Veintiocho.
Días después de que la profesora le explicara correctamente a JongDae por qué dos chicos no podían casarse, y obviamente, que él la entendiera.
Pero la profesora no dejó morir sus esperanzas, más bien, ella le echó más leña al fuego.
Pues sus palabras fueron: "Aigoo, JongDae, no te desanimes. No hay nada de malo en que dos chicos se gusten, más bien, es algo totalmente normal, sólo que las leyes de este país lo ven raro. Pero no te preocupes, tal vez cuando crezcas ya hayan legalizado el matrimonio entre dos chicos."
Y el corazón de Chen había saltado emocionado con esa respuesta.
Ahora se hallaba sentado en una banca junto a MinSeok. Él tomaba su mano delicadamente, cómo si ésta fuera hecha de cristal, la cual con un mal movimiento se quebraría.
Y JongDae no quería que sucediera eso.
Él quería cuidar cada parte de su pequeño amigo, cada centímetro de su cuerpo. No le haría daño por nada en el mundo, no quería que sufriera por nada ni por nadie en este mundo.
Entonces sonrió, porque sabía que estaría a su lado su vida entera.
Y así quería que fuera.
-MinSeokie -le llamó el mayor en un dulce canturreo, haciendo que éste girara su cabecita de inmediato. - ¿Puedo quedarme a tu lado toda mi vida?
Y MinSeok sonrió, sonrió como nunca antes mientras sus mejillas se sonrosaban con tal locura que hacía que su corazón corriera una maratón en su pecho.
Y él sólo pudo asentir, porque sólo bastaba aceptar más que ninguna otra palabra.
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Jueves, llegando tarde pero todavía es jueves.
AAAA LA PRÓXIMA SEMANA SIN EMPEZAREMOS BIEN NAAAISSS
POR CIERTO.
SOMOS BIEN GOALS
PERDÓN POR EL CAP TAN CORTO:(
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