006.
ZAYN.
Estaba sudado, sucio y muy enojado.
Odiaba hacer deportes, era algo tan simple como eso. Nunca habia comprendido la necesidad de los mismos, bueno, si sabia porque pero no tenia necesidad de ellos. Mi salud estaba en perfecto estado y era tan flaco como podia serlo sin estar enfermo. No necesitaba hacer más deportes que el de subir y bajar las escaleras de la biblioteca, la razón de patear una pelota a una red estaba más allá de mi comprensión.
Lo habia probado y lo odiaba.
Bien, lo admitia, yo no era quien portaba el gen deportivo, en todo caso mi hermana pequeña, Safaa, se habia llevado todo el maldito aporte genetico. Ella era una de las porristas de segundo año, etiquetada automaticamente en el grupo de los populares. Esa era una de las razones por las que la evitaba estando allí, no queria que la trataran de modo diferente o me prestaran más atención a mi. Ella habia estado enojada al principio ante mi insistencia en ocultar el parentesco entre nosotros pero luego de un tiempo, simplemente se acostumbro a ello. Nadie en la secundaria sabia que compartiamos Adn. Y seguiria de ese modo si dependia de mi.
—Vamos —Liam colocó su mano en mi nuca, guiandome con facilidad hacia las puertas de los vestuarios gracias a mi cansancio. Él parecio aprovechar el momento, ya que su brazo se deslizó con facilidad sobre mis hombros—. Ambos estamos listos para salir de aquí antes de que te desmayes y tenga que cargarte hasta la enfermeria.
—No vas a cargarme a ningun lugar, prefiero arrastrarme.
Él sonrió—. Y dime, mi pequeño saltamontes, ¿odias al mundo en general o esto es algo especialmente dirigido hacia mi?
—Por lo general, el mundo apesta pero tu te estas ganando un repudio personal.
—Eso es bueno —afirmó luego de pensarlo por un momento—. Del odio al amor hay solo un paso.
—Del odio al asesinato solo un centimetro. —replique.
Y eso solo lo hizo reir, era nervante. Tenia la hipotesis de que su corta inteligencia lo hacia inmune a mis ataques, lo cual no lo hacia menos insoportable pero tener una razón que excusaba las cosas que sucedian siempre me hacia sentir mejor.
Dando un paso lejos, quite su brazo de mis hombros con brusquedad y me incliné en busca de aire, aun no habia recuperado totalmente mi aliento—. ¿Todos los entrenamientos serás de esta manera?
Me miró con diversión—. Nah, seguramente solo los primeros, luego tu cuerpo se acostumbrara al esfuerzo fisico y ya no te sentiras como si te estuvieses muriendo o algo así.
—¿Estas seguro?
—Bastante —asintió—. He visto a varios chicos pasar por lo mismo, es solo cuestión de que comiences a tener una mejor forma fisica.
—Me agrada mi fisico —me defendi pateticamente.
Rio—. No dije que estuviese mal pero en el caso de que estalle un apocalipsis zombie, tu solo arrojate al suelo y no intentes correr, te atraparian en un segundo.
—Los zombies son biologicamente improbables, ya que un ser humano que ha perdido sus facultades para... —me corté de golpe cuando escuché el sonido de voces en grupo que se acercaba a donde estabamos. Girandome sobre mis talones, observé con temor hacia las puertas que daban a los vestuarios—. ¿Que es eso?
—El equipo —dijo con obviedad—. ¿Por qué crees que te cite tan temprano? El lugar les pertenece a ellos hasta que comience la primer clase.
Me volví hacia él—. ¿Que quieres decir? ¿Ellos vienen? ¿Por qué? ¿Por qué no me dijiste antes? ¿Que hacemos aquí aun? ¡Vamonos!
—Espera —me atrapo antes de que pudiese salir corriendo, mirandome extrañado—. Dejame saludar a algunas personas y puedo llevarte a casa.
—No es necesario, tu quedate y yo me voy.
Volvió a bloquearme el camino—. Solo saludamos y luego nos vamos, espera un minuto.
—¡No es necesario, puedo caminar! —chillé, aun así no me soltó.
LIAM.
