Sword Art Online

Sus pasos eran lo único que se podía escuchar por la calle, la niña bajita castaña iba camino a su hogar acompañada de su amigo Eiji.

¿Estás segura de que no quieres jugar? —fue lo que le pregunto su mejor amigo antes de que ella siguiera su paso—.

Hablaban desde hace días sobre el nuevo juego que se iba a lanzar, Sword Art Online se llamaba, era un VRMMORPG, este era de inmersión total usando un aparato llamado Nervegear. De este videojuego lo único que se sabía es que era sobre completar un castillo flotante a base de espadas, a la castaña le interesaba bastante aquel mundo pero no quería causarle disgustos a su padre pues el no le había permitido jugar ese tipo de cosas anteriormente. Así que simplemente se resigno a negar con la cabeza mientras sonreía levemente.

La verdad prefiero no hacerme ilusiones sobre jugar, nos vemos mañana, Eiji —Asi se despidió pues ya estaban en su casa—. Dio unos pasos y entro por la puerta principal para luego cerrarla, camino hacia su habitación y dejó su mochila en su lugar para después quitarse su uniforme y cambiarse a una ropa más cómoda. Al terminar fue caminando  de manera tranquila al estudio de su padre donde el la esperaba.

Hola padre ¿Pasa algo? —Hizo su pregunta pues lo noto más sonriente de lo normal, el hombre que conocía de toda la vida normalmente era serio con todos, incluso con ella. Noto como el permanecía sentado pero estiró su mano a uno de los cajones del  escritorio donde estaba sentado y lo abrió sacando una caja algo grande y se la entrego a su hija. Ella la abril con cuidado y saco, lo que menos esperaba ver, un Nervegear y una copia del juego Sword Art Online del que se había acabado hace unos días las copias. No supo que hacer y simplemente se abrazo de su padre con una amplia sonrisa, era uno de los mejores regalos que había recibido.

Gracias padre esto ¡Es increíble! Espera a que le cuente a Eiji sobre esto. —Fue interrumpida por su padre que señalo el reloj y luego el Doctor hablo—. Yo le regalé uno igual a él, sabía que ambos estaban emocionados por eso y me parece un buen amigo para ti, por eso se lo di, ahora deberías tomar un baño y comer porque falta una hora para la inauguración del juego.

Simplemente después de escucharlo asintió con alegría la pequeña de 13 años y corrió a hacer lo que él le había aconsejado realizar, después de todo, en unos minutos estaría en un mundo totalmente diferente al que ella estaba acostumbrada.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top