"Sabes que hay muchas maneras de matar a alguien que amas
la más lenta es no amarlos lo suficiente"

High Infidelity - Taylor Swift

narrador omnisciente

Febrero otra vez. "La Sociedad de la Nieve" fue un éxito mundial, las predicciones de Delfina de los enamoramientos se cumplieron y hasta comenzaron a fanearla a ella por ser tan swiftie y para hacerlos reír decidió hacer un cover de "no me doy por vencido".

Amaba que todos hayan pensado que Fran era super serio y que en realidad terminó siendo la persona más buena del mundo. Aunque también le dió algo de miedo como descubrieron lo que pasó con ver los covers que ella hizo o los comentarios de Matías en sus publicaciones que nunca fueron borrados.

Y bueno, en parte fue culpa suya porque hizo canciones que literalmente con las iniciales hacían su nombre; "Mastermind", "All of the girls you loved before", "This love", "I think he knows", "Afterglow" y "Sweet nothing" fueron las que los mandaron al frente.

Le dió vergüenza y a la vez tristeza saber que habían edits de ellos dos juntos como si fuera una tragica historia de amor a lo Larry Stylinson.

Ahora se encontraba por ir a los premios Goya como invitada de Bayona luego de pedirle que fuera como maquilladora, y para eso se le avisó mucho antes asi se preparaba un lindo outfit.

Como todos decían que ella estaba en su "Rep era" y venían de ilusionarse con la regrabación de Reputation; decidió ponerse un vestido negro parecido al que usó Taylor en los VMAs del año pasado con una cadenita que tenía un dije de vibora.

Sus uñas y labios pintados de un rojo potente fueron los responsables de captar la atención de la gente que la vió salir del hotel entre risas con Blas y Santi. Ella ya sabía que Matías estaba ahí con Malena y salió cinco minutos antes que ellos, pero su auto estaba delante del suyo.

Al llegar vió por la ventana como el supuesto amor de su vida estaba con otra mujer. Todavía le costaba entender quién de las dos fue la que sobraba, capaz también fue él quien no debía estar entre ellas, pero claramente era la teoría más estúpida del Universo.

Santi bajó primero y les sostuvo la puerta a Delfi y Blas, antes de verificarse mutuamente que los tres estuviesen impecables para las fotos.

Aunque habían algunas chicas que gritaban el nombre de ella y sostenían álbumes de Taylor para que los firmase. Le dió cosita arruinar esas obras de arte con su letra horrible, pero le repetían muchas veces que no pasaba nada.

Asi que mientras Matías estaba a unos metros también firmando cosas, Malena mostraba su lindo vestido y Delfina se quedaba intercambiando friendship bracelets; los ojos de los que sabían estaban posados en ellos tres. Y obvio que les sacaban fotos a Blas y Santi, pero ellos eran unos modelos divinos.

—¿Delfi no lo extrañas?— escuchó un grito de por ahí y todas empezaron a preguntar cosas como si fuesen sus mejores amigas. Y lo eran.

Ella asiente como si fuera obvio— Pero extraño brillar, amiga.

Las que entendieron la referencia a "Bejeweled" soltaron una risa y la castaña se despidió para ir algo apurada con sus dos amigos, tratando de ignorar a Matías. Y había funcionado, pero a menos de un metro de él habían varias chicas extendiendo pulseritas.

Miró varias veces dudando si ir, pero al final se rindió y se acercó a ellas, ganandose unas cuantas miradas de parte de Matías cuando la tuvo tan cerca. No se habían visto desde lo que pasó en su cumpleaños y ahora ella lo estaba ignorando como si no lo conociera.

—Te parece...— ella pensó viendo sus pulseras— ¿Slut por Say Don't Go?

La chica le intercambió la pulsera y cada vez que Matías daba un paso lejos, hacían que Delfina también diese uno, parecía un chiste toda esa situación.

—¡¿Delfi estás en tu Reputation era?!

—Siempre— Delfina responde con una timida sonrisa y al fin se da la vuelta para irse, haciendo un cortisimo contacto visual con Recalt, que no había pasado desapercibido por las fans de esa pareja.

Llegó a la foto con sus dos amigos y se sacaron unas pares con los que formaron parte de "La Sociedad de la Nieve", donde la incluyeron diciéndole que ella era una de los que estaban nominados al Óscar por maquillaje. No pensó que algo que hacía porque le gustara fuese tan importante.

Se sentó en medio de Enzo y Blas a ver la entrega de premios tránquilamente. Aplaudían cuando ganaban y el momento que todos espéraban llegó; la nominación de Matías.

Delfina movió su pierna algo nerviosa cuando comenzaron a abrir el sobre. Lo tenía a unos asientos de ella junto a Malena, asi que iba a poder presenciar su reacción en primera fila.

—Y el Goya es para... ¡Matías Recalt por "La Sociedad de la Nieve"!— anunciaron y Matías se levantó junto a su pareja para darle un fuerte abrazo y un beso, mientras que Delfi aplaudía con una pequeña sonrisa.

Él dió unos pasos y abrazó a Bayona con emoción, yendo directo al escenario limpiandose las lágrimas. Llegó al microfono, dijo algunos nombres del equipo de producción y siguió con su discurso.