Pegando a Zayn a mi lado, intenté mantenerlo debajo de mi brazo mientras esperaba que los demás se acercaran. En el momento que la puerta se abrio y el primer jugador la atravesó, supe que no habia manera de que pudiese mantener a Zayn al frente. El chico comenzó a retorcerse intentando escapar como si eso fuera algo de vida o muerte, llegó hasta morderme que fue lo que logró que afojara mi agarre y dejara que se escurriese detrás de mi. Seguro era más alto y grande que él pero eso no queria decir que nadie lo viera escondido detrás de mi.
—¿Estas seguro de que no quieres intentar una corrida hacia la otra salida? —bromee.
Él parecio meditar eso un momento, senti su frente apoyada en mi espalda cuando suspiró—. Eso no funcionaria, ellos me verian.
—¿Por qué les tienes miedo? —salude a algunos de los chicos cuando pasaron, sonriendo hacia ellos.
—No les tengo miedo.
Rodé los ojos aunque no pudiese verme—. Siento tus manos temblando aferradas a mi camiseta, amigo mío, no creo que puedas mentirme.
—No soy tu amigo y no estoy temblando. —replicó obstinadamente.
—Zayn. —pedi con un tono suave, esperando que eso lograra que me dijera la verdad.
Estuvo en silencio por unos momentos, su rostro enterrado en el centro de mi espalda—. Ellos son... más grandes que yo.
—¿Y eso te da miedo?
—Un poco. —susurró.
Pensé en ello por un momento—. Si te prometiera que no dejaré que nadie te lastime, ¿saldrias a saludarlos?
—No.
—¿No confias en mi?
—¿Por qué deberia de hacerlo? —musitó.
—Porque nunca dejaria que te hicieran daño. —dije con el mismo tono.
Él se detuvo por un momento, senti como su cuerpo se tensó totalmente y esperé. No estaba seguro de que fuese a decir nada pero de todas maneras, la aparición de Louis cortó todo lo que fuese a pronunciar. El ojiazul corrió hacia nosotros con una sonrisa, elevó una ceja pero cuando intentó observar detras de mi lo detuve por el brazo y sacudí la cabeza.
Sonrió—. Solo venia a saludar —hizo un gesto con la mano, sus ojos aun intentando ver sobre mi hombro—. ¿Que haces aquí? Pensé que no vendrias a la practica hoy.
—¿Cancelaste una de tus practicas por mi? —la voz de Zayn fue suave, su aliento calentó la parte trasera de mi camiseta.
—¿Una? —Louis rió, ignorando mi sacudida de cabeza—. Suspendio sus practicas de la semana entera.
—¿Por...por qué?
—Para ayudar a mi mejor amigo —aseguré rapidamente. Torciendo el brazo hacia atrás, atrape una de sus manos y pase mi pulgar por el dorso. Louis elevó una ceja en mi dirección pero no comentó nada—. Debo llevar a Zayn a su casa, ¿nos vemos luego?
—¿No saludarás a los demás?
Miré hacia la cancha donde los demás estaban calentando y sacudi la cabeza suavemente—. Saludalos por mi.
Louis me miró con curiosidad pero asintió—. Lo haré —dio un paso atrás—. Nos vemos luego. Adios, Zayn.
—A...adios.
Observé a Louis marcharse antes de suspirar, comenzando a caminar hacia atrás, a la salida. Zayn murmuró algo que no entendi pero no se quejo de mi metodo de huida. Lo mantuve todo el tiempo a mi espalda hasta que estuvimos lo suficientemente lejos para que nadie nos prestara atención antes de girarme y comenzar a caminar a su lado.
Me miró con el ceño fruncido con curiosidad—. ¿Por qué hiciste eso?
—¿Hacer que?
—Caminar hacia atrás —miró sobre su hombro—. Ellos pensaran que eres extraño ahora.
Reí—. Ellos ya piensan que soy raro.
Mirando el suelo, golpeo el suelo con la punta de sus tenis—. No me contestaste.
—¿Que?
—¿Por qué lo hiciste?
Guiandolo hacia el estacionamiento, busque las llaves de mi auto en mis bolsillos antes de sonreir—. Sube al auto, compañero.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top