Alacre(n)

Capitulo especial.

Cada capitulo especial será dirigido para conocer la vida de un personaje, héroe, villano u Oc. (Tienen importancia porque pueden entender algunas cosas o crear teorías a futuro)
No es necesario leerlo en todo caso; si quieren hacerlo, cuidado al final.

Especial 1: Antes del inicio

La lluvia en la cuidad caía de manera estrepitosa, todos los ciudadanos iban corriendo de un lado a otro intentando resguardarse del frió, el viento chocaba con las ventanas junto a su silbido melódico, los autos levantaban ríos de agua tras su paso y la gente de aglomeraba en las techos de los paraderos.

Pero entremedio de todo ese ruido, una joven de ojos perfectamente equilibrados entre el ámbar y el capuchino; entonaba una dulce melodía mientras disfrutaba la lluvia caer. Iba tranquila, sin prisa admirando todo a su alrededor y disfrutando el aroma de la lluvia chocar con el césped.

Sus pasos eran como una dulce danza, como si una ninfa jugara bajo la lluvia alegrando a todos quienes la veían reír y jugar. Sus cabellos de color vino revoloteaban con libertad bajo el llanto de las nubes, dejándose acariciar por el viento; haciendo reír a la joven con entusiasmo.

Pero aquella risa se detuvo al escuchar un aullido de dolor en uno de los callejones. Cualquiera diría que se marcharse, que era peligroso, pero su cuerpo se movió sin pensarlo, si alguien necesitaba su ayuda, ella estaría allí.
Así que entro por el callejón observando al dueño de tal quejido, un joven de piel canela y con el cabello tan negro como las alas de un cuervo. 

Tenía su estómago bañado en sangre, al igual que su brazo y parte de su rostro.

Realmente lucía mal.

Intento acercarse, pero el joven de inmediato se alejo, con su cuerpo en espera al igual que un lobo.

-Solo quiero...AH -Un grito ahogado fue liberado de la garganta de la joven, por el temor de un acto repentino. Estaba acostada de espaldas al piso, su boca era tapada por una mano morena, sus piernas enredadas en otras más firmes y sus brazos eran prisioneros sobre su cabeza.

-Si gritas despedazare tu cuello- La grave voz de aquel hombre acaricio el oido de la joven. Que después del pequeño susto quedó sorprendida por otra cosa.

-Son hermosos- Comento sin vergüenza, escapando suavemente del agarre contrario, llevo su mano por el rostro de su atacante.- Son como gemas de invierno-

El moreno estaba anonadado y preocupado por el poco instinto de sobrevivencia que mostraba la joven bajo de él. Pero la mirada cálida y preocupada de la chica le causaba algo extraño en todo su ser, lo que causó que la soltara y se sentará frente a ella.

-Estás muy herido...no deberías actuar así. Déjame ayudarte- la joven de inmediato al sentirse liberada, rebuscó en su bolso, sacando vendas y un desinfectante- Siempre traigo esto por si mi quirk no es suficiente- ella sonrió

-Estas loca- Aquella frase salió sin apuro alguno y de manera natural; combinada con una perfecta sonrisa que mostró dos grandes colmillos.

-Me lo dicen a menudo - La sonrisa se ensanchó y su mano empezó a trazar con cuidado un camino de sanación por el rostro del pelinegro.

Ambos estaban en una burbuja sin razón aparente, pero se sentía bien, se sentía correcto.

Ellos no lo sabían, pero ese curioso encuentro sería el inicio de una bella y trágica melodía.

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-Señorita Kalia. Gracias por venir hoy -Un hombre de cabellos castaños algo largos recibió con una sonrisa a la bella joven de cabellos vinos.

- No me llames señoritas David, mucho menos si soy menor a ti- Sus mejillas se ensancharon causando ternura a los dos jóvenes que la veian.- Toshinori dile algo.-

La risa particular del rubio gigante, resono por el cuarto, calmando el supuesto enfado de la joven.- Pero Kalia, tu padre es un héroe de renombre. David solo intenta acostumbrarse a llamarte así. No quiere que se repita lo de la otra vez.

-Mi papá es muy a la antigua. Además son héroes no le veo el problema a que me llamen por mi nombre.- La joven se acercó a una mesa y dejó allí su bolso- Bueno no importa ya...Toshinori déjame ver tu herida-

-¡Si querida doctora!- Con energías el héroe Nipón se sentó en la silla; quitándose la playera para que Kalia viera la herida y logrará sanarla rápidamente.

