XII. LAVANDA: Desconfianza
DISCLAIMER: Demon Slayer pertenece a Koyoharu Gotōge, publicado por la revista Shonen Jump y animado por el estudio Ufotable. / Este One-shot pertenece al reto #FebruaryFlower creado por Princess_Saremi, el cual ya terminó el 29 de febrero, pero yo deseo acabarlo, aunque me tome todo el año
TEMÁTICA: Lavanda / Confesión vergonzosa
PAREJA: Giyuu x Shinobu (AU Escolar, seguimos con las pillerías de Shinobu en el colegio :v)
NOTA DE AUTOR: A parte de la temática de este reto dada por la autora, quise utilizar "Lenguaje de las flores" para encaminar mi trabajo. En internet hay muchísimos significados para la misma flor por lo que utilicé el más formal que encontré que pertenece al libro: "El lenguaje de las flores" de Kate Greenaway.
XII. LAVANDA: Desconfianza
Suspiró hondo y exhaló. Podía hacerlo. Todos los días se esforzaba por sacar lo mejor de cada uno de sus estudiantes (aunque a simple vista pareciese sólo gritarles y agredirles con la mota). Esto no era nada del otro mundo.
¿Pero por qué él? Rengoku. Tengen o Kanroji, hasta Himejima, podía dar esa charla y ser más asertivos con los muchachos.
¡Ah, cierto! Ellos tenían sus propias secciones donde exponer el tema.
— Como es el día internacional de la mujer, hablemos sobre igualdad de género con los estudiantes cuando acaben el examen. — propuso Kanae Kochou, la maestra de ciencias, en la última reunión de docentes y todos aplaudieron su brillante iniciativa; aunque sospecha que Shinazugawa lo hizo solamente por caerle bien.
Se sortearon las secciones y le tocó los de tercero de preparatoria. Los aborrecía porque no le tenían el mismo miedo y respeto que los chiquillos de secundaria.
Él no se oponía al asunto; le parecía bien la lucha que habían hecho las mujeres por años para ganar sus derechos y reconocimiento en la sociedad. Su objeción era tener que comentarlo, que no tenía idea, y más frente a esos vándalos de grado superior.
Faltaban sólo cinco minutos para que sonara el timbre anunciando el final de la prueba y tendría que iniciar con su discurso. Continuó repasando las separatas que había preparado un día antes, ignorando la facilidad con la que los alumnos plagiaban en sus celulares o se pasaban papelitos con las respuestas.
Entendía los conceptos, pero le costaban hilvanar sus ideas para exponerlas ante ese público. Era el profesor de Educación Física, maldita sea. Su trabajo no era hablar con ellos.
Por suerte había elaborado algunas diapositivas y un video en su USB. Simplemente se las pasaría y con suerte entenderían algo del tema...
Palpó el bolsillo de su chamarra donde se supone que la memoria estaba guardada.
Tomioka, estás bien jodido; se lamentó. El aparato no estaba allí, ni en su otro bolsillo, ni en su maletín. Reposaba contento en su casa, prendido de su computador.
El retumbar de la campana anunció el final del examen.
—...Pueden tomarse cinco minutos más.
— Pero profesor, ya todos hemos acabado — intervino una de las chicas.
— ¿De verdad todos?
El aula confirmó en coro y al pobre maestro no le quedó más que recoger las fichas llenadas.
Aunque no estuviera listo ni tuviese su material de apoyo, por dignidad, cumpliría con el trabajo que le encargaron.
— Bien, ahora hablaremos de un tema importante: Igualdad de género. — anunció y para su desgracia, por primera vez, la muchedumbre parecía tener interés en lo que tenía que decirles. — Por que es necesario que conozcamos el rol que cada uno tiene dentro del espacio social.
— El rol de las chicas es ser muy lindas. — interrumpió Douma desde su asiento al final de la clase. —En cuanto más lindas, más útiles son para la sociedad.
Muchas risitas acompañaron su comentario bobo. ¿Dios, porqué los castigas con un cerebro diminuto?, se preguntó hastiado de la burla del mocoso.
—¡Cállate, Douma! — intervino la delicada pero firme voz de Shinobu. Lo que le faltaba, que ella también saliera con sus chistes. —¿Puedo acotar a su exposición, Tomioka-sensei?
Asintió con la cabeza, ya no tenía nada que perder. Desconfiaba de ella, seguramente en cualquier momento empezaría con sus ocurrencias, pero le cedió su lugar frente al grupo.
