Renuncia de derechos, ninguno de los personajes utilizados aquí son de mi propiedad.

La ventisca del fresco viento traspasando por la ventana ligeramente abierta le obligó a abrir los ojos con lentitud, cual niño pequeño peleó con la nada unos segundos y resignado llevo una de sus manos a tallar sus ojos.

Su cama era solo habitada por él, ofreció una habitación a las demás acompañantes de casa pero creyó que era mejor en estos días compartir el lecho, después de todo tardarían unas semanas en traer lo necesario para que la habitación de las chicas se pudiera llamar 'lugar acogedor'.

Era un salón vacío básicamente.

No es que fuera decisión suya seguir durmiendo sin nadie al lado, sinó que la misma Lumine explotaba cada vez que mencionaba la frase "Dormir juntos" y su inocencia le hizo creer que no era más que algún tick nervioso y decidió no indagar más.

El día anterior justo luego de comer se dedicaron a ir hacia varios locales de Mondstadt, naturalmente buscando cosas triviales para la ya no desamparada Lumine quién con aún mas pena acepto todo lo que Goku le regaló; pues ella no contaba con ningún fondo hasta el momento.

Fue un día especialmente largo, primero un entrenamiento, una charla, una especie de mudanza y luego salir de compras... Probablemente una charla más al final aunque eso ya no importaba, hoy todos estaban contentos con la vida.

-Aun es muy temprano. Olvidaba lo pesado que es tener una ventana que deja entrar todo el sol... -murmuró de forma pesada, intentando pararse del suave colchón que separaba sus ansias de descanso de sus obligaciones cotidianas.

Una vez tomo el suficiente impulso, se alzo de golpe y tuvo uno de esos mareos que eran comunes cuando eras muy brusco, no obstante el sentimiento paso y con lentitud camino sin calzado a las afueras de su cuarto.

-Supongo que aún estarán dormidas -se dijo a si mismo viendo como la puerta de la habitación que les dejo al duo de jóvenes seguía cerrada, así que dirigió su mirada a la puerta del baño y un poco más espabilado se apresuró.

Coloco su mano en la manecilla y la giro sin remordimientos, una vez llegó al punto donde era imposible girar más, jalo hacia él, pero sus espectativas de un baño vacío se desvanecieron instantes después...

-¿L-Lumine?

Su bien moldeado trasero y la fina curvatura de su espalda estaban al simple deleite de sus ojos, Lumine parecía aún adormilada y no fue hasta que volteo a ver al espejo cuando noto la presencia de Goku.

-¡¿Q-Q-Qué haces aquí?! ¡S-Sal p-p-por favor!

-¡Pero quería hacer del baño!

Lumine sintió la ausencia de lujuria en sus ojos, no la veía con indiferencia por estar semidesnuda con un pijama sensualmente revelador, la veía como si estuviera completamente cubierta de ropa.

Si era así... ¿Por qué se sentía decepcionada?

No obstante su vergüenza era bastante latente y sus mejillas cubiertas de rojo lo hicieron saber, desviando su mirada cubrió lo poco que podía de su cuerpo pues aunque no sintiera intenciones lascivas, la presión de la vista de Goku sobre ella en esta situación le afectaba.

-P-Permiteme terminar de lavar mis dientes. Te dejare usar el baño cuando termine -pidio de la forma más calmada que su corazón le dejaba, de cierta manera Goku pudo percibirlo y pese a ser alguien quisquilloso en estás situaciones la dejo de inmediato.

-¡Avísame en cuanto salgas por favor!

Salió disparado hacia quien sabe que parte de la casa y Lumine hizo una pequeña mueca antes de meter el cepillo a su boca.

-Ni siquiera cerró la puerta.

[...]

-¡Huele muy bien!

-Solia cocinar mucho cuando salía de viaje con mi abuelito. Debería decir que en el ámbito culinario soy un experto.

Por supuesto que tampoco lograría crear la cuarta maravilla en la gastronomía, sin embargo sus dotes para ella no eran malos, al contrario, era alguien que se podía considerar chef profesional para ciertos platillos en específico.

Lumine no soltaba ninguna pregunta. Se había quedado pasmada luego de la pequeña escena en el baño. Ya vestía las prendas que de costumbre llevaba pero la imagen de Goku detrás de ella mientras vestía poca ropa era algo difícil de borrar.

-¡Listo! Aquí está mi famoso filete de pescado -dijo Goku y como pudo saco su pecho aún cargando dos platos en sus manos.

-¡¿T-Tanto!? -clamo Paimon al ver la porción que Goku le dejaba. Era curioso porque era una glotona hecha y derecha pero comer está cantidad incluso le parecía inhumano.

-No quería verme egoísta y les serví lo que siempre me sirvo yo... Pero si no te cabe todo me lo como son problemas -expresó abundante de felicidad -Oye Lumine. ¿Estás bien? No haz dicho casi nada desde que te sentaste.