-Fue héroe sin el traje...otra vez- Comento David mientras se sentaba en su escritorio a perfeccionar algunos detalles.

-Mi cuerpo reacciona solo; no pueden culparme-

-Y se supone que eres mi superior Toshinori- La de cabellos vino se acercó frotando sus manos para luego ir pasando con suavidad sobre la orillas de la herida; dejando una pequeña luz que indicaba que las células se estaba multiplicando de manera correcta para cerrar la herida antes de lo normal.

-Gracias por venir tan pronto como te llamamos- Comento David.

-Son mis amigos. Además me encanta ayudar a quien me necesite - Contesto con tranquilidad mientras se aleja del rubio que tenía sus mejilla sonrojadas. Toshinori Yagi veía en esa dulce joven, una mujer ideal para acompañarlo contra el crimen.
Pero la diferencia de edad y el peligro que conlleva el mundo del heroísmo no le permitían decir más que palabras amistosas a la chica de ojos ámbar, a la chica que amaba tanto.

-Como toda gran heroína, la señorita Kalia vendrá a ayudar. - Grito con entusiasmo Toshinori mientras eleva en brazos a la chica, quién solo río por el acto.

-Solo soy una simple estudiante de medicina-

-No eres simple.- Comento David mientras acariciaba su cabellera- Ayudas a todos, no te importa de donde venga o quién sea. - hizo una pausa- Pocas personas son como ustedes dos, ayudar al otro sin pedir nada a cambio.

Kalia y Toshinori se observaron y leyendo sus mentes, fueron a abrazar a su castaño favorito; quién algo asustado, pero riendo; recibió el gran abrazo de oso de ambos.

Se quedaron conversando un rato; disfrutando del día libre que todos tenían y de la sensación familiar que les causaba mirar al otro sonreír.
Pero unos ladridos fuertes interrumpieron las risas, pero no por mucho tiempo; después de todo era bastante gracioso que el perro gigante de Kalia la fuera a buscar.

-Pero mira quién vino. ¿Cómo estás campeón?- Toshinori se acercó al gran perro negro y acarició su cabeza un rato, antes de que este intentará morderlo como siempre.

-Ya déjalo Toshinori. Todos sabemos que a ese perro no le agradas tanto-

-No es justo David. A ti te ama-

-Porque no ando apegado a su dueña- Río mientras miraba a la joven estudiante acercarse al perro. Quién la espero con calma para recibir con ternura esas caricias.
Si no fuera un simple perro; David pensaría que este estaba enamorado de Kalia.

-Bueno, como Einer me vino a buscar ya debería irme-

-¿No te puedes quedar un poco más?-Pregunto Yagi mientras la miraba fijamente- No nos veremos en un año y debemos fortalecer nuestra amistad-

- De seguro es muy fuerte ya. Pero debí irme haces unos minutos - respondió mientras miraba su reloj - No se preocupen les hablaré todos los días que pueda.
¡Somos amigos y siempre será así!-Termino sonriendo; iluminado la estancia como si de un sol se tratará.

Y con un beso en la mejilla se despidió de ambos hombres; de sus dos grandes amigos.
Sin saber que no los volvería a ver.

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-¡Einar! ¿Que paso?- La joven de cabello vino fue corriendo a la puerta del departamento, para ayudar a su pareja que venía con un hombre mal herido en su espalda y atrás otros dos hombres quienes vigilaban los alrededores- Pasen, ¡Rapido!

-Señorita Kalia...perdone ...mi aparien..-

-No se preocupe por eso. Einar déjalo en la cama rápido.- De inmediato el nombrado obedeció, siendo seguido por los otros dos hombre que entraron dando sus respetos a la dueña del lugar.- Bien, necesito agua y vendas. Vayan a buscarla mientras me encargo de las otras heridas-

Kalia empezó a acariciar las heridas del hombre, sintiendo como el hombre se esforzaba por no gritar del dolor. Después de todo el quirk de ella utilizaba las células vivas de un cuerpo para curar o reconstruir zonas perdidas, usando las energías del afectado.- Cálmese, le quitaremos las balas y podrá descansar-

Así trabajo por horas, curando no solo las heridas graves de aquel hombre, también de los otros dos y de su pareja. Aguantando las lágrimas en sus ojos, al ver las heridas profundas que nuevamente su amado tenía.- Conejito, calma. Estaré bien....gracias por ayudar a Joseph y a los demás.-

-No resistiré por más tiempo. Necesito saber que estarás a salvo, que estés a mi lado Einer...

