iv. the fight...
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➢𝔗he fight⌇
CAPÍTULO CUATRO ❙ 🏄🏻♀️◄
❝no more counting dollars,
we'll be counting stars❞
LA FIESTA DEBÍA CONTINUAR, o al menos eso era lo que JJ se repetía constantemente en la cabeza para combatir los evidentes celos que el ver a Alya en compañía de otro chico le habían causado. Se había dedicado a beber cerveza; mucha.
Alya por su parte se había dedicado a observarlo con cuidado mientras Brian continuaba hablándole. Ella no parecía escuchar una sola palabra de lo que el chico le decía. Le agradaba, pero le era difícil prestarle atención cuando JJ andaba cerca.
Se dedicaba a asentir con la cabeza suavemente, como si estuviera entendiendo todo lo que le decía, pero la verdad era que estaba enfocada en aquel rubio, quien estaba a cierta distancia bebiendo cerveza mientras observaba el atardecer con la mandíbula tensada.
Estaba molesto; ella lo sabía. Lo conocía muy bien. Tan sólo se preguntaba qué le había pasado para que estuviera así.
Las horas pasaron y la noche no tardó en aparecer. Ya no había música, pero todavía había gente en la playa bebiendo y conversando. Brian, para el gusto de JJ, se había ido ya que debía dormir temprano porque trabajaría con su padre al día siguiente.
Por lo tanto, Alya decidió quedarse junto a Kiara y Pope, donde también se encontraba Sebastian.
Fue cuando la voz de JJ captó su atención.
—¡Hey! ¡Sarah! —llamó a la Cameron, quien también estaba en la fiesta, cosa que no era de agrado para Kiara—. Sarah, ¿te interesa probar un poco de esta bebida?
—No, gracias —la chica, que estaba acompañada de su novio, Topper, se negó amablemente.
—¡Vamos! ¿No es lujosa? —insistió JJ.
Sí, definitivamente estaba muy borracho.
Alya le hizo una seña con la cabeza a sus acompañantes para que se acercaran un poco a la escena. No había forma en que aquello no terminara en un intercambio de golpes.
—Hey, JJ, ¿sabes qué? Yo la probaré —Topper se metió en defensa de Sarah—. ¿Sí? Gracias, amigo. Te lo agradezco.
—Gracias por la sugerencia, Topper, pero no te pregunté a ti —respondió JJ—. Tal vez si dices "por favor", pero no.
—Oh, ¿"por favor"? —expresó Topper con burla.
El ambiente se estaba volviendo aún más tenso con cada palabra intercambiada entre ellos. Claramente JJ estaba en busca de una pelea y Topper estaba más que dispuesto a dársela por más que quisiera fingir ser una persona pacífica.
—Sí, entonces, vamos, Sarah. Te aseguro que te encantará...
JJ no había terminado de hablar cuando Topper golpeó el vaso lleno de cerveza, haciendo que la misma se salpicara sobre la cara de Maybank, quien lo miró con furia.
—No, no, no, no quiere nada de ti —la reacción de JJ inmediatamente fue empujarlo, lo que hizo que John B finalmente interviniera entre ellos.
—No, no, no —John B trató de calmar a JJ, incluso Pope se acercó para ayudarlo, pero pudieron escuchar a Topper decir "sucios Pogues", y bueno, Routledge no podía quedarse de brazos cruzados ante tal insulto así que de inmediato se giró y le dio un fuerte empujón a Topper.
Nadie se mete con los Pogues.
—¡Hey, John B! —Pope le llamó la atención, las chicas observaban todo con preocupación—. No tenemos que llamar la atención, ¿recuerdas?
Topper iba en dirección a John B, claramente decidido a golpearlo. Sarah notó esto y de inmediato trató de detener a su novio de seguir con aquella estupidez.
—Okey, okey, woah —sin embargo, sus intentos fueron ignorados, pues Topper y John B ya estaban golpeándose—. ¡Chicos! ¡Chicos! ¡Ya basta!
Topper comenzó a patear a John B hasta llevarlo hasta el agua.
Las personas se amontonaron para ver la pelea.
—Hey, John B, no me obligues a ahogarte como a tu padre, ¿okey?
Grave error.
Aquellas palabras solo sirvieron para que John B se le abalanzara encima y continuara con el intercambio de golpes. Todos sabían que lo ocurrido con su padre era, por supuesto, un tema muy delicado para él.
