Advertencia: Uso de palabrotas, mención de muerte y referencia a violencia domestica.

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Durante el último capítulo

Cuando Regulus Jr. fue en busca de su hermana cierta rubia estuvo determinada a seguirlo, a pesar de que sabía que su sobrino no la quería cerca en esos momentos. Sin embargo, cuando las serpientes pasaron a su lado, la magia que había mantenido su corazón en un frío letargo durante años, de repente, se agitó y desvaneció, dejando tras de sí un calor conocido que la inundó por completo.

Theo, que caminaba a la sombra de su hermano de otra madre, sintió una fuerza invisible que lo impulsaba a girar la cabeza. Sus ojos buscaron y encontraron los de la rubia ocultos tras la capucha, a pesar del hechizo que velaba por los rostros de los encapuchados a los ojos de la segunda generación.

Azul océano y azul cielo se encontraron en un choque eléctrico, una colisión que resonó en el interior de ambos como el estruendo de una ola rompiendo contra las rocas.

-Theo, ¿vienes? -la voz de Pansy irrumpió, teñida de confusión, cuando él se detuvo en seco.

El castaño asintió con un gesto apenas perceptible antes de retomar la marcha tras sus amigos. Mientras tanto, Venus se debatía entre quedarse con su familia o explorar esta sensación que creyó que nunca volvería a sentir. Después de unos momentos, se desilusionó y decidió seguir el rastro de los Slytherin.

Con cada paso, Theo sentía cómo sus movimientos se volvían más lentos, como si cada baldosa del suelo le suplicara que se detuviera. Pansy, alerta ante el cambio de ritmo, estaba a punto de interrogarlo, pero un sutil movimiento de los ojos de Theo fue suficiente para que ella comprendiera. Sin una palabra más, continuó su camino hacia las mazmorras, dejando atrás un silencio que hablaba más que mil palabras.

Theo miró por sobre su hombro y aunque no notó a nadie, podía sentirla, así que se dirigió al salón vació más cercano.

Cuando la rubia entró, encontró al castaño recostado contra la mesa del profesor, con los brazos y tobillos cruzados en una posición falsamente relajada, con la vista puesta en sus lujosos zapatos.

-Sé que estás allí, aunque no pueda verte, puedo sentir tu magia-Le advirtió, sin levantar la cabeza- y creó que sería cortes de mi parte advertirte que el hechizo protector de tu capucha...no funciona conmigo.

-No vas a hacerme daño-Le aseguró la rubia levantando el hechizo de desilusión, pero Theo soltó una risa amarga y movió su mano, permitiéndole a Venus ver que tenía su varita lista para un duelo, de ser necesario.

-Curioso, muy curioso-Dijo conectado sus miradas nuevamente.

Una intensa descarga recorrió a ambos, que, si no fuera por su exigente entrenamiento sangre pura, se hubieran estremecido.

-¿Qué es curioso?

-Que confíes en que un Nott no te hará daño.

-No confió en un Nott, confió en ti.

-¿Quién eres?

-No es lo que realmente quieres saber. Así que responderé a la verdadera pregunta. No tengo idea de cómo, pero...puede que seas....

-No-Zanjó, parándose en toda su altura. A pesar de su edad, superaba a Venus por casi veinte centímetros-. Lo has visto, ya tengo a mi alma gemela.

La rubia dejó caer su capucha y le sonrió con nostalgia.

-Puede que ella sea el amor de tu vida, pero sabes que su magia no se siente...

-Son cuentos para que las niñas acepten sus matrimonios sin rechistar. No ha habido almas gemelas documentadas en más de un siglo.

-Lo has dicho, documentadas. Mi hermana tenía una y por cómo lo describió...

Theo avanzó, como si un hilo invisible tirará de él.

-Entonces sabes que podemos rechazar a nuestra alma gemela.

-¿Y eso es lo que harás? -Venus echó la cabeza hacia atrás cuando él la tomó del rostro con una mano.

-Enamorarse es algo que no puedes controlar, pero amar es una elección. Y yo la elijo a ella. Siempre será ella -dijo, y luego pasó a su lado. Sin embargo, el agarre de la rubia a su muñeca lo detuvo en la puerta.

-Sé que parece complicado, casi te doblo la edad, pero ambos fuimos criados en estas costumbres, Theo. Lo entenderán -Theo movió su mano para ser él quien ahora la tomara de la muñeca.

-Lo haré simple. No me interesa explorar algo que una maldita diosa creó por error. Demasiados han dictado cómo debe ser mi vida, pero nadie me dirá a quién debo amar. ¿Entiendes? -dijo, apretando su agarre- En el futuro nos conocimos y aún así la elegí a ella. ¿Por qué crees que, ahora que sé que tendré la vida que siempre soñé a su lado, lo echaría a perder por ti?

