Capitulo Ocho.

Frotando una mano por su rostro, Zayn terminó de ordenar los últimos papeles que necesitaba y los metio en una carpeta, haciendose una nota mental para pedirle a Debbie que les diera un vistazo. Estaba cansado y tenia hambre pero al menos, habia terminado las cosas más importantes del día para poder salir a tiempo y pasar el resto del día con su hijo.

Se sorprendió bastante cuando la puerta de su oficina se abrio y Eros, aun llevando su disfraz de osito, entró. Sus ojos eran enormes en su rostro mientras observaba los ramos de rosas pero cuando se posaron en él, sonrió y corrio en su dirección.

—¡Papi!

Sacando la silla de debajo del escritorio, observó a su hijo rodear el mismo antes de arrojarse a sus brazos. Subiendolo a su regazo, le sonrió—. Hola, cariño —beso su mejilla—. ¿Donde esta tu papá?

—Aquí —tendió una caja de chocolates con forma de corazón que tenian una nota pegada arriba.

Quitando el papel, rodeo a su hijo con un brazo para evitar una caida y leyo la nota: "Mi papá cree que tienes unos ojos hermosos y unos labios bonitos, ¿saldrias a una cita con él para que pueda descubrir que tu corazón tiene las mismas cualidades?"

Elevó una ceja cuando la puerta se abrio y Liam entró—. ¿Estas utilizando a nuestro hijo para pedirme una cita?

—No le vi el lado malo a utilizar a la personita que tiene la mitad de mi corazón para lograr que la que tiene la otra parte acepte salir conmigo —parpadeo con inocencia fingida—. ¿Hice algo malo?

Rodando los ojos ante el tipo, abrió la caja de bombones y le tendio uno a su hijo y a Liam antes de esconder la misma para evitar que su pequeño enfermara por comer ese tipo de cosas. Volvió a mirar a Liam.

—¿Que tienes planeado? —preguntó, tomando sus cosas para poder marcharse.

—A decir verdad, pensé que me dirias que no —lo miró aturdido.

Zayn rió—. Pues, te estoy diciendo que si, así que inventa algo.

Los ojos del castaño tenian un suave brillo en ellos cuando lo observaron acercarse—. ¿Te he dicho ya cuanto habia extrañado tu risa?

—No lo creo. —dejo que Liam tomara a Eros en brazos y lo acercara a su cuerpo con su brazo libre.

—Siempre he amado ese sonido y lo extrañe cada día que estuvimos separados —susurró, dejando un rapido beso en sus labios—. Y para la cita, ¿que te parece un picnic en el parque?

—Mmm, creo que puedo tolerar un poco de aire fresco.

Liam lo miró con diversión—. No vas a hacerme esto facil, ¿verdad?

—Mmm-mhm —negó con la cabeza.

—Es una pena para ti que sepa perfectamente lo que te gusta —sonrió, acercandose y bajando la voz—. Y sé que amas los picnics porque crees que son romanticos, más aun si son cerca de un lago.

Oprimiendo los labios juntos, se negó a responder a eso. Tenia razón, Liam sabia mucho de él, nunca habia sido una persona cerrada cuando se trataba del castaño, por lo que conocia todos sus secretos detalladamente. Eso haria las cosas más interesantes a su parecer.

Poniendose de acuerdo en que Liam iria por él a su casa para darle tiempo de cambiarse y al castaño de comprar las cosas necesarias para el picnic, ambos se marcharon en sus propios autos. Eros habia parecido un poco enojado por tener que volver a alejarse de papi pero lograron convencerlo con la promesa de más dulces.

(...)

Una hora despues, los tres estaban sentados sobre una manta en el parque bajo la sombra de un árbol mientras observaban los patos nadar en el lago frente a ellos. Eros estaba chillando, emocionado, cuando una pata con sus polluelos salió del agua y se dirigio al lugar donde estaban, recolectando la comida que las personas habian dejado olvidadas.

—¡Papi, Jamie! —apuntó con su pequeño dedo a los animalitos.

Riendo, Liam tomó algunas migajas de galletas de la canasta que habia comprado y les arrojó, logrando que se acercaran un poco más a ellos. Los ojos de Eros no podian ser más grandes en su pequeño rostro mientras observaba a las aves apresurarse para buscar la comida.

