Renuncia de derechos, ninguno de los personajes utilizados aquí son de mi propiedad.

Un silencio infinito se posó sobre la habitación, habitación donde se encontraban casi todos los héroes actuales más grandes de Mondstadt.

Jean y Lisa habían dado una vuelta completa, ellas estaban en el escritorio de la Maestra Intendente, quién por su gesto se podía saber lo tan anonadada que se encontraba.

Lisa no estaba con una facción muy alejada de la de Jean, ella también estaba muy sorprendida por la grata sorpresa, las palabras parecían haberse quedado atascadas en ambas. Ninguna conversación surgió durante un buen lapso de tiempo.

Lumine y Paimon apreciaban lo que ocurría, era de cierta manera algo sorprendente de ver, era el regreso de un gran héroe que se creía muerto por años.

Incluso sin estar familiarizada con la situación, podía entenderla a la perfección.

-Goku... -finalmente Jean habló, con la cara echa sorpresa se alzo del escritorio y no despegó su mirada del chico.

La rectitud era algo propio de Jean, nunca se veía quebrantada por alguien o algo. Certeramente era extraño verla en este papel, sus ojos eran llorosos y ahora se veía insegura, exageradamente diferente a como se acostumbraba a mostrar.

La mujer lentamente se acercó hacia el joven Son, por respeto y por hacer este momento un poco más íntimo, Eula, Kaeya, Lumine y Paimon retrocedieron un poco para dejar un buen espacio personal a ambos.

Goku le observaba con una cara cálida, únicamente esperando a que ella por fin se rindiera en este combate mental por soportar el llanto, conocía bastante bien a la chica.

Después de todo, hace mucho había sido su compañero del alma.

Unos segundos pasaron, Jean seguía acercándose y ya solo quedaban pasos contados para quedar frente a frente del pelirubio.

Una sonrisa se pintó en Goku mientras le otorgaba un gesto sereno a la chica, una vez quedó de cara con Goku, extendió su mano derecha de forma paulatina al rostro del Son.

Una lágrima traicionera escurrió de su ojo izquierdo, empapando levemente la mejilla del mismo lado en lo que está gota descendía, una vez tocó el mentón del chico, supo que esto era una completa realidad.

-D-De verdad... Tu... -balbuceo Jean, no podía evitar flaquear y sus palabras salían con debilidad, con gentileza recorrió el cachete de Goku y luego tomo su rostro con un poco más de seguridad.

El Son alzo tambien su mano derecha, de una forma tranquila la coloco encima de la de Jean, como si de alguna forma le dijese "Estoy aquí".

Ella no aguanto más. Las lágrimas ya le habían salido y con toda la pena del mundo se abalanzó hacia el pecho de Goku, dejándose caer en ruinas ahí.

-Perdonenme, las dos -dijo Goku imitando la acción de Jean, recorriendo la espalda de la chica con sus fornidos brazos, aferrando aún mas aquel abrazo.

El Son se quedó unos momentos así con Jean, no obstante recordó que había alguien más que no había visto desde hace tiempo ahí, evidentemente era Lisa.

Ella tenía una de sus manos cerca de su boca, su cara también estaba inundada de lágrimas, pero curiosamente ella no se atrevió a acercarse como lo hizo Jean.

El Son optó por dejar esto en segundo plano, en unos momentos también la atendería a ella, pero creía mejor estar con Jean en estos momentos.

Kaeya y Eula veían incrédulos como la mujer que tanto se veía imponente se había dejado caer en brazos de Goku, triste y notablemente descuidada, algo que nunca habían esperado ver en una mujer como ella.

-Esta bien... Y-y-yo te perdono, lo i-importante es que e-e-estés aquí -hablo Jean aún con su rostro enterrado en el pecho de Goku.

Ante la respuesta el chico suspiro, ya estaba un poco más tranquilo, juraba que con ellas una buena golpiza o un buen castigo si se iba a llevar.

O tal vez estaba cantando victoria muy pronto...

-Yo... No... -la voz femenina de Lisa sonó, Goku se estremeció al oírle, había usado un tono bastante fuerte.