Venus, ahora una sombra de la mujer que alguna vez fue, siempre acostumbrada a ser la segunda opción, la que todos toman por sentado. Convertida en un objeto de uso y desecho, una vez que su utilidad se agotaba, ya fuera por su familia o extraños. Con cada rechazo, cada desaire, cada mirada de desprecio, grabado en su corazón como cicatrices que no sanaban. Su dolor era un río silencioso que fluía en su interior, un eco constante de su soledad y desesperación. En un intento de liberarse de otro momento cruel de su realidad, tiró de su brazo para soltarse del agarre.

-Lo siento, no volverás a saber de mi

-Creo que eso será difícil. Seremos familia en el futuro-Ella lo miró confusa, así que él se lo explicó-. Sabemos que Hermione es la Rosier perdida y ella es una como una hermana para mí. Me ha salvado, sin saberlo, innumerables veces. Le debo casi todo...así que no pienso abandonarla. Es la madrina de uno de mis hijos y tú, su tía. Seremos familia, sin contar que Draco es mi hermano en todos los sentidos que importan.

Venus cerró los ojos y trago sus lágrimas, maldiciéndose por siempre ponerse en estas situaciones imposibles.

-Estás desesperada por afecto, no hace falta ser un genio para saberlo, pero no lo encontrarás conmigo. Hemos visto que tendrás una vida feliz, no la desperdicies persiguiendo cuentos de hadas-Con eso, Theo abrió la puerta del salón

-Puedes amarla, pero jamás te hará sentir completo. Menos ahora que me has encontrado-De un momento a otro, la mano de Theo tomó el cuello de la chica en un firme agarre, pero sin ejercer verdadera presión.

-No soy mi padre, pero tampoco un santo. Así que te recomiendo no provocarme, porque no tienes ni puta idea de lo que hablas y si valoras tú vida, no volverás a referirte a ella o nombrarla, porque no mereces ni decir su nombre.

Venus llevó su mano a su garganta cuando él la soltó y la dejó sola en aquel salón. Iba a perseguirlo, sin saber bien porque, pero su anillo pulsó, señal que Regulus estaba gravemente herido, así que corrió hacía el Gran Comedor.

Cuando llegó, pudo ver el daño junto a los Weasley queriendo escapar, por lo que no dudo en tomar la forma animal que le resultaba más cómoda. Necesitaba despedazar algo, para poder proyectar como realmente se sentía, pero cuando iba a convertir a Ronald Weasley en su nuevo manjar, el dragón se hizo presente.

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Mientras tanto en las mazmorras

-Ya hermano, cálmate-Dijo Blaise Zabini, intentando mantener el paso de su amigo, que había entrado como un loco a la sala común

-Cállate Zabini

-Draco...-intentó Pansy

-No, está claro que ahora se irá con Potter. Cuando le ofrecí huir, se negó por él...-se colocó frente a la chimenea, apoyando sus manos sobre las piedras y con la vista clavada en las llamas-ahora puede hacerlo.

Pansy y Blaise se miraron, ya que nunca Draco había usado únicamente el apellido del Elegido, sin acompañarlo con un insulto o burla, eso significaba que realmente creía lo que decía.

Esa verdad, causó que la tristeza brillase en los ojos verdes de la Slytherin, que iba a consolarlo, decirle lo que le prometió a su ahijado, pero una voz que helaría los huesos de cualquiera, hizo eco en las silenciosas mazmorras.

-¿Hacer qué? -Theo espetó de tal forma que los Slytherin vieron a Lord Nott y no a su amigo cuando este entró a la sala común.

-Dejarme y con eso... todo este absurdo intento de salvarnos

-Escúchame bien, Malfoy- La voz plana del castaño hizo que sus amigos dirán un paso atrás y el mencionado volteara a verlo-. No eres el maldito centro del mundo. Hermione... desde que te conoció no hecho otra cosa que mantener tu maldito trasero a salvo. Si, es amiga de San Potter y de la comadreja, pero porque ellos fueron los primeros en aceptarla, mientras nosotros nos paseábamos por los pasillos insultándola por el estado de su sangre. Ella sólo está siendo agradecida...-Siguió hablando Theo, mientras avanzaba hacia su amigo, el cual ya se había recompuesto de la sorpresa y tenía su típica máscara de indiferencia en su lugar.

-No sabes nada, Nott

-¿Eso crees? -Se burló- Ella es mi mejor amiga, Malfoy... que no se te olvide. Es como mi hermana y haría lo que fuera por ella. Así que tú, tendría cuidado con lo que dices...