—¡Ya basta, chicos! —gritó Kiara.
Por supuesto, ninguno escuchó. Sarah y Pope también seguían intentando que se detuvieran, pero ellos no los escuchaban.
—¡Esto se puso bueno! —exclamó Sebastian con una sonrisa, Alya golpeó su brazo y lo miró con seriedad. No era el momento—. Lo siento.
—¡Topper, basta! —Sarah le gritó a su novio.
JJ y Pope ahora parecían motivar a John B a que acabara con Topper, lo que por supuesto frustraba a Kiara y a Alya.
Sabían que por más que gritaran que se detuvieran, ellos no iban a hacer caso. Y mucho menos con tanta gente observando y motivándolos a seguir peleando, esperando a que alguien salga victorioso.
—¡Alto! —Kiara gritó una vez más y dio un paso hacia adelante—. ¡John B!
Sebastian la agarró del brazo, sacándola de lo que se podía llamar la "zona de peligro" y evitando que entre tantos golpes, ella terminara herida por accidente.
La pelea no parecía estar cerca de terminar. John B seguía gritándole a Topper y los golpes no se detenían.
Hasta que de un momento a otro, Topper lanzó a John B al agua, dejándolo inmóvil y ahora teniendo todo el control.
Lo estaba ahogando.
Fue ahí cuando la preocupación comenzó a aumentar entre los Pogues. Debían hacer algo. Ya no podían seguir de brazos cruzados.
Mientras Sarah continuaba tratando de llamar la atención de su novio, los Pogues se miraban los unos a los otros tratando de pensar en qué podían hacer para evitar que aquella pelea terminara en algo lamentable.
—¡Haz algo! —le ordenó Kiara a Pope.
—¡Lo está ahogando!
—¡Topper!
Todo pasó muy rápido.
De un momento a otro, JJ sostenía un arma y presionaba la punta de esta en el cuello de Topper. No tiró del gatillo, solo la sostuvo para asustarlo y evitar que siguiera ahogando a su amigo.
Topper se paralizó y la multitud de personas que observaban la pelea dejaron de animarla para ahora observar la escena con miedo. ¡JJ tenía un arma!
Alya no podía creer que JJ había llevado el arma a la fiesta. Se suponía que debían mantener un bajo perfil. Pero en realidad eso no era lo que le importaba. ¡Sebastian estaba observando todo! ¿Cómo iba a explicarle algo como eso sin contarle todo lo que le había ocurrido en la mañana?
—Alya, ¿qué es eso? ¿Por qué JJ tiene un arma? —le preguntaba el chico a su hermana con desesperación y confusión. Alya no respondió nada, tan solo esperaba que JJ no fuera capaz de dispararle a Topper.
No había necesidad de llevar aquella pelea a algo más serio.
—¡Sí, sí, sí, sabes qué es! —escupió JJ con una sonrisa cínica—. ¿Qué harás, amigo?
—¡JJ! —gritó Sarah.
—¡Cálmate! —gritó Pope, igual de preocupado que los demás.
—¡JJ, suelta el arma! ¡Esto no es un juego! —exclamó Alya esperando a que la escuchara y le hiciera caso, aún sabiendo que eso no sucedería.
Muchas de las personas comenzaron a correr y abandonar el lugar, temiendo que JJ disparara y alguien saliera herido. Definitivamente la situación parecía ir de mal en peor.
—¡JJ! ¡Basta! ¡Baja el arma! —siguió gritando la Cameron.
—¿Dijiste algo, princesa?
—¡Baja el arma!
—No, todo está bien, todo está bien —Topper soltó a John B y comenzó a ponerse de pie lentamente, con temor a que JJ le disparara—. JJ, vamos.
—¡Kie, Alya! ¡Detengan al psicópata de su amigo! —Sarah les gritó a las nombradas, lo que provocó una reacción de parte de Steiner.
—¿Quieres hablar de psicópatas? ¡Tu novio estaba ahogando a John B! —exclamó. Sebastian miraba todo con confusión, seguía sin poder procesar que JJ tenía un arma en sus manos. Aún así, tenía una mirada protectora sobre su hermana mayor, a quien defendería de Sarah Cameron de ser necesario.
JJ dejó libre a Topper y se dirigió a todos los presentes.
—¡Okey, escúchenme bien! —seguía sin soltar el arma—. ¡Váyanse de nuestro sector de la isla!
