DISCLAIMER: Este One-shot pertenece al reto #FebruaryFlower creado por Princess_Saremi. / Demon Slayer pertenece a Koyoharu Gotōge, publicado por la revista Shonen Jump y animado por el estudio Ufotable.

TEMÁTICA: Geranio / "Perdóname por soltar tu mano ese día"

PAREJA: Giyuu x Shinobu

NOTA DE AUTOR: A parte de la temática de este reto dada por la autora, quise utilizar "Lenguaje de las flores" para encaminar mi trabajo. En internet hay muchísimos significados para la misma flor por lo que utilicé el más formal que encontré que pertenece al libro: "Le Langage des Fleurs" de Vanessa Diffenbaugh. La trama que cree para esta entrega, la considero un poco larga, de forma que la dividiré en tres partes, segmentadas en los siguientes episodios.

ADVERTECIA: El siguiente trabajo contiene temas delicados como el suicidio, motivo por el cual les pido tener la mente abierta e intentar comprender costumbres de otras culturas tales como el "seppuku". Traté de documentarme sobre el tema para poder tocarlo de la forma más sensible que me sea posible. Creo que también podría llegar a ser un poco gore. Giyuu perdóname por lo que voy a hacer ☹.

IX. GERANIO: Devoción Inquebrantable.

Ambos cazadores se miraron fijamente por varios segundos sin mencionar palabra alguna. Entre ellos, sólo había espacio para el silencio absoluto. Shinobu deseó ahogarse en los profundos ojos azules de su compañero cuando este le dedicó una última mirada.

—Confío en ti — murmuró tan bajito que ni siquiera escuchó su voz, pero el movimiento de sus labios le permitieron entender su mensaje.

Sakonji y Giyuu procedieron con el ritual. Cuidadosamente, de sus cinturones sacaron el tanto tradicional y lo desenvainaron. Con cuidado envolvieron la hoja de la daga en papel de arroz. El joven sintió que el miedo y la desesperación volvían a dominar su cuerpo, creyó que en cualquier momento empezaría a temblar.

Tragó saliva y volteó a ver a su maestro; el anciano se retiró su máscara. Jamás había visto su rostro y su expresión de serenidad y calma alentaron su valor para proceder.

"Porque es lo que un hombre hace."

La voz de Sabito resonó en su mente, ciertamente, hace años que no podía recordar su timbre, pero ahora la escuchaba con claridad en sus pensamientos, como si el día de ayer hubiese compartido con él.

Era ahora o nunca.

Levantó el arma con ambas manos... y esta fácilmente se hundió en su abdomen. A los segundos Urokodaki le siguió.

Lamentaba muchísimas cosas en su vida. Muchísimos errores y uno de ellos fue obligar a Shinobu a acompañarlo en ese momento, por que la escuchó sollozar tras él. Jamás imaginó que una chica como ella, tan valerosa y descarada, lloraría por alguien como él.

Pero la relación entre un seppukunin y su kaishakunin era estrecha e íntima, un amigo o un familiar. Ni su maestro y Tanjiro podía hacerlo, sólo quedaba ella.

Dolía muchísimo. No era la primera vez que recibía una herida profunda en el vientre, pero ciertamente, jamás experimentó un malestar tan aberrante como este. Sentía que su cuerpo se partía por la mitad y respirar, era puramente tortuoso.

Querer a su hermana, Sabito, Urokodaki, Tanjiro y  Nezuko había sido doloroso. Amar a Shinobu también fue una tortura, pero no se arrepentía del afecto que sintió por todos sus seres especiales.

Vio que su ropa se teñía en sangre rápidamente, sus manos, sin embargo, no estaban manchadas. No moriría deshonrado.

Sabía que, si pedía piedad, el Patrón se lo concedería, pero ya no había marcha atrás.

Cerró los ojos y con la poca fuerza que le quedaba arrastró el tanto hacia el lado izquierdo de su torso y el filo desgarró sus entrañas. Un sabor casi metálico inundó su boca y tosió, escupiendo sangre.

El corte se deslizó hacia la derecha y en el sacrificio final, volvió al centro, llegando casi al esternón.

La agonía se le hizo perpetua, ni siquiera era capaz de algo tan sencillo como inhalar.

La pilar observaba como la espalda de su compañero tiritaba como una hoja atormentada por el viento y su sangre se derramaba en el suelo. Era incapaz de moverse, había visto a gente morir de forma dolorosa antes, su propia hermana falleció así entre sus brazos, en una escena grotesca.

Pero era diferente, era ella quien debía acabar con la vida de Tomioka para evitarle más sufrimiento.

Shinjuro Rengoku elevó su nichirinto por los aires y un movimiento veloz como el flamear del fuego, cercenó el cuello de Urokodaki por detrás, quebrando el hueso y la garganta, pero deteniéndose allí, sin que el morboso acto se convirtiera en una decapitación. Finalmente, el antiguo pilar del agua, Sakonji Urokodaki, había pagado por sus promesas y descansaba. Rengoku respiró tranquilo.

Giyuu por su parte, seguía en agonía, si la mujer no actuaba pronto, su sufrimiento podía durar horas antes de que sucumbiera a la muerte.

Pero ella no podía consumar el ritual, jamás en su vida había decapitado ninguna criatura, ni humana ni demonio, ¿Por qué debía empezar a hacerlo cortando el cuello del hombre del que se enamoró? ¿Por qué tenía miedo cuando era él quien estaba sumido en el dolor en el suelo?