-La vida de un criminal no es fácil amor y agradezco que sigas conmigo a pesar de ello- Menta y ámbar se encontraron con delicadeza, mirándose con tanto amor que nadie pensaría que ella era hija del segundo héroe mas fuerte de estados unidos y él uno de los más prósperos criminales de América.-Pero pronto las cosas concluirían y por fin...estare con ambos-

Lo último lo dijo mientras acariciaba el pequeño vientre de su amada, en el cual llevaba el fruto de su amor. Y por el cual, Einer estaba terminando todo lo más rápido posible; para cuando su hijo naciese, solo su pandilla estuviera en la zona, permitiendole seguridad y una vida lo más normal posible.

-Señorita Kalia. Vaya  descansar y discúlpenos por venir así, conocíamos su estado y aun así-

-No se preocupen por ello. Salvare a quienes lo necesiten aunque no lo digan- Comento sonriendo con tanta naturalidad como las flores en primavera- Ahora descansen, aquí estarán seguros.-

Y así estuvieron por un tiempo.

Einer y Kalia amándose con pureza y furor. Un ágape perfecto era entonado cada vez que se miraban o se sonreían; sus pequeñas danzas en el salón, sus risas contagiosas, los paseos matutinos, con el pelinegro como lobo, para que nadie lo encontrara en las calles.
Esto último era gracioso, ya que casi todas sus citas eran así, paseos de la dueña y su mascota; y solo cuando el sol se ocultaba y la luna se imponían podían amarse ambos con forma humana.

El tiempo pasaba y todo parecía un bello cuento de hadas; que lastima que la vida real no era así.

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-Ane, ane papa atio jo...Un pequeño trabalenguas de un chico que estaba aprendiendo hablar inundo el salón de esa humilde morada. El chico tenía una dulce sonrisa, mientras una pequeña cola peluda se movía de un lado a otro.

-Te gano un niño que acaba de cumplir un año Joseph. Que vergüenza- Einer reía mientras iba a tomar a su pequeño en brazos, festejando el triunfo.- Tan pequeño y valiente que saliste.

-ugar...ugar ma- 

-Yo ya no tengo energías. Tu hijo es peor que una lluvia de balas, ¿Sabias?- Joseph se levanto como pudo del suelo, con la espalda adolorida por la edad, pero feliz al ver a su joven jefe sonreír con su hijo en brazos.

-¿Estas comparando a mi pequeño con unas meras balas?-La dulce voz de la oji-ambar entro al salón; quien de inmediato se acerco a sus dos hombres amados y dio un leve pellizco en la nariz de su hijo.

-Dije lluvia de balas...de tanques...emhh. Tu hijo sera peor que una bomba atomica-

-Asi esta mejor- La sonrisa angelical de la mujer, causo leves risas en el hombre ojos menta, quien de inmediato abrazo a su amada por la cintura plantando un beso en su cabeza y hombro. -Mi hijo será muy fuerte, todo un guerrero al igual que su padre-

-Y guapo, no se te olvide. Conquistara a todos y todas; igual que yo-Continuo Einer al comentario de su mujer.

-Lo que digas amor- 

Se miraron a los ojos y sonrieron con alegría. El pequeño de ojos heterocromaticio sonrió al ver a sus padres reír y beso a los dos, en la mejilla.

Los únicos que podían ver esas escenas eran los subordinados de Einer. Después de todo se supone que Kalia había viajado a otro estado para terminar sus estudios y no para cuidar de su pequeño hijo.
Nadie sabía la existencia de ese dulce niño, el fruto de un pecado que había cometió Kalia. Al aceptar el amor de un criminal.
Pero quién la podía culpar, Einer no era solo un criminal. Era brillante, protector, gracioso, muy inteligente y valiente. Dispuesto a aprender cosas nuevas solo por su bien, dispuesto a arriesgar su vida por los suyos y lo más importante, dispuesto a ayudar a quien no puede gritar.

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-No es necesario. Yo puedo hacerla y...-Intento decir Einer, pero su subordinados no entendía de contrarias.

-No, tu sigue jugando con tu hijo que lo tienes merecido. Además mañana empieza la persecución y no sabrás en cuanto tiempo vuelvas a ver a tu esposa y a tu hijo.-

-Gracias...cuando mi conejito llegue avísale que fuimos a jugar al rió- Y con el asentimiento del hombre mayor, padre e hijo convertidos en lobos fueron corriendo al patio, ocultándose en el bosque y siendo libres. Tan libres como le permitía ese terreno alejado de la cuidad.