La realidad era que las serpientes nunca entendieron como del día a la noche Theo se había vuelto tan cercano a la princesa de Gryffindor. De hecho, algunos apostaban que habían sido amigos mucho antes de que Draco coincidiera con ella esa noche en los pasillos.

-Ah, ¿sí? -Espetó con maldad y tanto Pansy como Blaise se prepararon para el golpe. Sabían que Draco cuando estaba dolido era capaz de hacer explotar hasta al calmado Theo- Pero al parecer en el futuro, no será así...Dime Nott, acaso ¿crees que seguirás siendo tu mejor amiga, ahora que tiene Potty a su lado?

-Me das pena hermano, pena de verdad, porque al parecer no estuviste viendo lo mismo que nosotros en las presentaciones. ¿Crees que ella es madrina de mi hijo gracias a Luna? ¿Por qué crees que ellos siguen usando el nombre "Merak"? -la cara del rubio era un poema- Has estado tan ciego...Ella sacrificó todo por nosotros y tú ¿así vas a pagarle? ¿Con berrinches? Si tu amor por ella se limita a de quién es amiga, agradezco que nunca se lo hicieras saber.

En ese momento la ira invadió a Draco y arremetió contra su hermano de otra madre. Lo tomó de la túnica y estampó contra la pared más cercana, mientras presionaba su antebrazo contra su garganta.

-Escúchame ahora tú, Nott-Siseó ejerciendo más presión-. Nunca, pero jamás te atrevas a juzgar mis sentimientos por ella ¿oíste? ¡Jamás!

-Espero-dijo sin inmutarse, pero con algo dificultad por la presión- que puedas decirle lo que sientes antes de que sea demasiado tarde... porque a este ritmo, vas camino a perderla

Y como si el destino dijera "que así sea", la puerta de la sala común se abrió de un golpe, dejando ver a los de la tercera generación levitando a sus heridos, junto a Remus levitando a su hijo y Narcissa a su esposo.

Tan pronto como vio la escena, Draco soltó a su amigo y corrió hacia su madre.

-Madre ¿qué sucedió?

-Ayúdame con tu padre, Draco-Ignoró la pregunta de su hijo, mientras transfiguraba uno de los sofás en una amplia cama y recostaba a Lucius

-George, ve por las pociones reabastecedoras de sangre. Son la prioridad-Ordenó Lyra, mientras también recostaba a su hermano en una cama trasfigurada.

-A la orden princesa

-El resto, ayuden con la transfiguración de camas, gasas y demás suministros médicos que las medibrujas necesiten.... Theseus y Roxanne, cuiden la entrada por favor.

-Pero, Andy...-quiso protestar el chico

-Por favor, Roxy

-Theseus...vamos-el encapuchado dio una última mirada a su madre adolescente, antes de asentir, pero en el momento que iba a dirigirse hacia la puerta, un gritó se escuchó.

-¡Hermione! - El desespero y sorpresa eran notorios en la voz del príncipe de Slytherin, mientras empujaba a la gente frente a él para acercarse a su castaña.

-¡Aléjate de ella! -Se escuchó desde la entrada, dejando a todos congelados en su lugar-Que no se le acerque-Tan rápido como lo ordenó, un encapuchado y Alex bloquearon el camino de Draco.

-¿Quién te crees que eres para decirme que puedo hacer? Puedes ser su líder ¡pero yo soy tu padre!

-No-Dijo y en un segundo estaba frente a la versión adolescente de su progenitor.

En ese momento, ambos tenían la misma altura, pero Scorpius tenía un cuerpo más desarrollado que, a pesar de su capa y túnica, podía apreciarse a simple vista.

-Te falta mucho para ser mi padre. Mi padre en la vida la hubiera abandonado y menos dudado de su amor por él-Los ojos de Draco se abrieron con sorpresa-. Si, se lo que pensaste y todos en esta sala, en otras circunstancias, se estarían riendo de lo absurdo que fue...

-Calla-Siseó

-¿O que, padre? ¿Dime que harás? -Lo desafió con un siseó igual de letal, acercándose todavía más a él

-Lo único por lo que tienes tanto coraje, es porque los tienes a ellos-Gruñó señalando con la mirada al resto de la tercera generación-. Tal es así, que no puedes ni dar la cara-Scorpius, con una risa ácida, dio un paso atrás abriendo los brazos

-¿Eso crees, padre? - Y con un rápido movimiento se quitó la capucha, pero no la capa-No soy únicamente un Malfoy; no necesito esconderme con mi familia y mucho menos te tengo miedo.