Disparó dos veces al cielo, lo cual por supuesto causó pánico en los demás. Todos lo que todavía no habían escapado, corrieron atemorizados por sus vidas.
Sebastian quedó en shock, al igual que Alya. ¿En serio se había atrevido a disparar el arma?
Sebastian tenía temor. No conocía ese lado de JJ y Alya definitivamente tenía muchas cosas que explicar.
Alya, Kiara y Pope se acercaron a JJ con furia.
—¡¿Estás loco?! —expresó Pope mientras Kiara le daba un fuerte empujón a JJ.
—¡Idiota! —le gritó Kiara.
—¡Idiota! ¿Por qué hiciste eso?
Alya solo lo observaba con decepción y frustración.
—¡Le estoy salvando la vida! ¿Sí? —se defendió el rubio.
—¡Estúpido! ¡Estás arriesgando todo! —exclamó Pope con enojo.
—¿De qué demonios hablan? —les preguntó Sebastian frustrado—. ¿Qué diablos fue todo eso?
JJ miró a Alya, buscando que ella lo defendiera, ella simplemente lo ignoró y se acercó a John B, que cayó inconsciente en el agua luego de tantos golpes.
—¡John B! —su gritó alertó a los demás, quienes se acercaron para ver qué ocurría. Al ver el estado de John B, se preocuparon bastante.
—Alya...
—¡Ahora no, JJ! —exclamó ella con enojo y frustración por lo que estaba pasando—. Rápido, ayúdenme con él.
Los demás la ayudaron a levantarlo del agua y a llevarlo a su casa, donde se aseguraron de que estuviera a salvo para entonces cada cual dirigirse a sus respectivos hogares.
Vaya noche...
A LA MAÑANA SIGUIENTE, Alya salió de su habitación luego de haber tenido una larga noche. No había podido dormir. Todo lo ocurrido en aquella playa seguía rondando por su cabeza. Y ahora se veía obligada a tener que explicarle las cosas a su hermano o simplemente esperar a que él no hiciera preguntas. Al menos no delante de sus padres.
De todas formas debía prepararse mentalmente para eso porque a este punto, Mary y Austin seguramente ya estaban enterados de los sucesos de la noche anterior.
Alya se dirigió a la cocina, deseando por dentro que fuera la única despierta en esa casa, pero no. Toda su familia estaba ahí. Sus padres, sus hermanos y hasta su abuela.
—Tenemos que hablar —dijo su padre con seriedad.
Alya aguantó la respiración al oír eso. Su mirada inmediatamente se dirigió a Sebastian, casi matándolo con la mirada. Estaba segura de que él había dicho algo.
No había forma de que eso saliera bien.
—Alya, ¿cómo es eso de que JJ disparó un arma anoche? —Austin fue directo al grano.
—Papá...
—¿JJ tenía un arma? —preguntó Kayla asombrada. Sabía que JJ era impulsivo pero no sabía que tanto.
—Kayla —la llamó su mamá en un tono firme, indicándole que no se metiera en esa conversación.
—No era una arma real... —trató de mentir Alya, lo cual no le salió nada bien.
—Los disparos me parecieron muy reales —comentó Sebastian con sarcasmo.
—Tú cállate —le ordenó Alya.
—¡Basta! Los dos —Austin los regañó—. ¿Qué fue exactamente lo que pasó?
—Papá, ¿en serio tenemos que hablar de esto ahora?
—Sí, Alya. Tenemos que hablar de esto ahora —la situación no era un chiste para Austin—. Quisiera saber el porqué JJ, tu amigo, disparó un arma anoche.
Alya guardó silencio. No sabía exactamente cómo explicarles las cosas a su familia. ¿Lo entenderían? ¿Se metería en problemas? ¿Qué pasaría después?
—Escucha, amor, nos agrada JJ —empezó a decir Mary—. Creemos que es un buen chico y sabemos cuánto te importa. Pero si está en malos pasos, sabes que vamos a poner límites. No se trata de cualquier cosa, estamos hablando de alguien cercano a ti que tiene un arma en su disposición.
—Nadie salió herido —lo defendió Alya.
—¿Pero y si la historia hubiera sido diferente? —esta vez habló Austin—. ¿Te has puesto a pensar en eso?
Alya no tenía nada que argumentar en su defensa porque era cierto. JJ pudo haber herido a alguien, incluso a sí mismo. Haber disparado dos balas al aire no era un chiste.
