Solar POV

Los sonoros ronquidos de la rubia se escuchan por toda la habitación, la cual se halla a oscuras, además de los fuertes truenos y la lluvia que está cayendo afuera. Es de noche, y nos hallamos, lastimosamente, de regreso en Corea. Nuestro CEO nos dijo que no podíamos viajar a Suiza o algún otro país ya que tenemos que iniciar con las grabaciones para el nuevo show en el que nos han invitado, Queendom.

Hemos decidido en vivir en mi casa, y por veces visitar el antiguo apartamento de Byul, ya que el CEO cree que, si nos quedamos en mi apartamento constantemente, los fans podrían sospechar, más por las fotos que sube en Instagram Byul, y en los videos de Solarsido. Por lo tanto, mi hermana y mi esposa ya se han hecho muy amigas, pues Yonghee vive con nosotras, por el momento.

Es la una de la madrugada, y aún no puedo dormir. ¿Saben cómo se siente tener tanto sueño que no puedes dormir? Pues me ha estado pasando unos días ya. Pienso mucho acerca de tantas cosas últimamente, en los viajes que planeo con Byul, en tener nuestra propia casa, sin fingir nuestra vida en general...

- Yong...- interrumpe mis pensamientos la voz soñolienta de mi esposa, quien, a la vez, me toca el hombro derecho.

- Moon Byul, ¿estás despierta? - pregunto extrañada, volteando a ver a mi derecha y observando una Moon Byul con el pelo desarreglado, un pijama azul oscuro parecido al mío rosa, arrugado y sabanas cubriéndole hasta la cintura, también hechas un lío.

- Es que, me acabo de despertar...- responde en un susurro la rubia, con los ojos algo llorosos y una expresión angustiada - Tuve una pesadilla y ya no puedo dormir.

- ¿Tan fea fue? - digo esto mientras termino de voltear mi cuerpo al frente suyo. Moon Byul es de las personas que nunca tienen pesadillas, a menos que le preocupe o le ponga ansiosa algo; es por ello, que me comienza a preocupar su estado.

Esta solo se limita a asentir mientras pocas lagrimas salen de sus ojos. Rápidamente, coloco mi mano sobre su mejilla, y me dedico a limpiarlas, para luego acariciar su rostro, con el fin de confortarla.

- Tranquila, solo fue un mal sueño- le digo con voz preocupada, para luego abrazar su cintura y darle un suave beso en los labios.

Al separar nuestros labios, la rubia solo se limita a sonreírme y verme de una manera tan débil, que hace que mi corazón duela enormemente por verla así.

- Te amo- me susurra.

- Yo te amo a ti- le digo de igual manera mientras ambas nos observamos de entre los sonoros truenos. Mi esposa entonces, regresa sus labios a los míos, y al separarlos, se acurruca en mi pecho mientras mis manos acarician su pelo.

A la mañana siguiente, me despierto antes que la menor, y, al terminar de ducharme, salgo de la habitación a hacernos la comida. Mis pensamientos divagan en la noche anterior, en los ojos rojos de Byulyi, en su expresión... ¿Qué le habrá pasado para haber tenido esa pesadilla? Pienso con inquietud.

- Huele delicioso- exclama una voz detrás de mí, la cual al principio creo que es de Byul, pero al oírla mejor sé de quién se trata.

- Yonghee, pensé que hoy ibas más temprano al trabajo.

- Si pues, no dormí muy bien ayer, entonces pedí descanso. ¿y tú hermanita?

- Byul y yo no dormimos bien anoche...- digo en un susurro, con la sartén en mano.

- Uuuu Yongsun, asi que a eso se refieren con que la lluvia es para enamorados...

- No me refiero a eso unnie- exclamo pegándole con una caja de cereal en la cabeza- Malpensada

- Si, si, quien habla- dice sobándose el área del golpe.

- ¿Yo? - digo suspirando luego- Últimamente me ha dado insomnio, y Byul no sé qué le pasa, pero anda angustiada.

- ¿Por qué lo dices Yong?

- Porque tuvo una pesadilla ayer, y ella solo las tiene cuando le pasa algo.

- ¿Será que no están cogiendo bien?- dice pícaramente la mayor.