Allí, en medio de la sala común de Slytherin, se encontraba un chico de piel pálida y cabello rubio, no tan claro como el de su padre, pero sí portaba sus ojos grises. Aun así, lo que llamó la atención de todos, fue que, si lo miraban más de un segundo, además de las ondas en su cabello, su rostro gritaba quién era su madre

-Ella... ella...-Tartamudeó Draco en shock

-Si, Hermione Malfoy es mi madre-Esas palabras fueron cómo un golpe tan fuerte para el peliplata, que dio un paso involuntario hacia atrás-o como ustedes la conocen... Hermione Granger

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Al mismo tiempo en la celda de las mazmorras

Tan pronto como llegaron, Albus junto a otros dos encapuchados tiraron a la familia Weasley dentro de la celda que, en un futuro cercano, estaría encerrada toda la casa de Slytherin.

- Así es como siempre debió ser- se burló en un tono digno de una serpiente-. Las comadrejas rabiosas pertenecen a jaulas, como su pequeña mascota traidora ¿no es así, tío Ron? -Finalizó con condescendencia

El mencionado enrojeció de tal forma que no se podía diferenciar donde finalizaba su cabello de donde comenzaba su rostro.

Tan pronto como la celda se cerró, el hechizo de silencio y de petrificación cayó, por lo que tanto Ron como Louis arremetieron contra los barrotes, causando que los encapuchados soltaran carcajadas.

-¡Pagarás esto, Potter!¡Te lo juro! -Eso congeló a muchos en la celda, ya que, si bien todos vieron a un chico hablarle a Harry, pocos escucharon su voz y los que sí, tras todo el caos, no llegaron a relacionarlo con su carcelero.

-¿¡Harry no dirás nada?!-Le gritó Ron a su mejor amigo, quien sólo miraba el suelo.

-Hace mucho tiempo que él perdió ese derecho. Aunque creí que podría salvarlo de sus errores esta vez, creo que de nuevo me equivoque.

-Lo siento-Harry le dijo a su hijo, quien agradeció a la capucha por no revelar sus lágrimas silenciosas, tras escuchar las palabras que por tantos años espero oír de su padre.

-Todavía no es tarde, espero que recapacites

-¡¡¡DEJA DE QUERER MANIPULARLO!!!-Gritó Ginny yendo hasta los barrotes y sacando una mano por los espacios en un intento por alcanzarlo.

-Las únicas personas que siempre lo manipularon, ya fuera para enriquecerse o fama, están encerrados con él en esta celda-Siseó casi sobre el rostro de su madre, antes de alejarse bruscamente y mirar a Louis-. Si fuera tú, hablaría con ellos para que se mantuvieran tranquilos, sabes de lo que soy capaz si me molestan o a los que amo-El rubio trago.

-¡No te tenemos miedo, ni a ninguno de eso...

-¡Tío Ron! -Lo llamó su sobrino, interponiéndose entre los barrotes y su tío-Cálmate, debes aprender a identificar cuando has perdido y créeme, lo hemos hecho-La furia ardió en los ojos de Ron y del resto de su familia. Ginny iba a volver a hablar, pero Lucy la detuvo:

-Tía, no. Louis tiene razón. Con Albus hay peores destinos que la muerte-La mirada de la pelirroja se centró en uno de los encapuchados que escoltaba a su primo y suspiró para aflojar la presión de su pecho- y créenos, ahora está siendo paciente. Simplemente déjenlo así.

Con una sonrisa de victoria, que únicamente los Weasley del futuro notaron, volteó para dirigirse hacia la sala común de Slytherin con un movimiento de su túnica que enorgullecería al hombre con quien compartía su segundo nombre, siendo escoltado por sus dos amigos.

Por un momento, la celda quedó sumergida en un silencio asfixiante, que fue roto por un Louis colérico, atacando a su prima.

-¡No puedo creer lo que hiciste! ¿Ahora serás una traidora? ¿Te aliarás con los Malfoy como el estúpido de Albus?

-¿Puedes calmarte? -Suspiró la pelirroja mientras tomaba asiento en un rincón de la celda-Gritarme no hará que cambie de opinión.

-¡Eres una maldita traidora!

-Y ahora hasta pareces más hijo de mi padre que Hugo-murmuró masajeándose las sienes.

-¿Alguien nos explicará qué está pasando? -Cuestionó Harry, bastante cansado.

-Eres mi hija, así que explícate-Le ordenó Ron, tomándola con tanta fuerza del brazo, que está soltó un quejido de dolor mientras se paraba.

