana me mandó un mensaje, dice que se le la veamos sobre carretera en la próxima estación de servicio- dijo Jack viendo su teléfono, era el turno de Elsa para manejar.

Ambos esperaron en la estación hasta la llegada de una joven de cabello castaño y mochila morada.

- Hola hermanito, Hola Elsa- dijo entrando al asiento trasero.

- Hola Emma-

- Hola hermanita, ¿Jaime?-

- No pudo venir, tiene que hacer algo para su graduación-

Que su hermano mensionara a su novio hizo que recordara algo de lo que tenía planeado vengarse desdé hace mucho tiempo, más precisamen desdé que Jaime fue presentado a su hermano.

- Elsa pregunta sería, ¿Ya te acostaste con él?- Jack había dicho lo mismo cuando conoció a Jaime, solo que con la vos sería, el pobre Jaime estaba muerto de nervios ese día y casi se orina en los pantalones ante esa pregunta.

Jack realmente no era un hermano celoso, simplemente le gustaba molestar a su hermana; pero ahora él estaba rojo como un tomate viendo de reojo a Elsa.

- anoche en tu asiento-

Emma hizo una mueca y Jack empezó a reír, anoche no había pasado nada tan "agitado" pero hipotéticamente si se acostaron.

Pasaron unos minutos y Emma seguía con una cara de incomodidad bastante notoria.

- Tranquila no pasó lo que tú crees, solo dormimos- Emma suspiró aliviada.

- ¿Trabajas en una farmacia Emma?- preguntó Elsa, gracias a Emma y su encuesta ambos se conocieron.

- Sí, bueno espero que ya no por mucho, me recibí como enfermera hace unos meses pero aún no encuentro trabajo.

- Yo trabajo en un asilo, están buscando personal de enfermería ¿Te interesa?- a Emma le brillaron los ojos, de no ser porque Elsa estaba manejando la abrasaria.

- Me agradas.

Los tres sonrieron y siguieron hablando hasta llegar a la reserva natural.