—Creo que él será veterinario. —Zayn comentó, pasando sus dedos a través del cabello de su hijo, apartandolo de sus ojos—. Ama los animales, se vuelve loco por ellos.

—Es un buen dato —sonrió—. ¿Conoce el zoologico?

—Fuimos cuando era muy pequeño pero dudo que lo recuerde.

—¿Podemos ir?

Zayn parpadeo hacia él con confusión—. ¿Me estas pidiendo permiso?

Se encogio de hombros—. No tengo idea de hasta donde se me permite ir con ustedes —confesó—. Me emociona ser capaz de mostrarle algo así, quiero ser capaz de ver su expresión de emoción cuando vea a los animales, pero no voy a presionarte, Zayn.

Bien, ahora él se sentia culpable por un montón de cosas a la vez—. Aun me duele lo que hiciste y tengo muchas heridas que sanar, Liam —lo miró directamente—. Pero Eros es tu hijo tambien, y ahora que te veo con él, yo realmente me siento como una basura por habertelo negado tanto tiempo y...

—Hey, no, no te culpes —Liam quito la canasta del camino y lo atrajo a su lado—. El que cometí el error fui yo, cariño, tu fuiste un pequeño guerrero al salir adelante como lo hiciste. Protegiste a nuestro hijo, fuiste todo un hombre, no como yo y eso solo me hace amarte más de lo que ya lo hacia. Nunca te culpes por lo que sucedio.

—Un verdadero hombre te hubiese buscado y te habria dicho lo que sucedia. —susurró con voz ahogada.

—No, cariño, un verdadero hombre protege aquello que ama a cualquier precio —corrigio—. Y lo hiciste, no dudes de lo valiente, inteligente e increible que eres. Jamás te atrevas a culparte por algo de lo sucedido porque de todos nosotros, tu eres el único que ha hecho las cosas bien.

Miró hacia arriba, a su rostro—. ¿En serio crees eso?

—¿Que eres maravilloso y la persona más inteligente que haya conocido? Si, lo creo —dejó un beso en su nariz, sonriendole, antes de voltearse a ver a Eros, quien los observaba distraidamente mientras masticaba una galleta—. En cuanto a este chico, estaré orgulloso de ser el padre de un veterinario o un arquitecto, ¿te gustaria construir casas como papá, cariño?

Eso logró que Zayn cayera de espaldas, riendo—. Te lo aseguro, él tiene un gen destructivo de una milla de ancho.

—¿Alguna anecdota enlazada a esa afirmación? —preguntó con diversión.

Zayn asintió—. ¿Sabias que a Louis le sale la vena artistica cuando se aburre o se queda sin cigarrillos? —preguntó pero no esperó una respuesta—. Hace un tiempo, le compre legos a Eros y a Louis se le ocurrio armar una mansión con ellos, estuvo horas colocando piezas. Cuando la terminó, Eros apareció corriendo con su disfraz de dinosaurio y destruyo la construcción al grito de "Dozzila". Fue una de las pocas veces que vi a Louis llorar.

Y solo eso tuvo a Liam carcajeandose. Zayn sonrió, su hijo era un caso a tener en cuenta pero lo amaba y a sus locuras.

Cuando Liam logró recuperarse, lo miró—. ¿Tiene un disfraz de dinosaurio?

—La mitad de su armario son disfraces —confesó—. Comenzó cuando lo disfrazamos para Halloween en su primer año, ahora cada vez que vamos a la tienda y ve uno nuevo, me lo pide.

—Él se ve lindo en ellos —jaló una de las orejas de peluche de Eros y sonrió—. Igual que su papi.

—Oh vamos, deja eso, los dos sabemos que él es igual a ti. —rió.

Liam lo miró con un brillo emocionado en sus ojos—. ¿Lo crees?

Asintió—. Cada vez que lo miro, cada sonrisa o mueca —sacudió suavemente la cabeza—. Te veo a ti.

La sonrisa que Liam le dedico era tan brillante que Zayn tuvo ganas de llorar. El tipo se veia tan malditamente orgulloso y feliz de Eros que era hasta un poco nauseabundo. Mientras observaba a Liam hablarle de los patos a Eros a la vez que el pequeño devoraba las galletitas, se preguntó como de diferente hubiese sido su vida si no hubiese tomado la decisión de alejarse de todos.

Un beso en los labios lo saco de golpe de sus pensamientos, Liam rió sobre él—. Hey, dormilón, ¿me estas escuchando?