-Ron cálmate, no tienes por qué tratarla así-Le dijo su amigo, tomándolo por los hombros, hasta que el pelirrojo soltó a su hija

-Yo no toleraré que mi hija sea una traidora como tú lo hiciste con tu hijo, Harry. Antes muerto que dejar que ella apoye a esas escorias-Espetó sacándose el agarre de su amigo

-Creo que después de lo que hiciste, deberíamos saber toda la historia-Siseó Harry, quien se estaba hartando de toda la situación-antes de seguir apuntando y soltando acusaciones de las cuales no tenemos ni idea-Él quería saber cómo estaba su mejor amiga, disculparse con ella, no sólo por siempre ponerla en peligro, sino también por el dolor que su futuro yo pudo causarle.

-Lo único que diré, padre-Comenzó con los ojos llenos de lágrimas Rose, mientras se friccionaba donde Ron la había agarrado, que estaba claro que dejaría un moretón-. Es que por tu culpa se desató una guerra de sangre. Porque si bien los Malfoy y sus aliados estaban tomando poder político, era una guerra fría-Todos en la celda contuvieron la respiración-. El que la convirtió en una guerra como tal, el que abrió fuego primero-dio unos pasos hacia su padre-, el que causo el primer asesinato, fuiste tú

-Rose-La llamó Molly II, porque sabía muy bien lo que su prima diría

-Y créeme...sé muy bien que jamás aceptarías a un hijo traidor-Sonrió y se quitó bruscamente las lágrimas que caían por su rostro-. Hugo, enterrado a seis metros bajo tierra, es prueba de ello.

Todos jadearon ante el trasfondo de las palabras de la chica, antes de que esta caminara hasta la zona más apartada de la celda y se dejara caer abrazando sus rodillas contra su pecho para ocultar su rostro. Donde rompió en llanto, dejando salir por primera vez todo el dolor que guardó desde el final de la guerra.

Todos los Weasley estaban conmocionados, hasta que Fleur volteó a ver a su futuro esposo.

-Sé que no me borrarán la memoria y que a ti sí, pero te lo advierto en este momento, Bill-el chico la miró con los ojos llorosos-. Me casaré contigo, pero tan pronto como tenga a mis hijas, desapareceré y me las llevaré conmigo-Se escucharon varios jadeos y Louis sintió su corazón romperse, una vez más.

-¿Quieres decir...-pero fue interrumpido por su madre

-Qué no te tendré. Que me iré-Dijo viendo a su hijo-. Está claro que estás más allá de la redención y no dejaré que mis hijas sufran por las decisiones de esta familia.

-Pero... pero si me criaran diferente, tal vez...-Su madre se acercó a él y todos podrían jurar que, aunque era ¼ Veela, la criatura le arañaba la piel exigiendo ser liberada.

-¿Entonces estarías dispuesto a ser criado para ser aliado de esas escorias, como las llamaste? -Fleur hizo que sus narices casi se tocaran y su mirada estaba llena de desafío. Louis trago, porque podría jurar que vio destellos rojos en los ojos de su madre, y bajo la mirada-. Eso creí. Esto está más allá de tu crianza, porque si no, estoy segura de que tú prima Rose no estaría traicionándolos y su hermano no hubiera sido asesinado por su padre.

-¡¿Cómo puedes decir eso de mi Rony?!-Gritó la matriarca Weasley

-Eso es lo que acaba de insinuar su propia hija-Dijo con un encogimiento de hombros la rubia, enderezándose.

-¡El tío Ron no asesinó a Hugo! -Gritó Molly II

-¿Entonces quién? -La voz de Ron estaba llena de duda y las gemelas hicieron una mueca

-Tú...tío Ron...-Molly II soltó un suspiro-Fue un accidente, estabas discutiendo con la tía Lavender y un hechizo se desvió...

-Quisiste asustar a la tía, pero ella se asustó y desvió el hechizo. Siempre peleaban, pero ese día fue el peor-Explicó Louis

-Siempre encerraba a Hugo en su habitación cuando comenzaban a pelear-Todos voltearon a ver a Rose, quién seguía en la misma posición, pero levantó su cabeza y apoyo su mentón sobre sus rodillas-. Ese día mamá permitió que me fuera con...con mi novio. Claro está que no lo aprobabas por quienes eran sus padres. No estuve allí, pero mamá me mando un patronus llorando, exigiendo que volviera-Sollozó-. Mamá dijo que Hugo...Hugo la escuchó llorar y bajo para detenerte. Él amaba a Frank, así que quiso decirte que él era bueno, a pesar de quienes eran su familia...

-Dado su altura-agregó Lucy cuando el llanto venció a Rose-, el hechizo le dio en la cabeza. Nosotras estábamos allí, pero no lo vimos hasta que fue demasiado tarde.