—¡Suficiente Kochou! — gritó Himejima levantándose de su lugar. — Si no eres capaz de hacerlo, sal de allí. Tomioka-san está sufriendo y no podemos dejarlo. Yo me haré cargo.

Era verdad, el pobre hashira ni siquiera había caído en la inconsciencia, lamentó no haberle drogado con algo que menguara su suplicio.

"Confío en ti".

Su última voluntad sonaba en su mente. Él la había elegido, como amiga, amante y como kaishaku; creía en su valor y en su habilidad para ayudarlo en un momento de angustia. No podía defraudarlo. Así como la devoción de Tomioka por ella era ciega, la suya por él sería inquebrantable.

Limpió sus lágrimas con el puño de la manga de su haori y respiró hondo.

Retrocedió algunos pasos y levantó el arma del pilar del agua contra su propio dueño. Todas las escasas fuerzas de su cuerpo se concentraron en sostener la empuñadura y en un rápido movimiento circular como el aleteo de un lepidóptero, el seppuku fue concluido.

Lo último que Giyuu Tomioka vio, fue un enjambre de mariposas volar hacia él, antes de obtener silencio y paz. Extrañamente, pudo respirar por un segundo. Sintió el aroma del mar y de jazmines.

Las piernas de Kochou flaquearon y cayó derrotada, abrazando el cuerpo de su compañero de tantas misiones y aventuras, su blanco preferido de bromas, alguien a quien había admirado... ¿Por qué no pudo haberlo amado un poco más?

Cuando no soportó su culpa y comenzó a entrar en ppanic por lo que hizo, se aferró a él, Kanroji, Tengen y Himejima tuvieron que intervenir, la primera para separar a su amiga del cadáver y los otros dos para llevarse a Sakonji y Giyuu de allí.

Los enterrarían en un templo budista cercano con todos los honores que dos antiguos pilares del agua tan valientes y nobles como ellos merecían.

...

Shinobu sonrió nuevamente a las pocas horas de la muerte de su amigo. Le había tomado más tiempo recuperarse de la muerte de su hermana, porque ahora creía que era más fuerte como cazadora y como mujer. Porque sabía que no volvería, porque sabía que ya no estaría más. Cuando lo busque en su soledad, no estaría a su lado.

La misma sonrisa embustera que engañaba a todos los que la rodeaban. Seguía siendo amable y carismática, como si nada hubiese pasado.

Pero ahora estaba sola, frente a la tumba de Tomioka Giyuu, expresando sinceramente cuánto le había dolido su perdida. Cuán horrible era ver sus manos y recordarlas manchadas con su sangre.

— Perdóname por soltar tu mano ese día...

Cerca al mortuorio, habían crecido algunos geranios rojos, eran flores corrientes y sencillas, ni siquiera requerían de mucho cuidado plantarlas y sin embargo florecían maravillosamente, hasta cierto punto tan modestas que tal vez ni siquiera eran conscientes de su propia belleza. Puede ser que se parecieran un poco al pilar del agua, después de todo, era el único tipo de plantas en él tenía en su casa.

—Tomioka-san, me iré un poco lejos hoy. Ahora estoy lista para enfrentarme a la Segunda Luna Demoníaca; sé que mi hermana me acompañará en esta misión y espero que tú también vengas conmigo. — suspiro. —No tengo idea de que sucederá, pero quiero prometerles que traeré la victoria.

FIN

Por fin acabó. Fue terrible, pero está concluido y aunque escribí cosas muy tristes y feas contra personajes que me fascinan, me siento orgullosa de haber podido crear algo tan conmovedor. Estoy pensando en subir una versión nueva y extendida de esta Three-shot, ya como un fanfic de varios capítulos, más explicita y detallada. No lo sé, queda pendiente.

Al final, no pude matar ni a Tanjiro ni a Nezuko, el final queda abierto para ellos. Y aprendí muchísimo sobre el seppuku, pero ahora quiero olvidarlo porque es escabroso :/

Este capitulo es el final del reto. Solo puede cumplir con 9 días de los 28 :/ pero me divertí mucho haciendo este libro que no acabaré aquí. Aunque con menos regularidad seguiré subiendo las entregas relacionadas con flores hasta concluir los 28 retos.

Gracias a Princess_Saremi por haber iniciado este reto. Me ayudó a conocerme mejor como escritora, a recordar mis raíces, a investigar y encontrar mis ritos personales para inspirarme. Quiero comentarles que Umi_Honey también hizo el reto en este fandom e hizo un trabajo maravilloso y divertido, con mucha creatividad. Si mal no recuerdo creo que se llama FLOWERS, si no lo leyeron, pasen a checarlo.

Arckmed, mi amor, gracias por tu apoyo con esto. Incluso te creaste una cuenta en whattpad para leerlo. Sé que muchas veces fui irresponsable con la danza que estábamos practicando para carnavales por escribir, y también renegaba y me frustraba. Gracias por ser paciente y cariñoso conmigo.

Y nuevamente, gracias a las personas lindas que votan y comentan, de algún modo, si estas historias son bonitas, es gracias a ustedes también que me hacen feliz y me dan la energía para seguir creando.

Nos vemos en la siguiente historia, que no será GiyuuShino porque ya les hice mucho daño por ahora.

Bye bye!!