-¡¿Eh!? Cough, perdón. Solo pensaba en algunas cosas -musitó omitiendo detalles importantes -Goku. En uno de tus estantes hay una piedra obscura ligeramente rubí, tiene un diseño interior muy hermoso... Pero, si la comparo con la del señor Diluc, creo que son las mismas.

Goku quien apenas masticaba el primer bocado tosió con fuerza cuando escucho las palabras de la chica, y rápidamente trato de recomponerse.

-¿D-De verdad? No lo recordaba...

-¿No tendrás tu una visión de la que nunca nos haz contado?

-¿E-E-Eh? N-No, para nada. Era de mi abuelito p-pero nunca la utilizaba -termino de hablar bastante nervioso, cosa que Lumine vio con los ojos entrecerrados no muy convencida de la seguridad con la que lo dijo.

Una vez sintió que la mirada de la chica se calmo, volvió a llevar un pedazo de pescado a su boca e inicio con sus acostumbrados manjares exorbitantes, donde últimamente se veía más refinado pese a comer cosas que haría una ballena.

Lumine también corto un pedazo del montón de carne que Goku le sirvió, una vez la llevo a su boca, su mano se dirigió a su mejilla tomándola con exaltación.

-¡Que bueno está! -chillo desde el fondo de su alma y Goku aún sin dejar de comer le observo completamente complacido.

-Mhe añegra que the gushte -balbuceo con los cachetes inflados por toda la cantidad de carne que yacían en ellos, cosa que probablemente sería desagradable para cualquiera pero a Lumine le daba algo de ternura.

En un lapso de poco más de veinte minutos el plato de Goku acabo vacío, con apenas algunas migajas o pedacitos de carne, cosa nada comparable a los platos rellenos de Lumine y Paimon.

-¡Ya no puedo más! -flotando se tumbo para atrás mientras su boca sacaba humo, notoriamente satisfecha pero al mismo tiempo sintiéndose derrotada al no poder con la comida habitual de Goku.

Lumine solo reposo en la silla, cerrando sus ojos mientras que un poco de sudor escurría de su cuello, deslizándose poco a poco por cada curvatura que su esbelto cuerpo dejaba a relucir.

-Deberiamos ir hoy a buscar algunas recámaras y estantes para su habitación -hablo Goku sobando su esculpido abdomen que no pareció aumentar ni un centímetro sin importar todo lo que comió.

-N-No... -la voz cansada de Lumine se alzo solo para refutarlo -No quiero más cosas patrocinadas por ti. Ya haz hecho suficiente, déjame conseguir mis cosas por mis méritos.

-Pero no tienes ni un Mora, ¿Cómo lo harás?

-Empezare a hacer encargos en el gremio de aventureros -la oji dorado dejo de recargarse con comodidad y se sentó firmemente en la silla para dedicarle la mirada al Son -Escuche que no son complicados y pagan bien. Así podré ayudarte para repartirnos la carga.

-¿Te uniste al gremio de aventureros? ¿Cuando?

-Cuando resolvía el problema de los templos, aunque, ahora que recuerdo, probablemente no haya encargos hasta la próxima semana.

-¿Y porqué mejor no duermen conmigo? De verdad yo creo que es mucho mejor que estar tiradas en un tapete -declaro Goku llevando sus manos a la nuca, sin entender realmente la negatividad ante la propuesta.

Al notar la falta de empatía de Goku ante sus emociones, ella le contesto de la manera más simple posible.

-S-Son cosas femeninas.

-Que complejas son las mujeres... ¿Sabes qué? ¡Esta es mi casa! ¡Apartir de hoy dormirás conmigo Lumine!

Goku se levantó abruptamente de su silla y apunto con el dedo índice a Lumine mientras le veía retador. De alguna manera sentía que si no la obligaba a dejarse llevar por él, nunca aceptaría su ayuda y eso le molestaba.

Lo más probable es que ella tuviera pena, pero, ¿Por qué tenerla? Después de todo él se ofrecía sin pedir nada a cambio o reclamarle.

-Hump. E-Entonces espero que no te arrepientas de tu decisión cuando a medianoche robe toda la cobija para mí sola -de alguna manera su nerviosismo desapareció y ahora Goku se sintió algo intimidado, pero claro que algo tan tonto no le haría cambiar de opinión.

-¿Debería tomarlo como un reto? ¿Algo cómo para probar mi fuerza física?

-De verdad que solo piensas en pelea.

-Olvidaba que tú también estabas aquí, Paimon.

-¡Oye! ¡Es verdad! ¡Solo dijiste que Lumine estaría contigo pero yo no!

Goku rascó su mejilla mientras que veía la inconformidad de la hada voladora.

¿Por qué simplemente no le decía que también estaría con ellos? ¿Era por qué su instinto le gritaba que no lo hiciera? Sentía una necesidad inconmensurable por tener la noche solo para él y Lumine, era un deseo que no le había invadido, no desde hace tiempo.

-Tu puedes flotar. No tienes el inconveniente que yo tengo -comentó Lumine y su tono de voz pareció bastante agresivo, cosa que por su cara segundos después pudo saber fue exagerado.