-¿Qué hechizo fue? -Para este momento casi todos tenían lágrimas contenidas y las mujeres lloraban abiertamente. Las gemelas y Louis negaron con la cabeza-¡¿Qué hechizo fue Rose?!- Le gritó a su hija cuando nadie respondió, causando que diera un respingo

-Un... un...-Tomó aire-Fue un reducto.

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Sala común de Slytherin

Entre todo el escándalo, nadie se percató que Severus Snape había ingresado junto a los Nott-Lovegood y a los hijos Longbottom, quienes ya estaban más calmados.

Draco dio otro paso atrás, alternando la mirada entre su hijo y el cuerpo inconsciente de Hermione.

-Yo...

-¿Qué? -Espetó Scorpius

-Scor, basta-El rubio miró a su hermano, quien había recobrado la conciencia

-Steph, despacio-Le advirtió su hermana, pero él hizo caso omiso

-Estás siendo demasiado duro con él

-No, él no sabe...-Dijo señalando a su padre

-Exactamente...-Lo cortó su hermano mayor, pero en su intento por sentarse, a causa del dolor, un quejido interrumpió sus palabras-recuerda que él ahora tiene tan sólo 16 años y todavía no ha vivido la guerra como tal-Scorpius miró a Draco-. Tú lo has dicho, él no es el padre que conocemos... de hecho, ninguno es la persona que conoceremos en el futuro.

-No estarás queriendo decir que dejaremos esto impune-Orión respiró profundamente y su silencio fue afirmación suficiente

-¿Quién fue? -la voz de Draco era sombría, nadie sabía qué paso por la cabeza del joven en esos minutos que se mantuvo callado, pero ahora parecía dispuesto a asesinar a quien fuera el responsable de que su familia estuviera herida.

-No harás nada-Le advirtió Narcissa

-No, él no puede hacer nada, pero yo si-En ese momento todos vieron a un Draco mayor reflejado en su hijo.

-Scorpius lo siento, pero no lo permitiré

-¿Perdona? -Cuestionó incrédulo, volteándose a ver a su amigo

-Si alguien hará pagar a Weasley, seré yo. Ya en el futuro permití que tomaras el asunto en tus manos, por el poder, y estuve de acuerdo en no hacer nada aquí, porque alteraría de forma irreparable el futuro. Sin embargo, si ahora alguien lo hará pagar, seré yo-Theseus dio un paso al frente con determinación, dejando caer su capucha.

Frente a todos se encontraba un chico de cuerpo esbelto, con la tez algo oscura, cabello renegrido y ojos oscuros.

-Eres mi hijo-Soltó incrédulo Zabini, ya que era algo casi innegable.

-Si-Dijo mirando a su padre, con una sonrisa que delataba su parentesco

-No me interesa que tonta rivalidad tengas con la familia de la comadreja, pero atacó a mi familia, así que es mi problema-Gruño Draco, llamando la atención a él nuevamente

-Como dijeron, no sabes nada, padrino. Así que mejor deja de hablar, porque solamente estás causando que queramos darte un golpe como lo hizo tía Mione en tercer año-Algunos rieron por lo bajo de la broma, pero otros estaban demasiados tensos como para hacerlo.

-¿Terminaron? -Cuestionó Snape con su tono característico-porque si no lo notaron, mientras miden quién es el más rudo, hay heridos que no están siendo atendidos-Eso pareció un golpe de realidad para todos.

-Gracias, padrino-Le susurró Orión a Snape, con un leve golpecito en el hombro, antes de que sus piernas le fallaran y fuera atajado por Lyssander

-¡Luna! -Exclamó Theo, saliendo del shock, mientras corría hacia su futura esposa y verificaba si estaba herida

-Estoy bien, Theo. Solo son unos cortes

-¿Pandora y Lorcan? - Cuestionó viendo que faltaban dos de sus hijos

-Ojalá en el futuro nos distinguieras así-Se burló Lyssander, ganándose una mirada fulminante de su padre.

-Están con sus parejas, los necesitaban-Cuando vio la cara de disgusto de su futuro esposo, la rubia acaricio su rostro dulcemente-. Ya habrá tiempo para eso, ahora nuestros amigos nos necesitan.

-Igualmente ya estamos aquí, madre-Aviso Pandora, antes de que Theo también la tomará del rostro y verificará su estado. Acto que repitió con su otro hijo-. Bien, ya... estamos bien

Por su parte, Scorpius se dirigió hacia sus abuelos, mientras Draco intentó nuevamente acercarse a Hermione y esta vez nadie lo detuvo.

-¿Cómo está ella? -Preguntó a la encapuchada que había venido a revisarla, tras dejar a su hermano con Snape, mientras se sentaba a su lado y tomaba su mano.

