El príncipe de cabellos plateados se arrodillo frente a Rhanerya, bajo la cabeza en forma de respeto y luego poso su mirada en la reina, su hermana sonrio.

—Daeron— exclamó Rhaenyra y el joven sonrio, estiro su brazos y su pequeño hermano la abrazo, Rhaenyra sonrio y luego se alejo de el, mirandolo sin dejar de sonreir— Me alegro por fin conocerte.

—El honor de conocerla es mío, majestad— contesto Daeron.

Rhaenyra negó con una sonrisa.

—Soy tu hermana y no necesito que me trates de esa manera, omite la palabra "majestad"— acaricio el cabello platinado de su hermano, sonrió un poco mas— Te pareces tanto a nuestro padre.

Daeron le sonrio, se acercó a Aemond y abrazo a su hermano mayor, Heleana imito su gesto y le contó de sus visiones.

Valyria se sentó en el trono de Dragonstone y Rhaenyra se acerco a su hermana.

—¿Estas bien?

Valyria la miro y negó con la cabeza.

—Debo hablar contigo— tomó la mano de su hermana y la jalo hacia la salida de la sala.

Daemon las miro partir y regreso su vista a sus sobrinos.  Daemon observo a su hijo Baelon mirando por la ventana y se acercó a él.

—¿Te encuentras bien?

Baelon soltó una risa sin gracia y negó con la cabeza.

—¿Te importa?

Daemon fruncio el ceño y lo tomo de los hombros obligandolo a que lo viera.

—Eres mi hijo, claro que siempre me va a importar tu sentir.

Baelon parpadeo y asintió con la cabeza, apartó la mirada de su padre, le sucedió lo que había pasado con Valyria así mismo como su sentir, Daemon jalo a su hijo y lo abrazo, Baelon sollozo en el hombro de su padre y agradecio por tenerlo de regreso.

Rhaenys observo la escena de padre e hijo y sonrió un poco, Daemon podría ser descrito por todos como un hombre sin sentimientos y hasta cruel, pero lo era, no con las personas que amaba.

Rhaenys asintió con la cabeza mirando a Baela y a Rhaena y las dos jóvenes se aproximaron a su padre, Daemon las presentó con su hijo mayor y Baelon le sonrio envolviendo a las dos princesas en un abrazo de su hermano.

***

—¿No vas a decirme algo?

Rhaenys apartó la mirada del mar y le sonrio a Daeron.

—Estuviste excelente, buen trabajo con los Higthower fingiendo estar de su lado.

Daeron le sonrio a su tía.

—¿Eso es todo? Esperaba algo más por soportar a mi madre y a mi abuelo este tiempo. No se, un dragón nuevo, escudos, armas...— enumero y Rhenys le sonrio.

—Ya tienes a un gran dragón— le sonrió Rhaenys.

Daeron le regreso la sonrisa y miro hacia el horizonte como el sol se iba ocultando pintando el cielo de colores morados y anaranjados mientras que los dragones volaban los cielos.

—Te extrañe— soltó Daeron y Rhaenys se giro a verlo— No tenia a nadie que me regañara.

Rhaenys estiro su mano acariciando el cabello rubio de su sobrino.

—Yo tambien te extrañe mi niño.

Daeron había vivido por años con Rhaenys alejándose de su familia, había sido criado junto a sus primos Leanor y Leana hasta que su madre lo mando a Higthower para ser el gobernante de la casa. Aquello fue un sufrimiento para Daeron al alejarse de las personas que consideraba familia, el fue uno de los ayudantes de Deamon para que Leanor escapara con su amante y que se llevara a cabo la boda entre Rhaenyra  y Daemon.

Daeron le regreso la sonrisa y quiso expresar que Leanor no estaba muerto pero se mordió la lengua.

—Sabes tía...— Rhaenys se giro a verlo
— Hubiera amado que tu fueras mi mamá.

Los ojos de Rhaenys se llenaron de lágrimas ante la confesión del joven, lo jalo y lo abrazo mientras observaban los últimos rayos de la noche.

***

Rhaenyra se paso una mano sobre su cabello rubio y le sonrio a Valyria.

—Es...— busco la palabras correctas ante lo que le había comentado su hermana— Complicado.

Valyria hizo una mueca,  le dio un sorbo a su vino, se relamio los labios y le sonrio.

—¿Quieres algún te?— le pregunto Rhaenyra.

Valyria fruncio el ceño y coloco su mano sobre su vientre, por una parte si lo quería para deshacer cualquier particula que tuviera de Aegon en ella pero por otra parte sería destruir la de Baelon.

—No lo se— confesó confundida y paso una mano sobre su rostro— Estamos al borde una guerra y por una parte traer un hijo no es lo correcto...— se quedó callada y observo a Rhanerya quien se mostró preocupada, se regaño por no pensar antes de hablar— Pero tal vez, estos hijos seran un nuevo comienzo para la familia Targaryen.

<O el sufrimiento> pensó Rhaenyra con preocupación, le sonrió a su hermana.