Jisung y Minho pasaron todo el fin de semana juntos.

Como en los viejos tiempos.

Minho se comportaba muy cariñoso con Jisung, lo abrazaba y besaba sus rosadas mejillas y si, habían compartido un par de besos, besos inocentes que Jisung le robaba a Minho.

— Hannie, por favor no hagas eso. — Pidió Minho abrazando a Jisung.

— ¿Hacer qué? — Preguntó Jisung inocentemente volviendo a besar los labios de Minho.

Jisung sabia que lo que hacia estaba mal, Minho tenia novia además de que no correspondía sus sentimientos... Aún.

— Bebe. — Insistió Minho mirando los labios de Jisung.

Minho por su parte no sabia que hacer en esa situación, su mejor amigo, su hermano lo besaba mientras hacia ruiditos un tanto sucios que solo lograban excitarlo. Pero era inevitable no caer ante los deliciosos besos de Jisung, sus labios eran jodidamente dulce y exquisitos.

— ¿Me llevas a casa?, mamá me esta esperando. — Minho asintió tomando las llaves de su auto.

El viaje fue incómodo por el lado de Minho, a diferencia de Jisung que se veía muy cómodo.

— Nos vemos mañana Honnie. — Jisung se acercó a Minho y plantó un pequeño beso en sus labios.

Minho no respondió, el comportamiento de Jisung lo hacia sentir pequeño, simplemente no sabia que hacer con tales muestras de afecto. Era muy extraño en Jisung, el no solía ser muy cariñoso y eso lo asustaba, no quería que Jisung cambiará solo por su enamoramiento por el.

— ¿No crees que te estas ofreciendo demasiado Jisung? — Cuestiono Félix metiendo un puñado de palomitas en su boca.

— No lo creó del todo. — Jisung suspiro mirando a su amigo. — Es que Minho y yo siempre hemos sido unidos que cuando intente alejarlo todo salio mal.

Jisung fulminó con la mirada a Felix provocando que este se sonrojara hasta las orejas.

— Perdóname Jisung, sabes que soy débil. — Se excusó Felix aun con el rostro sonrojado. — Hyunjin solo apareció y comenzamos a hablar, ambos tomamos demás y una cosa llevó a la otra...

— Y de un momento a otro se encontraban en una nube de pasión en donde lo único que se escuchaban era sus gemidos. — Continuó Jisung con una sonrisa pícara.

— Pues si, el sexo estuvo genial, ¿Y sabes que? ¡Me ha estado llamando! — Soltó Felix emocionado.

— ¿Hablas enserio? — Preguntó Jisung sorprendido. El sabia el tipo de chico que era Hyunjin, uno libre sin compromisos.

— Si, que te digo Jisung, todos me corresponden. — Alardeó Felix haciendo que Jisung rodara los ojos.

— Lo se Lixie, eres hermoso y todos te aman. — Dijo Jisung mirando como Felix veía su teléfono con corazones en los ojos. — Solo ten cuidado, ¿Si?.

Felix lo miro antes de asentir.

— No quiero que sufras por alguien que no te pueda corresponder. — Dijo Jisung con su mano en el hombro de su amigo. — Te habla la voz de la experiencia.

— Gracias por preocuparte Sung — Félix se acerco abrazando a Jisung. — Pero todos caen ante mi y te prometo que no seré yo el que sufra.

Félix se separo y beso la mejilla de Jisung.

— Ten cuidado tu también Jisung. — Jisung fruncio el ceño con una mueca de confusión. — Lo que tratas de hacer esta muy bien, es obvio que Minho se muere por ti, pero es tan tonto que no se da cuenta y solo quieres darle un empujón, pero sabes que es complicado. El tiene novia que por lo que me han contado es una perra y Minho ya te rechazo una vez y sin tacto. No quiero que sigas sufriendo Sung, ese empujón que quieres darle puede llevarte con el y no lo digo de buena manera, por favor, te quiero mucho y me duele verte tan triste y roto.

Jisung se sintió frágil por un momento, Félix tenia razón no podía seguir así, todo su plan sonaba estupido ahora, solo se estaba humillando asi mismo, ni siquiera el sabia si iba a hacer entender a Minho que lo amaba y el lo hacia también. No quería ser más el niño que no entiende un no como respuesta, solo se dañaba así mismo.

El valía mucho más que eso.

— Todo lo que has dicho desde el día en que decidí cambiar para llamar la atención de Minho  hasta ahora, tu realmente tenías razón, lo que dijo Jeongin en el parque de diversiones, él también tiene razón, incluso lo que mi abuela me dijo, ella también tiene toda la razón. — Puso sus manos en su rostro, llorando sintiéndose mal por si mismo, por no seguir los consejos que le dieron, tan tonto. — El no me merece, si no es capaz de saber lo que siente por si mismo, ni siquiera con ayuda, el... el es un idiota, Lix.

Félix lo atrajo a sus brazos y Jisung lloró, sacando todo lo que sentía.

— Llora todo lo que quieras, Sung, aquí estoy. — Decía Félix mientras acariciaba el cabello de Jisung.

— Necesitó un descenso, necesitó un tiempo para mi, para dejar de ser tan estupido. — Soltó Jisung limpiando sus lágrimas.

— ¿A que te refieres? ¿Que harás? — Preguntó Félix preocupado.

— Mi abuela hace días que ha querido que la visite, esta muy sola desde que el abuelo falleció y necesita compañía.

— ¿Te mudaras? — Félix grito sosteniendo las manos de Jisung. — Por favor no me dejes, por culpa de Minho no tenemos que pagar los que si te queremos, ¡No me abandones!, somos mejores amigos, sin ti, ¿Que seria de mi? — Félix estaba entrando en pánico, lágrimas bajaban por sus mejillas. — ¡No te has ido y ya te extraño!

Su amigo si que era un dramático.

— Por dios, eres un dramático. — Jisung le sonrió arreglando su cabello que debido a las lágrimas se le había pegado en el rostro. — Tonto, no me mudare, solo seria por un corto tiempo.

— ¿Significa que no me abandonarás?

— Por supuesto que no, nunca encontraría un amigo como tú. — Félix sonrió y volvió a abrazarlo.

— Obvio, nadie es como yo.

Jisung amaba a Félix, su amigo era una de esas personas que no podrías cambiar por nada ni por nadie, eran tan diferentes, pero a pesar de eso encajaban muy bien. Ellos siempre se apoyarían y estarían cuando el otro lo necesitará.

— ¿Mejores amigos por siempre? — Pregunto Jisung con una sonrisa en sus labios que Félix inmediatamente le devolvió.

— ¡Mejores amigos por siempre!

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