El pequeño lobezno era más ágil,en su forma animal que en la humana. Incluso aprendía mas rápido de esa forma que en la otra, sabiendo ya cazar y nadar con ese cuerpo.
Pero fuera de ello, lo más le gustaba al lobezno era jugar entre las patas de su padre, tirarse encima de el y darle leves mordidas o ladridos graciosos.

Cuando llegaron al rió, el pequeño lobo se lanzo al agua, salpicando el agua, como si bailara sobre ella. Su pelaje bailaba junto al viento y sus bellos ojos, que compartían las miradas de sus padres, reflejaban con perfección la luz de la noche.

Cuando el pequeño cachorro ya estaba cansado, bostezo con fuerza. Demostrando que no tenia ni energías para caminar a la pequeña cabaña; por ende su padre, convertido ya en humano, lo tomo en brazos y se dirigió a la casa,. 

Einer tuvo que despertar a su hijo, para que cenara. Después de todo no lo dejaría ir a la cama con el estomago vació.

Cenaron solos, ya que Joseph se había ido a la guarida de la pandilla y Kalia había llamado para indicar que su turno se había alargado en el hospital, por un accidente causado por un villano.
Einer cada vez que oía eso, se preocupaba. El la amaba con tanto fervor que jamas podría amar a alguien de nuevo, haría todo lo que ella le pidiese, pero ella era hija de un héroe, ella jamas lo presentara a su familia, a sus amigos, a penas conocía a sus compañeros de trabajo y lo entendía, pero a veces pensaba que su hijo y amada; estarían mejor con otro hombre, con un hombre de bien.

-Vamos a dormir, cariño- Levanto a su hijo quien le sonrió con entusiasmo, sacando sus orejitas y bostezando en el proceso. Fue al cuarto compartido, y dejo al menor en la cama, quien de inmediato se coloco el pijama y se metió bajo las sabanas, mirando a su padre, esperando con entusiasmo el espectáculo. La sonrisa del mayor de los pelinegros, fue el gesto para indicar que empezaría a cantar. Una canción sin letras solo melodías entonas a la perfección, como todo un lobo cantando a la luna. Cuando termino beso la frente de su hijo- Amo papa-

-También te amo. Ahora duerme, mañana vendrá mamá a jugar con los dos.- Con sueño pero una sonrisa en su rostro el menor cerro sus bellos ojos heterocromaticos para fundirse en el mundo de los sueño. 

El reloj empezó a seguir su ritmo, dejando pasar los minutos, que se convirtieron en horas; las cuales aumentaban sin detenerse. Trayendo nerviosismos al lobo, quien no venia o sentía a su amada llegar por ningún lado. Y antes de que iniciara una rápida maratón a los alrededores para saber donde estaba, su celular desechable sonó.

-Deben irse de allí...¡Ahora!-

-Kalia, amor ¿Que pasa?- La voz de su amada luz sonaba desesperada y agitada, como si recién lograra escapar de algún lugar-

-Es la persecución...empezaron esta noche y se dirigen hacia allá. Alguien vendió tu escondite y van en busca de todos...he intentado llamar a Joseph pero no contesta. Por fav.....-

-¿¡Amor!? ¿Kalia?...Demonios- Rápidamente subió en busca de su hijo, quien había despertado por los gritos de su padre. Lo tomo en brazos y rápidamente lo envolvió en una especie de cesta. Tendría que ir como lobo así seria más rápido.

-Papa...mama oe eta- 

-Tranquilo campeón...nos seguirá pronto-Lo termino de envolver y se transformo. Salio corriendo, mientras escuchaba el viento cambiar de velocidad, sentía los aromas de los héroes venir y el sonido de las patrullas acercarse.

Poco tiempo después, se escucharon disparos, patrullas y los fuertes golpes de los poderes del ellos héroes.

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-¿Y? ¿Al final que quirk tiene el mocoso?- Un hombre robusto con cabello gris y ojos frios; miro a la mujer que se encontraba frente a él, bebiendo un champagne.

-Pareciera que puede convertirse en lobo....aunque a veces se le ven orejas de gato.-Comento con indiferencia.