- ¡Yonghee! - le reclamo esta vez golpeándole con más fuerza.

- Ouch, me vas a dejar un morete – reclama la castaña con su mano en la cabeza - Pero quizá solo sea algo del trabajo.

- No creo.

De repente, ambas oímos pasos en la cocina y nos volteamos asustadas.

- Calma, soy solo yo- explica la rubia echándose a reír.

Anda puestos unos joggers grises, una gorra blanca, un top negro que deja al descubierto su marcado abdomen (y su poca voluptuosidad), y unos boxers que noto por como la parte donde está la marca sobresale del pantalón. A Byul le encanta usar boxers últimamente, en especial los masculinos, según dice los femeninos son muy incómodos.

- Byul, ponte la camisa- le reclamo sonrojada y algo alterada por su repentino look.

Bueno, tan repentino no es; ahora que estamos casadas prefiere andar semidesnuda por toda la casa, o al menos cuando Yonghee no está, que es casi el noventa y nueve por ciento de las veces, ya que la castaña se pasa más tiempo con su nueva novia que con nosotras. Solo pasa aquí un día a la semana.

- Vamos, como que si te importara- dice pícaramente la menor, para luego guiñarme con su ojo izquierdo, haciendo un sonido con su lengua.

- Bueno, yo regreso con Young Mi-explica mi hermana riendo ante mi expresión sonrojada- Las veo en una semana.

- ¿Y tú desayuno? - exclamo mientras esta cruza la puerta.

- ¡Esta a donde voy! - grita en medio de carcajadas la mayor.

- ¡Eres una sucia! - le digo de igual manera mientras cierro la puerta.

Regreso a la cocina y me hallo con Byul en la mesa, pero ahora me la encuentro sin el top que andaba puesto.

- ¡Moon!

- ¿Creías que con este calor iba a permanecer con ese top? - dice esta con una pícara sonrisa en el rostro- Además, tenía que aprovechar que Yonghee ya no está aquí. - esta vez habla en un susurro mientras se acerca a mí y comienza a besar mi cuello.

- B...byul- digo en un esfuerzo de apartarla de mí, más es en vano, ya me tiene contra la pared.

- ¿Sabes cuánto te deseo? - pregunta mi esposa mientras se acerca a mis labios y los comienza a besar. - Por cierto, buenos días- susurra para luego succionar mi labio inferior y morderlo con lujuria.

Mis manos corren a su cuello, mientras las suyas se encuentran firmes en la pared, enjaulándome. En un momento, su lengua entra en mi boca y yo comienzo a chuparla. Entre el vaivén de nuestros labios, la calentura aumenta, y mis manos empiezan a recorrer la desnuda espalda de la menor. Sin embargo, mis pensamientos viajan hacia la noche anterior y entonces, con mis manos en su torso, la aparto de mí.

- ¿Ddunie? - pregunta mirándome extrañada.

- ¿Qué tienes Byul? - la miro consternada.

- ¿A qué te refieres?

- Te comportas así cuando te pasa algo, y tienes pesadillas- digo tratando de cuestionarla.

- No es nada – cambia su expresión a una seria y quita sus manos de la pared, alejándose. – Será mejor que me vaya a arreglar, pronto va a venir Hyelim unnie por nosotras.

Nos mantenemos calladas en el carro que hace tiempo no usamos. Nos hallamos con Hyejin y Wheein, quienes para el show de Queendom nos acompañaran todos los días.

- Unnies, ¿tienen algo? - pregunta la morena quien esta agarrada de la mano de Wheein.

- Nada que te preocupe Hyejin- exclama la rubia.

Al llegar al lugar, saludamos a muchas chicas de grupos que estarán con nosotras, incluidas Apink y las amigas de Moon Byul que se hallan en (G)I-dle, AOA y Oh my girl. Sin embargo, pronto toda mi felicidad se derrumba.

- ¿Byul? – pregunta de repente una voz atrás de nuestro grupo.

- Dahee- 

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Mil disculpas, se que hace tiempo no actualizaba, por eso les traje un capítulo más largo, espero lo disfruten.

Pd: Stream Spit it out, esta hermosooo.

Annyeong<3