-¿E-eh? -Goku llevo sus ojos hacia donde se encontraba Lisa, con algo de temor vio como sus manos desprendían algunas cargas de energía Electro, lo que suponía una sola cosa.

-¡E-Espera! Aquí está Jean también, ¡Si me das a mi le das a ella! -clamo Goku en una forma de defensa, quién para su mala suerte, justo Jean se colocó en su espalda de forma instantánea.

-¡¿Cómo?! No me acordaba que fueras tan veloz... ¡Pero aún así, si me das a mi puede que le des a Jean! -dijo nuevamente el Son mientras extendía sus dos manos hacia Lisa y las sacudía de un lado a otro.

-Tu harás que no me de, ¿Verdad? -mencionó Jean a las espaldas del chico, su voz sonaba sarcástica y ahí fue cuando supo que ambas ya habían pensado en esto.

Suponía que algo malo tenía que salir de esto.

-¡Eres un tonto! -exclamó Lisa y Goku se preparó, un rayo de tonalidad púrpura salto de las manos de la Bibliotecaria y fue a parar directamente al Son.

-¡Ghgk! -un quejido salió de sus dientes mientras los apretaba, su cuerpo recibió tal descarga de lleno y no había sido una certeramente tranquila, Lisa lo había atacado con bastante furia.

Antes de que pudiera reaccionar, sintió un enorme empujón, cuando se fijo, Lisa ahora era quien le abrazaba fuertemente por enfrente, al mismo tiempo, Jean le abrazaba por detrás.

-Que ambiente tan cálido -comentó Kaeya a las tres chicas a su costado, ellas le dedicaron una mirada pequeña y luego se volvieron a centrar en Goku y las dos mujeres.

Goku río despavorido, una carcajada que duro poco pues a los pocos segundos nuevamente tomo un rostro sereno, donde abrazo a Lisa e intento de abrazar a Jean.

Unos minutos así pasaron, ninguna interacción surgió a raíz de esto, probablemente se debía a la pena de ambas a hablar en aquellas circunstancias. Esto era a causa de que se mantenía rectas ante todos.

Ahora mostrarse así ante los demás era extraño.

Finalmente, ambas fueron aflojando el abrazo, lo que daba a entender que ya estaban por separarse del Son, el cual también dejo de aplicar fuerza en el agarre.

Las dos luego de segundos tomaron distancia a él, Goku también se separó un poco y se posicionó de manera que podía verlas a ambas.

-¿Ya están mejor? -pregunto Goku con una sonrisa tranquila, una de esas sonrisas que solo él sabía dar, ellas respondieron con un gesto sereno.

-Si -contestaron de forma directa, limpiando las lágrimas que ambas desprendían aún, ya para por fin deshacerse de esta sensación triste y disfrutar del regreso del hombre que alguna vez les había alegrado la vida.

-¿Por qué desapareciste? ¿Fue por lo de tu abuelo? -pregunto Jean mientras que con su antebrazo secaba lo poco que quedaba, él tomo su nuca y la rasco con nerviosismo.

-Si... Fue por eso -respondió no sintiéndose muy alegre de decirlo -Nunca creí que algo así me afectaría tanto. Pero supongo que la perdida de un ser querido es lo peor que podría pasar... Eso o quedarme sin comida.

Ambas chicas no se enfadaron ni creyeron que aquello había sido una razón tonta, justo aquello les había pasado cuando Goku había 'Muerto', así que justo ahora podían empatizar con él.

Lo que si era cuestionable era la forma en la que se deshizo del sentimiento de tristeza, aislarse sin ningún previo aviso creían que fue una decisión tonta.

Era mejor contar como se sentía, aunque seguramente aquello también era algo de orgullo y por eso mejor decidió arreglarlo a su manera.

-Hubieras avisado. No sabes cuánto estuvimos pidiendo que estuvieras bien... -hablo nuevamente Jean, Lisa corroboró lo dicho por la Maestra Intendente.

-Es verdad. Después de tanto tiempo creímos que habías muerto, cariño -agrego Lisa, Goku hizo una mueca.