-¿¡Hah!? ¿¡Ahora por flotar me quedo sin una camita suave!? ¡Mejor díganme que van a jugar al mamá y al papá! -musitó enfadada cruzándose de brazos y dando una media vuelta suspendida en el aire.

El rostro de Lumine se pinto de un carmesí que nunca antes experimento, sus gesto paso a ser el de un puchero lleno de pena y genuinamente giro a ver a Goku como si de manera telepática dijera "Dile algo a la niña".

-¿El papá y la mamá? ¿Por qué siento que ya lo había jugado? -se cuestionó y hasta se esmero para intentar recordar si es que alguna vez ya lo probó, seguramente lo tenía en la punta de la lengua pero la mirada de Lumine le vencía.

-No sé a qué te refieres con eso pero, no lo digas Paimon... Por qué, a, Lumine... ¿Le molesta? -claramente sin tener idea de que decir 'regaño' a Paimon como si de verdad se tratara de alguna niña, inconscientemente él trio armaba una escena familiar en el que cualquiera confundiría al par de rubios con una cariñosa pareja.

Para su suerte la chica le dejo de mirar con esa ferocidad y está vez observo a su primera compañera de viaje.

-¡Bah! ¡Ya que! Yo me duermo en el sofá.

Paimon también compartió la sensación de ser amenazada y decidió ceder ante la injusta situación; por lo menos desde su punto de vista. De cierta manera sentía celos de lo complaciente que era Goku en cuanto a Lumine se refería.

Curiosamente está apenas era la primera vez que se notó más indiferente.

-Dejando este tema de lado. También vi un bastón rojo en el armario de la habitación, n-no me malinterpretes, lo vi porque quise colgar la ropa que compré ayer y me dio curiosidad.

-Oh, mi báculo. No recordaba que seguía aquí.

-¿Báculo? -interrogo Lumine evidentemente esperando más información, no diciéndolo de forma directa pero haciéndolo algo obvio.

-Fue un regalo de mi abuelo cuando cumplí diez. Era una forma de apoyarme porque aún no era lo suficientemente fuerte y derrotar a Slimes o algún que otro mago se hacía fácil, tal vez él lo veía una forma de compensar mi falta de visión. Aunque no lo creas, de pequeño anhele una.

Imagino que no es un bastón normal -dijo Lumine ante las palabras poco concisas del Son.

-Si no mal recuerdo. Podía estirarse casi infinitamente, no sabría decirlo porque las veces que intente extenderlo al máximo se perdía de mi vista y prefería evitar algún daño accidental.

Lumine extendió sus párpados cuando oyó tal cosa. ¿Un báculo que se podía extender incesantemente? Era una arma que hasta cierto punto sonaba ridículamente útil, y claro si sabías usarla sería poderosa.

-¿No había la probabilidad de que se rompa?

-Era irrompible según mi abuelito.

Aún mejor, eso creía.

-No tengo pensado usarla. Creo que ya soy bastante fuerte por mi mismo, aunque, le tengo bastante cariño -expresó él y se vio nostálgico, tanto Lumine como Paimon se miraron por unos segundos viendo la escena con algo de esa emoción compartida.

-Pero... Tampoco sería mal, llevarla en caso de algún inconveniente.

-¡Paimon muere por ver a Goku pelear con el bastón eterno!

-Si no se llamará báculo sagrado, ese sería un buen nombre.

Antes de que la conversación pudiese llegar más lejos unos cuantos golpes sonaron en la puerta de madera. Goku fue el encargado de ir hacia ella para abrirla.

-¿Amber?

-¡Si estabas aqui! ¡Rápido! ¡La Gran Maestra Intendente Jean me pidió que los reuniera a los tres en la catedral! Era sobre algo relacionado a Stormterror.

-¿Diluc ya logro localizarlo? -murmuró anonadado de las capacidades tácticas del Ragnvindr -Gracias por avisarme Amber.

Ella asintió euforicamente y Goku se dio la vuelta para observar a la dupla que ya estaba acercándose a él, listas para lo que el siguiente encuentro traería.

-Sabes. Eso de que el dragón vuele tanto, no me termina de agradar... ¿Dónde dijiste que estaba mis báculo?

-En el armario.

-Creo que tengo una idea para acortar distancias.

__________________

Fin del capítulo.

¿Qué les pareció?

Otro capítulo bastante tranquilo si se podría decir así, el tercero básicamente diario y probablemente mañana salga el cuarto, aprovechando que horita tenemos inspiración 🤙🏿

El capítulo pasado decía que el que lo traduciera decidía qué fic se actualizaba xD era lo que decían esas letras de mrda aunque al final nadie pensó en eso supongo.

Ya me siento más en calor otra vez con la narración en tercera persona, me sentí bastante perdido por el hecho de que las últimas cosas que escribí fueron en primera persona, aunque siento que ya me vuelvo a acostumbrar a está.

Se viene peleita con el dragón, supongo que aquí ya es bastante obvio y no cuenta como spoiler porque va lineal a la historia xD

Buen día, tarde o noche.

¡Sayonara!