-Perdió mucha sangre y estamos regenerando su bazo con pociones, pero se recuperará por completo-Al escucha el tono de su voz y al notar el cuidado con el que la joven atendía a la castaña, se atrevió a preguntar:

-Eres nuestra hija ¿no es así?

-Tengo otros pacientes que atender-Respondió, levantándose abruptamente y alejándose.

Eso confirmó la sospecha de Draco, pero la más pequeña de los Malfoy no tenía ganas de hablar con la versión adolescente de su padre. Ella estaba verdaderamente enojada con él, con todos de hecho, por como parecía que otra vez serían ellos los que perderían a sus seres queridos por culpa del famoso "lado luminoso".

Además, no estaba segura de que, si su padre intentaba consolarla, sus paredes de oclumancia resistieran lo suficiente como para evitar que ella se derrumbara, como una niña pequeña, en sus brazos.

-Déjame verte, Steph-Snape asintió, permitiendo que Lyra revisara a su hermano, mientras él iba con Teddy.

Todos, tanto los de ese tiempo como los del futuro, dejaron por un tiempo las peleas o la curiosidad y, exceptuando Draco que se negaba a alejarse o soltar la mano de Hermione, se dispusieron a ayudar a los heridos. Ya fuera pasando ungüentos, pociones, vendando o realizando hechizos bajo las específicas instrucciones de Narcissa, Lyra y Snape.

Ya cuando Lyra informó que solamente quedaría esperar y que todos necesitaban descansar un poco, Blaise se acercó a su hijo.

-¿Podemos hablar? -Lo llamó colocando una mano sobre su hombro, lo que hizo que chico se estremeciera-Lo siento-Se disculpó, quitando su mano- No buscaba perturbarte

-No soy tan bueno en oclumancia como los demás, padre y he estado algo emocional-Dijo en un intento de restarle importancia al tema-. Vamos a alejarnos un poco del caos-palmeó la espalda de su padre y lo llevó a los sofás más alejados del grupo-¿Te importaría sí te dijera quién es mi madre?

-De hecho, es lo primero que me gustaría preguntarte, pero creí que no me lo dirías...

-Claramente no debería, al menos no aún-Informó algo desganado

-Dudo que a Scorpius verdaderamente le importe-Habló una encapuchada, acercándose a ambos hombres-. Ya demostraste bastante control y con el estado de algunos, no creo que volvamos a las presentaciones pronto-Blaise se aclaró la garganta

-¿También eres mi hija? -Se notaba el claro nerviosismo en su voz, pero la expresión alarmante y las mejillas sonrojadas de su hijo, lo hicieron reconsiderar.

-No-Dijo la encapuchada bastante divertida-. Soy la amante de su hijo, ya que su esposa no pudo venir en este viaje, decidí acompañarlo

-¡Roxanne! -Exclamó con los ojos bien abiertos Theseus

-¿Qué? ¿Ahora te avergüenzas de nuestra aventura, amor? -Dijo inocentemente, con la mano a la altura del corazón.

-No sé tu nombre hijo, porque créeme lo estaría pronunciando completo-Tras la conmoción, Blaise miró a su hijo de tal forma, que la pareja temió por la vida de Theseus-. Estoy de acuerdo con que disfrutes de los placeres de la vida y de una buena compañía, pero no te hubieras casado... porque dudo que te hubiéramos obligado a hacerlo

-Señor Zabini...-intentó la chica, dándose cuenta del curso equivocado que tomó la conversación, pero el moreno alzó una mano para callarla.

-Jamás hice promesas vacías a las mujeres con las que estuve y apuesto que nunca le fui infiel a tu madre, así que espero que tengas una muy buena explicación para esto. Porque estoy seguro de que te criamos mejor que esto.

-¿Ves lo que provocaste? -Le dijo el joven a la encapuchada, la cual se encogió de hombros

-Esto no es su culpa-la desaprobación vibraba en la voz de Blaise.

-De hecho, si, Señor Zabini-Blaise la miró-. Dado las historias que contó en el futuro, pensé que sería divertido para usted saber que su hijo se le parece más allá de la apariencia.

-Ella no es mi amante, padre-El moreno encarnó una ceja en cuestionamiento-. Es mi esposa.

-Pero ella dijo que...

-Como dije, mi error. Solamente hice una broma, nunca pensé que reaccionaría así

-Lo que pasa Roxy-Dijo ya algo más divertido Theseus-. Es que padre ha luchado por tanto tiempo por el amor de mi madre, que creo que no le gustaría que dañara a una mujer como ella...

Ahora era el turno del Slytherin de tener las mejillas sonrojadas y parecer avergonzado.

-Mi hijo está en lo cierto. Puede que esté bien divertirse, pero el amor es algo totalmente diferente y no se traiciona a quien se ama.