-Lo sé, estoy algo decepcionado de mi mismo, no había visto las cosas con retrospectiva para ese tiempo -respondió Goku con una cara un poco más seria, ambas notaron el gesto y mejor dejaron el tema.

-Lo importante es que haz vuelto -musitó Jean en un tono ya las calmado -Lo que nos da a saber que sigues vivo, eso es lo que importa ahora.

-No te sientas mal cariño, de todas maneras nunca haz sido muy maduro que digamos -manifesto Lisa, soltando una risa burlesca al terminar sus palabras.

-Dicen eso por que no tienen mi visión ganadora sobre la vida -comentó Goku desviando su mirada algo indignado de que básicamente le dijeran tonto.

Ambas soltaron una risa de nueva cuenta, luego se miraron mutuamente.

-Realmente me alegra que todo haya sido una especulación errónea -declaró Jean, demostrando que se sentía bastante alegre de que Goku siguiese con vida y aún mejor, que haya regresado con ellas.

-Cariño. Si alguna vez te vas de nuevo, por lo menos deja una carta, ¿Bien?

Goku sonrió levemente y asintió.

-Si ahora necesito dejar una carta. Deberás ayudarme a escribir de forma correcta, Lisa -hablo Goku, después de todo Lisa era alguien experta o eso creía al ser ella la Bibliotecaria de Mondstadt.

-Hablemos más tarde de lo que a pasado durante este tiempo -interrumpió Jean ya retomando su rectitud habitual -Debemos detener este tormento.

-Es por Stormterror, ¿No? -profirio el Son, las miradas de ambas chicas se dirigieron a él -Justo logré ahuyentarlo, quién sabe que hubiera ocurrido si no hubiese logrado intervenir.

-¿Lo alejaste de Mondstadt? -cuestiono Lisa con los ojos levemente abiertos de la hazaña, Goku asintió un poco eufórico.

-¡Si! Es raro que no lo notarán luego de que haya caído sobre el techo de la Sede...

-Ahora que lo mencionas, escuchamos un gran estruendo, justo mandamos a Kaeya a revisar para ver cómo iba la cosa -indago Jean, recordando como el lugar retumbó levemente en cierto momento.

-No destruiste nada, ¿Verdad cariño? -interrogo Lisa, mostrándose no muy feliz por la idea de que Goku haya echo pedazos alguna parte de la Sede de los caballeros.

-¡No!, ¡No, al contrario, todo quedó implacable por mis grandes habilidades de... ¿Protección? -hablo Goku buscando una buena excusa, según él no había destruido nada, aunque ni siquiera había echado un vistazo rápido.

-¡Oh casi lo olvidaba! -exclamó Goku casi al instante, recordando al parecer algo importante -Ella es Lumlne, la encontré cuando vi a Stormterror por primera vez, ella también lo vio.

Lisa y Jean se quedaron en silencio, evidentemente esperando a que Goku prosiguiera con la explicación, él entendió y continúo.

-Viene en busca de su hermano gemelo perdido y le dije que le ayudaría a encontrarlo, ¿Podrían echarme la mano? Seguramente lo encontraremos con más facilidad.

Lumine abrió sus ojos levemente de sorpresa, una aura de felicidad irradio en ella, al parecer se había echo amiga de la persona indicada.

-¿Es su hermano gemelo? -pregunto Jean y luego miro a Lumine de pues a cabeza -Tu hermano es exactamente igual que tú entonces...

Ambas mujeres cerraron sus ojos intentando recordar a un sujeto que les recordara a la susodicha, aunque tal cosa parecía imposible, no habían visto a alguien tan llamativo.

Luego de unos momentos ambas negaron con pena, la búsqueda mental no había dado frutos, Lumine solo agachó un poco la cabeza algo que Goku no paso desapercibido.

-¿Creen que podrían hacer algo como una campaña? Incluso pegar carteles serviría... -insistio el muchacho, era la única idea que por ahora tenía en mente.

-Probablemente. Podríamos ayudar pero entonces veo más factible que esto sea un intercambio -comentó Jean.

