Princesa del Agua, Princesa Sirena.

El mar guardaba muchos secretos, entre ellos, las míticas 7 princesas sirenas de cada océano, pero había una mas aparte de ellas, la futura gobernante del Océano, la Princesa del agua.

Acuamarin.

Para una sirena de su edad era normal ir por todo el mundo, conocer mas seres marinos y vivir libre.

-¡¡Señorita Acuamarin!! -nada detrás de ella un hipocampo de color perla-. ¡!Esperame!!

Claro que como futura soberana de las aguas de los 7 mares, no puede ir sola asi como asi, detrás de ella iba uno de sus guardianes, un hipocampo llamado Bloo.

-Vamos, Bloo -le anima la pequeña princesa-. Hoy quiero encontrar algo nuevo y tener una aventura.

-Sabe que siempre le permito todo, pero de ves en cuando debemos ir al mar infinito a ver a su madre -recuerda la criatura marina.

-Ya se, pero como ya que en unos años cumplo 13 años, quiero explorar el mundo antes de empezar con mis obligaciones en el Mar Infinito -dice la niña nadando mas rápido.

-¡Señorita!

La joven princesa no quería alcanzar la edad tan esperada para los de su especie, pues sabia que no tendría tanta libertad como ahora, aun asi estaba dispuesta a aceptar su destino pero quería saber todo lo que podía del mundo.

-¿Ah? -la perlada vio un brillo en lo que parecía una cueva marina-. ¿Qué es ese brillo?

-Es uno de los antiguos manantiales de gestación -esclica la hipocampo-. Anteriormente, las sirenas usaban lagunas, lagos y ríos que conectaban con el mar para pasar sus últimos dias de embarazo en la superficie, al haber gran consentrasion de sirenas apunto de dar a luz, los lagunas, logos y ríos empezaron a tener propiedades curativas y mágicas...

Se dejaron de usar cuando humanos los encontraron y empezaron a establecerse hay...

La pequeña princesa se encontraba asombrada, no pensó mucho cuando empezó a nadar hacia la cueva.

-¡Princesa, no vaya! -va tras ella.

-Nunca he visto humanos, es una gran oportunidad para una aventura -dijo la princesa mientras entraba por los túneles a gran velocidad siguiendo el brillo.

Era un trayecto largo, pero a la velocidad a la que iban no tardo mucho en salir del túnel para encontrarse en el fondo de un gran lago, se podía sentir la antigua magia de aquellas sirenas que venían aquí a tener a sus hijos, el agua era pura y cristalina. Al mirar a la superficie se reflejaba la luna en el agua y los rayos de su luz alumbraban el agua. Había peses que se acercaron a la princesa, revoloteando a su alrevedor haciéndole cosquillas.

-Parece que estas aguas han sido bendecidas por los cielos al conservar la pureza de nuestra gente -empezo a dar vueltas como bailando.

-Es un lugar hermoso, Princesa -dijo la hipocampo comiendo algunas algas.

-¿Que son esos? -nada hasta llegar a unos platas que salian a la superficie.

-Son los Lirios Guardianes, anteriormente se usaban para que el agua se mantuviera pura y limpia para el bienestar de las sirenas que venían aquí -me explica Bloo mientras ve que una enredadera de la plata se ataba a mi brazo-. Se alimentan de magia que esta y rodea el lago.

Me quede maravillada mientas sentía que absorbía un poco de mi magia para luego soltarme lentamente.

-¿Crees que pueda salir a ver afuera? -me quede viendo el reflejo de la luna.

-No seria recomendable, princesa -dice rapido.

Lentamente nade hacia la superficie, al salir sentí el agua escurrir de mi cabello mientras solo me quede flotando en el agua ocultando mi torso y cola.

-!Que hermoso¡

Ver el cielo estrellado y como brillaba en el lago, hacia que me dieran ganas de cantar

Estaba tan entretenida cantando que no me di cuenta de que me habían descubierto.

-¡Oye! -se acerca un niño rubio al lago, parecía enojado-. ¿¡Que haces hay!? ¿¡Quien te dejo entrar!?

-Y-yo... -estaba asustada pero me puse firme-. ¿¡Y a ti que te importa!? ¡Este lago le pertenece a mi gente, puedo estar aquí si se me da la gana!

Se me ha queda viendo un rato -¿Quien eres?

-B-bueno... -le muestro mi cola.

-¡Una sirena! -exclama sorprendido y se arrodilla a la orilla del lago y yo me acercó-. Eres una sirena.

-Si, eso soy -le contesto entre risitas-. Mi nombre es Acuamarin, princesa del Agua. ¿Cual es tu nombre?

-Soy Claude Day, segundo príncipe del reino obeliano.