—... A los sobrevivientes de los Andes, a los que no volvieron, a los familiares de los que no volvieron por dejarnos contar su historia. Muchisimas gracias, especialmente a Roberto Canessa por ser Roberto Canessa un gran personaje para interpretar— tomó un poco de aire y la castaña aplaudió con ternura— A mi mamá, a mi hermano, a mis tíos, a mi abuela, a mis amigos, a mi novia, Male, Corazón— Delfina dejó de aplaudir, pero de igual manera comportandose respetuosa— Te amo, por acompañarme, gran compañera— suelta un suspiro entrecortado— Y especialmente a mi padre que lo perdí antes de hacer esta pelicula, y esto te lo dedico a vos, papá, gracias. Y por ultimo mandar un abrazo muy grande a mi país, Argentina, que está pasando por un momento muy delicado y pedir que por favor no se manche la cultura. Muchas gracias y muchas veces.

Cuando él se bajó del escenario pudo notar que Delfina era una de las pocas que se habían puesto de pie para aplaudirlo y antes de sentarse tuvieron un corto contacto visual.

Lo que siguió transcurrió normal, festejaban los premios de la pelicula, respetaban todas las categorías y charlaban animadamente, hasta que llegó la hora de irse al hotel luego de un largo día.

Delfina se quedó sola en el lobby comiendo unas papas fritas y después de una hora sentada en las escaleras del hotel, subió por el ascensor, encontrandose con Matías saliendo de la pieza mientras se abrochaba su campera.

Ella se quedó helada al verlo. Seguía con el vestido y todo lo demás, asi que le dió un poco de vergüenza.

—Iba a ir a ver si estabas bien— él rompe el silencio cuando ella sale del ascensor y se queda parada en medio del pasillo.

—Estoy bien— asiente todavía confundida por su interés— Felicidades por el premio.

—Gracias. Felicidades a vos por el Óscar, seguro lo ganan— Matías dice amablemente, con ese tono sereno de voz que solo él sabía usar.

—Seguro— afirma con tránquilidad— Nos vemos.

Cuando trata de caminar frente a él para ir a su pieza; su voz la detiene.

—Ya sé que no te mencioné en el discurso, pero quería agradecerte por los lindos momentos que pasamos— rasca su nuca algo nervioso.

No habían dos personas hablando. Solamente dos fantasmas en su lugar, tratando de acordarse lo que era tener latidos.

—Es que no hablamos desde que te fuiste— habla después del sobrevalorado cómodo silencio de Delfi— Perdoname.

—¿Por qué nunca sos el primero en romperte?— pregunta ella retoricamente con algo de tristeza en su voz— Vi que le diste a Malena la camiseta de Riquelme, capaz es de ella más lo que fue mía.

Parecía un tema interminable, solo que llegó el momento de duelo antes de que al fin tuviesen paz. No habían ganas de gritar o de pelear, solo querían recordarse con los ojos lo mucho que se extrañaban y el rencor que había de por medio.

—No me culpes por enamorarme tanto de ella, era un pibito— agacha la mirada con vergüenza— Ya sé que soy un arrogante hijo de re mil puta que no sabe cómo pedirte perdón, pero de verdad espero que puedas verme con una mejor luz algún día.

—Al menos no le digas corazón, con eso estoy bien— él la mira confundido— No la llames como solías llamarme a mi.

—No quiero pelear con vos y no quiero irme a dormir sabiendo que ya no voy a ver tu sonrisa.

—Tenés todo mi respeto, siempre lo vas a tener, pero a veces puedo odiarte, Matías.

—Me diste el tiempo y el espacio, estaba fuera de control y te pido perdón por haberte decepcionado— da una pequeña pausa— Me acostumbré a vos y es un hábito que no puedo romper así nomás, y los dos sabemos que vos mentalmente ya estabas en la puerta.

—Ni siquiera trataste de llamarme para arreglarlo— le recuerda con un nudo en la gárganta— Tenías que hacermelo saber e iba a estar en la puerta del pasillo espérandote.

—Olvidate de todo lo que te dije. No fuiste una experiencia, fuiste algo hermoso para vos, yo soy el problema— mira directo a los ojos de Delfina tratando de descifrar qué es lo que siente— Y ahora no puedo arrepentirme desde que guarsaste tus cosas en una mochila y te fuiste.

—Trato de olvidarte, pero es dificil porque no sé cómo— confiesa sintiendo sus ojos aguados— Hicimos algo bonito y ahora me estoy cayendo a pedazos viendo tu vida en fotos como solía verte dormir.

Otra vez estaban en silencio. Dos corazones rotos que no habían sobrevivido a una gran guerra.

—De verdad espero que seas feliz, Matías. Nos vemos— dice Delfina antes de volver a darle la espalda.

—Siempre te voy a amar, Del— Matías responde, haciendo que ella se voltee a verlo.

—Yo a vos, Mati— le dedica una tierna sonrisa, sintiendo que por unos segundos volvieron a ese amor adolescente.

Y lo dejó en el pasillo, porque volverían a encontrarse en uno resistiendose a la tentación de preguntar;

Si una cosa hubiese sido diferente, ¿sería todo diferente hoy?

Autora:

Gracias por estas semanas leyendo, disfrutando y llorando juntas. Gracias por querer a Delfi tanto como yo. Gracias por hacer de éste un espacio seguro, aunque algunas me hacían enojar. Gracias por seguirme eligiendo y confiando en mi todos los días para leerse algo cuando están al pedo.

Nunca está de más dar amor en un mundo que es tan carente de eso y en un país donde estamos tristes por la situación. No necesitamos un motivo para sacar una sonrisa de vez en cuando.

Amen sin miedo, que una mala experiencia no les quite las esperanzas porque son las y los lectores más buenos que pude tener.

Los amo con todo mi corazón, acá siempre van a tener a una amiga.

- Jazmín
hsalvarez