Los soldados que servían a la casa Targaryen en el bando negro estaban en fila mientras el príncipe Daemon pasaba a su lado y los miraba de reojo, Caraxes sobrevolaba por los cielos junto a Syrax.

Valyria observaba desde la ventana a su tio preparar a las tropas que combatirian esa noche en contra de Aegon, la princesa pasó una mano sobre el cabello de su hijo quien se giro a verla apartando la mirada del mapa.

—Insisto que debo ir.

—No— negó Baelon mientras observaba la espada oscura entre su mano, se giro hacia su hijo— No está a discusión.

Aerion intercambio una mirada con su madre y Valyria negó con la cabeza, depósito un beso sobre la frente su hijo y le sonrio.

—No esta a discusión— repitió las palabras de Baelon y abandono la habitación.

Baelon salió detrás de Valyria y se encaminaron hacia las orillas de la playa donde Daemon preparaba a los soldados. El príncipe Daemon ordenaba en antiguo Valyrio las órdenes mientras se pasaba entre los soldados.

—Las palabras de mi padre se resume en que no sean inútiles y ganemos—negó Baelon y Valyria sonrio un poco— Tal vez si dices algo, puedes hacerlos sentir más animados a lo que nos enfretamos.

Daemon termino su discurso y le sonrio a los dos jóvenes.

—Fue un gran discurso, ganaremos— hablo con seguridad Daemon.

Baelon intercambio una mirada con Valyria y este con el, la joven princesa dio un paso hacia los soldado y los hombres pasaron su mirada en ella.

—Hombres— comenzó a decir Valyria en voz alta— Las batallas son situaciones que como humanos deberíamos evitar, pero una batalla esta desatada por injusticias, muertes y tristezas— paso sus ojos lilas entre los hombres— La casa Targaryen siempre ha sido unida pero tras entrar Allicent Higthower y usurpar un trono que no le corresponde para Aegon Targaryen ha provocado la guerra dentro de la misma— Valyria suspiro y regreso la vista a los hombres con seguridad— Mi padre, el rey Viserys murió por la ceguera que tenía ante la situación que prevalecía dentro de mí casa, los verdes mataron al rey— alzó la voz en eso ultimo— Y quieren hacer lo mismo con nuestra reina, Rhaenyra Targaryen.

Rhaenyra apretó la mano de Daemon y el hombre imito su gesto para tranquilizarla.

—Ustedes serán los guerreros que de niños esperan y miraban de lejos. Aquí estamos ahora, somos los guerreros que construyeron este pueblo, debemos tomar el trono que nos pertenece— miro a Rhanerya y le sonrio, la reina negra le regreso la sonrisa — ¡Larga vida a la reina Rhaenyra!

Los soldados alzaron sus escudos repitiendo las palabras de Valyria, la joven miro hacia el cielo nublado, la batalla que por años habían postergado estaba a punto de comenzar.