-Rayos. Necesitamos que nos sirva de algo. Pagué por el y necesito que valga el dinero perdido.-

-Tranquilo lo valdrá. Después de todo solo debes mirarlo. - Hizo una pausa para tomar más de su copa- Su piel es tersa y virginal; sus ojos son dos joyas brillantes y su cuerpo es delgado y pequeño. Cualquier hombre o mujer pagaría por romperlo-

-Tienes razón.-Levantandose más decidido camino hacia la puerta de salida- Pasa una foto de él por los clientes, dile que haremos una subasta para ver quién le quita la virginidad. Conociendo lo rápido que son; mañana ya tendremos alguien...prepararlo desde ya-

Asintiendo y elevando su copa, la mujer sonrió con cinismo. No iba a esperar, si mandaba todo esta mañana tendría a muchos depravados esperando su confirmación para la tarde/noche; además, ella era quien cuidaba de todos esos niños y adolecentes para la empresa; y aquel pequeño de apenas 4 años era una joya muy valiosa.
Lo subastaria de inmediato; y si el mocoso sobrevivía podía arrendarlo a más personas.

-Madre- Una joven de cabellos rubios y ojos miel entro al cuarto; vestía un traje simple de color negro que hacía resaltar su blanca piel- Dos hermanos fallecieron hoy y quería preguntarte si podía...

-¡¿Y qué mierda haces aquí?! Ve a tirar sus cadáveres. No queremos que los niños más pequeños los vean y se asusten.

-Yo...pero- La mirada fría de la mujer y su semblante serio hicieron estremecer a la joven adolescente- Entiendo, le pediré a mi hermano mayor que se los lleve

-A, y baña a Nox. Quiero que lo lleves a mi cuarto para escogerle una buen traje.

- Pero madre, el aún es muy pequeño y ...

-Haz lo que te dije Alice- y tras esas palabras crudas, se fue.

La joven rubia camino por los pasillos de la mansión  buscando al mayor de todos, al encontrarlo bajaron al sótano. Allí estaban todos sus hermanos menores, entre 4-13 años, siendo el menor un pequeño de piel canela y ojos heterocromaticos que no hablaba mucho. Pero siempre dormía con ella y su hermano mayor.

-Alice- La voz agravada de su "hermano" interrumpió sus pensamientos- Ve con Nox. Quizás los demás lo culpen otra vez.

-Bien- Y sin más apresuró su paso llendo al "cuarto común" encontrándose con lo que temía su hermano mayor. Los chicos más grandes, estaban nuevamente culpando a Nox de la muerte de sus otros dos hermanos; al parecer se habían enterado por que este había ido a dejar flores.

-¡Desde que llegaste estamos muriendo! Te hubieran dejado en la calle...antes era más difícil y contigo lo es aún más......ojalá alguien te mat...-

-¡Ya basta! Todos a sus cuartos- Grito con furia. Todos corrieron a sus cuartos, todos menos un pequeño pelinegro- Bebé...ven aquí Nox.

-Herman Alice - El pequeño niño corrio hacia ella y la abrazo con fuerza. Las pequeñas orejas gatunas se movían con los leves estamos del menor.- ¿Cuando vendrán mamá y papá por mi?

Las lágrimas querían salir de los ojos de la muchacha pero las aguanto.-Pronto bebé; tus padres vendrán pronto.- Más que una afirmación fue un ruego sin voz.

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-No podemos permitirlo Hatter- La voz quebrada de la chica rubia golpeaba con fuerza el corazón del pelinaranja. Odiaba verla así, rota, y todo porque los intentos de cuidar del pequeño niño que había "adoptado" hace dos años habían fracasado.

Se suponía que el pequeño solo limpiará las balas, los paquetes de pólvora y ayudaría a afilar los cuchillos, todas las armas que vendía Padre. Después cuando Hatter cumpliera los 21 podrían escaparse con el pequeño y vivir muy lejos. Incluso pensaban viajar al sur de América, quizá encontrarían un lugar donde criar al pequeño que nombraron Nox.

Pero no; todo se había arruinado con la sorpresiva y rápida subasta del menor. No sabrían quien lo compro no sabían si solo era un tipo en busca de sexo o alguien que amaba el masoquismo.

Tenían miedo.

-No podemos ir así sin más.- Se rasco la cabeza con frustracion- Mierda. Solo una semana...eso faltaba, solo una puta semana para irnos. Y esos dos tuvieron que venderlo.-

-Quiza...quizá nos escucharon ese día. Es decir no es normal que vendan a alguien tan pequeño. Normalmente esperan a que cumpla 10 años para que sobreviva a la experiencia...y...demonios-

-Calmate. Tú misma lo dijiste debemos hacer algo. Ya sabemos cuál es el cuarto donde ocurrirá solo debemos evitarlo.- Se calló unos segundos- Entraremos, iré en contra de quién lo compro y tú corres con Nox hacia afuera.