—Sigo sin saber de dónde sacó el arma —dijo Sebastian. Todos miraron a Alya, pidiéndole una explicación.
Ella suspiró y decidió contarles todo lo sucedido desde el momento en que salió de su hogar la mañana anterior. Todos estaban sorprendidos, sin saber qué decir exactamente.
No era común que tu hija de 16 años te confesara que junto a sus amigos encontraron un bote hundido del que sacaron una llave que los llevó a un motel en el que encontraron una habitación que escondía muchas pilas de dinero y un arma en una caja fuerte además de pertenencias de alguien a quien encontraron muerto.
—¿Y no se les ocurrió avisar esto a la policía? Alya, tú y tus amigos podrían estar involucrándose en algo ilegal —dijo Austin.
—Tratamos de informarlo a la Guardia Costera, pero nos ignoraron —mencionó ella—. Además de que fueron dos policías quienes robaron dinero de allí.
—Aún así, cariño, esta es una situación en la que un grupo de adolescentes no debería meterse —aconsejó su madre—. Déjenselo a las autoridades.
—Mamá, podemos sacar algo bueno de esto —Alya expresó—. Quiero decir, ¿acaso tenemos algo que perder?
Todos se quedaron en silencio, pensando en sus palabras.
—Sé que suena muy loco, pero les juro que tendremos cuidado y no nos pasará nada —siguió diciendo la adolescente—. Solo imaginen todo el dinero que podemos sacarle a esto y cómo podría mejorar nuestra vida.
Alya miró a su abuela, quien la miraba con orgullo y a la vez preocupación.
Todas sus condiciones de salud pasaron por su mente. Todo lo que sufría su familia en silencio pasó por su mente.
Si podía sacar dinero de toda esa situación, definitivamente lo usaría para darles una mejor vida porque lo merecían.
Austin y Mary intercambiaron miradas. Estaban preocupados, pues temían el tipo de cosas en el que su hija podría meterse si le permitían seguir involucrándose en aquella "investigación" que compartía junto a sus amigos.
Pero confiaban en su buen juicio. Estaban al tanto de que ella sabía cuidarse sola y que no estaría rogándoles autorización de no estar segura de lo que estaba haciendo.
Austin suspiró.
—Está bien.
Alya sonrió.
—Pero harás que Sebastian sea parte de eso.
—¿Qué? —Alya dejó de sonreír, mientras que al mismo tiempo Sebastian sonreía con victoria.
—Confiamos en ti, Alya —dijo Mary—. Pero teniendo en cuenta el incidente del arma, necesitamos que Sebastian sea nuestros ojos en tu grupo de amigos.
Alya rodó los ojos.
—Es eso o nada —sentenció Austin a lo que Alya suspiró con molestia.
No podía quejarse.
—Está bien.
Unas horas más tarde, los Pogues se reunieron en el Chateau para hablar de lo sucedido la noche anterior y también sobre la Sheriff Peterkin, quien visitó al líder del grupo durante esa mañana. Alya no tenía más opciones, así que llevó a Sebastian junto con ella.
Había un silencio un tanto tenso. JJ lanzaba piedras hacia la nada, Kiara tocaba unos tambores, Pope leía un libro, Alya evitaba la mirada de JJ, John B estaba en un profundo silencio y Sebastian observaba toda la dinámica con las cejas levantadas. Esperaba a que alguien hiciera o dijera algo.
—No lo hagamos, ¿sí? —la voz de Routledge llamó la atención de todos—. Peterkin dijo que si me alejo del pantano me ayudará con Servicios Sociales.
—¿Y le creíste? —cuestionó JJ.
—Sí, le creí, JJ.
—Es policía —el rubio comenzó a alterarse—. Le creíste a un policía.
—¡Sólo tengo que alejarme un par de días del pantano y me ayudará! —exclamó John B—. No ayuda el hecho de que tú hayas disparado un arma.
—¿Sabes qué debería haber hecho? Debería haber dejado que te ahogara.
Claro que JJ no lo decía en serio. Sería el primero en sacrificar su vida por el grupo en una situación de vida o muerte.
—Sí, claro, ¿Topper iba a ahogarme? —preguntó John B con sarcasmo.
—¿Te viste al espejo? —respondió Maybank con el mismo tono, ya que Routledge tenía un enorme moretón en su ojo izquierdo.
—Qué gracioso. ¡Vamos, sigue! Cuéntame más. Vamos.
JJ se acercó.