-Créame Señor Zabini, ha criado a un buen hombre. Ahora si me lo permiten, me gustaría quedarme en caso de que Theseus me necesite por lo de su madre-ambos hombres asintieron y ella se sentó en el apoyabrazos del sofá en el que se encontraba su esposo, con toda la delicadeza de una joven de la alta sociedad.

-Eres una sangre pura-Dijo al notar sus movimientos entrenados.

-Si, pero digamos que no es que importe demasiado en el futuro

-Nosotros de verdad nos enamoramos, no fue un contrato o algo así.

-Aunque sí una estrategia en beneficio de la familia durante la tercera guerra-Viendo la expresión de su suegro, decidió dar un pequeño resumen-. Mi padre es George Weasley-Los ojos de Blaise se abrieron como platos-. Tía Mione tiene un cariño especial por él y tras la muerte de su gemelo, como ya se notó en las presentaciones, no se sentía cómodo con su familia. Tras descubrir a mi primo, la verdad, su lealtad nunca más volvió a vacilar.

-Pero teníamos miedo de que, a la hora de la batalla, no fuera capaz de luchar contra su familia. Así que Scorpius buscó a alguien que se acercara a Roxy-Buscó los ojos de su padre-. Yo ya estaba enamorado de ella, la guerra sólo me dio la excusa perfecta.

-Créame Señor Zabini cuando le digo que, cuando supe la verdad, quise matarlo. Dude de su amor, dude de todo, hasta de las intenciones de los "Merak" o los propósitos de la guerra, pero estaba embarazada y casada con vínculo mágico.

-No había vuelta atrás-Confirmó Blaise y los jóvenes asintieron

-Sin embargo, yo también estaba perdidamente enamorada de su hijo, así que, tras la guerra, le hice pagar con creces sus mentiras

-Y yo me aseguro de demostrarle mi amor cada día-Dijo tomando su mano y depositando un beso en sus nudillos, sin dejar de mirarla. Lo que hizo sonreír a Blaise

-Lamento esa jugada, ya que supongo estuve de acuerdo en el futuro

-Era la guerra, padre. Además, tampoco se la lastimaría o a su familia, pero teníamos que intentar de todo para que estuvieran de nuestro lado de buena gana, antes de simplemente mandarlos lejos

Eso hizo que el moreno suelte el aire que no sabía que estaba conteniendo, ya que esperaba que en caso de que su hijo no hubiera tenido éxito, George y su familia se verían envueltos en un fatídico destino, lo cual, dado lo que vio en las presentaciones, no era para nada merecido.

Theseus sonrió, al igual que su esposa, aunque Blaise no podía notar esto último. Sin embargo, ambos jóvenes sabían la verdad. Los "Merak" tenían únicamente dos reglas durante la tercera guerra y la primera era que estabas con ellos o estabas en su contra. Por suerte la familia de Roxanne siempre formó parte del primer grupo.

-Dijiste que estabas embarazada...-Tragó el nudo de su garganta- ¿Así que soy abuelo? -Ambos jóvenes soltaron una carcajada por la cara del Slytherin, mientras asentían

-Si, otro heredero Zabini. Su nombre es Gael y tiene cinco años.

-Andábamos en busca de su hermano, antes de que este viaje interrumpiera nuestros planes

-¿Qué? -Blaise palideció

-Tranquilo papá. Estabas más que feliz con la idea en el futuro

-Sobre todo porque si era niña, llevaría el nombre de su abuela paterna y sin importar el género, sería reconocido como heredero de esa casa

-Así que tu madre es de una Casa Noble y Antigua... acaso...-Tanteó sin querer ilusionarse demasiado

-Si, padre. Mi nombre es Theseus Zabini Parkinson y mi madre es Pansy Zabini de soltera Parkinson.

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Bueno, sí a alguno le quedaba alguna duda, ya se confirmó el Dramione y sus hijos.

Sé que no hay demasida descripción de Scorpius y Theseus, pero fue al propósito, porque la deje para sus presentaciones.

Diganme sus teorías y opiniones sobre las parejas.

Para los que siguen mis demás fics ¿esperaban esta reunión?

¿Cómo será que realmente están relacionados mis fics?

Lo hable en un live, pero este es el mejor ejemplo de cuando digo que deben leer entre líneas lo que escribo, porque sí, lo peor de Ron fue el destino de su hijo, pero recuerden que Lavender se asusto y desvió ese hechizo ¿se entiende las verdaderas intenciones de Ron esa noche? Además de que Rose estaba tan acostumbrada, que escondía a su hermano.

En fin, los leo y espero verlos alguna vez en mis live para tirar chismes y teorías.