El sábado llegó.

—¡Es hoy!– gritó de emoción. Se alistó tan temprano que tuvo que volver a la cama por media hora antes de poder irse a tomar el autobús.

—Doyoung, ¿Olvidas algo?– preguntó su madre.

—No, mamá.– contestó Doyoung.

—Entonces, que te vaya bien.– dijo ella.

Doyoung se fue con una sonrisa, tomó el primer autobús a la escuela y luego de quince minutos llegó.

Entró a la escuela, buscando a sus amigos. Entonces los encontró cerca de la cancha de baloncesto.

—Doyoung, buenos días.– saludó Donghyuck sonriente.

—Buenos días.– los saludó, notó que faltaba Jungwoo.– ¿Y Jungwoo?

—Sí vendrá, parece que se le ha hecho tarde.– dijo Jaemin.– por cierto, parece que esos chicos estarán en nuestro curso.

Señaló disimuladamente. Doyoung volteó de a poco, miró a dos chicos altos, uno más delgado que el otro, y una chica de cabello castaño.

—Parece que sí.– dijo Doyoung.

Donghyuck simplemente asintió, Jaemin saludó a alguien, entonces voltearon a ver, era Jungwoo.

—¡Jungwoo!– saludó Doyoung. Él le sonrió.

Pronto llegó su profesor de matemáticas, entonces se reunieron con él. Como había dicho Jaemin, los chicos estarían con ellos en el curso, incluso se había unido Hansol, el mejor amigo de Lucas, intensamente enamorado de Jaemin.

Jaemin simplemente miró a otro lado, no podía creer que Hansol se había unido al curso también.

Doyoung hizo puchero mirando al rededor, Lucas no se había unido.