2.

— Espérame aquí, Roggie, iré a buscar algo —Brian le sonrió tomando su plato que aún contenía bastante del alimento que este comía.

— ¿Con tu plato...? —Roger se extrañó mientras interrumpía el recorrido que estaba haciendo su tenedor dirigido por su brazo, hacia su boca.

— Eh... sí —respondió el de rizos rápidamente—. Yo... le pediré al chef que me... que me ponga... mayonesa.

— ¿Le pondrás mayonesa a una lasaña vegana? —preguntó Roger.

— O sea... no mayonesa... eh... pimienta —mintió viendo como el frasco correspondiente a la pimienta se encontraba vacío.

— Bri, solo llama al mesero —repuso el rubio tomándolo delicadamente por el brazo.

— Tardará mucho, yo... ya vuelvo, amor, espérame aquí —dijo, le dio un beso corto y se fue rápidamente, dejando a Roger sumamente confundido.

Rápidamente caminó hacia donde se encontraban los baños, aquí había un pasillo y un basurero, donde tiró toda la lasaña y limpió el plato con agua del lavamanos.

Roger se extrañó al verlo volver con las manos vacías, además de que había tardado bastante.

— ¿Y tu comida...? —preguntó.

— Eh... lo que sucede es que me puso la pimienta, y... estaba muy bueno... así que... me lo comí allí mismo y... el mesero se llevó el plato —mintió.

Roger no dejaba de preguntarse qué era lo que sucedía con su novio. No era primera vez que hacía eso.

Estaba sumamente preocupado por él, y por más que le preguntara, sabía que las respuestas de Brian estaban siendo todas inventadas por él y no correspondían a la verdad.

Suspiró hondo pensando en esto, mientras se dirigían en el auto a su casa.

— ¿Te quedarás? —le preguntó una vez que se bajaron y entraron a la vivienda.

— Claro, bebé —sonrió el de rizos tomándolo por la cintura para luego acariciar su mejilla—. Eres tan hermoso...

Roger sonrió, amaba a Brian y todo lo tierno que este pudiese ser con él.

Lo abrazó por el cuello, tratando de auto convencerse que quizás solo él estaba siendo supersticioso y Brian sí estaba diciendo la verdad.

Trataba de pensar eso, porque significaba que aún Brian jamás le había mentido, como había sucedido en los anteriores dos años de noviazgo y tres anteriores de amigos.

— Tú eres hermoso, mi amor —le sonrió.

No me mientas, Roggie...

Brian imitó la acción del rubio y luego lo besó de forma dulce. Roger correspondió al beso de su amado novio y rió levemente cuando sintió como Brian le llenaba la cara de besos hasta que volvía a besarle los labios.

— Te amo —le dijo.

— Yo te amo más, Bri —sonrió Roger apegándose al cuerpo del mayor y cerrando los ojos.

Roggie... mi ángel... ¿qué haces conmigo? Deberías estar con alguien que te merezca...

Brian besó su cabeza y se quedaron así un rato más hasta que decidieron ir a dormir.

Brian fue a cambiarse al baño, Roger había ido a buscar su pijama a la secadora y al volver simplemente entró sin saber que su novio se encontraba ahí.

Lo encontró con el pantalón de pijama puesto y con la camiseta en mano mirándose al espejo, mientras... ¿sollozaba?

Cuando abrió la puerta rápidamente se dio vuelta, aunque después del tiempo suficiente para que Roger se percatase de lo que hacía, y se tapó instintivamente el pecho con la camiseta.

— ¡L-Lo siento! —exclamó Roger—. Yo... 

Iba a cerrar la puerta, pero no evitó volver a notar las costillas al costado de Brian, el cual era visible puesto que simplemente se había tapado con la camiseta, pero no se la había colocado, por lo que esa parte era visible.

— Amor... ¿p-podrías cerrar la puerta, por favor?

— ¿Bri...? ¿Puedo verte?

Brian enrojeció.

— Tranquilo, amor, solo... se acercó y cuidadosamente tomó la camiseta, Brian desvió la mirada mientras las lágrimas comenzaban a acumularse en sus ojos.

Roggie, no... te darás cuenta de lo horrible y obeso que soy y ahí sí me dejarás... ¿y qué haré sin ti?

Con una expresión triste, miró el delgado —o mejor dicho esquelético— cuerpo de su novio.

De pronto todo cuadró.

Lo abrazó fuertemente estando por llorar. Brian enrojeció y se sorprendió, pero correspondió al abrazo.

Roger apoyó su rostro en el hombro de Brian mientras lentamente comenzaba a llorar, tratando de que el mayor no se percatase.

— Mi vida... ¿por qué no me dijiste? —preguntó en un tono dulce sollozando.

— ¿D-Decirte qué cosa? —preguntó Brian nervioso.

— De esto, amor...

— Creo que no te comprendo... —dijo Brian fingiendo aquello mientras comenzaba a acariciar su cabello.

— De que no estás comiendo... de qué te ofendes a ti mismo... de que piensas que soy mucho para ti...

Brian permaneció en silencio aún abrazándolo.

— ¿Desde cuando no...? ¿No comes?

— Desde hace una hora, mi amor, en el restaurante —mintió el mayor.

— No, Bri... me refiero a desde cuando dejaste de comer normalmente.

Brian permaneció nuevamente bajo silencio.

— No puedes estar tan delgado porque sí...

— No estoy delgado, amor —rió Brian de manera leve, pero irónica. 

— Sí lo estás.

— Claro que no...

Roger suspiró.

— Hablaremos de esto en la mañana, ¿sí?

Brian asintió, Roger se separó y lo dejó que terminara de vestirse para luego él hacer lo mismo.

Se fueron a dormir, Roger se acurrucó en el pecho de Brian abrazándolo, este también lo abrazó.

— Te amo.

— Yo más, Roggie.

Y acto seguido, se besaron para luego disponerse a dormir, estando ambos preocupados, pero por distintas razones, que en cierto modo, correspondían a la misma situación.

//////
Hola! Vengo a avisar que quizás sea medio depre este fanfic xd

(Como si hiciera algún fanfic no depresivo)

Bueno, eso nos vemos uwu

- Em

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top