Narrador Pov's

Takeshi caminaba por las calles de Musutafu,dirigiéndose a su departamento donde vivía con su novio.

Ambos habían estado ocupados últimamente,casi no se veían.

La razón era por sus trabajos.

Su novio estaba tan ocupado trabajando y protegiendo a las personas como héroe.

Mientras él se encargaba de los labores de la casa en las mañanas y en las tardes casi noches se la pasaba trabajando en trabajitos sucios en el extranjero.

Claro,nada TAN ilegal.

Después de todo,estabamos hablando de Takeshi.

Takeshi odiaba las ilegalidades e injusticias.

Usualmente prefiere investigar cada trabajó antes de hacerlo para ver si valía la pena hacerlos o no.

Pero eso costaba tiempo y Takeshi necesitaba tiempo para su novio.

Las veces que se podían ver,eran cuando los dos se despertaban en las madrugadas,ya sea para tomar agua o para ir al baño,se miraban,aunque el otro estuviera dormido,solo se deseaban la buenas noches aunque el otro no respondiera.

Pero bueno,ahora mismo había vuelto un día antes de lo esperado,apenas comenzaba a anochecer.

Su novio le había comentado que hoy era su día de descanso y que se la pasaría en casa,descansando.

Y él quería estar con su amado.

En eso Takeshi pasó frente a una joyería y por un momento miró el gran ventanal de exhibición y miró varios anillos de compromiso.

Takeshi desde siempre había decidido jamás,JAMÁS casarse.

Pero desde que estaba con su novio,la idea ya no parecía tan desagradable.

Comenzaba a agradarle la idea de estar unido a su novio por un lado como lo era un anillo.

Tal vez....

Takeshi dudó,viendo los anillos,pero ninguno le convencía.

Y eran caros.

Pero solo suspiró.

Su novio merecía lo mejor.

Y no dudó en entrar a la tienda a buscar un buen anillo.

Claro,sabía de antemano que su novio lo aceptaría,varías veces platicaron sobre el asunto de casarse y aunque Takeshi parecía desagradarle la idea,a su novio no,en cambio,él mismo dijo que aceptaría totalmente si Takeshi se lo propusiera.

¿Y qué esperaba Takeshi?.

Tampoco era tan joven,era un hombre de 39 años,casi 40 años.

El tiempo se le escapaba de las manos a lado de su novio que apenas y tenía 20 años.

La diferencia era notoria y aunque su relación era de lo mejor.

Obviamente había muchas cosas que alteraba su relación.

Por ejemplo,la fama y popularidad que comenzaba a ganar su novio.

Cada vez que salían,eran rodeados y apenas y podían pasar un momento juntos afuera.

Pero no se quejaba,si su novio estaba feliz,Takeshi era feliz.

Al salir de la joyería,llevaba una cajita de terciopelo color azul para después guardarla en su bolsillo y comprar una flores antes de que cerrarán la florería y después pasó a comprar algo de comida para llevar a casa.

-Un rato después...-

Takeshi por fin llegó a su departamento.

No pudo evitar sentirse nervioso mientras apretaba el ramo de rosas rojas.

¿Porqué se sentía tan nervioso?.

Ok,no era tan difícil,solo le estaba por proponer matrimonio al chico que amaba.

Y sabía que aceptaría.

Asi que sin más,abrió la puerta con una leve sonrisa y un leve rubor en sus mejillas.

Hasta que escuchó un fuerte gemido.

Que provenía de su novio.

Takeshi aún con una pequeña sonrisa,vió como su novio estaba en la cama,junto a su amigo de la milicia.

Ambos desnudos.

Follando.

X:O-oh dios.–Gimió aferrándose a la espalda del mayor,hasta que vió la puerta abierta.–T-takeshi...–Soltó alertado,mientras estaba aferrado a su amante.

Su amigo se tensó y se giró a verlo.

Takeshi solo seguía con su expresión de antes,una pequeña sonrisa y los ojos bien abiertos,de la sorpresa.

Para después Takeshi soltar las flores y la comida.

Todo se cayó de su manos.

Y su corazón se rompió dentro de él.

X:Y-yo te lo puedo explicar....–Soltó tapándose con la sábana e intentando pararse para acercarse a su novio,pero las piernas le temblaban.

¿Cuánto tiempo estuvieron....

No,no,Takeshi NO quería saber eso.

Pero apesar de eso,lo único que atinó hacer Takeshi fue cerrar la puerta con tanta calma.

Como si no hubiera visto como le ponían los cuernos con su supuesto amigo en SU cama,dentro de SU departamento.

Y se dió la vuelta y comenzó a caminar por el pasillo,regresando por donde vino.

Su expresión era tranquila.

Aún cuando en el fondo le dolía está jodida traición.

La peor traición que le podían hacer a una persona.

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