—Empecemos diferenciando términos. — sonrió amistosa como estrategia para llamar la atención. — ¿Conocen la definición de sexo?
Iba a detenerla. Sabía que no podía creen en que Kochou tomaría el asunto en serio y, además; las charlas de salud sexual y reproductiva le tocaban a Sanemi la siguiente semana, que se joda él...
— El sexo es universal y son las diferencias genéticas y biológicas que segmentan a los seres humanos en varón y mujer, sólo existen esos dos y son los mismos aquí, en el Latino América o donde ustedes quieran.
Ah, verdad. Había leído esos conceptos anoche.
—El género, por otro lado, son los roles, funciones, ideales y prejuicios que las diferentes sociedades o culturas asignan para cada sexo. Varían con el tiempo, la religión, la economía... En fin, múltiples factores que lo definen, técnicamente es los valores que la sociedad atribuye que debe ser un hombre o una mujer...
Cada palabra la pronunciaba con tanta seguridad y pasión, que las ideas que postulaba resultaban coherentes. Se preguntaba donde habrá aprendido Kochou tanto sobre igualdad, posiblemente ayudó ayer a su hermana a prepararse para su discurso. Pero no importaba, lo que valía la pena es que le había salvado el pellejo y estaba agradecido.
—...Concluimos entonces que tanto hombres como mujeres compartimos los mismos derechos y deberes, y estamos en las mismas condiciones, capacidades y habilidades de desenvolvernos en la comunidad por igual.
Finalizó y sus compañeros estallaron en aplausos, incluso Giyuu aplaudió; felicitando su brillante ponencia.
Y nuevamente la campana retumbó, informando que era la hora de salida.
—Shinobu-chan no solo es bonita sino también muy inteligente — chilló Douma intentado abrazarla.
—Si, sí. Ahora vete, que necesito cobrarle un favor a Tomioka-sensei. — respondió la joven tomando su bolso a prisa para evitar que el mencionado se le escapara.
Cuando la clase estuvo completamente sola y el maestro pretendía marcharse luego de calificar las evaluaciones, Shinobu se plantó frente a su escritorio.
— Profesor, quiero invitarle a comer.
Giyuu la miró de pies a cabeza atónito por la declaración tan sorpresiva. Era lo último que se esperaba de sus acosos.
— No. — respondió solemne. — Uno, eres mi estudiante y dos, las chicas no hacen ese tipo de confesiones tan vergonzosas.
— Sólo le pedí que salgamos a comer algo, no que se case conmigo. — eso se lo pediría en algunos años más. —Además, ¿no aprendió nada hoy? Las mujeres también pueden invitar a una persona que les agrada a salir... y como usted no le agrada a nadie, tendré que invitarlo yo, ¿No cree?
Era inevitable, Kochou siempre acababa saliéndose con la suya. No podía debatir contra su lógica; tarde o temprano terminaría convenciéndolo, sin mencionar que, de alguna manera, se lo debía. Que más daba, de cualquier forma; irían a un lugar público, no a un motel. Y le avisaría a Kanae para evitar malos entendidos.
— ¿Tienes suficiente dinero para pagar la cuenta?
— Dije invitación, no abuso — rió despacio. — Dividiremos la tarifa a mitades, ¿le parece?
— Pero iremos a comer salmón con rábanos — respondió Giyuu resignado, levantándose de su silla.
— Ni crea. La persona que invita elije ¿no? Vamos a una cafetería que inauguro recientemente. Mi hermana dice que hacen un té de lavanda delicioso y quiero probarlo. Puede llevarme a comer salmón otro día.
¿En que momento habían acordado una segunda cita? Ni por un segundo, debía bajar la guardia con Kochou.
"Desconfía de Kochou, desconfía de Kochou", repetía su mente.
FIN
Hola!!
Wooh, dos entregas en menos de 24 horas, soy tan productiva :v Pero es que no podía dejar pasar la fecha.
¡Feliz día de la mujer a todas las chicas preciosas que siguen y leen estos trabajos! Y también a las maravillosas escritoras que diariamente entregan sus talentos para enriquecer este fandom con precisos y adorados fanfics, dedicando su tiempo a la creación de contenidos muy interesantes y a entretenernos. A todas nosotras, nunca permitan que nada restrinja continuar con nuestras decisiones, ambiciones y metas.
La terminología que he utilizado sobre género en el desarrollo de esta entrega es la que manejamos en la ONG donde laburo.
Bueno, acabando, me iré a hacer la siesta un rato más.
Cuídense :D
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top