—Siempre ganan, ¿no? —soltó—. Kooks contra Pogues. ¡Ellos siempre ganan! ¡Maldición!
El rubio estaba molesto. Tanto que soltó un golpe a una de las bolas que colgaban como decoración.
—¡Okey, está bien! —exclamó Kiara, ya un poco cansada de la actitud de JJ.
—¡No, no está bien! No está bien —exclamó él de vuelta—. No quieren que vayamos al pantano. Eso significa que hay algo valioso. Y lo sabes, hermano —señaló a John B.
Alya los miró en silencio. No iba a admitirlo en voz alta, pero JJ tenía razón. Si tanto les cohibían la entrada al pantano, era porque no querían que ellos encontraran algo. Algo valioso.
—Sé que tú lo sabes —JJ habló con más calma—. Entiendo porqué tú no quieres ir —miró a Pope—. Eres exitoso, arriesgarías demasiado. Y tú, Kie... —miró a la chica—. Ya eres rica, ¿por qué te molestarías?
Aquel comentario hizo que la morena girara los ojos. Claramente no le gustaba que JJ le restregara en la cara que ella ya tenía dinero solo para poder ganar una discusión. Pero a fin de cuentas, era la verdad. Y no había mucho que ella pudiera decir en su defensa.
—Pero ustedes y yo, chicos —JJ miró a Alya, Sebastian y John B—, ¡no tenemos nada que perder! No tenemos nada, ¿sí? Y John B, sé que antes esta no era tu situación.
—No quiero hablar de esto —John B se puso de pie y comenzó a alejarse—. Hazte a un lado.
—¿Eso es todo? —cuestiono JJ.
—¡Sal del medio!
JJ se volteó hacia la dirección en la que John B se estaba yendo.
—John B, oye, tengo un plan.
Los demás intercambiaron miradas. Las ideas de JJ no solían ser muy buenas. Nunca llevaban a algo bueno, pero tal vez no perdían nada con escucharlo.
—¿Tienes las llaves del barco de Cameron?
—No, JJ —John B se expresó en un tono de queja, sabía que la idea de su amigo no era nada buena.
—Tomamos prestado su equipo para bucear y vamos al bote hundido esta tarde —ofreció Maybank—. Amigo, eso va a salvarte. Ningún chico rico va a un hogar, ¿verdad?
John B se giró para mirar a Alya.
—¿Tú qué opinas? Eres la más sabia aquí.
—Auch —se quejó Pope de forma irónica.
Alya miró a JJ por un segundo antes de mirar a Routledge. Luego suspiró.
—¿Te soy sincera? Es una pésima idea —soltó—. Es horrible. Malísima.
—¿Pero? —preguntó JJ, esperanzado de que por lo menos ella se pusiera de su lado en esto.
—Pero... Supongo que si eres cuidadoso, no pierdes nada con intentarlo —nunca pensó que le daría la razón a JJ—. Es esto o un hogar de acogida.
JJ sonrió satisfecho y John B suspiró.
—Bien.
Cada Pogue volvió a su respectivo hogar mientras John B se dirigía en la búsqueda del equipo de buceo de los Cameron. Esperaba poder cumplir con el plan y que la idea de JJ no lo metiera en más problemas de los que ya tenía.
Si algo salía mal, podían despedirlo.
Los demás tan solo esperaban a que fuera un plan exitoso. No tenían tiempo que perder.
Ya estaban muy involucrados como para retroceder.
(sin editar)
author's note !
¡HOLA, HOLAAAA! Espero estén bienn. Aquí les traigo un nuevo capítulo de Smoke and Fire. Está un poco más corto que los de costumbre, pero es que Wattpad no ayuda con tantos bugs. Fue frustrante escribirlo, pero aquí estamos. Aprovecharé ahora para ir escribiendo el próximo (espero que sin tantos bugs de por medio) para así actualizar más rápido cuando este capítulo llegue a la meta de votos y comentarios indicada al inicio.
Me sorprendió que eso funcionara tan rápido con el capítulo anterior, así que definitivamente lo seguiré haciendo. Gracias por su apoyo <33
En fin, ¿opiniones, teorías, sugerencias? Quiero leer todo lo que tengan en mente!!
Nuevos ships, quizás... 👀
Ahora Sebastian es oficialmente parte de los Pogues. ¿Qué piensan sobre eso?
Los estaré leyendo!!
Linda noche 💕
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