El joven ruso se encontraba rezando rápidamente frente a la puerta de la oficina del monstruo de piel carmesí pues hasta afuera se podía sentir el asqueroso hedor a alcohol de varios días, ambos guardias que se encontraban en la entrada lo miraron con lástima más no dijeron nada hasta que el bicolor entró tembloroso y pudieron suspirar preparándose para oí de lo peor.

El platinado se cubrió los ojos apenas localizó la gran figura de URSS desnudo sobre una mujer inconsciente que probablemente sería una soldado desafortunada, mirando al suelo sintió su estómago revolverse al oír el gruñido molesto del mayor por ser interrumpido. Momentos después sintió un empujón que le indicaba que se moviera, acercándose así rápidamente hasta la mesa llena de papeles para dejar los que sostenía esperando poder irse lo más pronto posible.

-Какого хрена ты хочешь, маленький ублюдок? -Resopló con molestia el de cuenca oscura apenas poniéndose los pantalones para sentarse en su escritorio frente al menor que intentaba no vomitar por el olor nefasto que emanaba su ebriedad de varios días-.

(¿Qué mierda es lo que quieres, pequeño bastardo?)

-Я приношу... Я приношу донесения из Курска, немцы атакуют различными танковыми ротами, и у нас есть многочисленные человеческие жертвы и невосполнимые танки... -Dijo el de ojos hielo concentrándose para que no le temblara la voz al leer superficialmente los papeles que debía dejar, rogaba internamente para salir ya de allí o que alguien más viniese a informar algo para irse-.

(Traigo.. traigo informes de Kursk, los alemanes están atacando con varias compañías de tanques y tenemos múltiples bajas de humanos junto a tanques irreparables.. )

-Эти проклятые бесполезные люди, они ни хрена не служат. -Gruñó el soviético con molestia pues estaban quedando como inútiles, pero ya los haría arreglar su jodido error de una manera u otra. Al devolver su mirada hasta el menor que miraba la mesa con apariencia nerviosa notó que este tenía los labios resecos y se los relamía constantemente, por lo que tomó una de las botellas con vodka que tenía cerca y sirvió un vaso que le acercó- Вы хотите пить, выпейте немного.

(Esos malditos humanos inútiles, no sirven una mierda. / Te ves sediento, bebe un poco.)

-Это не обязательно, я должен.. вернуться к своим задачам.. -Se excusó rápidamente el niño causando molestia en el azabache mayor quien frunció el seño haciendo que su corazón comenzara a latir rápidamente a causa del miedo de lo que seguramente le esperaba-.

(No es necesario, tengo que.. que volver a mis tareas..)

-Я сказал пей это дерьмо, подчиняйся России! -Su gran mano roja acercó más el vaso rebalsando al bicolor que sin más opción lo tomó bebiendo dificultosamente su contenido debido a lo fuerte que era para su garganta sin costumbre-.

(¡He dicho que bebas esta mierda, obedece Rusia!)

El de gran cicatriz tenía una sonrisa repulsiva observando aún dentro de su ebriedad como el de desgastado uniforme bebía entre lágrimas que hasta cierto punto le generaban placer al ver cómo sufría para tragar el alcohol que él pasaba como agua por su garganta. Para el cuarto vaso el más bajo no podía más con el ardor de su estómago y las fuertes arcadas que tenía, al tener una alimentación tan mala y no haber comido esa tarde ingerir algo tan fuerte como el vodka lastimaba su sensible estómago generándole un dolor horrible dejándolo incapaz de poder seguir bebiendo.

-Выпей, черт возьми, не веди себя как изящная сука! -Gritó de nuevo totalmente ebrio el de Hoz y Martillo golpeando la cabeza de Rusia contra el vaso con vodka que acabó derramándose sobre la mesa generándole más enojo-.

(¡Bebe ya maldito mocoso, no te comportes como una perra delicada!)

• • •

El ruso se removió sobre su pila de sábanas viejas sintiendo aún dolor en su rostro pero evitó levantarse para buscar un espejo pues no estaba de humor para saber qué tan hinchado había quedado luego de los golpes del hombre rojo. A su lado se acercó la tricolor con un pequeño recipiente metálico entre sus manos al notar que su hermano ya había despertado.

-Медсястра сказала, каб нанесці гэта табе, каб паменшыць запаленне, калі ласка, брат.. -Pidió tímidamente la azabache rogándole con la mirada que se dejase ayudar pues su estado se veía deplorable sumado a sus ojeras y lo delgado que estaba-.

(Una enfermera dijo que te pusiera esto para bajar la inflamación, por favor hermano..)

-Спасибо, Бела -Se resignó el eslavo mayor inclinándose para que ella pudiese colocar el bálsamo frío sobre su piel, de haber sido alguien más lo hubiese ignorado o negado de mala manera pero al tratarse Bielorrusia dejó que pudiera sentirse más tranquila ayudándolo al menos un poco-.

(Gracias, Bela)

☽⊱┈──╌ ❆ ╌──┈⊰☾

En el territorio finlandés el albino mecía tranquilamente a su bebé con un brazo mientras cocinaba entretenido de oír a la castaña cantar mientras limpiaba sus rifles para mantenerlos en buen estado, al sentir a Vuori removerse dirigió su vista hasta ella cruzando sus miradas haciéndolo sonreír. Sus pequeños ojitos curiosos se habían abierto ya dejando ver una gema miel y una ámbar oscuro para sorpresa de sus padres, ese rasgo la había vuelto aún más especial pues era en todo el sentido una mezcla de ambos y la amaban más que a nada.

Cuando la cena estuvo lista el rubio dejó a la niña en brazos de su madre para que ella también pudiese alimentarse mientras ellos comían el delicioso guiso de receta finesa.

-Cada día que pasa te ves más hermosa.. -Soltó el de ojos ámbar tomando la mano de su prometida, entrelazando sus dedos con una sonrisa dulce en el rostro-.

La latina dejó escapar una risa suave y se sonrió de vuelta con un ligero sonrojo en sus mejillas, Suomi le decía a diario lo hermosa que era o cuánto la adoraba y no podía estar ya más enamorada de él, sin duda era todo lo que hubiese querido una pareja por lo que esperaba con ansias a que su pequeña creciera para poder casarse incluso si la guerra daba malos pronósticos, estarían juntos bajo la protección de la unión latinoamericana para evitar una posible represalia del soviético.

-Gracias por darme una hija tan hermosa, te amo Suomi.. -Murmuró ella al oído del más alto cuando estuvieron nuevamente sentados en el sofá junto a la de hebra miel y el gran reno, el escandinavo la rodeó con su brazo y unió sus labios en un lento beso lleno de sentimientos-.

Haría todo lo que fuera para proteger a su familia, iba a ser el buen padre que nunca tuvo y cuidaría a su gente.