-Aunque primero que nada, Mondstadt les da la bienvenida. A ambas, mi nombre es Jean, son la Gran Maestra Intendente de la Sede de caballeros de Favonius. Ella es Lisa, la Bibliotecaria.

-Es un placer -dijo de igual manera Lisa, poniendo una de sus manos por su escote, dejándose caer un poco hacia enfrente.

-¿A qué se refiere con ese intercambio? -pregunto Lumine, tal cosa le había tentado y rápidamente paso a optar por la acción, Jean sonrió levemente.

-Debemos inspeccionar tres de los cuatro templos de los cuatro vientos. De ahí proviene el poder de Stormterror, si lo haces, te pedimos que te quedes en Mondstadt, los caballeros de Favonius te ayudarán a encontrar a tu hermano -hablo Jean.

Lumine se quedó en silencio unos momentos, luego le echó una mirada a Goku, quién comprendió la situación.

-Tranquila. Ellos son muy confiables -expresó Goku, cosa que hizo que Lumine pusiera una cara más decidida.

-Entonces me encargaré de la expedición -musitó Lumine usando un tono bastante seguro, Jean se vio complacida ante la reacción de Lumine y aceptó.

-¿Qué harán ustedes? -pregunto Goku observando a Eula y Kaeya, quienes al instante respondieron.

-Ayudare en la expedición -replicó Kaeya con tranquilidad, Goku observó a Eula en esta ocasión.

-No tengo nada planeado. Probablemente ayudaré a exterminar la amenaza lo más pronto posible, es mi deber como Caballero De Favonius -contesto Eula, Goku sonrió.

-En ese caso. Yo iré a ver a Diluc -hablo Goku con serenidad y los presentes le vieron con una cara confusa, cosa que le hizo preguntar el por qué de las caras.

-¿No ayudarás con Stormterror?

-Bueno. Yo creo que ya hice bastante este día, aparte ya no formo parte de los Caballeros así que, no es mi obligación -dijo Goku, de cierta manera parecía egoísta, pero tenía razón, si no quería intervenir, entonces nada le obligaba a hacerlo.

-Eso si. Si quieren pelear frente a frente siempre estaré dispuesto, ¡Una buena pelea es una buena pelea! -exclamó alegre el mismo varón, un suspiro salió de los presentes.

Por lo menos si una contienda surgía tenían el apoyo de uno de los Jóvenes más poderosos de Mondstadt.

-En ese caso. Nuestro camino se separa, por ahora -comentó Eula, Goku asintió.

-¡No! ¡Yo quería seguir con Goku! -chillo Paimon haciendo un berrinche, Goku río y Lumine le obligó a callarse.

-Nos vamos a ver después. Yo dije que ayudaría a Lumine a encontrar a su hermano y seguramente emprendamos un viaje juntos -declaró Goku.

No obstante, una pequeña presión amenzante surgió a raíz de esto, de reojo observo a las presentes y tanto Eula, como Lisa y Jean le estaban viendo no muy alegre.

-¿Qué? -comentó Goku confundido, Jean y Eula desviaron su mirada hacia otro lado negandose a contestar, Lisa con una sonrisa algo retorcida respondió.

-Cariño, de verdad deberías considerar más los sentimientos de las demás.

-¿Eh?

-Somos muchas. Empieza a tomarte el tiempo para complacer a cada una, ¿Te parece bien?

-¿Eh?

-Andando Goku, hay que irnos para que ellos empiecen a contar más a detalle el plan, tu ve con Diluc, yo iré a uno de los templos -Kaeya jalo a Goku del cuello de su camisa, como hombre, debía ayudar a su compañero en esta situación.

-Nose por qué pero siento que debería agradecerte -dijo Goku rascando su nuca mientras salían de la habitación, él río en respuesta.

-Pues cuando lo entiendas lo harás.

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Fin del capítulo.

¿Qué les pareció?

Pues bueno, ni modo Lumine, con Goku o sin Goku no te salvas de chambear.

Ya actualice, toca dejarlo así por otros dos meses, o 1600 votos y 500 comentarios en dos minutos y actualizo ahorita.

Ahora nosé que decir, una paja y a dormir.

¡Sayonara!