—¿Uh?

—Te pregunté si quieres ir al zoologico ahora, aun tenemos tiempo y no queda tan lejos.

Se sentó, pasandose las manos por el rostro para despabilarse antes de mirar a su alrededor con el ceño fruncido—. ¿Donde esta Eros?

Liam hizo un gesto hacia la derecha—. Creo que tiene planeado llevarse uno de esos patitos.

—Oh dios —Zayn rió al ver a su hijo correr detrás de la mamá pato, sus manitos con garritas al frente en un intento de atrapar un polluelo. Sus pies fallaron, cayó sobre el cesped y antes de que uno de ellos pudiese llegar a él, se levantó y escupió lo que habia entrado en su boca antes de seguir corriendo, gritando una y otra vez: "Jamie". Zayn suspiró—. Atrapalo y vamonos antes de que coma más cesped.

Riendo, el castaño hizo lo pedido mientras Zayn juntaba las cosas. Levantó la mirada cuando escuchó la risa de su hijo solo para ver que Liam lo habia atrapado y estaba haciendole cosquillas y gruñendo suavemente mientras se acercaban a él.

—Papá oso. —rio Eros, jadeando.

—Y tu eres mi bebé osito —Liam bromeo antes de mirar a Zayn y mover las cejas—. ¿Te interesa ser el papi oso? Tendrias beneficios con papá oso.

—¿Estas coqueteando conmigo de nuevo, Payne? —bromeo, sacudiendo la cabeza mientras se ponia de pie con las cosas en sus manos—. Soy un padre de familia respetado, no intentes esas cosas conmigo.

—Ouh, dificil, ¿eh? —rio—. No importa, la miel es más dulce cuando cuesta más obtenerla.

—Deja las referencias a osos. —pidio con una sonrisa, dirigiendose a donde habian dejado el auto.

El viaje al zoologico fue increible. Eros parecia emocionado con cada animal que veia, sus ojos eran amplios y Liam parecia encantado de hablar con él, diciendole lo que sabia de cada uno. El castaño aprovechó cada momento para acercar a Zayn a su lado, dejar besos rapidos en sus labios o simplemente aferrarse a su mano para que "no se quedara atrás". La sonrisa estupida en el rostro de Zayn no habia podido ser evitada de intentarlo.

Para cuando el día terminó, Zayn estaba seguro de que a Liam no le costaria mucho averiguar que él seguia amandolo como el primer día y Eros tenia un animal preferido nuevo, el peluche de pinguino aferrado a su mano junto a Jamie era la prueba de ello. Ellos realmente se habia divertido y Zayn se sorprendio al darse cuenta de que estaba esperando a su proximo dia libre para poder salir juntos.

—¿Esta es la parte donde me besas en la puerta? —preguntó Zayn, desbloqueando la puerta de entrada y tomando a un dormido Eros de los brazos de Liam.

—¿Quieres que te bese? —sonrió.

—No si vas a darme esa sonrisa engreida luego.

Liam se inclinó, acunando su nuca con la mano, unió sus labios en un dulce beso que duró demasiado poco a su parecer—. Dios, te amo. —el susurró calentó los labios de Zayn cuando Liam se apartó unos milimetros.

—Yo, Liam, no...

—No tienes que decir nada, mi amor, no te lo dije esperando recibir una respuesta, solo quiero que sepas que te amo —miró a Eros con una sonrisa—. Los amo muchisimo a ambos y no voy a parar hasta tenerlos a mi lado.

Mierda, ¿que demonios se suponia que debia responder a eso? Sin tener idea de lo que debia decir, tomó la parte delantera de la camisa del castaño y lo jaló hasta que sus labios volvieron a unirse. Era el primer beso que habia comenzado Zayn desde que se habian vuelto a ver y al parecer, Liam se percató de ello si el sonido sorprendido era una indicación.

Dando un paso atrás, Zayn murmuró un:— No vemos luego —antes de entrar a la casa y cerrar la puerta tras ellos, su respiración salia en jadeos.

Sin poder detenerse, se asomó por la ventana para ver a Liam posar sus dedos en sus labios antes de sonreir. La alegria se veia en su caminar cuando se marchó en dirección a su auto.

Zayn rió suavemente y miró a Eros—. ¿Será que no se dio cuenta de que nosotros tambien lo amamos?

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