- ¡¿Que?! Pero podrías ser herido y...-

-Importa más que estén los dos bien.- Le dió un suave beso en los labios y la miró a los ojos.- Vamos allá. Por nuestro hijo.

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-¡No! ¡Por favor! ¡Hermana Alice! ¡Hermano Hatter!- Los gritos del pequeño niño eran la melodía más maravillosa que había escuchado. Era una sensación tan placentera verlo allí; llorar mientras intentaba arrastrar los cuerpo difuntos de sus hermanos.
Era increíble verlo allí; peleando con la droga que le habían puesto para dormir, intentando rescatar a sus hermanos de esos hombre que caminaban tranquilos hacia ellos.- Despierten. Tengo miedo...

-Cariño. Tus hermanos ya no volverán a despertar-

-Mientes...ellos me llevarán con mamá. Papá los cuidara y seremos una familia y ...y - A pesar del llanto aberrante y la heridas de su cuerpo; el seguí allí de pie; intentando llegar a una ilusión que jamás alcanzaría.

-Yo jamás miento- Y con una sonrisa desquiciada; la mujer empujó al pequeño. Quién cayó lejos de sus dos hermanos.

-Alice era tan guapa - El hombre mayor tomo el rostro de la joven y lamío su mejilla con excitación.- Que lastima que no pudimos hacer un trío los tres, Nox. Ella lo mamaba tan bien-

-Ya basta...por favor. Abuela tu...-

-Pero cariño tus hermanos mataron a uno de mis mejores clientes. Teníamos que castigarlos- La mujer se acercó al cuerpo del joven y con el cuchillo empezó a cortar la piel.

-¡Detenganse!- Los colmillos pequeños pero peligrosos del menor salieron de inmediato, clavándose en la piel de aquella mujer que se hacía llamar Madre o Abuela.

A pesar de ella movía el brazo con fuerza, el no detenía sus colmillos. Sus garras empezaron a arañar la piel que alcanzaba y cada vez mordia con más fuerza aquel brazo.
Hasta que una bala se incrustó en su pierna.

Soltó un alarido al igual que lobezno herido y se alejó con miedo del hombre grande. Quién lo miraba con deseo mientras le apuntaba con el arma.

-Es una bestia...mira que colmillos tiene -Dijo la mujer mientras reía y miraba su gran herida- Al parecer tiene hambre nuestro pequeño-

-Pues alimentemoslo. No queremos que se desmaye durante el sexo-

Lo que pasó a continuación fue crudo para cualquiera; tan fuerte que el pequeño lo bloqueo de su mente; no a la perfección, pero lo intento para seguir con vida.

La mujer enfada por su brazo mal herido, termino de cortar la piel del joven pelinaranja. Estaba mal cortada, tenía trozos de músculos colgando y una que otra vena se notaba.

-Bien, provecho amor- Y de un goleó, metió el pedazo de piel en la boca del menor. Quién a pesar del llanto, el miedo, los intentos de no tragar y de alejarse; termino comiendo el trozo.- Es el primer bocado. Espero que te guste más-

Los dos adultos rieron a carcajadas; mientras continuaban con su cometido. Extasiandose con las las lágrimas del menor, con sus gritos de auxilio y peticiones al viento.

Desde ese día; nadie fue a su rescate.

Porque él era como el gato negro; traigan mala suerte.
Porque era como un perro negro; que atraía la muerte.

Nadie lo quería cerca.

Solo querían usarlo.

Y así estaba bien; porque es como decía la abuela:
Todo esto es porque lo amaban

El sufriría porque así se amaba. Por ende; cada vez que los cuerpos de hombres y mujeres lo tocaran; cada vez que sus colmillos y garras descuartizaban a otro ser humano; todo ello era expresión de amor.

Era la expresión de su propio veneno.

El no sabía que años después un par de ojos rojos lo nombrarian con afecto.

El no sabía que años después un par de ojos verdes se convertirán en su salvación.

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¡Capitulo especial terminado! El próximo continuará la historia de manera prolija.

Aproveche de hacer este especula por los 3000 lecturas (estoy muy emocionado; jamás depende llegar tan lejos)

Recuerden que leo cada comentario y me entusiasmó mucho al leerlos.

Cuando lleguemos a los 6000 o 5000 haré otro especial jjiji

¿Izuku, Monoma, Takeshi o Mei?

Cuidado con la respuesta jeje.


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